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El vecino como pretexto
Vamos contemplando el desmoronamiento de la economía nacional con la
vista puesta en las elecciones de 2012
M. MARTÍN FERRAND ABC 11 Noviembre 2010
UNO de los aspectos más negativos del sistema autonómico que se
sustenta en el Título VIII de la Constitución reside en que cada
Gobierno regional tiende a servir de coartada y disculpa a todos los
demás. Es evidente que España, en su conjunto, no funciona. Los
datos económicos obligan al pesimismo. Pero si se analizan en los
diecisiete epígrafes en que hemos parcelado el Estado, y se cruzan
los datos unos con otros, siempre aparece un roto que disculpa el
descosido ajeno. Ayer, Javier González Navarro publicaba en estas
páginas unos datos escalofriantes y desesperanzadores. Lo primero
porque marcan el fin de un modelo insostenible y lo segundo porque,
salvo que se produjera algún fenómeno taumatúrgico, el problema no
tiene solución desde los supuestos de que partimos y en la
aceptación como derechos adquiridos de lo que la mayoría de las
veces son solo privilegios continuados.
En lo que va de año, a partir de la EPA, se han destruido 146.600
empleos en el mundo privado; pero, para que el dato resulte más
demoledor e irreversible, en el sector público se han incrementado
110.200 nuevos puestos de trabajo. ¿Se supone que la ruina de los
primeros puede satisfacer los gastos que producen los segundos? Ahí
es donde empieza el cruce de comparaciones que acalla conciencias y
silencia las voces de quienes, en cada circunscripción, ocupan la
responsabilidad de la oposición. ¿Cabe esperar que los socialistas,
por ejemplo, denuncien en Valencia, la irresponsable actitud con la
que ellos mismos gestionan el gasto en Sevilla? Del mismo modo,
¿está en condiciones el PP de señalar el despropósito gestor de
Castilla-La Mancha que viene a ser parejo del que ellos protagonizan
en Castilla-León? En Madrid, donde el PP suele sacar pecho y
proponerse como modelo, los empleados públicos —funcionarios o
equivalentes— son 507.800. La suma de los que tienen trabajo en la
agricultura, la industria y la construcción no alcanzan los 480.000.
Sobre esos datos, ¿el PP y el PSOE están en condiciones de cruzar
entre sí las espadas de la crítica?
La Carrera de San Jerónimo se nos va convirtiendo en un continente
sin contenido porque los lotes que en ella nos representan carecen
de la autoridad que aporta el ejercicio. Se neutralizan entre sí por
la comparación, sin grandes diferencias, de los resultados en sus
feudos respectivos. Mientras tanto, vamos perdiendo el tiempo y
contemplando el desmoronamiento de la economía nacional con la vista
puesta en las elecciones de 2012. Para entonces es posible que todos
seamos ya empleados públicos o, más probable, que ninguno tengamos
empleo en ninguna parte.
El "drama" de Zapatero no se explica sin
los atentados del 11 M
Francisco Rubiales Periodista Digital 11 Noviembre 2010
Zapatero tenía perdidas las elecciones del 2004, pero la explosión
de los trenes madrileños, todavía no aclarada, cambió el puñado de
votos suficiente para convertirle en Presidente. A partir de
entonces, comenzó su mandato, la peor tragedia para España desde la
Guerra Civil de 1936.
El "Zapaterismo" no puede explicarse sin los atentados del 11 M, los
más sangrientos y conmovedores de la reciente historia de España.
Aquellos atentados no sólo lo convirtieron en un presidente elegido
por el miedo, sino que crearon en la conciencia española el vacío
moral y el desasosiego político necesarios para que el demoledor
"Zapaterismo", con toda su carga corrosiva de la moral y de la
decencia, pudiera establecerse y prosperar.
Sin aquellos atentados, los españoles no hubieran soportado lo que
Zapatero trajo consigo: la instauración de la mentira como política
de gobierno, el uso del dinero público para comprar voluntades y
votos, la ruptura de la igualdad en España, el endeudamiento
enloquecido, el despilfarro, el decaimiento moral,el avance de la
corrupción, la pérdida del prestigio internacional y una serie de
errores y de políticas nefastas que dieron al traste con la riqueza
acumulada por los españoles en las últimas décadas, convirtiendo al
país en una inmensa fábrica de parados y de nuevos pobres.
Hay un ejemplo en la Francia de inicios del siglo XIX, cuando el
cónsul Napoleón Bonaparte dominaba la vida política, que explica la
casi nula resistencia de España ante el drama que representa
Zapatero. La historia es la siguiente:
A finales del año 1800, el gobierno consular había redactado un
proyecto de ley de tribunales especiales que pretendía hacer de la
justicia un instrumento más de opresión política. La opinión pública
se puso en contra y Bonaparte y su gobierno se asustaron y no se
atrevían a aprobar la nueva ley. De repente, la noche del 24 de
diciembre los realistas explosionaron un artilugio infernal en la
calle Saint Nicaise cuando pasaba por allí la carroza del Primer
Cónsul, camino de la Ópera. Bonaparte resultó ileso, pero 60
personas resultaron muertas o heridas. El atentado, primero en su
género, causó una conmoción enorme en Francia, además de pánico. En
medio de la confusión general, Bonaparte logró hacer aprobar la
nefasta ley de tribunales especiales sin la menor dificultad.
La conclusión de aquella experiencia fue perfectamente captada y
asumida por Bonaparte: "Un atentado brutal provoca en la opinión un
vacío y un miedo que permite que las medidas gubernamentales más
ignominiosas y las leyes más execrables puedan pasar tan
furtivamente como el contrabando por las narices de aduaneros
dormidos".
Durante algunos meses, la conciencia social francesa fue incapaz de
reaccionar, pero después lo hizo con entereza e indignación. Algunos
acusaron al gobierno de haber provocado el atentado y muchos
historiadores confirman que aquellas acusaciones pudieron ser
ciertas. Es un hecho que el siniestro Fouche, por entonces ministro
de la policía, instruyó a los gendarmes revolucionarios franceses en
el por entonces nuevo y tenebroso arte de los atentados terroristas
prefabricados, que irrumpen en el momento oportuno para aterrorizar
a la opinión.
Bonjamín Constant publicó un libro en 1814, después de la caída de
Napoleón ("De l' esprit de conquête el de l' usurpation, dans leurs
rapports avec la civilisation européenne"), en el que advertía a los
ciudadanos de los peligros que amenazaban a la civilización bajo los
nuevos gobiernos surgidos tras la Revolución.
El "Zapaterismo", cuyo gobierno en España ha estado cargado de
cambios y de medias execrables, ha sido soportado por los españoles
con una cobardía indescriptible, quizás como consecuencia del
estupor y el miedo producidos por los trenes destruidos por las
bombas y los cadáveres ensangrentados de Atocha.
Sin embargo, la misma historia demuestra que, una vez pasado el
efecto paralizante del miedo y del estupor, las defensas se
restablecen, la moral ocupa su espacio natural en la conciencia de
la población y los opresores se ven obligados a retroceder y a
abandonar su sucia labor de destrucción.
Voto en Blanco
Mientes, Felipe, y lo sabes
Juan Carlos Olarra Estrella Digital 11 Noviembre 2010
(Antón Saracíbar a Felipe González tras la huelga general de 14D-88)
Nunca tuviste realmente en tu mano la posibilidad de volar a la
cúpula de ETA, con lo que no tomaste ninguna decisión en ese
sentido. Porque dicha posibilidad presupone el conocimiento cabal
por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado de la
situación exacta de tal aquelarre asesino, con la suficiente
antelación y certeza. Y tal suceso, de haber sido cierto, habría
permitido actuaciones más sensatas y eficaces que la que pretendes
haber descartado en tu grandeza moral. Sabiendo dónde iban a estar
en un momento dado, podrías haber ordenado detenerlos, o promover
que otro país lo hiciera, si es que estaban fuera de España. Y si tu
bien amigo Mitterrand no estaba en disposición de ayudarnos, siempre
podrías al menos haberte asegurado de que se siguiese su rastro con
similar denuedo al que había permitido localizarlos con tanta
exactitud. Seamos serios, Felipe. Ni aunque hubieses tenido la
ocasión circunstancial de llevar a cabo lo que ahora nos cuentas,
habría pasado de una mera conjetura ¿O es que crees que vamos a
considerarte capaz de ordenar una acción explosiva, en sentido
estricto, en el suelo de nuestro vecino del norte, gobernado por uno
de tus admirados padrinos al que regalabas una admiración que a
veces se tornaba en vasallaje? Nunca renunciaste a ninguna
oportunidad que estuviese verdaderamente en tu mano, como ahora nos
quieres hacer creer, independientemente de si eso te engrandece o te
empequeñece moral o políticamente, o si de tus atrabiliarias y
extemporáneas confesiones deriva ventaja o desventaja para el
partido en el que aún militas.
Desconozco, Felipe, las razones que te han llevado a contar lo que
contaste, en este preciso momento de nuestro acontecer. Puestos a
elucubrar, creo que un ataque de soberbia, acentuada por la
perspectiva que dan los años, te ha llevado a esta forzada
circunvalación intelectual (paralela a aquellos prodigiosos
circunloquios con los que a veces envolvías la nada y ocupabas el
vacío lugar del silencio, al que siempre temiste tanto). Rodeo de la
imaginación y la palabra, del verbo y del pensamiento, con el que
probablemente quieres hacer tuyo algo de lo que te obligaron a
abjurar en público y que, en el fondo de tu corazón, quieres
reivindicar para tu legado. Pero claro, salvando siempre los
obstáculos políticos, y sobre todo jurídicos, que de ello se
pudiesen derivar.
Por eso se confunden (o nos quieren confundir) quienes buscan
paralelismos con el “I shot” de Margaret Thatcher cuando fue
preguntada sobre los detalles de la operación Flavio. La Primera
Ministra se limitó a destrozar la estrategia de los Rubalcabas del
laborismo que, con sus tentáculos en los servicios secretos,
pretendían evidenciar errores en la cadena de mando. La Baronesa, a
diferencia de ti, Felipe, pisaba terreno seguro, puesto que su
decisión se amparaba en la legislación que permitía abatir a
cualquier terrorista descubierto en territorio británico con el
propósito de cometer un atentado. Y los tres asesinos del IRA contra
los que disparó el SAS querían volar a la banda de música del cambio
de guardia.
Tampoco aciertan quienes aprovechan la coincidencia temporal con los
aperitivos de las memorias de George W.Bush que hábilmente nos va
filtrando su editor. El anterior inquilino de la Casa Blanca admite
lisa y llanamente que autorizó una modalidad de tortura y pretende
enmarcar dicha decisión en el bien mayor que con la misma se habría
obtenido y que se concreta según él en salvar vidas. W nos dice lo
que hizo y nos explica lo que cree que consiguió, mientras que tú
nos relatas lo que al parecer no hiciste, aunque podrías haber
salvado vidas de haberlo hecho.
Puede que tu único parangón sea tu admirado personaje francés. Ese
colaboracionista disfrazado de resistente y capaz de fingirse
víctima de un atentado, que gobernaba la gran República al tiempo
que tú lo hacías en España. El encontró la fórmula para reivindicar
indirectamente una de sus vergonzantes hazañas, cuando condecoró a
uno de los responsables del atentado terrorista contra el Rainbow
Warrior. Pero al menos La Esfinge reconoció la gloria ajena como
medio para apuntalar la propia. No es tu caso.
No sé que pretendes diciendo lo que dices aquí y ahora, ni me parece
útil dedicar mucho más tiempo a tratar de averiguarlo. Simplemente
constato que no puedes estar diciendo la verdad y que creo que eres
consciente de ello.
Papelón
La «constatación» de que Mohamed VI es el amo del Sahara representa
el punto más bajo desde la Marcha Verde
IGNACIO CAMACHO ABC 11 Noviembre 2010
EN los treinta años de conflicto del Sahara, aprovechados por
Marruecos para imponer su política de hechos consumados, España no
ha sabido ni querido enmendar el papelón de su precipitada salida
descolonizadora. Antes al contrario nos hemos movido siempre en una
suerte de ambigüedad culpable, que el zapaterismo ha ido
reconvirtiendo en abierta connivencia con la estrategia marroquí sin
abandonar el discurso ambivalente salpicado de mantras de diálogo y
multilateralidad. Ocurre que el sultanato, como régimen autoritario
que es, resulta poco proclive a las sutilezas y cada vez más a
menudo pone a prueba las tragaderas españolas con actos de una
brutalidad insoslayable. El asalto a los campamentos de El Aaiún
tiene ribetes de pogrom étnico que han provocado incluso la repulsa
de la muy proalauita Francia sin que el Gobierno de
Zapatero/Rubalcaba sea capaz de manifestarse con el mínimo de
energía que requiere la dignidad democrática.
España tiene derecho incluso a ponerse de parte de Marruecos si lo
considera positivo para los intereses nacionales, pero lo que no
puede hacer es renunciar a su papel de referencia en un problema que
como antigua metrópoli colonial le atañe de modo directo. Y eso es
exactamente lo que ha hecho este Gobierno: ponerse de perfil con
abstractas apelaciones a la calma, inhibirse de sus
responsabilidades históricas y actuales y hasta montar el consabido
lío diplomático al reconocer primero y «constatar» después
—rectificando en horas, como es costumbre— los supuestos derechos
efectivos y soberanos de Rabat sobre el territorio saharaui. Hacerlo
en pleno escándalo por la inaceptable y violenta razzia de El Aaiún
constituye un ejercicio vergonzante de sumisión política y de
denegación de amparo.
El zapaterismo aplica en el Sahara su conocido criterio de doble
rasero, ese hipócrita embudo moral que determina la consideración de
las cosas y los hechos según su adecuación a las conveniencias
propias. La legalidad de la ONU vale para desautorizar la guerra de
Irak pero no para aceptar el cumplimiento del plan Baker y otras
resoluciones que llevan años en el limbo de la diplomacia.
Desmantelar a sangre y fuego un asentamiento de refugiados
constituye una canallada si la ejecuta Israel pero no merece condena
explícita cuando es Marruecos el que la lleva a efecto. Vetar a
periodistas y parlamentarios como testigos de la violencia de Estado
es pecado mortal para cualquier régimen democrático y pecata minuta
si lo decide nuestro amigo el sultán. Nada grave para suspender el
solícito interés de la ministra de Exteriores —menudo debut el de
MinisTrini— por la maltrecha rodilla de Evo Morales.
La «constatación» de que Mohamed VI es el amo del Sahara representa
el punto más bajo del abandono español desde la Marcha Verde. Hasta
ahora: tal vez haya ocasión de constatar que podemos hacerlo peor.
Vergüenza ajena y oprobio común
El régimen marroquí no se distrae estos días con las maravillosas
relaciones que mantiene con Zapatero
HERMANN TERTSCH ABC 11 Noviembre 2010
UNA de las pocas formas que nos quedan ya para intentar huir de la
vergüenza que produce la actuación de nuestro Gobierno en el
exterior es ejercitar la certeza de que otros españoles lo sabrían
hacer de otra forma. Por desgracia es cierto que nos representan a
todos en el mundo por haber sido elegidos por una mayoría. Pero
también lo es que hay muchos españoles con preparación, criterio y
carácter que nos representarían y defenderían los intereses de
España con dignidad, eficacia y altura de miras. Decir que lo harían
mejor es no decir nada, porque hoy lo difícil es encontrar a quien
pueda hacerlo peor. Antes de considerarse un enviado de la
Providencia Progresista, nuestro Gran Timonel le dijo a su consorte
aquello de «Sonsoles, no te puedes imaginar cuantos cientos de miles
de españoles podrían gobernar». Un instante único aquél, en el que
brotó tamaña verdad de sus labios.
A estas alturas de la tragicomedia del zapaterismo podemos decir que
el listón no es ya obstáculo ni para el más torpe de los reptantes.
Por lo que no son centenares de miles sino millones, señora
consorte, los que gobernarían sin hacer el daño que su marido ha
hecho. En nuestra política exterior estamos viviendo horas estelares
del zapaterismo químicamente puro. El dislate generalizado ha
alcanzado cotas orgiásticas del despropósito. El ridículo y el
oprobio son ya la percepción constante en un serial interminable de
torpezas y barrabasadas. Cierto, como dicen fuera, que los españoles
tienen al Gobierno que han elegido. En nuestro descargo cabe alegar
que nadie en su sano juicio podía prever lo que nos venía encima.
Estaba claro que habríamos de pagar por una política exterior sin
principios, sin profesionalidad, sin carácter, criterio ni firmeza.
Una política que nos ha marginado en nuestro espacio natural de las
democracias occidentales, donde España ya solo cuenta como fuente de
preocupación e inseguridad económica. Solo nos tienen ya en cuenta
esos regímenes dictatoriales o autoritarios que por afinidades
ideológicas este Gobierno ha apoyado y financiado. No para
agradecerlo. Para pagarnos con insultos, desplantes y desprecio.
Venezuela o Cuba, Bolivia, Mauritania o Marruecos, ¡qué más da!
Nuestra obsequiosidad es ya humillación y tiene además humillación
por respuesta. Así es el mundo. Si no nos respetamos nosotros, ¿por
qué iban a hacerlo otros?
Ayer fue otro día de auténtica vergüenza en la gestión española de
la crisis marroquí. Por un lado salía la ministra Trinidad Jiménez
negando muy enfadada que hubiera sido avisada de antemano de la
bárbara operación policial marroquí. El diario El Paísasegura que sí
lo sabía. Dada la impotencia del Gobierno, casi da lo mismo. En el
Parlamento, el ministro de la presidencia Jáuregui, se hacía tal lío
al explicar dicha impotencia, que acabó atribuyendo a Marruecos la
soberanía territorial sobre el Sáhara. Después dijo que no quiso
decir lo que dijo. Da igual también. Miren que nos dijeron que
Jáuregui venía de ministro porque se explica muy bien.
Periodistas franceses pudieron viajar a Marruecos para visitar los
escenarios que el régimen de Mohammed VI tenga a bien enseñarles.
Los periodistas españoles poblaban los aeropuertos a la espera de
que el Sultán les deje entrar a mirar un poquito. Mientras continúa
la operación de terror contra la población, las detenciones y los
saqueos. El régimen marroquí no se distrae estos días con las
maravillosas relaciones que mantiene con Zapatero y Rubalcaba.
Quizás allí crean que estas relaciones son exclusivamente para
cuestiones de protocolo y privilegio de tantos líderes socialistas
que han hecho de Marruecos su particular y muy privilegiada
alternativa a la Costa Azul.
Serios errores de diplomacia
Editoriales ABC 11 Noviembre 2010
El viraje que dio este Gobierno hacia Marruecos, cuyas razones no ha
explicado aún, ha desencajado los tradicionales equilibrios de
España en el Magreb
A diferencia de lo que sucede con los errores en el campo de la
economía, las equivocaciones en política exterior son en ocasiones
difíciles de cuantificar, pero eso no impide que el precio de la
mala gestión aparezca, como le sucede al Gobierno de Zapatero, que
recoge ahora los amargos frutos de su decisión de apoyar
incondicionalmente a Marruecos. Negándose a condenar los hechos
violentos que han desencadenado los disturbios en El Aaiún para no
irritar a Rabat —lo que equivale a considerarlos como aceptables— no
contribuye ni a la solución del conflicto ni a la buena marcha de la
sociedad marroquí hacia la democracia, y tampoco representa a la
sensibilidad mayoritaria de los españoles.
Al contrario, el viraje que dio este Gobierno, cuyas razones no ha
explicado todavía, ha desencajado los tradicionales equilibrios de
España en el Magreb y ha contribuido a alejar las posibilidades de
una solución. Marruecos es un vecino con el que es conveniente
desarrollar las mejores relaciones. Precisamente debido a esa
vecindad, es una insensatez exponer nuestros intereses estratégicos
a las maniobras de extorsión que se puedan urdir aprovechando esa
proximidad con sucesivos pretextos como la pesca, la emigración
ilegal, la droga, el integrismo, Ceuta y Melilla o el Sahara.
Puesto que Marruecos no es una sociedad democrática, habría sido
mejor no exponerse a esta situación con una política en la que se
definan nuestros intereses, tal como Marruecos hace con los suyos.
La ministra Trinidad Jiménez ha intentado recuperar el paso
recordando que España no reconoce la anexión del Sahara Occidental,
sin darse cuenta que lo que ha sucedido no ha sido solamente una
violenta intervención de las autoridades marroquíes, que al fin y al
cabo no puede decirse que sea una novedad más que en la brutalidad
de sus dimensiones. Lo peor ha sido la expresión de la violenta
enemistad entre la población saharaui y los ciudadanos marroquíes
llevados allí por el Gobierno de Rabat. Los enfrentamientos en las
calles de El Aaiún ponen de manifiesto que la brecha que separa a
las dos comunidades se ha hecho más grande en lugar de difuminarse,
como pretendía Marruecos, y que cualquier solución será aún más
compleja ahora que cuando el Gobierno socialista creyó erróneamente
que obtendría ventajas en otros campos si cerraba los ojos ante la
realidad y abandonaba los intereses de España al albur de la
política marroquí.
La impunidad del sátrapa
Antonio Pérez Henares. Periodista Digital 11 Noviembre 2010
Puede hacer lo que quiera. Puede vulnerar todos los Derechos
Humanos, puede arrasar a sangre y fuego un campamento, puede matar,
puede saquear, puede incendiar. Puede hacer eso y lo hace. Lo mismo
que provocar a los vecinos hasta la humillación, puede hacer lo que
le venga en gana en su territorio y en el que ocupa ilegalmente,
puede ciscarse en toda las resoluciones de la ONU, puede impedir que
haya testigos, apalear periodistas, puede mentir con descaro e
impunidad y hacer aparecer a sus víctimas como verdugos. Puede hasta
acusarles de haber sido ellos quines han creado esa dantesca imagen
de las jaimas incendiadas y El Aiun envuelto en la humareda y los
saqueos.
Mohamed VI sabe que es impune. Que nadie moverá un dedo contra él.
Porque tiene el respaldo de EE.UU, porque Francia lo apoya
incondicionalmente, porque ese el pago a sus “servicios”, porque es
el “amigo” necesario en el Magreb. Y puede tensar lo que quiera la
cuerda con España, en la frontera de Melilla, en el continuo
chantaje, en el sistemático recochineo, en haber retirado hace un
año largo su embajador, en incluso permitirse decir que nuestro
Gobierno fue informado de su bestial intervención sobre los
saharahuis que protestaban por sus cada vez más penosas condiciones
de vida. El sátrapa se siente impune. Porque en verdad lo es o al
menos así lo parece a los ojos del mundo que simplemente quieran ver
lo que sucede. Aunque casi todo prefieran mirar para otro lado. Que
esconde el quiere que miren mientras comete sus tropelías.
La respuesta, por decir algo, de nuestro Gobierno es vergonzante y
vergonzosa. Hace mucho que abdicó de su responsabilidad sobre un
territorio y una población a la que debe el amparo por lo que fue y
representó. El zapaterismo ha dado un paso más, un nuevo giro. Ya
apoya sus tesis de anexión , ya ni siquiera guarda las formas. Y es
tal su meliflua confusión que el ministro de la Presidencia reconoce
incluso la soberanía marroquí sobre el Sahara. Luego sale la
ministra de Exteriores para corregirle un poquito. Pero en eso
queda, en palabras huecas, en no tomar medida alguna y mirar,
siempre mirar para otro lado.
Claro que hay intereses. Lo hay aquí como también nos lo ponen
siempre que nos insulta el venezolano Chavez. ¿Pero queda algo de la
dignidad de una Nación?. Porque eso también cuenta y a la postre
también pesa en el concierto mundial. No habrá hecho alguno, no
habrá acción ninguna. Todo será un eufemismo tras otro para salvar
una cara que está roja de vergüenza. Pero más roja la sangre vertida
en las arenas del Sahara.
Sahara Occidental
La política del gran timo
GEES Libertad Digital 11 Noviembre 2010
Al cumplirse los 35 años de la firma de los Acuerdos de Madrid, el
conflicto del Sahara Occidental sigue sangrando por la misma herida
que entonces: la de la inanidad de una casta política que, tanto
desde la derecha como desde la izquierda, no ha sabido encontrar
alternativa a unas relaciones con Marruecos sin más contenido que el
de la dejación de responsabilidades. La bochornosa fuga de la
ministra Trinidad Jiménez, dejando campo libre a los desmanes de
Mohamed VI en el Sahara Occidental, es la última perla de esta
dinámica que prácticamente todos los partidos que han gobernado
desde la transición han cultivado, a costa de un sufrimiento
innecesario de los saharauis y de un alevoso engaño a los españoles.
En 1975 mientras Franco agonizaba, los firmantes de los acuerdos –en
verdad no fue más que una declaración de principios–, aseguraron que
tuvieron que ceder ante Marruecos por el grave riesgo de guerra
planteado por la llamada invasión pacífica de la Marcha Verde. Sin
embargo, los propios responsables militares de la entonces provincia
española confesaron años después que una semana antes de que la
Marcha Verde cruzase la frontera del Sahara Español, el ejército
marroquí ya estaba avanzando por el territorio desde la parte de la
frontera más alejada de la atención de la prensa internacional,
pendiente sólo del jaque mate lanzado por el entonces Rey Hassán II
con su amenaza de "invasión pacífica".
Los propios responsables de la entrega del Sahara reconocieron
además que la propia Marcha Verde integrada por 350.000 supuestos
civiles cruzó más tarde la frontera en virtud de un acuerdo tácito
alcanzado por el Rey Hassan II con el Gobierno de Arias Navarro que
obligó a las tropas españolas a una frenética actividad de desminado
y minado con el que se retrasaron las líneas defensivas. Objetivo:
que los "patriotas marroquíes" pudiesen adentrarse en el territorio
unos diez kilómetros durante unas horas, sin peligro de saltar por
los aires, hacerse una foto "recuperando" el Sahara al colonialismo
español y volver al punto de partida, del lado marroquí de los
límites internacionales. Luego, el remate a este farsa lo dio la
firma de unos supuestos acuerdos que se supone pactaban la
transferencia de la administración y que no fueron publicados en el
Boletín Oficial del Estado para que no pasasen de ser una
declaración de principios, es decir, papel mojado.
Paradójicamente, los firmantes de los acuerdos invocaron el interés
de España y el patriotismo para justificar el giro con el que habían
hecho descarrilar la política de apoyo a la autodeterminación
saharaui apuntalada por las Naciones Unidas, y que Franco
consideraba era la más acorde con los intereses económicos y
geoestratégicos de España. Pero ni siquiera el PSOE de Felipe
González –en la oposición tan pro-polisario como anti-otanista– hizo
nada al llegar al poder para desmontar el gran engaño. Todos los
partidos que han gobernado han contribuido así a mantener la ficción
de unos acuerdos que nunca fueron legales para justificar la
dejación de España en relación a sus responsabilidades con el pueblo
saharaui. Se ha hecho creer a los españoles que a España no le
quedaba más vínculo con los saharauis que el que dicta la
solidaridad, historia y cultura. No es así. Es por el imperativo
legal que dicta el artículo 73 de la Carta de Naciones Unidas y el
dictamen del experto jurídico de la ONU Hans Corell.
El PP se indigna ante la "incomprensible indiferencia" del PSOE de
Zapatero, pero también es cómplice del engaño que, disfrazado de
neutralidad y equidistancia entre las dos partes enfrentadas, ha
sido el mejor aval de Marruecos para seguir haciendo de su capa un
sayo con la tranquilidad que le daba el saber el Frente Polisario no
podía tomar la palabra en la ONU porque el Sahara sigue legalmente
pendiente de ser descolonizado. España –que es la autoridad que
debería legalmente hablar por el pueblo saharaui–, se lava las
manos, haciendo como si nada tiene que ver con el asunto y como si
fuese un asunto susceptible de mediación. Por eso las declaraciones
de la secretaria de Organización del PP solicitando a Zapatero que
auspicie unas negociaciones entre Marruecos y los saharauis "sin
interferencias que puedan empañar su buen fin" y supuestamente
encaminadas a que se pueda mantener "la posibilidad de un
referéndum", muestran una improvisación oportunista marcada por
elnefasto giro con el que el partido abandonó el paréntesis
pro-saharaui de Aznar, dejándose llevar de la mano por personajes de
dudosa amplitud de miras, que lo mismo son acusados de islamófobos
que recogen premios que defienden la solución autonómica, en
sintonía con Mohamed VI. Lo peor es comprobar que se ha puesto al PP
al mismo nivel que el PSOE de Zapatero, con una incapacidad pavorosa
para convertir la acción exterior en algo más que un caballo de
batalla en la política electoral.
Ambas fuerzas políticas compiten en vender a los españoles la burra
de que Marruecos es el socio por el que tiene que apostar España,
sacrificando el claro mandato de la ONU –que exige a España amparar
a los saharauis– en nombre del más burdo realismo político, suicida
además para nuestros intereses a largo plazo. Se ha dicho que la
contrapartida era la tranquilidad en Ceuta y Melilla, pero los
incidentes de los últimos meses y el bulo del niño que se decía
asesinado por la Guardia Civil han vuelto a demostrar que Mohamed VI
no está dispuesto a soltar la presa. También se ha hecho creer a los
españoles durante mucho tiempo que lo que ocurriese en el Sahara no
nos afectaba. Todo lo cual, además, estaba guiado por el falso
cálculo de que las nuevas generaciones de saharauis iban a seguir
los pasos de los dirigentes del Polisario, víctimas en buena medida
del poder corruptor y paralizador de las ayudas humanitarias, y que
se ven incapaces ahora de controlar la situación. Ahora las llamas
en El Aaiún han demostrado lo frágil que resulta una paz basada en
un statu quo de cartón piedra. Lo malo es que el humo oscurece
nuestro patio trasero.
GEES, Grupo de Estudios Estratégicos.
Víctimas unidas
Editoriales ABC 11 Noviembre 2010
Tanto anuncio del fin de ETA corre el riesgo de hacer creer que,
cuando llegue, también desaparecerán sus víctimas. El Día de la
Memoria, celebrado ayer en Vitoria, es la prueba de que ETA ya tiene
un rastro imborrable de muerte y dolor. Las víctimas de ETA deben
ser los inhibidores del olvido, de la injusticia que puede tentar a
algunos de premiar a los terroristas por dejar de matar.
Precisamente, si tan cerca está el final de ETA, el protagonismo de
las víctimas es aún más necesario. Y tanto o más lo es que las
víctimas de ETA, y de todo terrorismo, permanezcan unidas y fuertes
por su memoria, dignidad y justicia.
No es la economía, es la Libertad, idiota
Javier Benegas*. El Confidencial 11 Noviembre 2010
Es más que evidente que nos encontramos ante un cambio, casi un
terremoto al que han puesto sordina, que es ya imposible parar. La
gran cuestión es qué traerá consigo. Y, por ahora, mucho me temo que
no será la Libertad ni el derecho a decidir que tanta falta nos
hace. Porque si hay algo que caracteriza la mentalidad de los
europeos –y, muy especialmente, la nuestra- es esa fascinación por
la gran mentira sobre la que ya nos previno Hölderlin al escribir
que “lo que ha hecho siempre del estado un infierno sobre la tierra
es precisamente que el hombre ha intentado hacer de él su paraíso”.
El mayor problema no es tanto ya la decadencia de los supuestos
valores occidentales, sino la pérdida casi completa de nuestra
libertad individual. Y ello se ha hecho especialmente visible en el
terreno de lo económico. Estamos prácticamente impedidos para
emprender y crear riqueza. Las ideologías de izquierda y derecha,
ambas obstinadas en planificar nuestras sociedades y reducir a la
mínima expresión el ámbito de competencia de los individuos, han
transformado a las personas en parias.
Pero lo peor de todo, lo que nos llena de un asfixiante pesimismo,
es que ni la izquierda ni la derecha tienen previsto reformar este
modelo político. Muy al contrario: ambas defienden con obscena
vehemencia el actual status quo. Y se sienten cómodas combatiendo
por el poder bajo unas reglas no escritas que limitan el daño
infligido al adversario. En consecuencia, las víctimas son los
ciudadanos.
Mientras José Luis Rodríguez Zapatero dice proveernos de
“libertades”, la Libertad es reducida a su mínima expresión. Por su
parte, Mariano Rajoy, aparentemente inocuo e indeciso, hace lo suyo
excluyendo obstinadamente de su programa cualquier medida que vaya
más allá de las reformas económicas. Y, por último, respecto a esa
otra derecha que anida en el Partido Popular, valga como muestra el
equivocado análisis de que hay que quitar competencias a las
autonomías para devolverlas al Estado, cuando lo que realmente hace
falta es devolver esas competencias a los ciudadanos.
Entre unos y otros, apenas queda resquicio para la transformación
que necesitamos. Y tanto el PSOE como el PP, izquierda y derecha al
uso patrio, parecen estar de acuerdo en lo fundamental: mantener a
raya a los españoles.
Tanto el PSOE como el PP, izquierda y derecha al uso patrio, parecen
estar de acuerdo en lo fundamental: mantener a raya a los españoles
Siempre se ha dicho que los españoles somos gente de extremos,
porque vamos de la calma a la tempestad sin aviso previo; que somos
seres viscerales, irreflexivos, temperamentales y demás sandeces.
Esta socorrida imagen nos convierte en eternos adolescentes a los
que hay que tutelar y atar en corto. Pero se omite que, en España,
los gobernantes no han tenido sensibilidad alguna para ahorrar
padecimientos a sus gobernados. Y una y otra vez han sobrepasado
todas las líneas rojas con total impunidad, al no existir mecanismos
de control que pudieran evitarlo. Hoy esos mecanismos siguen sin
existir. Y por eso se genera la engañosa sensación de que la
sociedad está anestesiada.
Si existiera una verdadera democracia, si los diputados fueran
elegidos por distrito, si el poder judicial estuviera a salvo de los
partidos políticos y los legisladores votaran en conciencia y de
forma coherente con lo demandado por sus votantes, hace tiempo que
los españoles habrían manifestado su desacuerdo y, lejos de verse
abocados a ser seres implosivos y viscerales o, en su defecto, sin
sangre en las venas, el sentido común habría prevalecido y, con él,
el instinto de supervivencia.
Pero no. En España, la gente, los ciudadanos, los electores, sólo
tienen a su alcance una papeleta trucada cada cuatro años. Un voto
que, una vez es depositado en la urna, pone en marcha una maquinaria
letal que es imposible parar durante cuatro años. Y, si uno lo
piensa detenidamente, esta democracia nuestra produce aprensión.
Estando así las cosas, es triste ver cómo la impotencia sólo alcanza
ya a generar discursos voluntaristas, que abogan por poner en marcha
nuevos negocios e ideas a tumba abierta, de tal forma que diríase
que la solución queda reducida a contar con un ejército de heroicos
emprendedores dispuestos a inmolarse en el altar de lo imposible. Ni
una cosa ni la otra. No necesitamos que estos políticos que
padecemos nos solucionen los problemas, porque es cierto que debemos
ser nosotros quienes asumamos determinados riesgos. Ahora bien, para
aceptar nuestra responsabilidad en el ámbito de lo privado antes
deben devolvernos nuestra libertad individual y, de paso, sanear el
sistema. Y para eso, o bien seguimos el guión del españolito que va
de la calma a la tempestad sin mediar aviso, o bien de entre tanto
político sin entrañas surge algún héroe, quizás un suicida, capaz de
poner las bases de una profunda reforma.
* Javier Benegas es experto en branding y comunicación
El buenismo suicida
Juan Van-Halen www.gaceta.es 11 Noviembre 2010
No todos somos justos y benéficos aunque lo proclamase la
Constitución de Cádiz.
Este neologismo viene asimilándose a una determinada manera de
gobernar desde políticas de buen talante, condescendientes, de
apaciguamiento como fin en sí mismo. En definitiva, débiles. Poner
la otra mejilla al recibir una bofetada es cristiano pero nada
aconsejable a la hora de gobernar a los pueblos. En vísperas de la
Segunda Guerra Mundial algunos países que luego fueron aliados
ejercieron con el régimen nazi un buenismo avant la lettre. El mundo
sufrió el resultado. Churchill fue una de las pocas voces que
anunciaron la inutilidad del buen rollito. En España la
quintaesencia del buenismo tiene a Zapatero como portaestandarte. Su
política exterior, desde la Alianza de Civilizaciones al frustrado
intento de cambiar la Posición Común de la Unión Europea respecto a
Cuba, es buenismo. Y su política interna está impregnada también de
ese buenismo.
Este dogma ideológico buenismo considera que la mano tendida
soluciona los conflictos, pero es falso. La debilidad de una parte
fortalece y amplía las demandas de la otra. Todos no somos justos y
benéficos aunque lo proclamase bondadosamente la Constitución de
Cádiz.
Elena Valenciano, la voz del PSOE en política exterior, declaró que
el buenismo es su “apuesta de futuro”, y Moratinos se mostró
encantado de que los socialistas tuviesen por esos mundos fama de
ser “tan buenos”. Pero es un espejismo. La fama del Gobierno no es
de bueno sino de débil. Igual que es un espejismo creer que hay unos
terroristas mejores que otros. Abrir diálogo con el terrorismo es
otro error buenista. Compartí durante dos años tertulia semanal en
la SER con Ernest Lluch, una gran persona, y le escuché muchas veces
defender con ahínco el diálogo para salir de la violencia. Era puro
buenismo. Acabó recibiendo un tiro en la nuca como ejemplo de
diálogo.
Creer a pie juntillas que el diálogo y el buen talante todo lo
arreglan es una ingenuidad que no se puede permitir un político con
responsabilidad de gobierno. El diálogo es un medio pero no un fin
y, en todo caso, tiene sus límites. Hay asuntos sobre los que no se
debe dialogar y también hay interlocutores imposibles. La España de
Zapatero, en la vía del apaciguamiento, ha hecho repetidamente el
ridículo. El colmo es que ha recibido bofetadas incluso del Gobierno
colonial de Gibraltar porque el buenismo de Zapatero decidió
encuentros a tres bandas: España, Gran Bretaña y Gibraltar, de igual
a igual, rompiendo una política española que no se había
interrumpido con régimen alguno desde 1704.
El buenismo suicida de Zapatero le desliza hacia un nuevo diálogo
con el terrorismo, si es que alguna vez se interrumpió y no nos
mintió también en eso, desde el error de creer que una paz-trampa le
haría ganar las elecciones. Pero su condición de cadáver político
insepulto no lo arregla una cabriola más, aunque su estrategia sea
ahora esconderse detrás del buenismo de Rubalcaba que, por cierto,
no es tan inteligente como él quiere que creamos. Simplemente tiene
poder y abusa de él. El león es el rey de la selva no porque sea el
animal más fuerte ni el más bello ni el más veloz ni el más
peligroso. Es el rey de la selva porque los demás se lo han creído.
Y, además, no habita en la selva sino en la sabana.
El buenismo lleva también a considerar como panacea la llamada
Alianza de Civilizaciones. Debemos abrirnos a lo que nos llega de
fuera sin defender lo que es tradicional. Se aceptan como normales
los forcejeos sobre usos y costumbres de culturas y religiones que
no respetan nuestros valores ni los más elementales derechos
humanos, y se menosprecian y persiguen valores y signos de la
religión católica, mayoritaria en España, en aras de un laicismo
cateto e ideológicamente utilitarista.
Es chusco que se esté planteando, incluso por vía de iniciativas en
ayuntamientos, la institucionalización de un imposible “civilismo
sacramental”: bautizos, confirmaciones y comuniones laicos… Aunque
resulte anacrónico este laicismo rampante tiene un tufillo masónico
rancio claramente perceptible. Al infante don Enrique de Borbón,
muerto en duelo por el duque de Montpensier en 1870, le hicieron un
“funeral masónico”.
El buenismo viene a ser que cada cual haga lo que le venga en gana,
que se hable de derechos y no de deberes, que se prefiera pedir
perdón a pedir cuentas, que si otro país nos ofende debamos
conformarnos con el cobarde “podía haber sido peor”. Así, España
paga a piratas, condecora al cerebro de la invasión de Perejil y
hasta se deja insultar por ese municipio del Sur llamado Gibraltar
que se empeña en tener una fantasmagórica soberanía. Y el Gobierno
encantado de haberse conocido. El buenismo supone debilidad y
rendición. Nos va a costar mucho a los españoles enmendar un día el
daño del suicida buen rollito de Zapatero.
*Juan Van-Halen es académico correspondiente de la Historia y
senador.
Río Cabe
Obsesionados con la Basílica
Serafín Fanjul Libertad Digital 11 Noviembre 2010
Si usted visita Nápoles –habituado como está a convivir con la saña
contra el pasado que despliega incansable la autotitulada izquierda
española– tal vez se sorprenda al contemplar el enorme letrero que
en el edificio central de Correos proclama haberse construido en
1936, "XIV aniversario de la Era Fascista". Y sin salir de la misma
ciudad, también tendrá a su alcance la gran lápida conmemorativa que
en la Porta Alba nos recuerda que aquello se levantó en tiempos de
Felipe IV (nuestro Felipe IV, aclaro para víctimas de la LOGSE) por
orden del virrey don Antonio Álvarez de Toledo en 1625, porque en
Nápoles y todo el sur de Italia hubo un virrey español durante mucho
tiempo. A nadie se le ocurrió arrancarla y si se le ocurrió tuvo
escaso éxito. Por Italia, Alemania, norte de África hay vestigios
similares.
En la fortaleza española de Orán campean las Armas de España en el
escudo que sobrevuela en la entrada, por toda América –como es
natural– innumerables testimonios pétreos nos acercan un tiempo de
conquistadores, pobladores y fundadores de ciudades, a pesar de la
vena local hispánica, destructiva y cateta, que nunca falta, y
dispuesta a borrar el pasado arrasando monumentos. Pero hasta en
México, bien cerquita del Zócalo, se alza El Caballito (Carlos IV,
en efigie ecuestre, la última imagen que un servidor adjudicaría a
tal personaje) y en La Habana, nada menos que en la Plaza de Armas,
se levanta algo tan exótico como una estatua ¡de Fernando VII!, por
cierto reubicada hace escasos años, dentro de los enjuagues
político-económico-culturales de Eusebio Leal, Historiador de la
Ciudad. Y así mundo adelante.
Siempre he considerado que Rodríguez es un ejemplar bien
representativo del progre medio español: sectario, cortito de miras
y con una incultura oceánica. Con saberse al dedillo cuatro lemas y
tres consignas que aplican indiscriminadamente a cualquier situación
o contingencia ya les llega. Desde que alcanzó La Moncloa –y con él
su grey de intelectuales de alto bordo, desde Suso de Toro a
Ramoncín– no han parado en una iconoclastia necia que sólo rebalsa
el pus y la baba de la venganza, en no pocos casos de dirigentes
socialistas contra sus verdaderos padres, franquistas a carta cabal.
Pero hay algo que intentan liquidar "como sea", divisa preferida de
Rodríguez: el Valle de los Caídos. En estas mismas páginas
(Rodríguez, el de Bamiyán) hemos comentado el odio especial con que
distinguen al conjunto artístico, natural y religioso de Cuelgamuros
–para ellos es inadmisible una cruz tan grande, sin desvirtuarla y
escarnecerla– y ahora vuelven a la carga, con la zafiedad que les
caracteriza, conculcando la libertad religiosa (impedir el acceso a
los católicos a u n templo de su credo), ignorando el Concordato y
aprovechando el día de la llegada del Papa a España para tratar de
infligirle otra bofetada. Y, por supuesto, recordándonos que aquí
mandan ellos –"Él", el Sabio de La Moncloa– porque ganaron en
elecciones una precaria mayoría minoritaria.
También es cierto que junto al designio meramente vengativo subyace
el electoralista: echar carnaza a su tropa para reavivar la
mortecina y ya inencontrable vitola "de izquierda" en el PSOE, con
la que tanto lustre se dan. Puesto que en materias socioeconómicas
ese partido hace lo contrario de cuanto predica, hay que compensar a
la parroquia con gestos maleducados como intentar desairar al Papa
largándose a Afganistán, o permanecer sentado ante la bandera de
EEUU; o inventar memeces como la inversión de los apellidos...¡por
orden alfabético! Hay muchas más, pero no cansaremos al lector. A
nada que se esfuerce podrá recordarlas (cambio climático,
tercermundismo verbal, "la tierra es del viento" y etcétera) y
quizás convengamos en que el objetivo de tal parafernalia es siempre
el mismo: reenganchar al carro de la izquierda, con fines
estrictamente electorales, a los cabreados por la traición al
Polisario, por el paro o la congelación de las pensiones. Todo sea
por el socialismo.
COMUNICADO: Sobre el deseo utópico
intentar cambiar el Partido Socialista de Madrid
Ángel Gimeno Marín. Internet 11 Noviembre 2010
“Fue un deseo utópico intentar cambiar el Partido Socialista de
Madrid de los Zerolo, Segovia, Tomás Gómez, Barranco, Trinidad
Rollán, Lissavetsky, etc., al igual que el PSOE de Zapatero, Alonso,
Pajín, Valenciano, Aído y tantos otros, pero mereció la pena.
Hoy lo tengo muy claro. Hay que ayudar a cualquiera que pueda sacar
a Zapatero de la Moncloa, llámense PP, UPyD o IU.
Hoy me voy con la conciencia tranquila, tras haber intentado aportar
catarsis a un Partido en el que la mediocridad se ha instalado tanto
en su cúpula como en toda la organización y en el que nadie denuncia
que Zapatero se ha cargado el trabajo de los españoles a lo largo de
cuarenta años.
El Sistema Político Español no puede sostenerse al haber entrado en
quiebra todas y cada una de sus instituciones.
Nos hemos cargado el modelo productivo y el Estado de las
Autonomías, la educación tiene perfiles tercermundistas, el Estado
del Bienestar corre serio peligro y la partitocracia se ha
convertido en el peor enemigo de los españoles.
El pésimo nivel de nuestros políticos con corrupción por todas
partes, sumado al absentismo de la sociedad civil y la pérdida de
todo tipo de valores pintan un horizonte negro como en ningún país
europeo.
Hay que empezar un nuevo ciclo de nuestra vida política y económica
antes de que sea demasiado tarde.
Habría que someter a Zapatero a un proceso de impeachment, con
mayores motivos que los aducidos en EEUU contra Nixon.
Si Zapatero está enfermo, o presenta graves síntomas de estar
enfermo, no puede continuar al frente del Gobierno, porque ha
debilitado la unidad nacional, hace el ridículo con su política
exterior y cada vez que habla es mayor el desprestigio de España.
No podemos permitir que un sentimiento de impotencia ante una pésima
forma de gobernar hipoteque nuestro futuro y el de nuestros hijos.
Hay que cambiar todo de nuevo, especialmente nuestra forma de
participar en la vida política.
Hace falta crear la masa crítica política suficiente para reformar y
regenerar nuestras instituciones cambiando nuestra forma de vivir,
de trabajar y defender nuestros legítimos intereses.
Hace falta salir a todas las calles en manifestaciones pacíficas a
lo Gandhi, con un fin claro: acabar con métodos democráticos con el
Sistema Político que nos dimos en la Transición y empezar de nuevo a
Regenerar España.
El PSOE debe entrar en el cementerio de los Partidos Políticos
cuanto antes.
Todas las ideas que un día pudo tener el PSOE han muerto tras el
terremoto de la mundialización. Como lo único que entienden sus
cargos, es vivir de la política sin querer ver la destrucción de
España como nación y el inicio de otro largo periodo de decadencia,
hay que reducir su presencia en la vida política aprovechando todos
los procesos electorales
El proceso de elección de los peores a los más altos cargos del
Partido y el Gobierno, dirigen inevitablemente al PSOE con Zapatero
al frente, al cementerio de los Partidos Políticos saturado de
tumbas dónde duermen el sueño eterno organizaciones políticas que en
los dos últimos siglos ilusionaron a pueblos enteros y hoy no los
recuerda nadie.
¿Qué queda del comunismo, del anarquismo, de los partidos radicales?
¿Qué quedará del PSOE tras la dirección de Zapatero? Nada de nada.
Ni tan siquiera el recuerdo.
Falsedades, engaños y políticas obsoletas
Por sus engaños y falsedades, por la renuncia a defender los
intereses de sus votantes, por su travestismo, por desconocer y no
intentar comprender la realidad, el socialismo español camina a su
desaparición en el momento en el que el capitalismo ofrece su peor
cara.
En la peor crisis económica de los últimos cien años, en vez de
afrontarla y combatirla con planteamientos críticos, se ha dedicado
a desarrollar un programa económico impuesto por los mercados
financieros, que ha complementado con un programa social y de cambio
de nuestras costumbres calcado del Libro Blanco del Gran Oriente
Francés.
Esta desconexión con la realidad, unida a una navegación sin
brújula, sin nadie preparado al frente del Partido y el Gobierno,
conduce al PSOE sin remisión al cementerio de los partidos políticos
que terminaron sin ideario, sin doctrina, sin orientación política
alguna, pero sobre todo sin ninguna identidad.
Lo peor es que se está incubando un volcán de ira y violencia en la
sociedad española al igual que sucedió hace noventa años.
No podemos permitirlo
La socialdemocracia europea y el PSOE están condenados a desaparecer
En 2002 había en Europa quince gobiernos socialdemócratas. Tras las
próximas elecciones generales en Portugal, Grecia y España, no
quedará ninguno.
Han sido incapaces de responder a la crisis económica y lo que es
peor, se han hundido en el descrédito popular al aplicar los
programas de austeridad decididos por los mercados financieros y la
Unión Europea.
La conversión de Zapatero al socialiberalismo, impulsando las
privatizaciones, reduciendo los presupuestos a costa del bienestar
de los ciudadanos, destinando recursos a la salvación de Bancos
quebrados, reduciendo salarios a los funcionarios, congelando las
pensiones, preparando el aumento de la edad de jubilación y sobre
todo aumentando las desigualdades y la precariedad de los
ciudadanos, conducen al PSOE y a España a un callejón sin salida.
No es de recibo que el PSOE no sepa dirigirse a millones de
ciudadanos en paro víctimas de la mundialización.
Es incomprensible que no busque soluciones a las multitudes de
obreros desechados por las brutalidades del mundo postindustrial,
que no se preocupe por los excluidos, milieuristas y jubilados en
plena edad activa.
Es inadmisible que no hable tan siquiera de ese 43% de jóvenes
menores de 25 años que no encuentran trabajo, ni de las ayer clases
medias, hoy amenazadas por la miseria.
La socialdemocracia es culpable de que sus electores le den la
espalda
Hasta mediados de los 80 cada vez que el capitalismo avanzaba, los
socialistas apoyados por partidos de izquierda y sindicatos, daban
respuestas originales mejorando la enseñanza, la sanidad, derecho a
un empleo, Seguridad social, Estado social, Estado de bienestar...
Hoy día ya no queda lo más mínimo de aquella imaginación. La utopía
social ha desaparecido de sus pensamientos.
En la mente de los dirigentes socialistas, al igual que en la de sus
electores, el consumismo impera, así como el deseo de enriquecerse
lo antes posible. No sólo no van a contracorriente sino que incluso
lo defienden mediante la publicidad y los medios de comunicación
manipulándolos a su antojo.
Si hay algo que preocupa a los dirigentes socialistas, es como
conservar su puesto y vivir a costa del Partido o los Presupuestos.
Ha sido tal su dejadez que han permitido que hoy esté en peligro el
Estado del Bienestar y que la sociedad empiece a sentir pánico
cuando piensa en su futuro.
Para los europeos en general y para los españoles en particular la
socialdemocracia está al final de su ciclo político.
No han entendido nada de lo que estaba pasando, mal podían aportar
soluciones a los graves problemas de los ciudadanos.
España tiene problemas superiores a muchos países europeos, que no
puede esperar le resuelvan desde fuera.
España necesita un proceso de regeneración total, una nueva
Constitución, un nuevo modelo productivo y un nuevo Estado del
Bienestar.
El proceso a poner en marcha es más importante si cabe que el que
acometió en 1978, tras dotarnos de una nueva democracia.
La mediocridad de los dirigentes actuales del PSOE, con honrosas
excepciones, les inhabilita para dirigir este proceso de
transformaciones globales que hoy necesita España.
Continuar en el PSOE actual, es lastrar cualquier posibilidad de
colaborar en la transformación de España.
Por eso me marcho sin acritud, pero con la conciencia tranquila,
dejando a muchos amigos que desgraciadamente me comprenden, pero no
están por librar esta dura y próxima batalla. Lo siento por ellos”.
Saludos Socialistas
Ángel Gimeno Marín
Miembro del Comité Regional del Partido Socialista de Madrid,
PSM-PSOE
Profesor, Economista, Matemático, Ingeniero Industrial, Empresario
Máster y PADE en Economía y Alta Dirección
Ex Consejero de Economía y Hacienda de la Diputación General de
Aragón
Señora Ezenarro, no ponga excusas
SANDRA CARRASCO El Correo 11 Noviembre 2010
Estimada señora Ezenarro: Acuso recibo de la carta que nos dirige a
las víctimas del terrorismo para explicarnos su postura en relación
con la celebración del Día de la Memoria. Y créame si le digo que no
entiendo la postura que usted expresa en esas líneas. Porque lo que
nos ofrece son excusas por su no asistencia al acto, excusas que
nosotros no le hemos pedido. Y cuando alguien tiene que ofrecer
excusas no solicitadas, lo que está poniendo de manifiesto es que no
tiene la conciencia tranquila por la decisión que libre y
responsablemente ha tomado.
Sepa usted que para las víctimas del terrorismo acudir a cualquier
acto que tenga que ver con lo que nos sucedió, el atentado, el
funeral, las buenas palabras y un largo etcétera, supone siempre un
desgarro. Supone reabrir heridas profundas y, en muchas ocasiones,
muy antiguas. Pero somos capaces de superar ese dolor, porque
entendemos que nuestra presencia, que nuestro testimonio es muy
importante para deslegitimar el terrorismo, porque la mirada
inocente de una víctima deslegitima al victimario, convirtiendo al
activista en lo que realmente es: un asesino vil y cobarde.
Por eso, cuando nos invitaron a participar en el Día de la Memoria
no dudamos un solo instante en decir que acudiríamos, al igual que
acudimos cuando se aprobó la Ley de Reconocimiento y Reparación a
las Víctimas del terrorismo en junio de 2008 y que contó con la
unanimidad de los partidos democráticos. Y usted también votó a
favor.
Y dijimos entonces, y decimos ahora, que aguantaríamos la emoción y
el dolor por el recuerdo del sufrimiento padecido, porque la Memoria
ha sido una reivindicación fundamental de todas las víctimas del
terrorismo, junto a la dignidad y la justicia. Memoria para que no
se olvide lo que pasó y todavía sigue pasando, desgraciadamente, y
para que no se olvide por qué pasó: porque una banda terrorista
quiso imponer un proyecto político totalitario y excluyente sobre la
sangre inocente de las víctimas.
Y dijimos entonces, y repetimos ahora, que la unanimidad de los
partidos democráticos, algo que siempre hemos pedido las víctimas,
es un elemento fundamental para terminar con el terrorismo. Y no
entendemos que usted y su partido, que aprobó la Ley de Víctimas, no
participen en este acto. No podemos entenderlo, señora Ezenarro.
Habla usted de ruptura de consensos, y lo que vemos es que son
ustedes los que lo han roto. Ustedes sabrán exactamente por qué. No
podemos entender que usted y su partido no acudan al acto porque se
pretenda mantener la memoria de las víctimas del terrorismo.
Mire, señora Ezenarro, nadie es más sensible al sufrimiento que
quien ha sufrido mucho, y créame si le digo que hemos sufrido mucho.
Y podemos compartir con usted que nuestro sufrimiento puede no ser
el único que se ha generado en estos años. Pero usted misma indica
que se ha iniciado un camino para que sea reconocido. Y que se ha
iniciado de forma unánime, como siempre hemos pedido las víctimas
del terrorismo.
Por eso no podemos aceptar sus excusas no pedidas. Con el debido
respeto, lo que creemos que podría haber hecho es acudir al acto,
compartir con nosotros esos momentos de emoción y, después,
manifestar todo aquello con lo que no esté de acuerdo. Sepa usted
que, para las víctimas, las ausencias en un día tan importante
suponen un dolor añadido. Téngalo en cuenta para el futuro.
Entrevista Periodista Digital / El Catedrático de Derecho
Constitucional de la USC explica los porqués del conflicto, Carlos
Ruiz Miguel:
"Marruecos ha sobornado a Francia en el
asunto del Sáhara y no descarto que haya hecho lo mismo con España"
"España es la potencia administradora del Sáhara y su deber es
denunciar las violaciones cometidas por Marruecos"
Roberto Marbán Bermejo Periodista Digital 11 Noviembre 2010
La situación en el Sahara Occidental se sigue agravando. La antigua
colonia española se ha puesto ahora más que nunca de actualidad ante
el recrudecimiento del conflicto, como hemos podido observar estos
días.
Periodista Digital intenta arrojar algo de luz sobre esta espinosa
cuestión tras la nueva persecución de la población saharaui
emprendida por Marruecos y por ello entrevista a Carlos Ruiz Miguel,
Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Santiago
de Compostela.
Ruiz Miguel ya avanzó en su blog Desde el Atlántico que la represión
de Marruecos sobre los saharauis podría recrudecerse, como
finalmente ha sucedido. ¿En qué elementos se basó? Lo explica así:
"Sabía que, en primer lugar, la protesta de los saharauis por su
situación iba a más. Pero el dato más revelador fue la prohibición
de acceso de Marruecos a los medios de comunicación antes de la
destrucción del campamento saharaui."
"Cuando esto ocurre es porque ya se ha planificado algún tipo de
asalto y se busca que la opinión pública no conozca estos crímenes.
Así pueden escudarse diciendo que existen dos versiones enfrentadas
buscando confundir a la comunidad internacional"
"LO QUE NO DICE TRINIDAD JIMÉNEZ ES QUE NO SÓLO LA ONU TIENE TODA LA
RESPONSABILIDAD EN EL CASO DEL SAHARA"
Y es que el rey Mohamed ha aplastado en El Aaiún un campamento con
refugiados dentro. Y ante eso, la nueva ministra de Exteriores del
Gobierno de ZP, Trinidad Jiménez, se descolgó asegurando que esa
bestialidad no competía a España: "Es cosa de la ONU". Pero en
opinión de Carlos Ruiz Miguel, no dice toda la verdad:
"Es una verdad a medias. Cuando ella dice que la ONU tiene algo que
decir en esta situación tiene razón pero el problema es que no dice
toda la verdad. Las resoluciones de las Naciones Unidas señalan que
ellos son responsables del territorio porque es un territorio
colonial, pero no es sólo cosa de la ONU sino también de la potencia
administradora del territorio y lo que no quiere decir la señora
ministra es que en este caso es España"
"Esta misma situación, con matanzas incluidas como ahora ocurre, ya
se produjo en su día en Timor Oriental, que estaba invadida por
Indonesia pero la potencia administradora era Portugal, que ante el
conflicto asumió sus responsabilidades que no eran ni más ni menos
que denunciar los crímenes que se producen contra la población
civil."
"España debe velar por el bienestar del en su día pueblo colonizado.
Es su deber jurídico, no solo su deber moral. Tiene que denunciar
las violaciones de la potencia ocupante, que es Marruecos, en este
territorio"
"LA CLAVE ES NO OCULTAR NUESTRA CONDICIÓN DE POTENCIA
ADMINISTRADORA"
Para este experto de la zona, España "practica una política
deliberada desde el Gobierno y sus terminales mediáticas para
ocultar el hecho de que nuestro país es la potencia administradora
que para mí esa es la clave para explicar el asunto. Si eso no se
explica, es muy fácil luego echar balones fuera con la ONU,que ya
hemos explicado que tiene mucho que decir en el Sáhara pero no son
los únicos"
"MARRUECOS HA SOBORNADO A ALGUNOS POLÍTICOS FRANCESES; NO DESCARTO
QUE SUCEDA LO MISMO CON ESPAÑA"
Sea como sea, el 'sultan' alauita sigue perpetrando todo tipo de
fechorías sin que España levante la voz. ¿Por qué? Difícil saberlo,
pero Carlos Ruiz Miguel apunta una hipótesis cuanto menos
interesante:
"¿Por qué Francia tiene una posición favorable a Marruecos? Porque
se ha sobornado a una importante parte de la clase política francesa
y se ha financiado campañas electorales, lo que se conoce como una
financiación ilegal en toda regla. Esto significa que esos políticos
corrompidos apoyen a Marruecos y no es algo que diga yo, es que así
lo confesó el antiguo ministro del Interior marroquí que hizo
público como ciertos políticos de la izquierda y la derecha francesa
eran sobornados"
"¿Sucede esto en España? En mi opinión hay indicios de que algunos
partidos sí reciben este tipo de financiación por parte de Marruecos
pero no hay pruebas, al menos de momento. Yo sólo indicó esta
posibilidad"
"NUESTROS INTERESES EMPRESARIALES EN MARRUECOS TIENEN UNA
IMPORTANCIA RELATIVA"
Hay quien piensa que lo que realmente frena al Gobierno socialista a
la hora de tener una mayor firmeza con Mohamed VI y sus secuaces en
el conflicto del Sahara son los propios intereses españoles en
Marruecos. Sin embargo, Ruiz Miguel no secunda esta opinión:
"Respecto a los intereses empresariales en la zona yo relativizaría
todo lo posible. Es cierto que los hay pero también es cierto que
las inversiones más importantes han sido muy poco rentables para
España."
"Pongo un ejemplo: Telefónica protagonizó la inversión extranjera
más importante en la historia de Marruecos pero curiosamente ha
acabado vendiendo toda esa participación y de ello apenas ha salido
publicado nada en la prensa económica. ¿Por qué se ha ido Telefónica
de Marruecos sin ganar un duro? Porque invertir en un país sin
seguridad jurídica ni tribunales independientes implica acabar
participando en un sistema de corrupción, de caprichos y de
arbitrariedad"
"Otro ejemplo: Meliá realizó allí una inversión multimillonaria y
tuvo que perder muchos millones de euros por un capricho del rey
Mohamed al cual le molestaba la vista de un hotel. No son los únicos
casos. También podría hablar de la constructora de Florentino Pérez.
Las grandes inversiones españolas en Marruecos por lo general han
resultado un fiasco"
LE ENTREGA LAS PRIMERAS 12 CAJAS DE DOCUMENTOS
El Gobierno cede ante el PNV y vuelve a
expoliar el archivo de Salamanca
El precio a pagar por el Gobierno para aprobar los Presupuestos
comienza a hacerse visible. Según ABC, el Ejecutivo ha cedido a las
exigencias del PNV y le ha entregado 12 cajas de papeles del archivo
de Salamanca y que irán a parar al País Vasco. Se vuelve a romper de
nuevo la unidad del archivo.
LIBERTAD DIGITAL 11 Noviembre 2010
Este miércoles por la noche el Patronato del Centro de Documentación
de la Memoria Histórica, el que era conocido como archivo de la
Guerra Civil de Salamanca hasta que su nombre fue cambiado por el
Gobierno, aprobó un nuevo expolio del ya por si mermado registro
tras la salida de los papeles a Cataluña, según informa ABC.
Finalmente, las exigencias del PNV al Gobierno de Rodríguez Zapatero
han surtido efecto. Y tras su voto favorable a los presupuestos los
nacionalistas vascos han conseguido que el archivo vuelva a ser
dividido y que salgan de Salamanca los documentos reclamados por el
partido hacia el País Vasco. En total, se aprobó la partida de las
doce primeras cajas pedidas por el PNV y nuevos documentos con
destino a Cataluña. Sólo votaron en contra el alcalde de Salamanca y
el representante del ejecutivo de Castilla y León.
La ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, convocó de
"urgencia" el pasado viernes la reunión extraordinaria del Patronato
para aprobar el traspaso de 40 cajas y 980 inscripciones de
documentos a la Generalidad de Cataluña así como la transferencia de
12 cajas de "documentos del PNV solicitados en virtud del Real
Decreto de diciembre de 2008 que regula la restitución a
particulares".
Según cuenta Alberto Gutiérrez Alberca, representante de la Junta de
Castilla y León, "nos convocaron el pasado viernes con urgencia" en
una "señal" de que "tenían necesidad de que se aprobara este nuevo
envío cuanto antes". Además, indicó al diario ABC que "no hacemos un
trabajo normal, sino que simplemente nos informan de los miembros
que nos amputan".
Sin embargo, existen evidentes dudas jurídicas sobre la decisión
tomada por el Gobierno tal y como ya dictaminó la Audiencia Nacional
en 2008. El tribunal avaló la devolución de los papeles a Cataluña
pero advirtió que esa norma no servía para los reclamantes de otros
lugares de España.
los políticos, "unos bandoleros"
Boadella: "Cataluña me ha dado la muerte
civil"
Albert Boadella dice en una entrevista en El Mundo que los políticos
"son una banda de bandoleros que van al asalto del erario público".
También asegura que Catalaluña le ha dado "muerte civil".
libertad digital 11 Noviembre 2010
El director teatral cree que "una semana de dictadura al año sería
una terapia". "La gente volvería a valorar las cosas. El ejemplo del
mundo político en España es decepcionante para los jóvenes. Son una
banda de bandoleros que van al asalto del erario público".
Considera que "España está desapareciendo", no ya por los
nacionalismos, "sino porque nadie tiene conciencia de lo que es un
Estado y unos proyectos comunes. Cada uno va por su lado". Afirma
que "los jóvenes han descubierto España y su bandera gracias al
Mundial".
Dice Boadella que "Cataluña ha desaparecido" de su vida. "La he
hecho desaparecer. Cataluña me ha dado la muerte civil y he
descubierto otro mundo. Lamento no haber hecho esto hace 20 años".
"Cataluña tiene una tradición humorística que persiste aunque los
nacionalismos son la contradicción del sentido del humor; son una
religión, obligan a un auto de fe".
******************* Sección "bilingüe"
***********************
El señor X se hizo carne y puso al Pte. en
apuros (I)
Melchor Miralles. El Confidencial 11 Noviembre 2010
Pues sí. Han pasado muchos años y al fin Felipe González Márquez se
ha animado a aclarar definitivamente, y a su estilo, cobarde, que él
era el señor X del famoso organigrama de los GAL que en su día
elaboró e incorporó al sumario 1/88 del Juzgado Central 5 de la
Audiencia Nacional el magistrado juez Baltasar Garzón Real. Lo ha
hecho en unas declaraciones pavorosas a Juan José Millás en el
diario El País que han sido ampliamente comentadas, pero que no
puedo dejar de analizar.
Sus declaraciones a Millás en El País acreditan la catadura, la
condición moral del ex Pte. del Gobierno. Como hemos mantenido desde
el primer día quienes, pese a las presiones, amenazas, espionajes
ilegales y demás prácticas obstruccionistas de su Gobierno, dijimos
que era imposible que unas decisiones del calibre de secuestrar a un
anciano viajante de comercio, asesinar a treinta personas o saquear
el dinero público destinado a la lucha antiterrorista se adoptaran
sin su conocimiento y autorización.
Por vez primera Felipe González reconoce que, como las actuaciones
de los GAL tenían una enorme repercusión en las relaciones con el
Gobierno francés, “la información tenía que llegar hasta mí por las
implicaciones que tenía". Es evidente que no podía ser de otra
forma. Él se refiere en su conversación con Millás a la propuesta de
asesinar, volándola por los aires, a la cúpula etarra. Pero parece
sensato deducir que lo mismo sucedería con la decisión de secuestrar
a un anciano, de ametrallar bares a quemarropa indiscriminadamente,
de colocar bombas bajo los coches de los terroristas en plena calle
o disparar a la cabeza a los etarras, todo ello en territorio
francés.
Un tono más propio del presidente de una república bananaera
Cobra ahora mayor relevancia la famosa anotación del ex general
Emilio Alonso Manglano, entonces máximo responsable del CESID,
condenado por organizar una trama ilegal de escuchas y espionaje,
que de su puño y letra escribió literalmente en una nota de despacho
de 1983, en la que su jefe operativo Juan Alberto Perote, avisaba
del inminente inicio de acciones violentas contra ETA en el sur de
Francia: "Me lo quedo Pte. para el viernes". Según Perote, "Pte."
quería decir “Presidente”; según Manglano, "pendiente". Según la
lógica de los acontecimientos y a partir de las declaraciones del ex
Pte., parece sensato pensar que a González también tenía que
llegarle esa información, "por las implicaciones que tenía", por
emplear sus propias palabras.
Nos cuenta ahora, en un tono que imagino más propio del presidente
de una república bananera que del presidente de un país democrático
desarrollado, que en 1990 tuvo que decidir si se volaba por los
aires a la dirección de ETA en una reunión de su comité ejecutivo. Y
expresa sus dudas de entonces, y añade que dijo no, "y todavía hoy
no sé si hice lo correcto. No te estoy planteando el problema de que
yo nunca lo haría por razones morales. No, no es verdad. Una de las
cosas que me torturó durante las 24 horas siguientes fue cuántos
asesinatos de personas inocentes podría haber ahorrado en los
próximos cuatro o cinco años". Es decir, que González tenía, y tiene
aún, dudas respecto a si un Gobierno de un estado de Derecho debe
asesinar ciudadanos. Esta es su moral. Este es el hombre que
presidió España durante más de una década. Lo dice claro, clarísimo:
"No te estoy planteando el problema de que yo no lo haría por
problemas morales. No, no es verdad". O sea, que dijo que no, como
podía haber dicho que sí. Y esta afirmación tan inaceptable, tan
repulsiva moral y políticamente, se entiende mucho mejor un poco más
adelante.
Es decir, que González tenía, y tiene aún, dudas respecto a si un
Gobierno de un estado de Derecho debe asesinar ciudadanos. Esta es
su moral
Sí. Cuando habla de la "detención" de Segundo Marey Samper. Este
anciano viajante de comercio jamás fue detenido. Fue secuestrado por
orden de su Gobierno. Solo los dictadores de la peor ralea califican
de "detención" un secuestro en toda regla. Y González lo hace por
dos veces en la misma entrevista. No le traicionó el subconsciente
ni el lenguaje. El está convencido de ello. Estos tipos son así,
puta, como gusta de decir ahora el ex Pte. El señor X reconoce algo
que ya sabíamos, pero que en su boca es novedad: que el entonces
ministro del Interior de su Gobierno, José Barrionuevo Peña, estaba
al tanto del secuestro hasta el punto de que tenía la capacidad de
decidir si se seguía o no adelante con él. La vida del secuestrado
estaba en sus manos. Y ello, es evidente, hace de todo punto
imposible que no lo estuviera González también. Y añade el ex Pte.
que a Marey le salvó la vida Barrionuevo, que es "quien da la orden
para que lo suelten". No recuerda, como figura en la sentencia del
Supremo, que en el despacho de su ministro de Interior se debatió
una propuesta de un alto mando de su Ministerio, Julián
Sancristóbal, del máximo dirigente de su partido, el PSOE, en
Vizcaya, Ricardo García Damborenea, y de un comisario, Francisco
Álvarez, que pretendían asesinar a Marey y después enterrarle en cal
viva. Esos eran los debates que en esas fechas se mantenían en el
Ministerio del Interior del Gobierno presidido por González. Y es
verdad que, tras negarse José Amedo a asesinar a Marey y enterrarle
en cal viva, Barrionuevo ordena que no lo hagan. Pero no cuenta
González, como consta en el sumario instruido por el Supremo, que la
orden de su ministro, de Barrionuevo, fue que mantuvieran
secuestrado una semana a Marey. Y así se hizo. Y por ello fue
condenada a prisión la cúpula del ministerio de Interior de su
Gobierno.
No puede dudar ni una décima de segundo
¿Qué especie de gobernante es aquel en cuyo Ejecutivo hay un
ministerio en el que se decide secuestrar a un anciano, en el que se
debate si asesinarle y enterrarle en cal viva, en el que el ministro
del Interior toma decisiones sobre un secuestro, en el que el Pte.
califica como "detención" un secuestro? Un presidente del Gobierno
de un país democrático, de un Estado de Derecho, no puede dudar una
décima de segundo en rechazar una ejecución extrajudicial, un
asesinato en masa, aunque sea de terroristas. Y lo terrible es que
la inmoralidad es tal que aún hoy expresa sus dudas acerca de si
actuó o no correctamente. Es pavoroso certificar la carencia de los
más elementales principios éticos en quien durante tantos años ha
presidido el Gobierno de España.
Más adelante, la guinda la pone González al difamar con crueldad
insoportable al pobre Segundo Marey, de quien dice que "nadie ha
estudiado ni va a estudiar por el momento, ni yo lo pido, qué era o
qué significaba Marey en la cooperativa de Bidart". Cobarde de
nuevo, González trata de ensuciar la memoria de este anciano a quien
su ministro ordenó secuestrar pretendiendo relacionarle con la
cooperativa donde más tarde se detuvo a la cúpula de ETA, algo que
ya trató de hacer sin éxito su Ejecutivo con Corcuera de ministro de
Interior y Alfredo Pérez Rubalcaba de portavoz. Y, para más inri,
González confunde Bidart con Sokoa, que esa era la cooperativa
etarra de marras.
Pero no acaban ahí las escandalosas declaraciones del ex Pte. a El
País. Respecto al guardia civil Enrique Rodríguez Galindo, a quien
él ascendió a general siendo ministro el inefable Juan Alberto
Belloch, dice el señor X que "era un gran tipo" y añade que "estoy
seguro de que era inocente de la mayor parte de lo que le acusaron".
¡Qué poca vergüenza! Pero no extraña en él. Solo que conviene
recordar que el general Rodríguez Galindo, ese gran tipo, fue
condenado a 71 años de prisión en el juicio por secuestrar, torturar
hasta arrancarles las uñas, asesinar y enterrar después en cal viva,
estos sí, a los etarras Lasa y Zabala. Sentencia del Tribunal
Supremo de España ratificada por el Tribunal Constitucional del
Estado español y por el Tribunal de Estrasburgo.
*El título de esta columna me lo ha prestado mi amigo de Twitter
"Truku" Diego de Anta. Gracias
Una sola víctima
'Felipe González fue el responsable directo del asesinato de mi
marido'
Santiago González El Mundo 11 Noviembre 2010
Muchas veces, los análisis macro no permiten hacer consideraciones
micro. Procedamos. La mujer de la fotografía se llama Laura Martín y
es la viuda de Juan Carlos García Goena, un objetor que se fue a
Francia para huir del servicio militar y fue confundido por los GAL
con alguno de los terroristas de ETA que vivían en lo que en aquella
época se llamaba 'el santuario francés'. Fue asesinado el 24 de
julio de 1987, hace 23 años.
Recuerdo su foto de entonces. A lo largo de estas dos décadas largas
se le ha ido depositando el sufrimiento sobre los rasgos faciales,
en cada surco, en cada arruga, en las bolsas de los ojos. No ha
parado en todo este tiempo de reivindicar la memoria de su marido y
de reclamar justicia. A la hora de valorar las declaraciones del ex
presidente González deberíamos fijarnos en esta mujer. La sociedad
española ha pasado la página de los GAL. No sabe y no quiere saber.
En este asunto, la ministra de Sanidad, Leire Pajín es quien mejor
encarna la desmemoria colectiva: "entonces yo era prácticamente
pequeñita" (a punto de cumplir 21 años en la fecha del asesinato).
Laura Martín tiene dos hijas: la mayor era muy pequeña cuando
asesinaron a su padre. La segunda es póstuma. Tal como dice su
madre, las dos se han enterado de lo que pasó, pero esto es
justamente lo que separa a las víctimas del resto de la sociedad:
ellas sí quieren una explicación sobre lo que ya saben, una cierta
catarsis. Por eso, tras lo que González llama 'dilemas morales' lo
que aquí falta clamorosamente es sentido de la responsabilidad y
sobra la mojigatería de acogerse al pararrayos de las buenas
intenciones.
Ah, la perplejidad que produce esta tropa ubicua, que al mismo
tiempo que come placenteramente con Josu Ternera ("Ser uno con la
vaca", decía Oscar Ladoire en 'Opera prima') se sigue preguntando si
hizo bien al no ordenar el asesinato de la cúpula terrorista hace
veinte años, en un planteamiento que no soporta un análisis lógico:
dos años después de tener esa ocasión, la misma cúpula terrorista,
el colectivo Artapalo, fue detenida en una operación inmaculada
desde el punto de vista democrático. Bastarían esta consideración y
la posibilidad de que la información sobre la reunión hubiera sido
proporcionada por el mismo que señaló a García Goena como militante
etarra, para que comprenda que tal vez fue el único error que no
cometió. Pero basta mirar la foto, sin más.
Alguien le debe a esta mujer una explicación.
Eguiguren, Jáuregui, Rubalcaba, Zapatero y
González, los negociadores
Pascual Tamburri El Semanal Digital 11 Noviembre 2010
Jesús Eguiguren anticipa que ETA anunciará su fin en Navidad. Jaime
Mayor Oreja prevé, sin ser desmentido, que ETA estará presente en
las elecciones municipales de 2011.
Las noticias se acumulan en una sola dirección. Jesús Eguiguren nos
anticipa que ETA anunciará su fin en Navidad. Jaime Mayor Oreja
prevé, y no es seriamente desmentido, que ETA estará presente en las
elecciones municipales de 2011. Felipe González, quince años tarde,
reconoce que estuvo en su mano "volar" a la cúpula de ETA, y con
ello reabre el debate sobre el "Míster X" de los GAL. Los partidos
políticos nacionalistas han ofrecido, vía acuerdo de Guernica, un
nuevo marco institucional para Batasuna. Se da el caso de que los
intereses políticos del PSOE y los de la banda terrorista pueden
coincidir, y además pueden hacerlo sin que la banda renuncie a sus
esencias.
ETA es un grupo de nacionalistas vascos con unos objetivos políticos
perfectamente claros, y con unos medios para alcanzar esos objetivos
que han podido ir cambiando o matizándose. ETA quiere hoy y ha
querido siempre la autodeterminación, léase independencia, es decir
la secesión de España y Francia de algunas provincias y la formación
con ellas de un Estado-Nación nuevo y soberano. No cualquier Estado,
por supuesto, sino uno definido por su carácter socialista, ya que
ETA es un grupo político en el que, aunque no todos sus miembros han
sido siempre marxistas ortodoxos sí lo han sido sus fundadores y sus
ideólogos.
Muchos vascos y muchísimos navarros no nos oponemos a ETA porque sea
"violenta". Decir o pensar eso es una trampa intelectual, que
llevaría a algunos incautos a aceptar con alegría la posibilidad de
una ETA "no violenta". Esto no es así. No basta que ETA cambie de
"medios". Son sus fines los que la colocan fuera de la convivencia y
los que la hacen rechazable, antes de matar e independientemente de
que mate. Una ETA "pacificada" sigue sin ser un interlocutor
aceptable para un partido político democrático y español. Salvo que
sus prioridades no sean, tampoco, servir al pueblo español.
La cuestión ahora mismo es que el PSOE lucha por su existencia como
alternativa de poder no ya en estas dos Comunidades sino en toda
España. El PSOE, ahora con Zapatero y mañana con quien le suceda, es
una organización política que quiere gobernar todo el país y cada
una de sus regiones, y así imponer sus ideas –estas dos legislaturas
han supuesto una revolución en muchos sentidos- y colocar en los
mejores puestos a sus hombres y mujeres. El PSOE quiere por tanto
tener el poder y poderlo usar.
No hay dudas de que un "fin de ETA" sería una enorme baza electoral
para el PSOE, en 2011 y más en 2012. Las dos opciones que tuvo
Felipe González entre Argel y los GAL parecen aún abiertas hoy,
cuando nos movemos entre los coqueteos del caso Faisán y la
contundencia verbal de Alfredo Pérez Rubalcaba. Por supuesto que
para España y para la libertad de los españoles no es indiferente
que ETA desaparezca derrotada y aniquilada o que lo haga obteniendo
concesiones políticas de algún tipo. Pero puede suceder que para el
PSOE, en este momento, sí sea lo mismo. No debe serlo para el PP,
del que esperamos lo que no tiene el PSOE, que es una clase
dirigente formada y dispuesta al servicio de España antes que al de
sus propios intereses personales. Esperémoslo, porque va a hacer
falta en estos meses.
Memoria de futuro
EDITORIAL El Correo 11 Noviembre 2010
Las víctimas del terrorismo encarnan el recuerdo de un mal que solo
desaparecerá si se impide su retrospectiva justificación
La primera celebración del Día de la Memoria, que cada 10 de
noviembre recordará en Euskadi a las víctimas del terrorismo,
permitió ayer avanzar un paso más en la construcción de un futuro de
convivencia basado, como señaló el lehendakari López, en la verdad y
la justicia. La declaración unitaria fue suscrita por las tres
principales formaciones vascas -PNV, PSE-EE y PP- que junto a UPyD
redactaron un texto inequívoco de reconocimiento hacia todas las
personas asesinadas o que sufren las consecuencias directas de la
violencia totalitaria.
El hecho de que Aralar y EA rehusaran convertir el documento en una
declaración institucional del Parlamento vasco revela la
persistencia en nuestra sociedad de visiones que tienden a
contextualizar la continuidad del terror como expresión repudiable
de un conflicto irresuelto, equiparable a otras manifestaciones de
violencia de nuestro pasado colectivo. Actitud que, al margen de la
matizada posición que mantienen los citados grupos, corre el riesgo
de confundirse con la abierta negativa de la izquierda abertzale a
admitir el daño causado por el terrorismo etarra.
Ayer, el Día de la Memoria se convirtió en un gesto de solidaridad y
consuelo hacia todas las familias que han perdido un ser querido a
manos del terrorismo o se sienten amenazadas por éste. Una jornada
en la que las instituciones, en representación de la sociedad a la
que se deben, revalidaron su compromiso de recordar siempre la
maldad extrema a través de la consideración unánime que merecen sus
víctimas para cimentar las bases de una libertad ya sin coacciones.
Pero el primer Día de la Memoria también retrató dos concepciones
del futuro incompatibles que afloran cuando se habla del final de la
violencia: la de un porvenir basado en el obligado señalamiento de
las culpas que han ensangrentado Euskadi durante las últimas décadas
y la de un cierre en falso, por amnésico, de la barbarie que ha
provocado tan dolorosas vivencias. Llegado el día, para que la
sociedad vasca y el resto de los españoles tengan la razonable
certeza de que se acabó el terrorismo es imprescindible que en el
ambiente no quede rastro alguno de las justificaciones que
propiciaron su dictadura.
El Día de la Memoria
«Una memoria concebida como recuerdo exclusivo de las víctimas será
una memoria parcial e insuficiente. Tan importante como recordar a
las víctimas del terrorismo es el recuerdo del motivo por el que
fueron victimizadas»
CARLOS FERNÁNDEZ DE CASADEVANTE ROMANI El Correo 11 Noviembre 2010
CATEDRÁTICO DE DERECHO INTERNACIONAL Y RELACIONES INTERNACIONALES DE
LA UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS
El 10 de noviembre fue declarado por las instituciones vascas Día de
la Memoria en recuerdo de todas las víctimas del terrorismo. La de
2010 ha sido la primera edición. Este dato constituye por sí solo un
motivo de reflexión sobre la gravedad de un problema que no se
limita a la organización terrorista ETA que lo practica, sino al
proyecto político que esa organización persigue y que es el mismo
proyecto político que tienen todos y cada uno de los partidos
políticos del nacionalismo vasco. Ésta es la raíz del problema y lo
que explica tanto el largo tiempo transcurrido (décadas) para que
una celebración de ese tipo sea posible en el País Vasco por
iniciativa de sus propias instituciones, como el peligro de que,
poniendo el acento en el recuerdo a las víctimas del terrorismo,
pretenda correrse un tupido velo sobre el proyecto político en
virtud del cual 858 personas han sido asesinadas y muchas otras
mutiladas, secuestradas, desterradas, perseguidas, amenazadas,
extorsionadas.
De ahí que una memoria concebida como recuerdo exclusivo de las
víctimas del terrorismo sea una memoria parcial e insuficiente. En
efecto, tan importante como recordar a las víctimas del terrorismo
es el recuerdo del motivo por el que las víctimas fueron
victimizadas. Y al acercarnos al núcleo de la cuestión es inevitable
que muchos se sientan incómodos -incluso molestos- por la pregunta,
pues la claridad que emana de la respuesta posee una luz cegadora.
Así es, ninguna de las personas victimizadas devino víctima del
terrorismo como consecuencia de un hecho natural o fortuito sino por
la voluntad deliberada de una organización terrorista que desde su
origen persigue imponer al conjunto de la sociedad vasca su proyecto
político: un proyecto que tiene por objeto la independencia del País
Vasco. Y aquí es donde las heridas escuecen, porque el conjunto del
nacionalismo vasco persigue ese mismo objetivo y en aras del mismo
ha colaborado en el Parlamento vasco, en las diputaciones y en los
ayuntamientos con el brazo político de ETA hasta que éste fue
ilegalizado.
Los actos de memoria son necesarios, pero ¿se está dispuesto a
aceptar el panorama y las consecuencias de los hechos que la memoria
revela? ¿Se ha instituido un Día de la Memoria de las víctimas del
terrorismo para quedar bien con ellas o, por el contrario, existe la
voluntad de asumir plenamente las consecuencias que el ejercicio de
esa memoria conlleva? De ser así, no debería haber ningún obstáculo
en reconocer que el nacionalismo vasco ha sido injusto con las
víctimas del terrorismo. En este caso, la injusticia derivada de la
defensa radical, por encima de todo -y de todos-, del proyecto
político del nacionalismo vasco.
Hasta el extremo de castrar las palabras para disfrazar o disimular
la realidad. Por ejemplo, denominando inicialmente como Ponencia de
Víctimas a la que no tenía otro objeto que la atención a las
víctimas del terrorismo; apoyando abiertamente a los victimarios
integrando en su momento en la comisión de Derechos Humanos del
Parlamento vasco a uno de los terroristas más señalados; utilizando
los votos de los victimarios en el Parlamento vasco para alcanzar la
presidencia del Gobierno vasco sin que semejante apoyo planteara
nunca a los nacionalistas vascos ningún problema de conciencia; los
constantes intentos de deslegitimación del sistema judicial español
con ocasión de la ilegalización de Batasuna porque, según ellos,
«todos los proyectos y todas las ideas son legítimas». Que no es así
se lo recordó expresamente el Tribunal Europeo de Derechos Humanos
en su sentencia del 30 de junio de 2009, declarando sin ambages que
la ilegalización de Batasuna era conforme al Convenio europeo de
Derechos Humanos porque el proyecto político defendido por Batasuna
es incompatible con la democracia.
Son sólo algunos ejemplos. Del pasado reciente. Los hay también del
presente. Es el caso de la reciente actitud del PNV en el
Ayuntamiento de Andoain negándose a apoyar la personación del
Consistorio como acusación particular contra el asesino de Joseba
Pagazaurtundúa.
Ahora que tanto se habla de perdón y que se exigen tantas
declaraciones de perdón -eso sí, siempre a los demás-, no deja de
ser llamativo el hecho de que nadie haya pedido perdón a las
víctimas del terrorismo por semejantes felonías. Tampoco a quienes
(PSOE y PP) se atribuyó tener como objetivo «la destrucción de
Euskal Herria y la construcción de España» en el compromiso que PNV
y EA asumieron ante ETA en el verano de 1998, y que desembocó, el 12
de septiembre de aquel año, en el acuerdo suscrito por la totalidad
del nacionalismo vasco más IU, en Estella-Lizarra. No se pide perdón
-y esto es lo más terrible socialmente- porque, en el fondo, no se
tiene conciencia de culpa, de pecado. En consecuencia, todo está
bien y todo es justificable.
Por eso, una memoria que no esté dispuesta a reconocer los errores
cometidos y a enmendarlos no es una memoria sincera. Es una memoria
inútil que no permite cerrar las profundas heridas abiertas.
Blindaje electoral
EDITORIAL El Correo 11 Noviembre 2010
La tramitación parlamentaria de cambios normativos que acaben con
los resquicios que presenta la vigente Ley Electoral, aprovechados
en distintas ocasiones por la izquierda abertzale ilegalizada, no
solo aporta una garantía legal al pacto establecido por PSOE y PP
para reducir al máximo el campo de maniobra del radicalismo
filoetarra. Constituye además un compromiso añadido para el
Gobierno, obligado a reaccionar ante cualquier iniciativa de
registrar un nuevo partido político o de auspiciar agrupaciones
electorales que pudieran enmascarar el regreso de la izquierda
abertzale a las instituciones mientras persista la amenaza etarra y
no rompa abiertamente con la banda.
Los supuestos contemplados en la reforma iniciada y las cláusulas
que socialistas y populares quieren introducir durante su trámite
parlamentario, para impugnar aquellas candidaturas que se revelen
fraudulentas durante la propia campaña, apuran todas las
posibilidades que a ese respecto permitiría la Constitución. El
cambio normativo encierra un doble mensaje, el dirigido a la
sociedad democrática sobre la realización de la libertad gracias a
la Ley, y el enviado a la izquierda abertzale para que sepa que esta
vez no podrá burlar al Estado de Derecho.
Avui
Sánchez Camacho
José García Domínguez Libertad Digital 11 Noviembre 2010
Sostiene la señora Sánchez Camacho que el diario Avui ha sacado de
contexto cierta frase muy suya, tanto que luce entrecomillada en el
periódico para mayor abundamiento sobre su genuina maternidad. La
sentencia en cuestión, de cuya veracidad la locuaz Camacho aún no ha
concedido decir ni pío, es la siguiente: "[A mi hijo Manel, de
cuatro años] le riño si me habla en castellano". Así las cosas, por
el módico precio en saliva de pronunciar dos vocablos concatenados,
en concreto las voces "es" y "mentira", doña Alicia se habría
evitado incordios mayores. Es mentira. Tan sencillo como eso. Sin
embargo, y vaya usted a saber por qué, ha preferido enrocarse en el
brumoso jardín del contexto.
No es doña Alicia, por cierto, ni mejor ni peor que tantos políticos
profesionales de su generación. Acaso un poco más torpe. Aunque solo
un poco. Así, como sus pares, no posee el menor reparo con tal de
defender cualquier causa y su contraria. Al igual que esas pequeñas
orquestas cíngaras, las que se ganan la vida en las aceras
interpretando la música que los viandantes deseen escuchar, a la
Camacho tanto le da entonar un tango que un rock o una muiñeira. Si
la llaman del Avui, les confesará risueña que, amén de velar sin
descanso por la pureza fonética del pequeño Manel, cuenta con
"muchos amigos soberanistas". Léase separatistas. Muchos, no uno ni
dos ni tres. Ya se sabe, el contexto.
Si el interlocutor resulta ser Libertad Digital, plena de santa
indignación proclamará airada que "estas cosas [las regañinas
morfosintácticas descontextualizadas] pueden dar a entender lo que
no es". Aunque, al tiempo, no habrá manera humana de arrancarle qué
es lo que es y qué lo que no es. Si, en fin, es el plató de Tengo
una pregunta para usted quien la acoge, con la más gozosa de sus
sonrisas celebrará que Benedicto XVI "ha universalizado mucho (sic)
nuestra lengua propia". Que no la impropia, esa intrusa en cuya
defensa se redactó aquel célebre manifiesto que encabezara el Nobel
Vargas Llosa, el mismo que ella se negó en redondo a rubricar. Y es
que, a lo tonto, doña Alicia ha superado al mismísimo McLuhan: el
texto es el contexto.
Nota bene:
Tras fructífera conversación con Pep Lloveras, el periodista de Avui
que realizó el reportaje de marras, el arriba firmante está en
condiciones de afirmar que Alicia Sánchez Camacho aún no se ha
dirigido a ese periódico para exigirle rectificación alguna. Que el
diario Avui no alberga la menor intención de desdecirse. Y que el
autor material de la pieza, el citado Pep Lloveras, igual se
ratifica en la literalidad de lo publicado.
José García Domínguez es uno de los autores del blog
Heterodoxias.net.
juicio en la audiencia nacional
Otegi vuelve al banquillo por
enaltecimiento del terrorismo
EFE | MADRID El Correo 11 Noviembre 2010
La Fiscalía solicita 18 meses de cárcel para el ex portavoz de la
ilegalizada Batasuna por su intervención en un acto en San Sebastián
en 2004
La defensa alegará que el mitin había sido acordado con el PSOE, lo
que tratará de demostrar con el testimonio del presidente de los
socialistas vascos, Jesús Eguiguren
El ex portavoz de la ilegalizada Batasuna Arnaldo Otegi afronta en
la Audiencia Nacional su cuarto juicio por enaltecimiento del
terrorismo, en este caso por su intervención el 14 de noviembre de
2004 en un acto en el velódromo de Anoeta en San Sebastián.
Otegi -para quien la Fiscalía solicita 18 meses de cárcel y el Foro
Ermua cinco años de prisión- alegará que el acto, en el que se hizo
pública la llamada 'declaración de Anoeta', había sido acordado con
el PSOE, lo que supuestamente tratará de demostrar con el
testimonio, solicitado por su defensa, del presidente de los
socialistas vascos, Jesús Eguiguren.
"Para que dicha propuesta se pudiera presentar fueron necesarias muy
diversas conversaciones y acuerdos entre la izquierda abertzale y el
Partido Socialista Obrero Español, conversaciones en aquel momento
todavía no públicas, que asimismo hicieron posible la celebración
del acto en el velódromo de Anoeta", señala el dirigente abertzale
en su escrito de defensa. Sin embargo, la fiscal Teresa Sandoval
explica en su escrito de conclusiones provisionales que Otegi
comenzó su alocución, que se prolongó durante 45 minutos,
"subrayando que era un acto ilegal, de una formación ilegal y con un
portavoz ilegal".
El acto había sido anunciado por Otegi y los también acusados Joseba
Permach y Joseba Álvarez en una rueda de prensa el 21 de octubre de
2004, cuando comparecieron junto a otros miembros de la Mesa
Nacional para anunciar "un nuevo posicionamiento político" que
Batasuna daría a conocer en el velódromo.
Condenado en dos ocasiones
La Fiscalía subraya que en el recinto -que acogió a unas 15.000
personas- había "carteles de Batasuna cubriendo las vallas
interiores del velódromo, así como diversas banderas de la formación
ilegal y su logotipo en el atril de oradores", y que se proyectó un
vídeo recopilatorio de detenciones de miembros de la organización,
comunicados de ETA y concentraciones a favor de sus presos. Todo
ello, según el Ministerio Público, "con claro propósito de elogiar y
homenajear a la banda terrorista", ya que también se exhibieron
imágenes de etarras ya fallecidos y el acto terminó con los gritos
del público asistente coreando "Gora ETA militarra" y un "sonoro y
multitudinario 'ETA, herria zurekin' (ETA, el pueblo está contigo)".
Para el Foro Ermua, que ejerce la acusación popular y pide para los
tres acusados cinco años de cárcel y 20 años de inhabilitación por
enaltecimiento, desobediencia y reunión ilícita, el de Anoeta fue un
"acto de propaganda" convocado para reunir fondos para Batasuna y
homenajear a los terroristas.
Hasta ahora, Otegi ha sido condenado en dos ocasiones por enaltecer
el terrorismo -por su participación en un homenaje en 2003 al
terrorista José Miguel Beñaran, 'Argala', y la otra por su
intervención en 2005 en un acto a favor del preso José María
Sagarduy- y se le ha absuelto del mismo delito por sus palabras en
el entierro en 2001 de la presunta etarra Olaia Castresana.
Puigcercós se niega a responder una
pregunta formulada en castellano
www.gaceta.es 11 Noviembre 2010
"Si nadie les habla nunca en catalán, no lo hablarán ni entenderán
nunca. Si solo se les habla en castellano, no entenderán nunca el
catalán", ha añadido Puigcercós.
El presidente de ERC, Joan Puigcercós, ha abogado este miércoles por
responder en catalán a las personas que, entendiéndole, se dirijan a
él en castellano para conseguir que aprendan el idioma y lo hablen.
Puigcercós ha protagonizado una de las imágenes de la noche en el
programa 'Tengo una pregunta para usted' de TVE al negarse a
responder en castellano a uno de los ciudadanos invitados, lo que ha
molestado sobremanera al hombre, que ha declinado realizar su
pregunta si iba a ser respondida en catalán.
En tono conciliador, el dirigente republicano ha reprochado al
invitado su actitud, ensalzando la fortuna que, según ha dicho,
supone tener dos lenguas, y ha explicado que decidió hace tiempo
responder siempre en catalán "porque es el mejor favor" que puede
hacer a las personas que viven en Cataluña.
"Si nadie les habla nunca en catalán, no lo hablarán ni entenderán
nunca. Si solo se les habla en castellano, no entenderán nunca el
catalán", ha añadido Puigcercós, que ha señalado que hace
excepciones con aquellas personas que no llevan tiempo suficiente en
Cataluña como para entender el catalán.
Las primeras intervenciones del público han mostrado por donde iba a
discurrir la intervención de Puigcercós, puesto que se han centrado
en el catalán, la independencia de Cataluña, y el balance del
trabajo llevado a cabo por el tripartito.
Sobre el papel de ERC en el tripartito, Paula, una estudiante de 18
años, ha reprochado sin tapujos a Puigcercós que su partido "se haya
bajado los pantalones demasiadas veces", una afirmación que el líder
independentista ha rechazado, aunque ha admitido que cuando se forma
parte de un gobierno de coalición no se puede imponer siempre una
voz.
El candidato de ERC a la Presidencia de la Generalitat ha rechazado
fijar una fecha para celebrar un referéndum sobre la independencia,
puesto que no dispone de "una bola de cristal", y ha asegurado que
la mejor forma de evitar la confrontación con España es que Cataluña
sea independiente, puesto que, según ha dicho, así podrán tener una
relación de igual a igual.
Puigcercós se ha enfrentado también a las preguntas de un bombero,
que le ha interrogado sobre la situación en la que se encuentran las
familias de los bomberos muertos en el incendio de Horta de Sant
Joan (Tarragona), y a la de Núria, una trabajadora de 35 años que se
encuentra en silla de ruedas y que, como hiciese este martes con el
presidente de la Generalitat, José Montilla, le ha inquirido sobre
el despliegue de la Ley de Dependencia.
Albert Rivera: 'Bilingüismo en las escuelas
como los hijos de Montilla y Mas'
El candidato de Ciutadans defiende el bilingüismo en toda la
Administración pública catalana
www.lavozlibre.es 11 Noviembre 2010
Madrid.- “La Administración catalana debe ser bilingüe, redactar
documentos en las dos lenguas, ofrecer castellano en la escuela
pública, que es como estudian los hijos de Montilla y Mas”,
argumentó sobre el conflicto lingüístico de Cataluña Albert Rivera,
candidato por Ciutadans, en 'Tengo una pregunta para usted' de TVE.
“El problema no está en la calle, está en la Administración”,
continuó. Para el candidato, “rotular en bilingüe no es un
problema”, ya que en el propio programa “se han hecho preguntas en
castellano y catalán y no sucede nada”, argumentó. Sin embargo,
dijo, el problema es que los ciudadanos “se puedan dirigir a la
Administración en las dos lenguas”.
Al candidato de Ciutadans a la Generalitat también le plantearon el
asunto del idioma en la Universidad. “Estuve en Finlandia con una
beca Erasmus. Algunos de mis compañeros quisieron venir a Barcelona,
que les resultaba una ciudad muy bonita, pero querían hablar en
español”. Finalmente, explicó, se decidieron por otras ciudades,
debido al tema lingüístico. “Cuando una persona viene lo hace para
aprender contenidos, no catalán”, dijo. En este sentido, se
posicionó a favor de la libertad de cátedra. “Con este decreto
estamos cerrando la puerta a los que vienen”, apostilló. Albert
Rivera, a diferencia de Artur Mas y de Joan Puigcercós, hizo gala
del bilingüismo, utilizando español y castellano en función del
idioma empleado por los intervinientes.
Las preguntas del público giraron en torno a dos cuestiones que a
los participantes del programa: cuál era la orientación política de
Ciudadans y los desnudos con los que se promociona el partido.
“Somos un partido progresista”, aclaró, y “estamos a favor del
liberalismo social”. En otras palabras, “somos de centro, de centro
izquierda. Somos novedosos”. Pero algún otro espectador insistió:
“No sé de que pie cojea usted, al igual que otros compañeros”, le
espetó un participante, al que Rivera le reiteró que Ciutadans es un
partido progresista.
La forma de promocionarse, con anuncios en los que aparece Rivera y
otros militantes sin ropa, también provocó varias preguntas. Una de
las participantes argumentó que la política catalana “parece un
circo” e hizo mención al desnudo de Rivera y a Carmen de Mairena.
“Lo que es un circo es tener casos de corrupción”, contestó Rivera.
“Trabajamos, cuestionamos cosas serias. Entiendo la crítica, pero no
debemos quedarnos con la anécdota”, continúo el candidato de
Ciutadans. Sin embargo, surgieron nuevas preguntas sobre el asunto.
“Me quedo con el desnudo electoral”, le dijo una participante sobre
las explicaciones de Rivera. “Es una cuestión de marketing. Ha sido
el vídeo sobre política más visto en YouTube durante una semana. El
hambre aguza el ingenio, ya que somos un partido político pequeño
nos promocionamos así”, aclaró. Pero hubo una tercera pregunta sobre
el tema, esta vez sobre la utilización de niños en el 'spot'. “El
niño respresenta los cuatro años que llevamos. Es un anuncio humano.
Es totalmente legal y no fomenta el odio”, dijo en referencia a la
comparación con un anuncio realizado por la Plataforma Pro
Selecciones Catalanas, en el que un niño con la camiseta catalana
empujaba a otro con la de la Selección española y que fue utilizado
por los independetistas hasta que fue retirado de la emisión por
incitar a la violencia. “Un niño me despierta humanidad y no otra
cosa”, aclaró.
SALGADO ANUNCIA UN NUEVO CRÉDITO
Cumplir con el Estatuto catalán costará 950
millones extra en 2011
La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha
anunciado este miércoles en el Congreso que se ha previsto un
crédito de 950 millones de euros en el Presupuesto del próximo año
para compensar el déficit acumulado en el cumplimiento del Estatut
correspondiente a los años 2008 y 2009.
EFE Libertad Digital 11 Noviembre 2010
En respuesta en la sesión de control al diputado de CiU Pere Macias
sobre el cumplimiento de la disposición adicional tercera del
Estatuto en materia de inversiones del Estado en Cataluña en 2009,
Salgado ha recordado que para 2011 habrá que hacer inversiones en
infraestructuras por valor de 3.143 millones de euros.
Esta cantidad, ha dicho, está recogida en parte (2.742 millones) en
el proyecto de Presupuestos para el próximo año y el resto (391,8
millones) se concretará a través de otros proyectos pendientes de
determinar y de los peajes de autopistas.
Salgado ha insistido en que el Gobierno va a dar "absoluto"
cumplimiento a la disposición adicional tercera y para ello se ha
dotado en el Presupuesto un crédito de 950 millones para compensar
los déficit de 2008 y 2009.
"Por lo tanto, cumplimiento absoluto de la disposición adicional
tercera de acuerdo con la metodología pactada entre el Gobierno y la
Generalitat", ha remarcado la vicepresidenta, quien no ha dado los
datos de la liquidación provisional de 2009 que le había solicitado
el diputado de CiU.
La ministra de Economía ha indicado que se acaban de cerrar los
datos correspondientes al ejercicio de 2007, ya que de acuerdo con
la metodología acordada entre ambas administraciones los datos
finales sobre el cumplimiento de la disposición del Estatut deben
cerrarse al año tercero.
"No hay ningún deseo de ocultación, es absoluta transparencia pero
en las relaciones que tenemos entre los dos gobiernos", ha subrayado
Salgado.
Previamente, el diputado de CiU había acusado al Gobierno de hacer
un ejercicio de "antitransparencia" y había considerado que una
cuestión tan sensible como conocer el déficit en el cumplimiento del
Estatut no podía ser "motivo de ocultación".
Según Macias, el déficit acumulado correspondiente a los ejercicios
2007 y 2008 es de 1.386 millones de euros, que llegan a los 2.000 si
se suma el déficit de 2009. Ha indicado que le consta que la
información de este ejercicio ha sido enviada ya a la Generalitat y
ha asegurado que la sociedad civil catalana demanda conocer cuál es
el déficit acumulado.
"No deben guardar tan infantilmente esta cifra", ha añadido Macias,
quien ha reprochado al Gobierno que esté haciendo "un flaco favor a
la democracia con su extraordinario ejercicio de opacidad".
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