¿Nos hemos vuelto locos?
César Vidal La Razón 3 Enero 2013
Siempre fue una empresa de éxito. Surgida en una región del norte de
España, poco a poco, con enorme esfuerzo, fue extendiendo su red de
clientes por todo el territorio nacional. Incluso pareció que con un
plus de trabajo y buena voluntad tendría posibilidades en el mercado
internacional. Entonces llegó el nacionalismo y con él su retahíla
de consecuencias entre las que se encontraba la voluntad decidida de
imponer la lengua co-oficial de la región en el resto de España. De
entrada, se decidió que se debía atender a los compradores
únicamente en esa lengua, la hablaran o no. Así, la persona que
tomaba los pedidos usaba sólo la lengua co-oficial en las
comunicaciones incluso si éstas tenían lugar por teléfono.
Poco a poco, los antiguos compradores, situados en su mayoría en el
sur de España, se fueron hartando de aquella muestra de delirante
paletería y se buscaron otras compañías. Aunque todo se tradujo en
pérdidas en cascada que tenían lugar en medio de la crisis, ninguno
de los directivos dio marcha atrás. Las dudas sólo hicieron acto de
presencia cuando una importante nación de Oriente Medio decidió
firmar un contrato con la empresa que implicaba servir a un sector
completo de la administración durante años. Era un auténtico regalo
de los reyes de Oriente. La compañía envió el texto del contrato en
inglés y en la lengua co-oficial. Los árabes, sin embargo, no
estaban dispuestos a tolerar determinadas majaderías. Por correo,
les señalaron que deseaban recibir el contrato en la lengua oficial
de España y no en una de las co-oficiales. Para colmo, añadieron que
el ministro del ramo de la nación árabe conocía el español y se
sentía muy orgulloso de utilizarlo siempre que podía. La respuesta
de los árabes provocó un seísmo en la compañía. Los directivos
estaban dispuestos a perder el contrato. Desde la sucursal de
Madrid, insistían, no obstante, en el quebranto económico que
significaría para todos. Logró imponerse la sensatez madrileña y se
envió un nuevo contrato, ahora en español. Demasiado tarde. Cansados
de esperar, los árabes habían firmado el contrato con una compañía
francesa.
La última noticia que he tenido es que, siguiendo de nuevo los
criterios de la sucursal de Madrid, están pensando en poner una
persona que atienda los pedidos en español para intentar recuperar
los clientes perdidos. Lo sorprendente en esta historia
absolutamente verídica es que nadie se haya preguntado si no se han
vuelto locos y, sobre todo, si hay remedio para esa locura.
CARTA DEL PRESIDENTE DE INTERECONOMÍA
Intereconomía y Rajoy: a cada cual lo suyo
JULIO ARIZA www.gaceta.es 3 Enero 2013
Intereconomía, durante el Gobierno de Zapatero, constituyó un núcleo
de oposición y resistencia social y política.
"El Gobierno deja tirada a Intereconomía", "el Gobierno no ayuda a
los de Intereconomía", "Intereconomía abandonada por Rajoy y los
suyos"… Se trata de una afirmación tan reiterada, tan extendida, tan
manoseada que no me queda otro remedio que tratar de explicarla.
Intereconomía, durante el Gobierno de Zapatero, constituyó un núcleo
de oposición y resistencia social y política que llegó a conseguir
más de un 90% de notoriedad de marca en todo el territorio español.
La campaña "Orgullosos de ser de derechas" dio la vuelta a un
complejo largamente padecido que dejaba a la derecha conservadora y
liberal en inferioridad de condiciones en su pugna dialéctica con la
izquierda autodenominada "progresista". LA GACETA, con Carlos Dávila
a la cabeza, denunciaba con valentía los abusos y la sinrazón del
Gobierno socialista que enfrentaba a los españoles y empobrecía sin
remedio al conjunto del país. El Gato al Agua, por su parte, daba
cobijo a los líderes del centro-derecha que no encontraban medio
alguno donde ejercer libremente su labor de oposición.
Los espectadores, oyentes y lectores de los medios de nuestro Grupo
nos animaban a decir en voz alta lo que los demás callaban, lo que
los grandes financieros y empresarios toleraban con un silencio a
veces estremecedor y sin duda lamentable cuando el nivel de la ruina
comenzaba a ser insufrible. Con nuestros contenidos muchas personas
en España se reafirmaban en un modo de entender la vida en sociedad:
la protección de los más indefensos, la libertad para educar a los
hijos o en la simple enunciación de las cosas más obvias o evidentes
conculcadas por la legislación ZP.
La izquierda, mientras tanto, coreaba eslóganes llenos de sectarismo
y falsedad: "Son de extrema derecha", "fascistas" (porque
defendíamos la vida, la familia, la libertad y la unidad de España),
"son el grupo financiado por Esperanza Aguirre" (porque Aguirre nos
había concedido una licencia de TDT en Madrid de las 48 que había
otorgado en concurso), "Intereconomía vive de los obispos, la paga
Rouco" (cuando COPE pactaba con todos los medios menos con los
nuestros)…
Es cierto que nuestra empresa asumió libre y voluntariamente el
enorme riesgo de resistir al embate de un Rubalcaba que lo "sabía
todo de todos", a un Garzón poseedor de grandes secretos de Estado y
juez omnipotente de queridos emilios, a los disciplinados fiscales,
a la Policía judicial encargada de los tele shows, a la izquierda
mediática de Barroso y amigos del presidente que se mofaba de
nosotros y nuestros simpatizantes. Lo hacíamos porque creíamos en
nuestros principios y tampoco ignorábamos que el viejo refrán
"muchos aplaudieron sus piruetas pero él solo se curó las agujetas"
también regía para nosotros. Y así lo asumimos.
Apoyamos a Rajoy cuando sus amigos de La Razón o Antena 3
disfrutaban de un pacto bien engrasado con Teresa Fernández de la
Vega; véanse las portadas de la época. Lo hicimos pensando en la
unidad del centro-derecha y creyendo que Rajoy iba a propiciar ese
cambio social y legislativo. Nada nos debe Rajoy, ni el PP ni su
Gobierno, y nada le pedimos hoy. Tan sólo que cumpla las cosas que
prometía en las frecuentes entrevistas en nuestra Casa. Durante años
Rajoy y sus compañeros de partido generaron la esperanza de una
serie de cambios que paliaran y revirtieran los disparates del
zapaterismo. ZP en los primeros 15 o 16 meses de su Gobierno sacó
las tropas de Irak, legisló el divorcio exprés, los gaymonios o el
aborto libre. Rajoy no ha tocado ni una sola de esas penosas leyes y
eso supone un severo engaño a muchos de sus votantes que
Intereconomía no puede sino continuar denunciando.
Él a gobernar y nosotros a informar. Él a cambiar las leyes injustas
y nosotros a vivir de nuestro trabajo bien hecho y no de las dádivas
de dinero público de ningún Gobierno. Siempre tuvimos presente
nuestra historia con el Ejecutivo de Aznar. La revista ÉPOCA destapó
una cacería de osos en Rumanía pagada por Díaz Ferrán y Pascual,
propietarios de Spanair, al entonces ministro de Fomento,
Álvarez-Cascos. La publicidad institucional desapareció para
nosotros y las llamadas del político a las grandes empresas para que
nos cortaran la inversión publicitaria casi nos estrangulan.
Es patente que los medios de comunicación –todos– pasamos por un
momento de extraordinaria dificultad. Las ventas de periódicos en
los kioscos se han desplomado. La publicidad ha sufrido caídas
superiores al 50% acumulado en apenas cuatro años. El Gobierno ha
destruido las bases de una competencia leal en TV consolidando el
duopolio Antena3-Telecinco y el monopolio de Abertis. El modelo de
negocio ha colapsado. Internet y las redes sociales, como el tren
hizo con las diligencias en el lejano Oeste americano, han barrido
todas las estrategias de rentabilidad y crecimiento del sector.
Esta situación, que ya ha expulsado al paro a miles de periodistas y
a otros tantos miles de trabajadores de otras áreas en nuestras
empresas, parece hacer las delicias de colegas y observadores de
todo pelaje. Este es el país que tenemos y con estos bueyes hay que
arar. Aunque yo les recomiendo que no olviden que “cuando las barbas
de tu vecino veas pelar...”. Trabajamos en el trapecio, en el
alambre del circo, y no podemos evitar que haya psicópatas allí
abajo deseando ver cómo nos despanzurramos. ¡Gajes del oficio!
Esta es sucintamente nuestra pequeña historia. Estamos ahora
luchando para garantizar el futuro, no nos creemos imprescindibles
para nada ni para nadie, pero tenemos unas ganas y una fuerza para
luchar que pocos tienen: un equipo humano con una fortaleza, una
reciedumbre, una formación personal y profesional y un coraje que
nos hace especialmente fuertes. A todos ellos les doy desde aquí las
gracias y les digo que Intereconomía saldrá más fuerte de todas
estas dificultades.
"Si creen que vivo, creen que camino", repetía el piloto accidentado
de Saint-Exupéry, y se sobreponía a la inmensa fatiga, al frío y a
la nieve para seguir en pie hasta lograr su objetivo. Muchos
conciudadanos siguen caminando a pesar de todo y con ellos estaremos
estos meses de penurias para celebrar después juntos una nueva etapa
de libertad y prosperidad.
Todo el año es Día de Reyes
Javier Caraballo El Confidencial 3 Enero 2013
El político populista que gobierna en su región desde hace tanto
tiempo que ya no se recuerda fuera del despacho, se ha vuelto hacia
sí mismo en una de las cenas de Navidad y ha alzado su copa de
champán al cielo para dedicarse el brindis sin interferencias. Nada
de sentimentalismos para los deseos del nuevo año, nada de pasiones
terrenales que poco entienden de los vericuetos del poder. El poder,
sí, no hay otra frase escrita en su sonrisa cuando ha alzado la copa
para beberse de un trago los deseos que nadie más que él conoce,
entiende y maneja.
Es la sonrisa placentera que provoca el almíbar del poder regional,
esa nueva casta política que se instauró en España con la
descentralización de las autonomías. Ni la crisis económica ni las
limitaciones presupuestarias alteran la satisfacción de este hombre
ni distorsionan la amplitud de los deseos para el nuevo año. Vendrán
tiempos difíciles, pero no para él, no para sus intereses, porque lo
más complicado de la política, que es encontrar un discurso con el
que zarandear a las gentes, se lo ha facilitado la llegada de un
Ejecutivo de signo opuesto en el Gobierno de España.
Ni la crisis ni las limitaciones presupuestarias alteran la
satisfacción de este. Vendrán tiempos difíciles pero no para él, no
para sus intereses, porque lo más complicado de la política, que es
encontrar un discurso con el que zarandear a las gentes, se lo ha
facilitado la llegada de un Ejecutivo de signo opuesto en el
Gobierno de España¿Qué mejor regalo de Reyes que este que le ofrece
la posibilidad de justificarlo todo, de exigirlo todo, de protestar
por todo con sólo señalar con el dedo al de enfrente? Vendrán
tiempos difíciles, sí, pero cuando en España se está en posesión de
un agravio no hace falta nada más. Y este es su caso. La política
española siempre ha sido así, el cainismo se impone a la lealtad
institucional, sectarismo antes que colaboración, partidismo antes
que interés general. Alza el mentón, alza la copa y respira. En
España, todo el año es Día de Reyes Magos.
El empresario repeinado al que todos esperaban ver triste por las
calles se ha bajado de su flamante Audi para entrar a cenar en uno
de los mejores restaurantes de la ciudad. Una cena con los
compañeros de la asociación patronal para darle la bienvenida al
año. ¿Y triste? ¿Por qué iba a estar triste si lo único que le ha
ocurrido es que ha tenido que cerrar la empresa? En cuanto bajaron
los márgenes de beneficio, el empresario comenzó a planificar el
cierre. Nada le dijo a la veintena de trabajadores de la plantilla,
pero la decisión estaba tomada desde el principio: ni un esfuerzo
más para intentar reflotar la empresa, reconducirla o reajustarla.
Que no estamos en este mundo para sufrir y mucho menos para perder
dinero, como le explicó a sus colegas mientras el camarero
descorchaba un buen reserva.
Vendrán tiempos difíciles, sí, pero para este negociante, símbolo
del empresario especulador, los malos tiempos le han llegado con las
alforjas llenas. El cerrojazo de la empresa, el despido de los
trabajadores y hasta el listado de proveedores impagados no van a
hacer merma en su fortuna, que para eso ya están sus abogados y los
recovecos de la legislación laboral en España. ¿Triste? Que nadie se
preocupe por él porque ya tiene pensado abrir de extranjis el mismo
negocio, más reducido, pero sin pagar impuestos ni altas de
trabajadores. Nadie mejor que él lo sabe: en España, todo el año es
Día de Reyes Magos.
El trabajador municipal al que todos conocen en el barrio ha entrado
en el bar y ha pedido una ronda de cafés y carajillos para los cinco
amigos que a esa hora temprana se acodaban en la barra. Empieza el
año y en el Ayuntamiento le han confirmado que van a hacerle otro
contrato de seis meses en una de las empresas públicas. Jardinería,
mantenimiento, limpieza o un puesto de conserje en algún colegio,
qué más da. La vieja militancia en el partido le ha garantizado
durante todos estos años un modo de vida acomodado, unas veces con
el sueldo del Ayuntamiento y, cuando faltaba, con las ayudas y la
paga del desempleo. Nada para tirar cohetes, pero lo suficiente para
haber pagado el piso que se compró en el barrio y para sacar
adelante la hipoteca de un apartamento en la playa. En su ficha de
la bolsa de empleo del Ayuntamiento figura como ‘peón de cualquier
cosa’, que fue la recomendación que le hicieron en el sindicato para
poder ir contratándolo aquí y allí.
Y como el trabajo del ayuntamiento es, digamos, ‘flexible’, porque
nadie se desloma en el tajo ni nadie le pone reparos a que uno pueda
ausentarse del trabajo por asuntillos personales, siempre puede
echarle una mano a su hijo, con las chapuzas de la fontanería. ¿Sin
IVA? Pues claro, que sólo faltaba eso, pagar impuestos. Vendrán
tiempos difíciles, sí, pero ellos siempre han sabido nadar y guardar
la ropa. Ser listos, digamos. Que en España, si tú quieres, todo el
año es Día de Reyes Magos.
La reforma de los municipios, a punto
Editorial www.gaceta.es 3 Enero 2013
A la hora de meter el bisturí no caben las medias tintas.
Populares y socialistas nunca se ha entendido, pero todo apunta que
el primer pacto de cierto calado está a punto de rubricarse y en un
terreno como el de la Administración local que es clave para
embridar el gasto público, la gran asignatura pendiente del Gobierno
de Mariano Rajoy. Las conversaciones que están ultimando los
responsables de política local de ambas formaciones –Manuel Cobo y
Gaspar Zarrías– se iniciaron hace ya unos meses y todo apunta a que
el acuerdo se sellará en unos días.
Entre los aspectos más relevantes del futuro proyecto de Ley de
Bases de Régimen Local destaca la supresión de las cerca de mil
mancomunidades de municipios, la eliminación de duplicidades en
algunos servicios que serán asumidos por las diputaciones, la
limitación de los sueldos de los alcaldes y la conversión de los
interventores en un cuerpo estatal que tendrá competencia para
prohibir los gastos impropios de los ayuntamientos.
Todas las medidas parecen ir en el buen camino pero, sería deseable
que se acometieran con decisión, porque el recorte del gasto público
es un imperativo, una condición sine qua non para atajar el déficit
y poder lograr la ansiada recuperación económica. España cuenta hoy
con 8.112 ayuntamientos, casi los mismos que Alemania con
aproximadamente la mitad de su población, y sería un grave error
actuar con tibieza. A la hora de meter el bisturí no caben las
medias tintas.
Abusos políticos en la administración
Editorial Estrella 3 Enero 2013
El Partido Popular y el PSOE están pactando en la sombra un acuerdo
para reformar la administración local. De este acuerdo han aflorado
algunas ideas: reducir el peso de la administración que duplica
competencias y situar en un marco adecuado la percepción de salarios
de los alcaldes, equiparándolos en el nivel más alto de población a
los secretarios de estado.
Ésta es una buena noticia puesto que la administración local se ha
convertido en los últimos años en un auténtico hervidero de
corruptelas y abusos económicos, y se ha situado más como una
preocupación de los ciudadanos que como entidades cercanas adecuadas
para resolver sus problemas.
Muchos españoles consideran adecuado que los recortes lleguen a la
política y a la administración
España sigue siendo un país de pícaros y muchos de ellos han crecido
con el gigantismo autonómico y con el descontrol local. El ladrillo
y las concesiones, los concursos amañados y las adjudicaciones a
dedo han sido una práctica constante junto con rentas abusivas
cobradas por munícipes y asesores, y toda una suerte de vividores y
supervivientes que han encontrado acomodo en nóminas infladas para
su particular descaro y su habitual incompetencia.
Conviene que el principio que barajen ambos partidos se extienda al
conjunto de las fuerzas y que haya un consenso que facilite los
cambios jurídicos y que siente nuevas bases morales para abordar la
actividad pública. A todos corresponde corregir los desmanes que la
crisis ha puesto en evidencia.
Muchos españoles consideran adecuado que los recortes lleguen a la
política y a la administración. Por eso, las críticas del PSOE a la
reducción salarial en el parlamento castellano manchego no
encontrarán eco, y menos aún cuando se ha sabido que entre salario
fijo y dietas, los diputados autonómicos cobrarán más de dos mil
euros, una cifra que ya quisieran para sí además de los seis
millones de parados, muchos otros que ven como su salario no sólo es
más bajo, sino que además es el fruto de un trabajo mucho más duro y
de muchas más horas.
Dicho esto, es impresentable que quien lidera la iniciativa de
reducir los salarios de los diputados que deben controlarla, sea
quien, según se ha hecho público, cobra tres sueldos, todos ellos
con origen en dinero público. Y que nadie esgrima el argumento de
que es "el partido" quien le paga el más sustancioso de los tres
salarios para justificarlo: los partidos, quede claro, se financian
con dinero público que proviene de los impuestos de los españoles.
Ningún gasto de partido debe ser ajeno al control y la fiscalización
social. Esto de que los partidos gastan "su" dinero como quieren es
una falacia que debe caer denunciada con la misma fuerza con que
deben caer privilegios. Por ejemplo, las ventajas fiscales que los
representantes públicos perciben al tributar, por ejemplo, los
concejales, como dietas gran parte de sus ingresos y por tanto no
quedar éstas sometidas al control del IRPF.
Eso que es una vergüenza repulsiva es una realidad que, ya verán,
los grandes partidos no serán capaces de resolver sin la presión de
una opinión pública que actúe como lo que debe ser, el muro de
contención de los abusos de quienes encuentran en la gestión de lo
público un negocio del que aprovecharse ante la cara misma de todos
los ciudadanos.
Por no citar al muchacho de las NN. GG que mantiene su puesto de
trabajo – otra afrenta "digital" – en la administración local
madrileña cuando sus circunstancias son las que ya todos conocemos.
Otra muestra del uso y abuso patrimonialista de la administración
pública para el partido de turno, entendido este como un gran
negocio en el que participan todos los que saben moverse
adecuadamente dentro de él.
Si el PP y el PSOE quieren emprender nuevas reformas, la de la
administración local debe ser intensa y profunda, pero no menos que
la que ellos mismos deben hacer dentro de sus filas, pues es desde
ellas desde donde surgen los sujetos que perpetraran los descarados
abusos que cada vez son más públicos y evidentes, y que tanto
indignan a una población que bastantes penurias está pasando.
Crisis
La poda de la exuberancia municipal
Cristina Losada Libertad Digital 3 Enero 2013
Quien visite la página web de un ayuntamiento de alguna enjundia
encontrará allí una paleta de servicios sorprendente. Quiero decir
que sorprenderá a los desavisados, a aquellos que pensaran que un
municipio se limita a gestionar los asuntos que le son propios:
transporte, alumbrado, limpieza, recogida de basuras, mantenimiento
de calles, parques y jardines, seguridad, tráfico y cosas por el
estilo. Pues no. Esas limitaciones son pura antigüedad, que el
moderno municipio español ha superado con creces. Tan es así, que
junto a la generosa cartera de prestaciones, uno hallará, tras la
correspondiente búsqueda, la manera de optar a esta o aquella
subvención. Sea para fomentar el asociacionismo juvenil o el
deporte, sea para promocionar la cultura o el aprendizaje de la
lengua cooficial (no la española, obviamente), sea para cualquier
otra actividad que hayan decidido sufragar las inquietas mentes
políticas del municipio.
Tenemos en cualquier ayuntamiento que se precie, concejalías de
cooperación internacional, y de juventud, y de adolescencia y de
infancia, y de usos alternativos del tiempo, y de ocio, porque no
sabríamos qué hacer con el tiempo libre sin el concurso municipal; y
por supuesto, de fiestas, ¡imprescindible!; y qué sería de las
fiestas sin megaconciertos a los que todos contribuimos para que
disfruten a bajo precio los fans, pongamos, de Serrat y Sabina. Del
mismo modo que abonamos entre todos una parte del billete de avión
al destino que se le haya ocurrido subvencionar al municipio, tal
vez con el propósito de revitalizar el aeropuerto local. El de Vigo,
por ejemplo, puso casi dos millones de euros entre 2008 y 2012 para
que una compañía volara de Peinador a Heathrow, y aún así, no es
rentable y ha de cancelarse. Y éste es sólo uno de los muchos
ayuntamientos que extendió sus competencias al campo de los vuelos
comerciales.
Igualito que las administraciones autonómicas, las locales se
rodearon de un denso anillo de servicios, prestaciones,
subvenciones, organismos autónomos, empresas propias, mixtas o
participadas, que invitaban a preguntarse, al modo de Josep Pla ante
el luminoso paisaje nocturno de Nueva York, "y todo esto, ¿quién lo
paga?". Aunque hoy la cuestión, en plena sequía de ingresos tras el
maná del boom inmobiliario, es que no se puede pagar. Así, a la
fuerza ahorcan, no queda otra que reducir la hinchazón municipal,
aunque en conjunto sea de menor gravedad que la autonómica. Como ese
hueso es mucho hueso, y es más fácil hincarle el diente a lo local,
el PP y el PSOE pergeñan ahí una reforma. Hay quien propone suprimir
municipios, como UPyD, que se queja de la reducción de concejales
prevista: hará más difícil que los partidos pequeños obtengan
representación. Cada cual tiene su interés. Pero ninguna reforma
local será decisiva si no usa la podadera y reduce los ayuntamientos
a su hechura tradicional.
Primero vinieron a por los "muy ricos"
EDITORIAL Libertad Digital 3 Enero 2013
Tras otra agónica sesión, la Cámara de Representantes estadounidense
ha aprobado finalmente un acuerdo que, más que solucionar, va a
posponer, sino a agravar, el problema que el presidente de la
Reserva Federal, Ben Bernanke vino a bautizar como "abismo fiscal".
Una expresión que escondía una masiva y generalizada subida de
impuestos combinada con un recorte automático del gasto público a
los que abocaba el incumplimiento por parte de la administración de
Obama de los compromisos de reducción del déficit a los que se había
condicionado el aumento del techo de la deuda de 2,1 billones de
dólares aprobado por el Congreso en agosto de 2011.
En principio, es una buena noticia que, en el texto ahora aprobado,
se haya evitado la subida del IRPF a una inmensa mayoría de los
ciudadanos. Lo que no es positivo, en modo alguno, es la decisión de
subir los impuestos a los "muy ricos" como forma de encubrir y no
afrontar el auténtico problema, que no es otro que el excesivo gasto
público que, también en EEUU, lastra las posibilidades de
recuperación económica.
Y es que, al margen de las engañosas expectativas de recaudación que
Obama espera lograr con esta subida fiscal limitada al 1% de la
población con mayores ingresos; y al margen también de las
distorsiones que genera todo sistema impositivo en el que no rige la
proporcionalidad sino una arbitraria progresividad, el mayor
problema sigue estando en la renuencia del gobierno de Obama en
reducir drásticamente el gasto y el tamaño del sector público
norteamericano.
El verdadero "abismo fiscal" no es otro que el hoyo que, también en
EEUU está causando el peso de un sector público sobredimensionado
que no quiere ajustarse a la menguada realidad de sus ingresos. Y el
texto ahora acordado lo único que hace es posponer dos meses los ya
de por sí tímidos recortes del gasto público que contemplan los
presupuestos del Congreso.
Por mucha demagogia que se quiera hacer contra los "muy ricos" y por
comprensible que sea el alivio que ahora puedan sentir los
ciudadanos que no lo son, lo cierto es que este acuerdo no soluciona
el problema del déficit ni el preocupante ritmo de endeudamiento del
gobierno norteamericano: lo que hace es acrecentarlo posponiendo y
-peor aun- desenfocando su solución.
La mayoría de los ciudadanos norteamericanos que no van a verse
perjudicados esencialmente por esta subida fiscal ya deben, sin
embargo, preocuparse por este acuerdo. Y no sólo porque también
afecte, aun en menor medida, a las clases medias, que verán
incrementados sus impuestos sobre el ahorro en más de un 20%, o
porque ponga fin a las rebajas de dos puntos en la contribución a la
Seguridad Social. El acuerdo les debe preocupar esencialmente, y aun
sin ser "muy ricos", porque la "solución" propuesta no va a resolver
el problema. Y sin resolverse, nadie puede sentirse a salvo, por
"muy rico" que no se sea. O especialmente por no serlo.
La gran noticia
Juan Velarde Libertad Digital 3 Enero 2013
En un duro artículo sobre la situación de la economía española de
Juergen Donges –"Panorama económico y de futuro del euro"– publicado
en Expectativas, diciembre 2012, señala la existencia de una clara
acción en tres frentes que hay que asumir, para sanear su economía:
"Uno es el fiscal... Menos déficit significa menos deuda y menos
deuda reduce las cargas tributarias para futuras generaciones. El
segundo frente es el del sector financiero: se requiere una
capitalización adecuada de los bancos y las cajas que hagan fluir
con normalidad los créditos. Habrá que cerrar las (entidades) que
carezcan de un plan de futuro sostenible. Un tercer frente es el de
la economía real: se trata de elevar el potencial de crecimiento. Lo
que se requiere son unas reformas estructurales de gran calado que
den paso a la competencia y a la iniciativa privada y crear márgenes
para reducir costes de producción... abordando también la
liberalización de los servicios profesionales y las actividades
comerciales".
Por otro lado, en el mismo artículo, Donges subraya que existía "un
exceso de regulaciones y trabas administrativas de la actividad
emprendedora", aparte de que "en el caso de España (abundan)
crecidos conflictos políticos entre el Gobierno central y
determinados ejecutivos autonómicos, algo que los mercados también
registran, con preocupación".
Esto se completa con un párrafo de Julio Pomés, en este mismo número
de Expectativas, en el artículo "El estado del malestar": "Por otra
parte, un mercado donde las licencias son más limitadas, dispara la
especulación, lo que ahonda en una sociedad... graves diferencias de
ingresos vinculados a la buena o mala fortuna de entrar en el
mercado en un momento determinado".
Las autonomías se han convertido así en un problema importante, si
es que no alteran radicalmente su conducta. Esta tiene dos aspectos.
Uno es el fiscal. El otro, el del intervencionismo económico de cada
una.
Respecto a lo primero, parece que las medidas que se están adoptando
son oportunas. Carmen Morodo, en el artículo "Hacienda remite por
escrito a las Comunidades Autónomas la lista de ajustes que les
faltan. Ha empezado a mandarles cartas con duras advertencias si se
saltan el déficit. Entre otras medidas, el Gobierno ya les ha
trasladado que les cortará el Fondo de Liquidez Autonómica",
publicado en La Razón el 27 de diciembre de 2012, en uno de sus
párrafos dice: "Hacienda ha empezado a remitirles (a las Comunidades
Autónomas) cartas en las que por escrito les advierte, una a una de
los agujeros que la Intervención General del Estado detecta en sus
ajustes y de cómo deberían subsanarlos".
Siendo esto fundamental, se une a otra gran noticia. Esta aparece en
ABC, el 27 de diciembre de 2012, en un artículo de Mª Jesús Pérez y
Yolanda Gómez, titulado así: "Las empresas sólo necesitarán licencia
de una autonomía para operar en toda España. El Gobierno prevé
aprobar el 11 de enero el proyecto de ley de garantía de la unidad
de mercado, para facilitar la libre circulación de bienes y
servicios". Se trata de una excelente noticia que da respuesta a los
planteamientos de Donges y de Pomés. Allyn Young había señalado,
como complemento de su artículo "Increasing returns and economic
progress", aparecido en The Economic Journal, en 1928, así como en
el artículo "Capital" de la Enciclopedia Británica, que esa base del
desarrollo económico y del incremento de la productividad que es la
división del trabajo, como observó Adam Smith depende por encima de
todo "de la extensión del mercado". Esta proposición de Smith-Young
la habían pulverizado las 100.000 normas, muchas de ellas
contradictorias entre sí, que respecto al mundo empresarial teníamos
en España. Con Ceuta y Melilla, existían en España diecinueve
mercados diferentes. La gran noticia es que una próxima ley hará
saltar todo eso por los aires. Ese es el camino que hay que seguir,
junto con el del control del déficit de las Administraciones
Autonómicas. Y de modo implacable.
Abismo fiscal
Un Himalaya de impuestos
Juan Ramón Rallo Libertad Digital 3 Enero 2013
Lo llamaban abismo fiscal pero, en realidad, era un Himalaya de
impuestos. Escuchando a nuestros sesgados medios de comunicación,
uno se habrá llevado la impresión de que los estadounidenses estaban
a punto de experimentar un doloroso ejercicio de austeridad
consistente a partes iguales en recortes del gasto y en subidas de
impuestos. Pero no, los recortes del gasto eran puramente
decorativos en medio de una maraña de contundentes sablazos contra
el contribuyente: según la Oficina de Presupuesto del Congreso, de
no haberse evitado el mal llamado "abismo fiscal", los ingresos
federales de 2013 habrían aumentado en 478.000 millones (un 19,6%) y
los gastos federales se habrían recortado en... 9.000 millones (un
-0,25%).
Sí, ese era el abismo fiscal que amenazaba con desarmar al
todopoderoso Gobierno estadounidense: una reducción de apenas el
0,25% de su tamaño. Es verdad que si echamos las cuentas a la
europea (y a la española), deberíamos proceder a computar el monto
de los recortes por la diferencia entre lo que estimamos que habría
aumentado el gasto y lo que finalmente se incrementa; de tal guisa
que si mañana el cacique de turno promete aumentar el presupuesto en
varios millones de zillones de dólares y, al día siguiente, da
marcha atrás en su populista promesa, habrá que concluir que nos
hallamos ante el mayor ejercicio de austeridad que los siglos hayan
contemplado; y eso sin necesidad de recortar realmente dólar alguno
del presupuesto. Pero bueno, incluso empleando tales amañadas
cuentas de la vieja, los recortes del gasto apenas ascendían a
100.000 millones de euros (básicamente, en el Medicare, en Defensa y
en subsidios de desempleo) frente a un morrocotudo estocazo
impositivo de más de 300.000 millones (sobre todo por finalización
de las rebajas impositivas de Bush, la reducción de la cuota de la
Seguridad Social aprobada por Obama en 2010 y nuevos impuestos para
financiar la Sanidad). Austeridad gubernamental, pues, ninguna: como
en Europa, expolio al contribuyente para seguir manteniendo un
Estado sobredimensionado que no deja de crecer a costa del sector
privado.
Al final, demócratas y republicanos se han puesto de acuerdo en lo
más sencillo: esquilmar a los más ricos... o eso ha sido lo que nos
han contado. Porque, por un lado, es verdad que la peor parte se la
llevan aquellos estadounidenses que ganan más de 400.000 dólares
anuales (o familias que ingresan más de 450.000) y que se encuentran
entre el 1% más rico del país: su tipo marginal pasará del 35% al
39,6%. Peccata minuta, pensarán ustedes: ya que son ricos, que
apoquinen más durante estos tiempos de crisis. Dejando de lado los
distorsionadores efectos que ello conlleva, hay un dato que se nos
suele olvidar: ese 1% más rico ya venía proporcionando el 37% de
toda la recaudación federal por impuestos sobre la renta, frente al
50% más pobre que apenas aporta el 2,3% del total. 1%-37% vs.
50%-2%: la cosa, como se ve, va de burgueses insolidarios hacia los
más desfavorecidos. Por otro, y como ya sucedía con esa cortina de
humo que fue el Hollandazo, el rejonazo fiscal a los ricos oculta
que las clases medias también van a subir lo suyo: los impuestos
sobre el ahorro pasan del 15% al 18,8% (una subida del 22% que para
"los ricos" será, agárrense, del 60%) y se pone fin a las rebajas de
dos puntos en las contribuciones a la Seguridad Social. Podría haber
sido peor: subidas generalizadas sobre la renta y aumentos del 165%
en los tipos sobre el ahorro. Quien no se consuela, desde luego, es
porque no quiere.
Al final, sin embargo, volvemos a la casilla de salida. Convertido
el Himalaya fiscal en unos más modestos Pirineos fiscales, el
déficit proyectado para 2013 vuelve a superar el billón de dólares
por quinto año consecutivo. En sus cinco años de mandato, Obama
habrá amasado un mayor déficit que todos sus antecesores desde el
general Washington juntos. No es magra la gesta, sobre todo cuando
se la pretende hacer pasar este monumental despilfarro por el
principal dinamizador de la economía yanqui. Será que todavía no
hemos entendido el origen de las crisis, los contraproducentes
efectos de las políticas expansivas de demanda y que, en suma, no
hemos tomado las pertinentes lecciones de Japón: en 20 años, los
nipones han aumentado su deuda pública un 200% para lograr que el
PIB decrezca un 1,6%. La economía privada estadounidense está, sin
duda, en mucha mejor forma que la del Sol Naciente, pero no deja de
resultar inquietante que los mismos que aseguran que el estímulo del
déficit está obrando milagros, abran rápidamente las puertas del
infierno recesivo en cuanto ese déficit se reduce un poquitín. Si
tan autónoma es ya la economía estadounidense, ¿cómo es que se ha
vuelto tan adicta al gasto público? Y si es absolutamente adicta al
gasto, ¿cuándo podrá desengancharse para proceder a acabar con el
déficit? ¿Son cinco años de déficits billonarios demasiado poco
tiempo para lograr la ansiada recuperación? ¿Acaso requerimos de
otros cinco más para llegar a una onerosa deuda equivalente al 150%
del PIB?
En fin, que en ausencia de un rumbo claro sobre cómo atajar el
déficit público sin machacar a impuestos a la economía privada (es
decir, procediendo a rebajar el gasto público con intensidad para
permitir una sana creación de riqueza) sólo diferimos los problemas
esenciales en el tiempo. Nula determinación a la espera de que los
empresarios estadounidenses, pese a la asfixia fiscal y regulatoria
de su Gobierno (qué no pasará en España y en Europa), sean lo
suficientemente creativos y vuelvan a generar la suficiente riqueza
como para sufragar los expansivos desembolsos de su Leviatán. Todo
muy bonito, siempre que no haya sorpresas desagradables de por
medio; por ejemplo, que esos heroicos empresarios no sean capaces de
generar riqueza al mismo ritmo que el Estado la engulle y la
dilapida. Entonces, ah, el abismo fiscal de mañana dejará al
abortado ayer en un leve y anecdótico tropezón.
La madre de una niña asesinada escribe una carta a Gallardón
'Hacen recaer el peso de sus errores en los
más débiles e indefensos'
EFE www.gaceta.es 3 Enero
2013
El asesino de su hija cumplió 20 de los 44 años de condena. Hoy
escribe al ministro de Justicia para que la 'prisión permanente
revisable' sea una realidad.
Adoración Cano, madre de la niña Ana María Jerez Cano, asesinada por
José Franco de la Cruz El Boca en 1991, ha escrito una carta al
ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, en la que pide la
reforma urgente del Código Penal para "paliar la impunidad de los
que atentan contra menores".
Tras los últimos casos como el de los dos hermanos Ruth y José o el
de la pequeña Miriam, asesinada recientemente en Almería, el
Gobierno debe "aprobar de una vez por todas la reforma, ya que a los
responsables de las muertes de estos tres niños tampoco les
afectarán medidas contempladas en dicha reforma como la cadena
perpetúa revisable".
Por ello, ha remitido una carta al ministro de Justicia en la que le
recuerda que el asesino de su hija, con una condena de 44 años fue
puesto en libertad con solo 20 años de prisión cumplidos "y sin que
se adoptara ningún tipo de medida para controlarlo".
"La desidia, dejadez, incoherencias de las leyes, abandono y la
falta de responsabilidad hicieron posible la muerte de mi hija, y la
misma actitud permite que caso tras caso, asesinos como 'El Boca',
una vez han cumplido condenas ridículas sean dejados en la calle sin
ningún tipo control ni de garantía", continúa la misiva.
Además, considera que con la aprobación del nuevo Código Penal "se
evitarían que casos como Ruth y Jose se saldaran con permisos o
condenas insuficientes, o que en casos recientes como el de Miriam,
de tan sólo 16 meses de vida, sólo cumplieran la mitad de la
condena".
'La vida humana de los más vulnerables'
Señala Cano que los ciudadanos "no podemos, ni debemos seguir
permitiendo tan poca sensibilidad, falta de empatía y sentido de la
responsabilidad y dejadez de sus funciones en los responsables
políticos y que siempre hagan recaer todo el peso de sus errores en
las más débiles e indefensos".
"La vida humana de los más vulnerables se debe proteger con condenas
firmes y duras, como en el resto de Europa" y ello empieza, en su
opinión, por aprobar una reforma que, ha insistido, se anunció hace
ya más de tres meses.
Democracia Real Ya se querellará contra los
diputados que reciben dietas y tienen casa en Madrid
El documento se presentará este viernes ante el Tribunal Supremo
contra 63 parlamentarios que reciben 1.823 euros por pernoctación
P, Madrid. Estrella Digital 3 Enero 2013
La Asociación Democracia Real Ya (DRY) va a presentar este viernes
una querella en el Tribunal Supremo contra 63 diputados que, según
denuncian, perciben dietas de desplazamiento y manutención a pesar
de disponer de una o varias viviendas en Madrid.
Según ha explicado en declaraciones a Europa Press uno de los
letrados integrantes del Equipo Jurídico de la Asociación, Miguel
Ángel Jiménez, esos 63 diputados están percibiendo dietas por valor
de 1823,86 euros "en concepto de pernoctación", aun teniendo una
vivienda en la capital.
"Esa cantidad le correspondería a diputados que realmente lo
necesitasen, pero según el Registro de Propiedad y las declaraciones
de bienes que presentaron en el Congreso, todos tienen uno o más
pisos en Madrid, y muchos de ellos viven en Madrid", ha denunciado,
para añadir que el propio presidente del Gobierno también estaría
percibiendo dietas "de manera ilegítima".
Por todo ello, la Asociación DRY les acusa en su querella de los
delitos de malversación de fondos públicos y apropiación indebida.
Asimismo, quieren que "devuelvan el dinero que no les corresponde",
sobre todo teniendo en cuenta que "los recortes están trayendo por
la calle de la amargura a la mayoría de los españoles".
"Esta querella pretende ser un paso más en el camino a recorrer para
devolver la justicia a la sociedad, para poner freno a la decadencia
de unos políticos que, comprados por las grandes oligarquías, están
desangrando a los ciudadanos a los que dicen representar", aseguran
en un comunicado, en el que también informan de que ofrecerán más
detalles este viernes a las 11.30 frente al Tribunal Supremo.
******************* Sección "bilingüe"
***********************
Certificados lingüísticos ¡Infierno en la tierra! (en
Flandes como en Cataluña)
Juan Fernandez Krohn Periodista Digital 3 Enero 2013
[Macia vio en Bélgica unitaria refugio y tierra prmetida. Sus
sucesores acabarian tirando por la borda la solidaridad cultural con
el francés (lengua latina) en provecho del separatismo flamenco]
El camino de la independencia catalana ¿pasa por Flandes acaso o
sera aquí donde acaben desactivandose los sueños de los artificieros
y de los aprendices de brujo en cambio? Seriamente me lo pregunto y
más y más cada día que pasa lo confieso. El independentismo catalán
de antes de la guerra civil vio sin duda en Bélgica una especie de
tierra prometida de sus ideales independentistas, al fin y al cabo
¿no había comparado Eugenio Montes (fuera de toda sospecha) la
autonomía catalán durante los años de la II República con "la
primera autonomía" -del Imperio español- que fue para él la de los
Paises Bajos (católicos) de entonces, que plenipotenciarios
españoles -Diego Saavedra y Fajardo entre ellos- "firmaron con
sangre" en el tratado de Münster donde se sello la paz de Westfalia
y se puso un fin tanto a la guerra de Flandes (interminable) como a
la Guerra de los Treinta Años? "¡Münster de Westfalia tumba del
imperio -canto nostálgicamente Eugenio Montes- y de una causa
perdida!" Tierra prometida la Bélgica independiente que nació -por
la vía traumática de las crisis y transformaciones históricas- de
aquellos Paises Bajos "autónomos" de los Archiduques (de la Casa de
Austria), donde se seguiría reconociendo sin ambages la soberanía
española hasta el inicio de la ocupación francesa que siguió a la
revolución, y a la que solo pondría fin la derrota de Waterloo que
dio paso a la ocupación holandesa y quince años amas tarde a la
revolución de 1830 que dio paso a su vez al estado belga
independiente. ¿Se equivocó la paloma (como en la vieja canción
pacifista argentina de los años sesenta)? ¿Se equivocaron los
catalanistas poniendo todas sus esperanzas (y complacencias) en este
pequeño país independiente en el que ellos veían -craso error- un
modelo de paz y de convivencia en la armonía y en la concordia de
sus diferentes regiones y habitantes, tal y como se ve reflejado en
una de los poemas emblemáticos ("Bélgica") de la poesía catalana
contemporánea -texto de referencia de los exámenes lingüísticos
impuestos por la Generalitat de Cataluña- inspirado en Bruselas
(tierra de exilio de su autor) a todas luces?
Maciá -ejemplo mas emblematico aun-, se refugió durante los años de
la II República en Bélgica y escogió (nota bene) de lugar residencia
Lieja, en zona francófona. Con el resurgir del nacionalismo flamenco
("flamingante") y de las reivindicaciones lingüísticas en favor del
neerlandés desde finales de los cincuenta y principios de los
sesenta la situación dio un vuelco espectacular en Flandes y su
modelo lingüístico -de normalización (progresiva y a la vez
inflexible)- se convertiría una década mas tarde con la Transición
en faro de referencia obligada de catalanistas. Una larga travesía
en la que los defensores de la lengua catalana(frente al castellano)
se verían obligados a tirar por la borda por culpa de su "pathos"
independentista (y separatista) sus lazos de solidaridad cultural y
lingüística con el francés, lengua hermana (de la misma raíz latina)
sometido implacablemente en Bélgica a partir de entonces a los
embates del neerlandés -lengua germánica derivada del bajo/alemán-
en una guerra lingüística sin cuartel que habrá conocido a decir
verdad pocas treguas desde que aquí resido, por mas que la sangre -y
toco madera- no haya llegado al río (hasta ahora) La inmersión
obligatoria es una de las vertientes -como un arma de doble filo- de
la política de normalización lingüística tanto en Flandes como en
Cataluña, de otra en cambio se habla mucho mas en Flandes que en
Cataluña por razón de la diferencia de raíz entre las situaciones
lingüísticas en las dos regiones -a saber de uniformidad lingüística
(grosso modo conseguida) en Flandes y de bilingüismo en la práctica
de la vida cotidiana por el contrario entre catalanes- que hace
utópica e irrealizable en un futuro mas o menos cercano la meta de
la uniformidad lingüística (en catalán) de todos los habitantes del
principado, con la que sueñan (y es decir poco) los catalanistas.
Un arma secreta (esa otra) en verdad de eficacia tan temible (o
casi) como la de la imposición (obligatoria) del catalán como una
única lengua vehicular en la enseñanza publica, y me estoy
refiriendo a los llamados certificados lingüísticos, de lo que se
algo -ay dolor- de lo que me toca de mi experiencia personal e
intransferible de los años vividos en Bélgica -como lo acabo de
denunciar en unos foros flamencos-, y en particular -al principio de
mi residencia aquí- en la zona flamenca (neerlándofona) y de mi
transitar después -¡ingenuo de mi!- por centros de enseñanza del
neerlandés, en particular la VUB -Universidad libre de Bruselas (en
su rama neerlandófona) "Certificado de neerlandés/lengua extranjera"
"horresco referenes!" Un espectro amedrentador -y más aun en la
realidad de su aplicación o imposición en la práctica de la vida
cotidiana-, que no dejaría de evocar en los interesados -estoy
seguro- los exámenes lingüísticos que impone a no catalanes o
incluso castellano/parlantes nacidos y residentes en la región la
Generalitat de Cataluña para poder ejercer funciones en la
administración autonómica catalana. ¿Es mas difícil de aprendizaje
el catalán que el castellano, o en otro términos es "mas lengua" el
catalán que el castellano y entraña mas dificultad su aprendizaje
por consiguiente? Sin meternos en hondura tratando de dirimir una
cuestión tan capciosa, está claro no obstante que la
mayor/dificultad del catalan es una especie de axioma o de postulado
-y liena directriz- de la política lingüística de la Generalitat,
tanto en el ámbito de la enseñanza básica como en el de las
competencias lingüísticas exigidas en la administración autonómica,
como lo vienen denunciando de antiguo asociaciones de defensa de la
lengua castellana operantes en Cataluña. Me gusta el catalán, me
atrae -como me atrajo siempre el neerlandés- y como siempre me
atrajeron (unas mas otras menos) las lenguas extranjeras.
Desisto no obstante como acabé desistiendo en relación con el
neerlandés -que quede de entrada bien claro- de aceptar el someterme
en el futuro -horresco referens!- a pruebas de capacitación
lingüística del catalán (o las que fueran) ¿Por orgullo o falta de
flexibilidad? Un proceso de intención que no dejara de hacerme aquí
mas de uno. El aprendizaje de una lengua y su destino no puede
cumplirse por obligacion (o no del todo) La lengua propia forma
parte del terreno inviolable del libre albedrío. Y si el catalán
sobrevivió varios siglos sin protección oficial o sin una protección
especial del estado o de los poderes públicos, se lo debió a sí
mismo. Y en una Flandes independiente sucedería -y no hay que ser un
lince ni profeta para preverlo o pronosticarlo- como sucedió con el
francés tras la independencia de Argelia o con el castellano tras la
independencia de Marruecos en la zona de nuestro antiguo
protectorado, que acabarían triunfando de la arabización forzosa. Y
es en la medida que la normalización lingüística impuesta a partir
de los criterios y baremos establecidos por el estado holandés deja
en la cuneta (por propia/definición o por fuerza mayor) la realidad
histórica del flamenco/neerlandés, heredero del que se hablaba -y
escribía- en tiempos de la soberanía española por estas tierras. Un
argumento que habría que atreverse a esgrimir en favor del francés
-y también del castellano- en Bélgica y del castellano en Cataluña
pese al al tabú enorme que le rodea desde hace siglos, inspirado en
la Leyenda Negra
El verdadero liderazgo político
Joseba Arregui, ex consejero del Gobierno vasco y miembro de PNV,
distingue liderazgo de populismo
JOSEBA ARREGUI www.lavozlibre.com 3 Enero 2013
Madrid.- El diario 'El Mundo' publica en su edición del jueves 3 de
enero un artículo de opinión escrito por Joseba Arregui, ex
consejero del Gobierno vasco y ex miembro del PNV, en el que asegura
que "la reforma del Estado se debe hacer para consolidarlo, darle
cohesión y fortaleza, y no para satisfacer a nadie".
Bajo el título 'El verdadero liderazgo político', Arregui,
actualmente ensayista y presidente de Aldaketa (una entidad cuya
finalidad es crear y llevar a cabo proyectos educativos), distingue
entre el liderazgo del populismo y del siempre contentamiento de las
masas. El autor concluye que en España hace falta mucha más decisión
para acometer las reformas.
Por el interés de este artículo de opinión, reproducimos el texto
íntegro publicado por el diario 'El Mundo':
"No es nada fácil definir en qué consiste el liderazgo político.
Pero no trato de redactar un trabajo académico, sino de aproximarme
a algunas de las características que pudieran definir políticamente
dicho liderazgo, diferenciándolo del populismo y del contentamiento
simple de las apetencias de las masas. La mejor forma de aproximarse
a la definición del liderazgo político es la de tratar de verlo en
situaciones concretas y ante problemas concretos. Una situación de
crisis, una catástrofe, dificultades inesperadas, problemas al
parecer insuperables pueden ser ocasiones y oportunidades para que
el liderazgo surja. El liderazgo puede ser personal o colectivo.
Puede aparecer un líder con capacidad de marcar la senda de futuro a
la mayoría de ciudadanos sin estar entroncado en un partido político
o en un movimiento social determinado, pero también puede tratarse
de una o varias personas que actúan desde el seno de un partido
político o de un movimiento social.
Lo primero que caracteriza al liderazgo político es la capacidad de
dirigir un proceso político y social, y no ser mero seguidor de lo
que parecen demandas populares. Este liderazgo como dirección
resulta difícil en las condiciones actuales: por el peso de las
encuestas permanentes que indican las tendencias electorales de la
población y sus preferencias en cada momento, y porque, en nombre de
un falso concepto de la democracia participativa, se exige que los
gobernantes sean meros ejecutores de lo que se entiende que son
demandas justas de grupos de ciudadanos.
A pesar de esta dificultad que no entro a discutir de manera más
detallada, el liderazgo se caracteriza porque un partido político -o
determinada persona dentro de alguno de ellos- son capaces de mirar
a las necesidades del conjunto cuando los problemas arrecian. El
liderazgo político exige saber formular el diagnóstico de manera
convincente y plantear con claridad el camino que puede llevar al
futuro. Para ello, el líder ha de saber presentar soluciones para
los problemas urgentes, pero debe ser, al mismo tiempo, capaz de
mantener siempre presente lo importante al mismo nivel que lo
urgente.
Una de las maneras más fáciles y habituales de frustrar un liderazgo
incipiente radica precisamente en la utilización de lo urgente para
ocultar u obviar lo importante, de forma que siempre hay razones de
urgencia para no formular soluciones para los problemas importantes.
Si el liderazgo es colectivo, si se trata del liderazgo de un
partido político o de un colectivo social, éste debe poder reunir en
torno a sí a una mayoría amplia de la sociedad para que le siga en
el camino de futuro. Si el liderazgo es personal, mal puede el líder
dirigir al conjunto de la sociedad, o a una mayoría de ella, por no
estar seguro de si su propio partido o movimiento social le sigue en
la solución de los problemas importantes.
Tengo la impresión de que en estos momentos la política española
adolece de liderazgo político, colectivo e individual. Para
enfrentarse a los problemas urgentes se utiliza en demasía el
argumento de satisfacer demandas de otras instancias: Europa, los
mercados, Merkel, el BCE o el FMI son las razones colaterales de
políticas que debieran ser defendidas por la bondad intrínseca de
las mismas, si es que poseen alguna al menos. De otra manera, no
debieran ser puestas en marcha.
Pero hay más: cada vez parece más evidente que junto a la urgencia
de dominar el déficit público, poniendo en marcha las reformas
estructurales necesarias para ello, hace falta también algo que sin
ser, quizá, tan urgente como el déficit, no es menos importante: la
reforma de la estructura del Estado en su conjunto. Pero entre un
PSOE que se acuerda de su alma federal sólo cuando necesita
diferenciarse en Cataluña tanto de CIU como del PP, y un PP que
prefiere dejar las cosas como están, no sea que el nacionalismo
español en su seno proteste, el Estado se va arrastrando hacia no se
sabe dónde con todos los ciudadanos de espectadores y los líderes
políticos sentados en la tribuna de honor.
Llama poderosamente la atención el conglomerado de argumentos que se
utilizan para no proceder a lo que se llama la apertura del melón:
se dice que una reforma federal del Estado no satisfaría a los
nacionalistas, cosa bien sabida, olvidando que la reforma de la
estructura del Estado se debe hacer para consolidarlo, darle
cohesión y fortaleza, y no para satisfacer a nadie. También se dice
que cualquier reforma de la Constitución deberá contar con el mismo
grado de consenso que en 1978, dando a entender que como ello es
imposible, mejor dejar las cosas como están. Este argumento, sin
embargo, demuestra lo contrario: que el consenso del 78 es cosa del
pasado, que todo el mundo concuerda en que hoy ese consenso ya no
existe, con lo que el argumento cae por su propia base.
En las últimas semanas, en tercer lugar, hemos podido escuchar al
presidente del Gobierno decir que la Constitución en su forma actual
puede seguir ejerciendo su función por lo menos 10 años más. Si esto
fuera verdad, demostraría que es preciso comenzar a formular la
reforma necesaria para que en 10 años tuviéramos una Constitución
reformada y renovada, suponiendo que las cosas se hagan con
tranquilidad y sin premuras, que nunca son buenas consejeras en
estos casos.
En cuarto lugar: es un ejemplo de incapacidad de liderazgo afirmar
que no se puede proceder a la reforma de la Constitución porque no
hay consenso para ello. Liderar significa precisamente construir
consensos donde no los había, y no renunciar a lo importante por
falta de consenso. Esto significa renunciar al liderazgo.
Aunque lo hayamos olvidado, hace no pocos años cantábamos las
glorias de la España autonómica asentados en la bonanza económica:
la España autonómica era una de las razones -si no la razón
principal- de esa bonanza. La ecuación vale inversamente: la crisis
económica es una muestra de la crisis del Estado autonómico. Me
imagino a los responsables políticos alemanes -convencidos
federalistas desde su propia vivencia y éxito- mirando a la España
autonómica y preguntándose cuándo se van a poner los políticos
españoles manos a la obra, sin poder hacer otra cosa desde Berlín
que exigir austeridad para defender el euro.
Si algo hay claro es que España no puede seguir así. Y cuando todo
el mundo, o casi todo el mundo, percibe que algo no puede seguir
así, hacerlo es la manera más segura de caminar al suicidio
colectivo. Y podemos terminar habiendo saneado las cuentas de un
Estado que puede ya no necesitar de cuenta alguna, ni saneada ni
cargada de déficit".
Carta abierta a Mariano Rajoy, presidente
del Gobierno
Ramón Tamames www.republica.com 3 Enero 2013
El final de cada año siempre es buen momento para hacer un cierto
balance de la actividad del ejercicio a punto de terminar. Al objeto
de apreciar lo que de bueno se haya podido hacer, los errores en que
se incurrió, y lo mucho que dejamos pendiente de llevar a cabo,
tanto por agobios, o más que nada por indecisiones.
Pero no solamente debemos hacer nuestro balance propio, sino también
fijarnos en el entorno en que vivimos. Y en ese sentido, hoy publico
la carta que escribí al Presidente del Gobierno el pasado 24 de
diciembre, el Día de la Nochebuena, con una serie de observaciones
sobre el difícil año del 2012; y algunas previsiones, e incluso
recomendaciones, para el 2013. El texto, íntegro sin ninguna
modificación, y sólo con una nota a pie de página que no iba en la
misiva al Presidente, es el que figura a continuación:
Sr. Don Mariano Rajoy
Presidente del Gobierno
Palacio de La Moncloa
MADRID
Querido Presidente y muy apreciado Mariano:
Aunque estarás recibiendo toda suerte de felicitaciones por la
Navidad y el Año Nuevo, no quiero que falte la mía, tras doce meses
muy complicados. Creo que no me equivoqué -era fácil acertar-,
cuando te dediqué a ti y tus colaboradores económicos mi libro
“España: un proyecto de país” (que apareció en febrero y presentó
Luis de Guindos), cuando te deseaba lo mejor para “la difícil
travesía por las procelosas aguas de la crisis”.
Globalmente, habéis hecho lo que tenía que hacerse, después de años
de desconcierto, improvisaciones y errores de todas clases. Aunque
os habéis quedado cortos en la reforma de las Administraciones
Públicas, por su plétora de nóminas innecesarias para actividades y
servicios ineficientes y muchos de ellos prescindibles. Como también
se echa de menos los ajustes en la estructura municipal y
provincial, de los que tanto se ha hablado, y respecto de los cuales
tenéis cautelas excesivas. El Estado español, si me lo permites,
sigue siendo “un armatoste”, que el DRAE define como “objeto grande
y de poca utilidad”. Y estoy en la seguridad de que los tres años
que os quedan de mandato, podréis avanzar, pero los impulsos
iniciales no han sido suficientes y tendréis que recuperar mucho
tiempo perdido.
Más en lo macroeconómico, yo creo que finalmente, tendrás que
decidirte por el rescate a efectos de deuda pública. Lo cual no es
ningún estigma político, pues las reformas que ha hecho Draghi en el
BCE, en gran parte están pensadas para España. Y si consigues la
aceptación previa -tu sabes mejor que nadie de quién-, para con los
ajustes complementarios ir a captar esos recursos, no sólo podría
bajar la prima de riesgo, incluso por debajo de 200, sino que
además, al renovar deuda a sus vencimientos con tipos mucho más
bajos, la disminución del coste de su servicio en un solo año podría
ser de miles de millones de euros. Y además, al hacerse menos duro
el overcrowding, podrían fluir a España gran volumen de capital, no
sólo para las grandes empresas, sino también para pymes y familias.
Por otro lado, estimo que vuestra política de comunicación, no es
buena. No haría falta recordártelo, pero sigue siendo un clásico lo
que hacía Roosevelt, en sus charlas de los sábados (al lado del
fuego, fire place), cuando explicaba, minuciosamente y de manera
inteligible, su New Deal. La gente decía: “no sabemos si se
resolverán nuestros problemas, pero lo que está claro es que el
Presidente nos los explica en toda su complejidad, y hace lo que
puede”. Si tú organizaras una mejor información directa,
comprensible al amor del hogar -o en las pantallas televisivas, hoy-
seguro que tendría mucho efecto, y eso hace falta.
Por otro lado, públicamente os he criticado -y te he escrito algunas
cartas, que ya al final me responde el Sr. Moragas- poniendo de
relieve que ni el 21 de diciembre de 2011, ni después, habéis hecho
un verdadero diagnóstico global de la situación; y mucho menos
habéis formulado una estrategia a largo plazo. Y eso no deja de ser
una grave insuficiencia del Gobierno que presides, que tendría que
hacer por lo menos un informe general en cada semestre. Ya lo de no
hacer el debate del estado de la Nación, fue bastante decepcionante.
Un grupo de economistas que nos autodenominamos Pentateuco -porque
inicialmente éramos cinco, como los primeros libros de la Biblia-,
tendríamos sumo interés en tener contigo y la parte del equipo
económico que tú quieras, una sesión -que podría ser un almuerzo o
cena en algún lugar tranquilo, para lo cual ofrezco mi casa, que es
la tuya- en la que podríamos hablar de muchas cosas, que percibimos,
y que podríamos transmitirte. A veces, un grupo así podría
subrayarte cuestiones, y plantearte ideas que no se generan con
tanta frecuencia. De esto también hemos dicho algo, hace un tiempo,
a Luis de Guindos, pero hasta el momento no nos ha convocado.
Por último, si me lo permites, una referencia a Cataluña: la primera
de nuestras regiones en tantos aspectos, como cultura,
emprendedores, desarrollo tecnológico, etc. Que ahora pasa por sus
peores horas, lo cual no es nada nuevo, pues en el Principado
siempre ha habido quienes querían marcharse. Esos quienes, lo están
intentando desde hace 600 años, pues el compromiso de Caspe (1412)
-que fue una muestra de civismo político-, ya les pareció a sus
antecesores que era una iniquitat. Creo sinceramente que la
declaración del Gobierno y sus actos estarán en la línea de lo que
marca la Constitución, en sus artículos 1.2., 2, 155, y 161.2., 166
a 169, etc.* Y si se hacen las cosas bien, todo quedaría en un nuevo
Plan Ibarreche, sin posibilidad alguna. En ese sentido, tu actitud
flemática hasta ahora, ha sido buena, pero todo tiene su tempo, y
tendrás que pronunciarte con serenidad y claridad.
Espero me disculpes los contenidos de esta carta, pero creo que el
segundo año de tu Gobierno va a ser decisivo. Por los retos
políticos, económicos y sociales. Y en esa dirección, sabes que
puedes contar a tope con la inmensa mayoría, entre los que me
incluyo, con los párrafos anteriores que me han salido directamente
del cerebro y también del corazón.
Feliz Navidad y un cordial abrazo de RAMÓN TAMAMES
*Los artículos mencionados, para quien no tenga la Constitución a
mano, contienen las siguientes precisiones:
? Art. 1.2. “La soberanía nacional reside en el pueblo español del
que emanan los poderes del Estado”. En otras palabras, nada puede
decidirse sobre Cataluña si no se consulta a todo el pueblo español
en un referéndum nacional.
? Art. 2. “La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de
la nación española…”. Lo cual quiere decir que no existe
autodeterminación ni posibilidad de secesión, si no es reformando
previamente la Constitución para prever esa posibilidad; que no se
incluyó en el gran pacto constitucional de 1978, que Cataluña aprobó
en referéndum, como las demás regiones españolas, por abrumadora
mayoría.
? Art. 155. Se refiere a lo que en la jerga constitucional se
denomina “intervención federal”. Esto es, la posibilidad de que “si
una Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la
Constitución u otras leyes le impongan… el Gobierno, previo
requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma… podrá adoptar
las medidas necesarias…”. Dicho de otra forma, cabría suspender los
acuerdos que pudiere adoptar la Comunidad de Cataluña en la deriva
separatista de CiU y ERC. Y en caso de desacato manifiesto, el
propio Presidente de la Generalidad podría ser suspendido en sus
funciones.
? Art. 161.2. “El Gobierno podrá impugnar ante el Tribunal
Constitucional las disposiciones y resoluciones adoptadas por las
CC.AA. La impugnación producirá la suspensión de la disposición o
resolución recurrida, pero el Tribunal, en su caso, deberá
ratificarla o levantarla en un plazo no superior a cinco meses”.
Podría ser un paso previo al artículo 155, para “cargarse de razón”
en la intervención federal.
? Art. 166 a 169. Son los artículos que rigen la reforma de la
Constitución, que para el caso que nos ocupa, exigiría dos tercios
de mayoría en las Cámaras de las Cortes Generales, en una primera
fase; seguida de la disolución de las Cámaras, nueva mayoría de dos
tercios en el gobierno proponente y referéndum nacional. Todo lo
cual hace técnicamente imposible cualquier propósito de reforma si
no están de acuerdo los dos partidos mayoritarios, que en el tema
que nos ocupa están en contra de cualquier idea de secesión.
Como podrá apreciarse, mi carta al presidente, está escrita, como no
podía ser otra cosa, con el máximo respeto, porque el Sr. Rajoy,
cosa que a veces se olvida por parte de la opinión pública, es
presidente del Gobierno de todos los españoles; para bien y para
mal, y al margen de cualquier partidismo. Pero el referido respeto,
no es óbice para hacer críticas y plantear posibilidades
alternativas de acción.
Y como en una carta no puede incluirse todo, estoy meditando sobre
si la semana próxima, con ocasión del nuevo año y de la fiesta de
los Reyes Magos, sería conveniente completar las letras ya envidadas
a La Moncloa que aquí se han transcrito. Ya veremos, porque la vida
es bastante complicada, y no obstante la crisis, hay mucho trabajo,
cuando realmente se tienen proyectos propios…
Y como este es el primer artículo de la sección “Universo infinito”
que regento en el periódico que edita nuestro viejo y querido amigo
Pablo Sebastián, a él y a todo su equipo en Republica.com, les deseo
lo mejor para el 2013; extendiendo esos votos a todos los lectores.
A cuya disposición quedo, como siempre, en castecien@bitmailer.net
La Generalitat tampoco aplicará la reforma
local y se escuda en el Estatut para crear la suya propia
La consejería de Gobernación catalana rechaza, entre otras cosas,
potenciar las diputaciones
www.lavozlibre.com 3 Enero 2013
Madrid.- La Generalitat tampoco aplicará la reforma la reforma
local, escudándose en el Estatut para crear la suya propia y
esquivar la que PP y PSOE negocian. Así lo ha dicho la consejería de
Gobernación catalana, liderada por Joana Ortega.
Así, la consejería ultima la redacción de sus propia reforma local
en la que no contempla, entre otras cosas, la potenciación de las
diputaciones. La reforma podría incluso ser aprobada este mismo mes
de enero para ser remitida cuando antes al Parlamento catalán. La
Generalitat tan solo coincide con Gobierno en el criterio de
racionalización de la administración pública, aunque difiere en las
medidas concretas.
Mientras el Gobierno de Rajoy opta por la eliminación de las
mancomunidades y reforzar las diputaciones, la Generalitat considera
"más viable" en Cataluña potenciar los procesos para mancomunar
servivios, sobre todo en comarcas de pocos habitantes pero mucha
extensión.
La Generalitat también rechaza aplicar la reforma local del Gobierno
por sus diferencias a la hora de afrontar la limitación de los
sueldos de los alcaldes. Mientras la consejería de Gobernación
catalana es partidaria de limitarse a establecer "criterios
unificadores que sirvan de guía" para establecer los salarios de
aquellos que se dedican en exclusiva a la alcaldía, -recordando que
"no es lo mismo gestionar Barcelona que un municipio de 40.000
habitantes"-, el PP y el PSOE trabajan sobre la base de equiparar
por ley la nómina máxima de los alcaldes de las grandes ciudades a
la de un secretario de Estado.
Para no aplicar la reforma local que propongan PP y PSOE, la
Generalitat se ha escudado en el Estatut, que le otorga competencias
locales. Además, Joana Ortega, consejera de Gobernación, ha dicho
que sostiene con el Ministerio de Hacienda un compromiso para
incluir cláusulas concretas en la futura ley de bases de Régimen
Local que dejen claro la exclusión de su ámbito de aplicación no
solo para Cataluña sino también para País Vasco y Navarra.
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