Pedro Sánchez: mucho peor que un error
EDITORIAL Libertad Digital 6 Julio 2018
A pesar de que el desafío separatista no hace sino cobrar fuerza,
con las autoridades regionales catalanas dispuestas a seguir
adelante con el golpe de Estado del 1 de octubre, en el Gobierno
nacional hay un gran optimismo ante el encuentro que tendrá lugar el
próximo lunes en la Moncloa entre Pedro Sánchez y el racista Quim
Torra.
Fuentes del Ejecutivo socialista aseguran incluso que hay señales
positivas en el mundo separatista, y la ministra catalanista
Meritxell Batet, encargada de los enjuagues con los liberticidas,
sale con buenas vibraciones de sus conversaciones con Elsa Artadi,
mano derecha del racista Torra e íntima del cobarde prófugo Carles
Puigdemont.
El planteamiento del Gobierno ante el golpe de Estado separatista no
puede ser más preocupante. Probablemente muchos votantes socialistas
estén escandalizados por la actitud ancilar de Sánchez ante los que
quieren destruir la Nación, porque a estas alturas solo hay dos
alternativas posibles: o el Ejecutivo está en manos de unos
inconscientes incapaces de ver las gravísimas consecuencias de sus
actos, o son unos miserables y unos traidores a los que solo les
preocupa seguir en el poder, al que se han encaramado no por el
respaldo de la ciudadanía en las urnas sino por obra de una moción
de censura apoyada por neocomunistas, golpistas y albaceas de la
organización terrorista ETA.
El gran problema aquí planteado no es que haya fuerzas políticas
comprometidas con la destrucción de España: para desmontar
siniestras operaciones de ese tenor, el Gobierno, la Justicia y el
resto de las instituciones democráticas cuentan con mecanismos más
que suficientes. Lo más grave, lo que pone en riesgo la
supervivencia de España como nación, es que los encargados de
proteger el orden constitucional actúen al dictado de sus
principales enemigos como verdaderos quintacolumnistas. El
oportunista, el amoral Pedro Sánchez tiene todas las trazas de ser
algo mucho peor que un error.
Vivir en la confrontación
Bieito Rubido ABC 6 Julio 2018
Alguien en la bienintencionada y democrática España creía que un
pacto con los independentistas y golpistas arreglaría el problema
catalán. Ingenuos. Se olvidaban de que la razón de ser de los
separatistas es la confrontación. Nueva oportunidad, por tanto, para
Rivera, cuyo discurso sigue siendo el único claro frente a los
sediciosos. Se volverá a mirar y a escuchar otra vez al líder de
Ciudadanos. A la espera de que el PP, con nuevo presidente, retome
su firme papel de la defensa de la unidad de España. Difícil se le
presenta el panorama a Sánchez, que ocupa La Moncloa sin haberlo
votado los ciudadanos y con 84 exiguos escaños. A ver cómo explica
ahora el dirigente socialista que su pretendida «distensión», más
entendida como claudicación, solo ha servido para ahondar en la
fractura social. A lo mejor no le quedará más remedio que aplicar el
155, pero ahora con TV3 incluido. De lo contrario -que no se engañen
ni Pedro ni Pablo-, el pueblo español los empujará al desván de la
Historia. Lo del Parlamento autonómico catalán es la evidencia de
que Sánchez se equivoca y que Cataluña sigue siendo nuestro primer
problema.
Lo que pasa en España
Amalio de Marichalar ABC 6 Julio 2018
¿Alguien es capaz de explicarse qué es lo que está pasando en
España, donde vivimos una situación de golpe al Estado desde octubre
del año pasado y de pregolpe desde varios meses antes? El golpe de
Estado anterior se cortó radicalmente y nadie consideró que entrar
en el Parlamento gritando y con una pistola en la mano fuera un
hecho no punible, por ser, por ejemplo, un hecho teatral, aunque,
eso sí, de muy mal gusto. Puestos a buscar excusas se pueden buscar,
hasta considerar que fuera una broma pesada o una locura pasajera.
Pero no. Como es lógico y natural, desde el primer segundo no
cupieron interpretaciones posibles. Sin embargo, hay una gran
diferencia con el actual, en el que estamos desde hace nueve meses
-con interrupción provisional del 155-, viviéndolo en directo,
liderado, organizado, promovido, patrocinado y ejecutado por el
propio poder constituido y los partidos que le soportan, que además,
gracias a la Constitución, puede presidir la Generalidad y, para más
inri, representa al propio Estado y a sus leyes.
No solo esto, sino que el propio Parlamento regional, el anterior y
el actual, quiebra, transgrede, incumple y desafía todos los días la
ley y la constitución -«aunque no sea delito»-, pero, eso sí, un
referéndum, una solemne declaración de independencia, aún en vigor y
sin derogar, que yo sepa, y de proclamación de la República catalana
son solo un chiste.
Más aún, el anterior presidente de la autonomía, huido de la
Justicia, y el actual, con el auspicio del anterior, han retado
inadmisiblemente al Jefe del Estado y al Gobierno de la nación, en
su solemne discurso en el Parlamento autonómico, así como en su toma
de posesión, y ahora en Tarragona y Gerona. ¿Cómo se van a restituir
las ofensas, ataques, amenazas, vejaciones, «sean delito o no», al
Rey, que es el Jefe del Estado que nos representa, y ofenden a todos
los españoles? ¿Debemos llamar a Francia o a Alemania para que nos
enseñen lo que hay que hacer ante tamaña provocación? Debe de ser
que se ha vuelto «loco» unas horas solo, y casualmente cuando sale
en los medios nacionales e internacionales, o actúa
institucionalmente. Basta de bromas... A ningún otro español se nos
pasa una, cuando nos ponen solo una multa de tráfico, lo cual me
parece bien.
Solo hay una cosa buena -dentro de la enorme gravedad de la
situación-, y es que todos los españoles hemos descubierto el engaño
masivo en el que hemos estado viviendo: cómo se ha hecho un
adoctrinamiento desde hace décadas de los más desprotegidos, cómo se
ha inoculado una enseñanza perversa a los escolares, cómo se han
utilizado los medios y comprado voluntades para conducir a la
sociedad, cómo ha fluido el dinero para incentivar a tantas
organizaciones -«embajadas» para adoctrinar internacionalmente,
siempre con dinero de todos los españoles- y cómo se ha manipulado
sigilosamente y con amenazas. Nada que ver con una respetable
ideología que quiera convivir en un Estado de Derecho, por mucho que
no se esté de acuerdo con ella.
Descubierto está el plan de rebelión, reconfirmado por los autores
todos los días, jactándose de ello.
No caben más contemplaciones. Al anterior y al actual Gobierno de la
nación, o al que venga, se le acabó y se le ha acabado el tiempo de
la dilatación e «interpretación», puesto que no existe
«interpretación» ninguna a este golpe institucional al Estado.
¿Alguien imagina hoy mismo, sin atajar, esta situación tan grave en
el Algarve, en Portugal, o en Baviera, en Alemania? No hay palabras.
Amalio de Marichalar es Presidente del Foro Soria 21 para el
Desarrollo Sostenible
Antonio Escohotado: "La derecha desapareció en masa tras la II
Guerra Mundial"
El autor de Los enemigos del comercio participó en el XI Foro
Atlántico de la Fundación Internacional para la Libertad.
Jesús Fernández Úbeda Libertad Digital 6 Julio 2018
En su 77 cumpleaños, Antonio Escohotado tranquilizó al personal que,
preocupado por la posverdad o la situación política/social patria,
asistió a la mesa de debate "El futuro de España", enmarcada en el
XI Foro Atlántico de la Fundación Internacional para la Libertad
–comandada por Mario Vargas Llosa–. Este viernes, en la Casa de
América, el autor de Los enemigos del comercio dijo que "no tenemos
muchas razones para preocuparnos: si la verdad se puede valer sola,
y la mentira necesita el apoyo del Gobierno, hay más activo, más
patrimonio en un lado que en el otro".
Escohotado arrancó su intervención señalando cómo "cuando el mundo,
realmente, se está quitando de encima buena parte de sus problemas,
predomina el llorón, el embustero, el que dice las cosas a medias".
En este sentido, refiriéndose a la situación política en Cataluña,
dijo: "Dado el clima moral y la difusión de los embustes, si los
catalanes independentistas hubiesen tenido algo menos grotesco que
el señor Puigdemont, que el señor Junqueras, ¡uy, Dios mío, dónde
estaríamos ahora! Pero no lo tienen".
El autor de Historia general de las drogas dijo que "la derecha
desapareció en masa tras la II Guerra Mundial", con la excepción de
España, donde "duró un poco más", y que "se fue yendo al centro".
"¿Por qué hay derecha –preguntó el filósofo–? Porque la izquierda
necesita un espejo que la afirme".
Escohotado afirmó que quienes "quieren que los últimos sean los
primeros" tienen como armas "el odio, el resentimiento, el complejo
de inferioridad". Este sector, que "recibió con desolación que la
URSS había implosionado", ha encontrado una vía de escape con el
altermundismo, con el que se cumple "la restauración general del
censor".
Aun así, Escohotado señaló que "no tenemos muchas razones para
preocuparnos. Si la verdad se puede valer sola, y la mentira
necesita el apoyo del Gobierno, pues claro, hay más activo, más
patrimonio en un lado que en el otro". "Tenemos que tener muy
presente que la verdad se defiende sola y se va a seguir defendiendo
sola", concluyó.
Los tres enemigos de la nación
La portavoz de Libres e Iguales, Cayetana Álvarez de Toledo, señaló
que a España se le ataca, principalmente, desde tres frentes: el
nacionalista, el de la identidad de género y el de las "falsas
identidades ideológicas". La exdiputada del PP alertó de que "las
ideas que sembraron de muerte a Europa hace años, pues ahora las
tenemos que combatir". Sobre el nuevo feminismo, denunció que "va
creando dos comunidades: una de hombres y otra de mujeres", que "se
empieza a tolerar la discriminación legal" y que hay una
"tergiversación de la propia idea de lo que es un hombre, de lo que
es una mujer, y de las relaciones entre ellos".
Además, Álvarez de Toledo se refirió a esa "mentira" que señala que
el centro-derecha español es "heredero del fascismo" y sólo la
izquierda es "democrática". El objetivo final de todo esto, según la
portavoz de Libres e Iguales, pasa por "la impugnación de la
Transición, de la Constitución y de la figura del Rey".
Posverdad en vena y palos a 'El País'
Le siguió Arcadi Espada, quien dijo que la actual "es una época
cargada de mentiras, de mentiras en un sentido político,
periodístico, sobre todo". El periodista dijo que el golpe al Estado
de los separatistas catalanes es una "operación burda, ruda" de
posverdad, "una de las mentiras organizadas que, supongo, se
estudiarán": "Representan de la A a la Z una serie de mentiras
apoyadas por el dinero público, la radiotelevisión pública,
etcétera. No hay ninguna razón verdadera que justifique la
catástrofe moral y política a la que ha llegado Cataluña".
Además, el columnista de El Mundo dijo que la moción de censura
contra Rajoy es otra "singular, caricaturesca operación de
posverdad, proyectada desde la sentencia malintencionada, aunque
verídica", "torticeramente interpretada por los medios españoles".
La ponente final fue la experiodista de El País Maite Rico,
despedida por la nueva directora del diario de Prisa, Soledad
Gallego Díaz: "El punto y aparte en el país, España, ha coincidido
con el punto y aparte de El País, periódico, mi periódico hasta la
semana pasada". "Acostumbro a hacer valer mi independencia de
criterio, y eso es algo que no gusta a algunos", agregó.
Además, Rico dijo que "los problemas estructurales ahí seguirán,
como la irresponsabilidad y el revanchismo, y la opinión pública,
embelesada con el buen rollito y el talante". "El futuro de España
lo veo, francamente, muy negro", terminó.
La obsesión de controlar RTVE
CARLOS ELÍAS Y XOSÉ SOENGAS El Mundo 6 Julio 2018
Existe un viejo proverbio guerrillero que dice que nadie renuncia a
sus privilegios aunque se demuestre que son injustos, hay que
arrebatárselos. Los políticos españoles tampoco quieren renunciar al
control de RTVE, por eso hay que impedir que sigan teniendo ese
privilegio, porque es una característica propia de los regímenes
totalitarios.
No se trata de criminalizar la política, pero es necesario denunciar
el secuestro que se hace de los medios públicos con el objetivo de
controlar la información y convertirlos en aparatos de propaganda
del Gobierno. El espectáculo formado para elegir presidente de RTVE
evidencia hasta qué punto les interesa a los partidos convertir el
ente público en una plataforma electoral. El comportamiento
vergonzoso que protagonizaron las formaciones políticas demuestra
que son necesarios, y urgentes, muchos cambios en la sociedad para
que los representantes de las instituciones y de los partidos
comprendan que se deben a sus electores. La obligación de los
políticos es garantizar que el bien común prevalezca por encima de
los intereses particulares, y en las propuestas para dirigir RTVE
demostraron todo lo contrario.
RTVE no ha conseguido liberarse de un control político intolerable
en una democracia porque PSOE y PP, los dos partidos mayoritarios,
la han utilizado como aparato de propaganda durante décadas, al
servicio de sus intereses ideológicos, porque son conscientes de que
es una de las mejores armas para mantenerse en el poder. La
democracia modernizó las instituciones, pero la televisión no
consiguió liberarse de los vínculos que establece el poder político
para controlar la información. La estructura de RTVE favorece ese
control porque se basa en unos esquemas que tienen capacidad para
intervenir en la independencia del trabajo de los redactores. La
clave está en la fórmula que se utiliza para el nombramiento de los
cargos directivos, que los convierte en comisarios políticos.
Los vínculos entre el periodismo y la política son habituales y se
hacen más evidentes cuando profesionales acreditados de la
televisión pública aparecen avalando programas electorales. Para
evitar esta dependencia política es necesario que la elección de los
consejeros y del presidente se rija por un sistema donde se
contemplen exclusivamente méritos profesionales, evaluados por
expertos. El hecho de que los nombres propuestos para dirigir el
ente público sean candidatos de un partido ya cuestiona su
neutralidad, con independencia de su trayectoria profesional.
Los autores de este artículo (junto con la profesora Ana María López
Cepeda) hemos publicado en la Revista Latina de Comunicación Social
una investigación titulada El tratamiento de la información política
e institucional en TVE. En este trabajo señalamos que "la estructura
actual de RTVE está configurada por un organigrama que dispone de
los elementos y de los recursos necesarios para garantizar una
información veraz, rigurosa y plural, por eso, para que exista
censura o manipulación, tienen que darse una serie de
circunstancias: que haya redactores dispuestos a transgredir las
normas que se contemplan en el Manual de estilo de RTVE o directivos
con la capacidad de imponer un enfoque que no se corresponde con
criterios periodísticos. Cuando los elementos que han sido pensados
para garantizar la calidad de la información se convierten en
aliados de intereses políticos o ideológicos, desaparece el rigor".
Los medios de comunicación públicos son necesarios en la sociedad
porque cumplen una función insustituible, pero su politización hace
que muchas veces sean cuestionados por los ciudadanos porque no
responden a lo que se espera de ellos. Cuando son parciales, cuando
fomentan la espectacularización o cuando no permiten que las
minorías tengan una presencia cualitativa pierden su razón de ser.
Las protestas del 15-M reclamaban una renovación integral de la
sociedad, con cambios urgentes para modernizar las instituciones y
acabar con la corrupción. RTVE y la Agencia EFE no pueden obviar
esas demandas. Igual que los demás organismos, necesitan modernizar
su estructura y su gestión para garantizar el pluralismo, el rigor y
la calidad de la información. La actual dependencia política de RTVE
impide que muchos de sus trabajadores ejerzan su profesión con
libertad y esto afecta a su prestigio profesional. Las denuncias
sobre censura y manipulación son habituales por parte de los
redactores.
Todos los contenidos que se emiten en RTVE tienen que responder a
las características y a las exigencias que definen los parámetros de
calidad de un servicio público, sin intereses políticos ni
comerciales. Es incomprensible comprobar cómo una parte importante
de la programación de RTVE está adjudicada a productoras privadas,
que tienen unos objetivos comerciales, algo incompatible con las
exigencias de un servicio público. Y lo más preocupante es que
muchos de estos espacios externalizados emiten contenidos
informativos, con el riesgo de perder el control de la línea
editorial.
La BBC ha servido de inspiración para las demás televisiones
británicas, mientras que RTVE no es el mejor ejemplo para nuestros
canales autonómicos, muchos de los cuales han reproducido los mismos
esquemas de la televisión estatal: control político de la
información y adjudicación de parte de la parrilla a productoras
privadas, vinculadas a empresas que, en muchos casos, están
relacionadas con sectores afines al Gobierno.
El deterioro de la televisión pública, especialmente el de los
informativos, repercute en la credibilidad de la profesión
periodística porque la politización de la información se percibe
como una forma de engaño, sobre todo en una sociedad globalizada
como la actual. Ahora, gracias a Internet y a las redes sociales,
han cambiado los modos de consumo de la información. Los ciudadanos
tienen la oportunidad de acceder a otros canales, buscar
alternativas para informarse y comparar las noticias que se emiten
en RTVE con las versiones de otros medios. Así es como se evidencia
la censura, la manipulación y el control de los contenidos.
En la investigación titulada El tratamiento de la información
política e institucional en TVE, que mencionábamos antes, un
análisis de los informativos de 2017 demuestra que "el 74% de los
temas de información institucional tienen un enfoque que favorece,
refuerza o avala la imagen del Gobierno y de los organismos afines".
Los políticos son conscientes del poder que tiene la televisión para
influir en la opinión de los ciudadanos, por eso están tan
interesados en controlar la información para utilizarla en beneficio
propio. ¿Debemos financiar con nuestros impuestos propaganda
política e institucional?
Los datos de nuestro estudio de 2017 reflejan que desde TVE se
pretende dar una imagen positiva del Gobierno y del Estado. En la
información política, el 80% de las noticias referidas al PP tienen
un enfoque favorable para el propio partido, el 11% un enfoque
neutral y el 9% un enfoque crítico. En el caso del PSOE, el 59% de
los enfoques son favorables, el 10% neutrales y el 31% críticos. En
las noticias protagonizadas por Podemos los enfoques favorables
suponen el 17%, los neutrales el 25% y los críticos el 58%. Y los
temas vinculados con Ciudadanos tienen un enfoque favorable el 65%,
un enfoque neutral el 20% y un enfoque crítico el 15%. En el
tratamiento informativo de los líderes también existen diferencias
notables. Los enfoques de Mariano Rajoy son favorables en el 89%,
neutrales el 6% y críticos el 5%; los de Pedro Sánchez son
favorables el 42%, neutrales el 31% y críticos el 27%; los de Pablo
Iglesias son favorables el 25%, neutrales el 41% y críticos el 34%;
y los de Albert Rivera son favorables el 54%, neutrales el 29% y
críticos el 17%.
Con estos datos, ¿qué político va a querer renunciar al control de
RTVE?
Carlos Elías es catedrático de Periodismo en la Universidad Carlos
III de Madrid. Xosé Soengas es catedrático de Comunicación
Audiovisual en la U. de Santiago de Compostela.
Lanzmann en la retina
Elías Cohen Libertad Digital 6 Julio 2018
'Shoah' es una obra monumental, imperecedera; uno de los grandes
documentos del 'siglo de los genocidios'.
No sabemos cómo definirán los historiadores el siglo XX.
Desconocemos si harán hincapié en el gran salto tecnológico, en las
guerras mundiales o en la cultura popular. El filósofo Gabriel
Albiac escribió que será conocido como el siglo de los genocidios, y
ciertamente no seremos capaces de pasar por encima de uno de los
siglos más fascinantes de la Historia sin hablar de los asesinatos
masivos de grupos enteros de personas por el simple hecho de ser o
pensar diferentes.
El Holocausto ha sido y es el paradigma de los genocidios. Sus
horrores nos hacen estar alerta ante cualquier brote totalitario que
surge en las sociedades libres. Un trauma en la conciencia
occidental que ha traspasado generaciones y que ha definido el
sistema de relaciones internacionales y los controles que establecen
todas las democracias para evitar el ascenso de las tiranías o la
represión de minorías o grupos concretos. En consecuencia, es uno de
los temas más tratados, y definitorios, del siglo XX.
Claude Lanzmann, fallecido este jueves a los 92 años, ha sido
testigo y relator de ese capítulo central del pasado siglo: el
genocidio industrial e indiscriminado de 6 millones de judíos en
Europa durante la Segunda Guerra Mundial.
Su documental Shoah, de nueve horas de duración, aclamado
mundialmente y definido como "obra monumental", hizo un íntimo y
crudo ejercicio de introspección en torno a los protagonistas de uno
de los momentos más oscuros de la Humanidad. Sin utilizar ninguna
imagen de archivo, a través de los testimonios de víctimas, verdugos
y testigos, Shoá es un examen de conciencias, un intento de
contestar la sempiterna pregunta: ¿cómo pudo pasar? Es, también, un
documento inapelable y valiosísimo contra la recurrente y siempre
motivada moda de negar o minimizar el Holocausto.
Lanzmann siempre despreció la ficción que se ha hecho sobre el
Holocausto, la consideraba una transgresión. Juzgaba, además, que
imágenes explícitas sobre los crímenes en los campos de
concentración eran una obscenidad y las lágrimas que provocaban en
el público, "un goce, una catarsis". Lanzmann era periodista, y su
obra gira en torno a la difusión de la verdad y no a la creación de
relatos; y se la tomó muy en serio. "Cuando veo lo que he hecho a lo
largo de mi vida, creo que encarné la verdad. Nunca jugué con esto",
llegó a decir. El prestigioso crítico Roger Ebert dijo de Shoah: "No
es un documental, ni es periodismo, ni propaganda ni política. Es un
acto de testimonio".
Más allá del negacionismo que propalan los nazis y los islamistas,
hay un hartazgo por la constante producción de películas, libros y
documentales sobre el Holocausto. Es verdad que muchos
supervivientes, y no sólo Lanzmann, han renegado de La vida es
bella, de La Lista de Schindler o de La Raffle, por no ajustarse a
lo que ellos vivieron o, directamente, por explotar el tema. Son
debates espinosos pero legítimos. Sin embargo, es imposible negar el
valor pedagógico de la ficción y del ejercicio artístico para
explorar un acontecimiento que ha marcado a fuego las conciencias
occidentales.
Lanzmann no hizo ficción, ni buscó concienciar. Sólo descubrir la
verdad sin cortapisas y sin maquillajes. La cámara frente a la
persona, el testimonio sobre el relato, la investigación sobre la
suposición, la historia sobre la especulación. Tan empecinado fue en
su búsqueda de la verdad y del sentido del Holocausto, que el rodaje
de Shoah le llevó once años.
Aunque su origen judío le vinculara al Holocausto, siempre valoró su
distancia relativa con los campos de concentración para rodar Shoá.
De hecho, afirmó que no habría podido hacerlo si hubiera sido
prisionero en alguno de ellos. Aun así, su cercanía a los hechos es
evidente –luchó en la Resistencia francesa contra los nazis–.
Lanzmann tuvo una biografía trepidante. Vivió un romance con Simone
de Beauvoir y, según contó en su autobiografía, no se quedó a vivir
en Israel porque la noche antes de partir se había acostado con
ella. Dentro de esa relación pasional, fue invitado por Jean-Paul
Sartre a escribir en su revista Les Temps Modernes, incluso a
dirigirla.
No obstante, no todo fueron éxitos profesionales, viajes, luchas
políticas y romances. Hace unos meses sufrió la peor de las
pérdidas: la muerte de su hijo de 23 años, de cáncer. Lanzmann dijo
entonces:
La muerte no es evidente. Yo no defiendo para nada la muerte. Sigo
creyendo en la vida. Amo la vida con locura, aunque la mayoría de
veces no sea divertida.
Lanzmann muere, pero su obra sobrevive en nuestras retinas. El
esfuerzo de Lanzmann por informar y tratar de comprender es una
lección esencial para el mundo volátil y ambiguo en el que estamos
atrapados. Su documental Shoah es una obra imperecedera que nos
adentra en los pasajes más tenebrosos del siglo XX.
Cuba, el socialismo y la libertad
El autor reflexiona sobre las opciones políticas que, bajo una
imagen idealizada, proponen sistemas de gobierno que restringen las
libertades y los derechos de los ciudadanos.
Diego Barceló Larran El Espanol 6 Julio 2018
Cojo el metro y veo sentado a un señor mayor con una camiseta que
pone “Viva la revolución-Fight for Freedom” (lucha por la libertad).
La leyenda está ilustrada con la bandera cubana y la imagen del Che
Guevara.
¿Qué es el socialismo? Es la restricción deliberada de la libertad
de acción del ser humano. Unas veces, moderada, como es el caso de
la socialdemocracia. Otras, de forma extrema, como en el comunismo.
Pero no nos confundamos: la socialdemocracia y el comunismo, así
como todas las formas intermedias de socialismo, tienen una
naturaleza común. Solo difieren en el grado en el que restringen la
libertad.
Las demasiadas décadas de propaganda que ya acumulamos no podrán
variar la realidad: Cuba no es un país que respete la libertad de
sus ciudadanos. Eso no es una impresión personal. Por ejemplo, el
Índice de Libertad Económica, que elabora la Heritage Foundation,
coloca a Cuba como el tercer país más represivo, apenas por delante
de Venezuela y Corea del Norte. El Índice de Libertad de Prensa, que
publica la Freedom House, sitúa a Cuba en el puesto 193 de 199
países, por lo que es calificada de “no libre”. A una conclusión
similar llega el Índice de Libertad digital y en Internet, también
de la Freedom House, donde se denuncia, entre muchas otras cosas,
que la proveedora estatal de telefonía móvil (Cubacel) filtra de
manera sistemática mensajes de texto con palabras tales como
“democracia”, “dictadura” y “derechos humanos”.
Qué significado tiene, entonces, el “Fight for freedom” de la
camiseta del señor del metro? Es una burla macabra hacia quienes
perdieron su vida intentado huir de la isla y también hacia los que
cada día sufren la represión castrista. Es otra pieza de la misma
propaganda cínica que sigue intentando dar una imagen romántica a
una tiranía que fue cruel desde su inicio. Fue el mismo Che Guevara
quien dijo públicamente, en las Naciones Unidas, en diciembre de
1964, que “tenemos que decir aquí lo que es una verdad conocida, que
la hemos expresado siempre ante el mundo: fusilamiento, sí; hemos
fusilado; fusilamos y seguiremos fusilando mientras sea necesario”.
Podemos, partido que apoya a Sánchez, persigue las mismas políticas
que se aplican en Cuba y Venezuela
Probablemente sin darse cuenta, quienes comercian con Cuba, quienes
invierten en Cuba e incluso quienes viajan a Cuba, contribuyen, cada
uno en su medida, con el mantenimiento de ese régimen liberticida.
Es habitual que quienes nacen es un país libre, como España (aunque
la nuestra sea una libertad socialdemócrata, con muchísimas
limitaciones), den la libertad por descontada. Que se tome la
libertad como algo garantizado, seguro, permanente. Tan garantizada
y segura que incluso hay quien cree simpático ponerse camisetas con
leyendas que promueven la tiranía. Creo que es un error peligroso.
La libertad es, en algún sentido, como la salud: hay que preservarla
cada día; cualquier desarreglo puede estropearla.
Ojalá estas fueran reflexiones extemporáneas. El principal apoyo de
Pedro Sánchez en la moción de censura que lo ungió presidente del
Gobierno fue Podemos, partido que desea para España las mismas
políticas que se aplican en Cuba y Venezuela. En la medida que
puedan, y mientras los demás los dejen, intentarán avanzar con su
agenda contraria a la libertad. Por eso debemos tener más presente
que nunca el caso cubano. Y recordar que la libertad siempre puede
restringirse, aunque esas restricciones se presenten como “nuevos
derechos”, “cuestión de decencia” o intentos por alcanzar objetivos
nobles como la “igualdad” o la “equidad”.
*** Diego Barceló Larran es director de Barceló & asociados.
******************* Sección "bilingüe"
***********************
Un nuevo paso hacia el Estado plurinacional.
Vicente A.C.M. Periodista Digital 6 Julio 2018
PEDRO SÁNCHEZ EMPEÑADO EN DESTRUIR ESPAÑA CEDIENDO SOBERANÍA E
IMPONIEDNO LA INMERSIÓN LINGÜÍSTICA EN TODA ESPAÑA.
¿habrá alguien que pare a este sujeto en su carrera hacia la
destrucción de España? No solo va a mantener una reunión con los
golpistas tratando de pactar concesiones que nunca serán admitidas
por el Parlamento de España,- no al menos el actual-, como el de la
cesión de Soberanía a quienes pretenden destruir España y declararse
independientes. Este sujeto quiere además institucionalizar aquello
que ha servido como instrumento de disgregación y adoctrinamiento de
algunas partes de la sociedad española en un sentimiento
nacionalista excluyente antiespañol. Se trata de que intenta imponer
la llamada “inmersión lingüística" en toda la Administración pública
dependiente del Estado. Es decir, extender el uso de las lenguas
consideradas cooficiales en aquellas autonomías donde se reconoce su
uso en plan de igualdad con el idioma común de España, el español, a
todas las administraciones del Estado en cualquier lugar de España.
Esta propuesta que además incorpora otras aberrantes exigencias,
pretende de hecho dar rango de igualdad al español o castellano,
hablado por más e 450 millones de personas en el mundo con otras
lenguas minoritarias y locales como el gallego, el vasco o el
catalán, hablado por apenas unos pocos millones. Una reforma
incompatible con el espíritu y la letra de lo que recoge la
Constitución de España que en su artículo 3 indica lo siguiente:
“1. El castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos
los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla.
2. Las demás lenguas españolas serán también oficiales en las
respectivas Comunidades Autónomas de acuerdo con sus Estatutos.”
Esta propuesta entra dentro del paquete de “buena voluntad” que este
okupa monclovita quiere ofrecer al xenófobo antiespañol
independentista Joaquim Torra en la reunión que mantendrán el
próximo lunes 9 de julio en Madrid. Una reunión que el mismo Torra
ha reconocido en el Parlamento autonómico de Cataluña que incluirá
la petición de culminar el proceso de implantación de la República.
Creo que aquellos que siempre han abanderado la defensa de la
legalidad vigente deben hacer todo lo posible para terminar esta
deriva descarada hacia la destrucción de España. Pedro Sánchez no
solo ha accedido al poder de forma obscena apoyado por los enemigos
de España, sino que se presta gustoso a favorecer la disgregación de
nuestra Patria haciendo concesiones a esos enemigos que solo pueden
ser calificadas como Alta Traición. Y creo urgente y necesario el
que esas fuerzas políticas hagan un frente común frente al avance de
este nuevo Frente Popular de una izquierda desquiciada dispuesta a
todo con tal de mantenerse en el poder al que ha llegado por esta
vía de indignidad sin pasar por las urnas.
No debemos consentir que se imponga un programa ilegítimo por no
haber sido votado ni aprobado por la mayoría de los españoles, que
atenta contra la Unidad de España y contra los principios esenciales
de convivencia que nos dimos todos aprobando la Constitución, que
estos miserable prometieron defender, cumplir y hacer cumplir. Una
Ley no puede modificar aquello que la Constitución no contempla y
que, para su modificación, requiere un proceso perfectamente
establecido que estos miserables pretenden saltarse de forma impune.
Es nuestro deber denunciarlo y exigir a esos partidos que ahora se
concentran en luchas intestinas por el poder, que antepongan los
intereses de todos los españoles sobre sus limitados y bastardos
intereses partidistas. Solo les pido que cumplan con aquello que
dicen defender pero que llegado el momento eluden enfrentarse de
forma cobarde y tan traidora como aquellos que pretenden imponer su
modelo demencial de Estado plurinacional. Porque una cosa es el
respeto por las “singularidades” y considerar “La riqueza de las
distintas modalidades lingüísticas de España es un patrimonio
cultural que será objeto de especial respeto y protección”, y otra
cosa es imponérnosla a las bravas en toda la Administración del
Estado, a empresas, a medios públicos de comunicación y otras áreas
de la vida ciudadana. Ni el gallego, ni el Euskera, ni el Catalán
son idiomas oficiales en el territorio global de España, sino solo
en las respectivas demarcaciones territoriales administrativas, que
no naciones, en las que su uso ha sido o es habitual e histórico.
Esta ley, de aprobarse, debería ser denunciada ante el tribunal
Constitucional por incumplir de forma flagrante con el artículo 3 de
la Constitución de España. La pena es que el PP y CIUDADANOS parecen
estar centrados más en sus cuitas personales y de partido que en
hacer de verdadera oposición a estos verdaderos okupas que acabarán
por destrozar nuestra casa común desmontando grifería, tuberías,
cableado y cuadro eléctrico, carpintería exterior, etc., dejando el
inmueble de nuestra nación en un solar inhabitable cuando sean
obligados a desalojarlo.
Solo espero una respuesta acorde con este nuevo desafío de un
partido y un Presidente de Gobierno dispuesto a todo para
“normalizar la vida política” (véase demoler lo hecho por el PP) de
forma ilegítima lo que no se atrevería a plantear abiertamente a los
españoles en campaña electoral.
¡Que pasen si pueden un buen día! Y si mantienen una actitud
indiferente es que nos mereceremos lo que nos pase.
Víctimas de la antipolítica
Carlos Herrera ABC 6 Julio 2018
Dice Vicente del Bosque que a España la eliminó del Mundial el
antifútbol. Ciertamente no he profundizado en el artículo y no he
tenido tiempo de saber si el seleccionador español se refiere al
practicado por la propia selección o al que jugaron sus rivales,
pero el símil me sirve para algunas pinceladas, siendo la más
inmediata que el gobierno sobrevenido mediante moción de censura
también puede ser víctima de una suerte de antipolítica, consistente
en aliarse con los peores socios posibles. Sánchez debe su cargo a
formaciones tan ejemplares como los independentistas catalanes, los
proetarras vascos (incluidos peneuvistas) y los clarividentes del
séptimo día de la ultraizquierda de Podemos. Y a cada uno ha de
cumplimentar; no son formaciones políticas que obren por altura de
miras o preceptos de sensatez común: son usureros de la antipolítica
y quieren cobrar sus ditas como sea y a ser posible pronto. ¿Debemos
conceder a maniobras como las que estamos presenciando la categoría
de «política»? ¿Debemos resignarnos a entender que estas cosas son
las que engendran ese reino de lo posible al que hemos equiparado el
concepto político?
La política no consiste en comportarse como mercaderes
cortoplacistas empachados de fraseología demagógica, barata, simple
y de arquitectura intelectual absolutamente endeble. El noble
ejercicio de la política, que es administrar los recursos comunes
para organizar la vida de las personas y garantizar cierto acceso al
bienestar o, cuando menos, cierta evitación del malestar, es uno de
los patrimonios de la vida relativamente moderna mediante el cual se
han evitado conflictos mayores y se han proporcionado sólidos pasos
a los seres humanos hacia estabilidades sociales imprescindibles.
¿Qué tiene que ver la política, pues, con convertir a Podemos en
muleta de un gobierno como el de Sánchez, o con hacer de racistoides
indeseables como Torra y cualquiera de sus vomitivos portavoces unos
admisibles compañeros de conversación y/o negociación? Sánchez, buen
pagador, no ha tardado dos días en anunciar que trasladará presos
etarras al País Vasco (no así a otros vascos presos por otro tipo de
delitos), en poner a los presos soberanistas a recaudo de los mismos
soberanistas que exigen su libertad, en dar carta de naturaleza a
las exigencias autodeterministas y en entregar, como regalo de
bodas, la radiotelevisión pública a una banda de extrema izquierda
como Podemos que va a transformar la radio y la televisión en un
remedo de publicaciones de periodismo adolescente y sectario al
estilo de aquellas en las que ha ido a buscar a los primeros
candidatos para el cargo de máximo mandatario. Si alguien cree que
ese mangoneo, ese bochornoso espectáculo de mercachifles, ese
intercambio de cromos gastados tiene algo que ver con la política es
que no ha conocido cómo la política puede ser desarrollada por
personas con densidad moral y elevados principios tanto históricos
como circunstanciales poco habituales en los tiempos que corren.
¿Qué clase de memorias podrían escribir individuos como los
protagonistas de este último y prodigioso mes? ¿Alguien cree que
podrían tener algún interés más allá de la morbosa curiosidad por
conocer el grado de desenvolvimiento en el manejo de la simpleza
semántica en la que desarrollan su actividad?
Esperemos impacientes por comprobar hasta qué punto Sánchez puede
ser víctima de la antipolítica de la misma manera que la infausta,
aburrida e inútil selección de fútbol lo ha sido del antifútbol. Los
primeros pasos establecen, en proyección, un panorama desolador en
el que cualquier pestilencia es posible, pero el problema no estriba
en cómo puede perjudicar al «polite» presidente ese chalaneo con lo
peor del parlamentarismo español: la suerte que corra su gobierno es
lo de menos, el problema está en que los perjudicados vamos a ser
nosotros. Lo que luego les pase a ellos debería traernos sin
cuidado.
Las minorías separatistas pretenden acabar con la España
constitucional
Un botón basta como muestra
Miguel Massanet diariosigloxxi 6 Julio 2018
No han tardado las huestes socialistas del gobierno del señor
P.Sánchez en entrar a saco con todo aquello que, de alguna manera,
habían conseguido los miembros del minoritario gobierno de don
Mariano Rajoy, en su tímida respuesta a los embates soberanistas
iniciados por los catalanes y seguidos a distancia, con suma
prudencia, pero sin perder puntada, por los no menos fanáticos y
convencidos abertzales del señor Urkullu que, con más astucia pero
no menos pasión que sus colegas catalanes, no quieren estar tan
lejos de ellos como para renunciar a las conquistas, muchas o pocas,
que éstos pudieran conseguir del Estado español, pero cuidándose de
no estar tan cerca para el caso de que, un fracaso del
independentismo catalán, les pudiera afectar negativamente a ellos
también.
La V columna separatista incrustada en el nuevo gobierno del señor
Sánchez, la “activa”, “resabiada” y partidaria de un estado catalán
independiente, la ministra neófita Meritxell Batet, no ha tardado en
mostrase decididamente partidaria de un acercamiento a los
planteamientos catalanistas, sin tomarse la molestia de disimularlo.
Empezó hablando de una reunión de “gobierno con gobierno” entre
señor Sánchez, presidente del Gobierno español y el señor Quim
Torra, también virtual presidente de una “comunidad”, solamente
esto, del reino español. Únicamente los separatistas catalanes se
habían atrevido a tratar de tú a tú al Gobierno de la nación
española, lo que aumenta la gravedad del desliz de la ministra y
demuestra el estado de disposición del actual gobierno a pactar con
los catalanes, para agradecer “sus servicios”, lo que fuere
necesario para intentar conseguir lo que para ellos, sólo es
disminuir la “crispación” con ellos y, para el resto de españoles
que nos sentimos humillados ante una situación tan rocambolesca, no
es más que un grave acto de deslealtad a la nación española.
Parece ser que, la señora Batet, ha tomado la decisión de entrar a
saco con las varias impugnaciones contra medidas del Gobierno
catalán, evidentemente contrarias a lo dispuesto en nuestra
Constitución, interpuestas por el gobierno del PP ante el Tribunal
Constitucional, todo ello con la evidente intención de la ministra,
según sus propias palabras, de “reducir la conflictividad con
Cataluña”. ¿Cómo casa esta actitud tan tolerante, esta postura tan
negociadora o esta forma de plegarse al plan de actuación de los
soberanistas catalanes, que han venido exigiendo “diálogo” sobre
todos los temas incluidos, como dice el señor Tardá, el tema del
“referéndum del derecho a decidir”, con la actitud valiente y
favorable a la aplicación del 155, manifestada por el señor Sánchez,
cuando apoyó la aplicación de aquella medida constitucional en la
comunidad catalana?, ¿Qué ha sido lo que ha cambiado desde antes de
la aplicación, en Cataluña, de determinados recortes a sus
facultades autonómicas, apenas unas pocas, y la actual situación en
la que han conseguido del Gobierno de España, gracias al apoyo de
los independentistas vascos y catalanes, si es que es cierto que no
les prometieron nada a cambio para conseguir dicho apoyo, que
justifique este cambio de actitud del PSOE? Mejor que no les
apliquen “la máquina de la verdad” no fuera que saltara hecha añicos
ante tantas falsedades.
La siguiente operación, harto significativa, si como es obvio en
esta ocasión los favorecidos han sido los de Podemos, una formación
que ha pasado por momentos de graves conflictos internos, tanto en
el caso del enfrentamiento de P.Iglesias con el señor Errejón; como
ante esta actitud impensable en un directivo de un partido
comunista, consistente en pretender justificar la compra de una casa
enorme, de 600.000 euros, en uno de los lugares exclusivos de la
comunidad madrileña, con el débil argumento de que iba a ser padre y
necesitaban más espacio ¡Así se las ponían a Fernando VII! Y lo más
kafquiano de todo ello: lo someten a referendo de los votantes de
Podemos y, todos estos que se pasan la vida criticando a los
“ricachones” que viven en moradas semejantes a la adquirida por su
líder, deciden que deben hacer una excepción con el caso del señor
de la coleta, porque ¡es un comunista de pro y se merece vivir en
una “chabola” que cuesta 600.000 euros, sin pararse a pensar en lo
contradictorio que llega a ser un dispendio semejante, cuando hay
infinidad de destinos que se les podrían dar a un puñado tan grande
de monedas europeas para mejorar la vida de las personas que se
encuentran bajo el nivel de la pobreza y que, con tanto ahínco,
todos ellos se dedican a defender, cuando critican a los burgueses
de la “casta”.
Lo cierto es, y es fácil advertirlo si uno vive en Cataluña y pulsa
la opinión de la ciudadanía, aquella que es partidaria de separarse
de la España que los “roba” o que “ha encarcelado sin motivo a sus
líderes revolucionarios” de los que piden su libertad. La verdad es
que, cada día se habla menos de los exiliados en Bélgica, Alemania o
Suiza, todos perfectamente instalados, con sus pagas completas y
viviendo la plácida vida de aquellos cuya única ocupación es comer,
divertirse y dormir (solos o acompañados, que a todo tienen derecho
estos padres de la patria catalana) sabiendo que no les va a faltar
el dinero que les llega puntualmente procedente de los impuestos de
los ciudadanos catalanes; que aquel optimismo que invadió al
soberanismo catalán a pocos días de la implantación del 155 y que,
justamente cuando se aplicó esta medida excepcional, vino seguido de
un bajón, un temor y un retraimiento, acompañado con el éxodo masivo
de empresas que cambiaban su sede social a otras partes de España,
otra vez, por extraño que pueda parecer, se puede advertir un
resurgimiento de este catalanismo radical, después de que este
señor, Quim Torra, un simple lacayo del señor Puigdemont, parece que
ha decido emular y superar a su mentor, mostrándose más agresivo,
más incontinente en su forma de expresarse, más propicio a la falta
de respeto hacia las autoridades españolas y, por supuesto, más
atrevido a la hora de formular sus exigencias, convencido de que él
es quien está en posesión de los triunfos y de la debilidad de su
interlocutor, el presidente del Gobierno, que se sabe en minoría y
cuya única salvación estriba en conseguir que los separatistas lo
sigan apoyando para mantenerse, al menos hasta que finalice esta
legislatura, en la poltrona del Gobierno.
Cuando uno ve las encuestas que publican algunos periódicos adictos
a los separatistas y contrarios al anterior gobierno del PP,
respecto a que la ciudadanía se muestra más convencida de que la
economía irá mejorando es posible que no hayan tenido en cuenta, por
formar parte de todos estos crédulos que se tragan sin pensar en
ello todo lo que les tramiten las TV o los periódicos, hoy
completamente dependientes de los partidos comunistas y
secesionistas, los datos que todavía no han repercutido, porque no
han tenido tiempo para ello, como ha sido el caso de los magníficos
datos de empleo del mes de junio que, aunque ahora se los puedan
atribuir los del PSOE, es evidente que se han debido a la buena
actuación de los anteriores gestores de la política de trabajo.
Veremos cuando, como ya se ha venido anunciando, se proceda a
cambiar la reforma laboral que llevó a cabo el PP a instancias de la
CE y se les vuelva a dar carta blanca a los sindicatos para
interferir en la marcha de las empresas, algo que sucedía
habitualmente antes de que las mencionadas reformas se hubieran
puesto en marcha.
Un botón basta como muestra. El cine catalán, del que tantas
maravillas cuentan los críticos catalanes y los medios de
información de la autonomía, un cine clientelar, egocéntrico, donde
lo que prima es pertenecer a la casta separatista o formar parte del
gremio de los progresistas antisistema. Pues bien, el barómetro más
eficiente para valorar la calidad de este cine, del que tanto
presumen los catalanes, no se corresponde con sus resultados
económicos y con el número de asistentes a la reproducción de sus
películas. En el 2017, según un periódico tan nacionalista como es
La Vanguardia, la recaudación del cine catalán se redujo, pasando de
63 millones de euros en el 2016 a 37 millones, casi la mitad del año
anterior, en el 2017. Se podría pensar que fue un tropiezo o que se
debía al encarecimiento del IVA, no obstante este año, 2018, no
parece mejorar porque la tendencia es la misma que en el año
anterior. Un signo que podríamos añadir al del turismo que también
ha bajado aunque los expertos lo justifican diciendo que, aunque han
sido inferior en personas, se ha recaudado más; una pobre excusa
porque todos sabemos que en otros tiempos todos los hoteles de
Barcelona estaban rebosantes, lo que indica que la situación
política que se vive en Cataluña no sirve de acicate para animar a
los turistas extranjeros a que vengan a visitar a los catalanes,
pensando que en tales condiciones de inseguridad, es más prudente no
arriesgarse. ¡Ah! Y resulta llamativo que las nuevas autoridades
autonómicas empiecen a reclamar que, las empresas que abandonaron
Cataluña ante los acontecimientos que dieron lugar al 155, regresen
de nuevo a sus antiguas sedes; cuando lo que sigue sucediendo es que
el éxodo, puede que menos numeroso que en los tiempos de crisis
total, siguen produciéndose como un cuentagotas que, en cualquier
momento, si el problema sigue sin solucionarse, es muy posible que
se vuelva a reproducir un segundo éxodo masivo que acabe de ponerle
la puntilla a la economía de toda Cataluña.
O así es como, señores, desde la óptica de un ciudadano de a pie,
tenemos el convencimiento de que, en lugar de conseguir la reducción
de la crispación que pretende el señor Sánchez, con su actitud de
acercamiento a las posturas catalanas; mucho tememos que consiga lo
que no parece haber previsto, que la crispación que pretenden calmar
de entre los separatistas catalanes, se vaya reproduciendo
progresivamente en el resto de ciudadanos españoles, hartos de que a
los catalanes se les permita ser los que pongan en solfa el progreso
de la nación española. Algún día, señores míos, alguien deberá poner
remedio a un estado de cosas, que ya hace tiempo que viene
amenazando con acabar con la España de la concordia y la vida
apacible, para llevarnos de nuevo a aquellos momentos en que
estuvimos a las puertas de tener que ser redimidos desde Europa.
Ahora dudamos que quisieran hacerlo y es posible que llegue un
momento en que decidan darnos la patada y nos expulsen de ella. Que
nadie dude de que, si se implantan las doctrinas de Podemos, esta
posibilidad puede llegar a ser del 100%.
La mano tendida
Manuel Toscano. vozpopuli 6 Julio 2018
La llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa, tras derribar al gobierno
de Rajoy con una moción de censura hábilmente ejecutada, ha
suscitado tantas expectativas como interrogantes. Se trata de ‘un
cambio de época en la política española’, ha declarado el nuevo
presidente. Y como tal ha sido recibido por una parte importante de
la opinión pública y por los medios afines; de creer a algunos
comentaristas, parecería que la fisonomía del país ha cambiado de la
noche a la mañana.
Como suele suceder, el entusiasmo choca inevitablemente con la
realidad. La pretensión de inaugurar un tiempo nuevo por parte del
nuevo gobierno contrasta con la precaria base parlamentaria que lo
sustenta. El partido del gobierno cuenta con 84 diputados y los
partidos de la oposición controlan la mesa del Congreso, donde
tienen mayoría. Más aún, el triunfo de la moción de censura fue
posible gracias a lo que Santos Juliá ha llamado ‘la coalición del
rechazo’, una inesperada coalición negativa con la que el Partido
Socialista concitó el voto favorable de las fuerzas políticas más
dispares, de Unidos Podemos al PNV, pasando por los independentistas
catalanes y hasta Bildu. Aunque Sánchez ha manifestado su voluntad
de agotar los dos años que quedan de legislatura, eso va a depender
de cómo gestione los apoyos de aliados tan dudosos como inseguros.
Se ha discutido mucho sobre supuestas hipotecas y compromisos
políticos adquiridos con tal fin, que Sánchez ha negado. Sin
embargo, los números mandan.
De ahí la inquietud que generan los gestos y declaraciones del nuevo
gobierno a propósito de la crisis abierta en Cataluña por el
independentismo. Aunque el nombramiento de Josep Borrell como
ministro de Exteriores fue recibido inicialmente como una buena
señal, otras cosas resultan difíciles de entender. Ha habido
críticas por la falta de reacción ante los ataques de los
secesionistas contra el Rey o la tibieza ante el incidente
protagonizado por Torra en el Smithsonian Folklife de Washington. A
la vista del perfil de Torra, quien defiende públicamente ‘crear
otro 1 de octubre’ para hacer efectiva la república, resulta
discutible la decisión de levantar la supervisión de los gastos de
la Generalitat o concederle una entrevista en La Moncloa,
aparentando una normalidad que no es tal. Como preocupante es el
traslado de los dirigentes independentistas procesados a las
prisiones catalanas, llevado a cabo esta semana. Por más que se
presente como una simple medida administrativa, ¿es prudente dejar
su custodia en manos de quienes los consideran presos políticos y
están dispuestos a presentarlos como mártires de la causa? Hablamos
de una administración penitenciaria dirigida por los partidos que
protagonizaron el quebrantamiento del orden legal y que, lejos de
haberse retractado de su aventura ilegal, insisten en mantener el
desafío al Estado.
Se trata de gestos y concesiones que se ofrecen, antes de cualquier
negociación o así se dice, en aras de la distensión y para propiciar
el diálogo con el gobierno catalán y las fuerzas políticas
nacionalistas. ¿Representa esto un viraje político decisivo o se
trata de un mero cambio en las formas que no afecta a lo sustancial?
Lo ocurrido en la sesión de control al gobierno del pasado 27 de
junio resultó bien ilustrativo. Recordemos que Gabriel Rufián, con
el estilo zafio que acostumbra, advirtió al presidente que, por
muchas palmaditas en la espalda, llamadas, comidas y promesas de
cargos que les hicieran, los republicanos no se iban a olvidar de
‘los nueve secuestrados en Estremera, Alcalá Meco y Soto del Real’.
En su respuesta, Sánchez se limitó a afearle que llamará ‘hooligans’
a los ministros Batet y Borrell. ¡Rufián faltando a la cortesía
parlamentaria! Con todo, tras recordar que el nuevo gobierno no
atizará el ‘agravio territorial’, lo más significativo fue el cierre
de su intervención, pues caracteriza el sentido de esa mano tendida
al diálogo: “Ojalá, a partir del próximo 9 de julio, podamos
emprender un camino que restañe muchas de las heridas que, durante
estos últimos seis años, como consecuencia de la falta de criterio y
de estrategia del anterior Gobierno, ha causado la fractura social
que existe ahora mismo en Cataluña”.
Hay que leerlo atentamente. En sede parlamentaria el presidente del
Gobierno no considera oportuno ni necesario rechazar la alusión a
los ‘secuestrados’ en prisiones españolas, dos veces repetida por el
siempre sutil parlamentario de ERC. Más importante aún, Sánchez no
duda en atribuir al anterior gobierno del PP la responsabilidad
exclusiva por la fractura social abierta en la sociedad catalana. La
impresión que deja el intercambio parlamentario es clara: Sánchez
busca el entendimiento con los partidos que lideraron la intentona
separatista, mientras culpa de la crisis catalana al PP. En esa
dirección apunta la recuperación del relato según el cual la
sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut fue el
agravio fundamental que dio alas al independentismo. Son razones
para temer que la política de Sánchez pase por romper el bloque
constitucionalista para explorar las posibilidades de una mayoría
alternativa con populistas y nacionalistas.
Un día antes de la sesión en el Pleno del Congreso salió el auto de
la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo que desestima los recursos
presentados por los abogados de los dirigentes independentistas en
prisión contra el procesamiento dictado por Llarena en marzo pasado.
Hay consideraciones que merecen atención en los fundamentos
jurídicos, como la parte en la que el auto se refiere a ‘cierta
banalización de lo ocurrido’ en la que insisten las defensas, cuando
presentan los sucesos de septiembre y octubre como la defensa de un
proyecto político legítimo mediante una movilización ciudadana
pacífica y festiva. La Sala recuerda que ‘los hechos presentan una
inusitada gravedad en un sistema democrático’, pues se trató de una
sublevación o levantamiento dirigido por las autoridades de la
Comunidad Autónoma, que decidieron de factoderogar la Constitución y
el Estatuto. Es perfectamente legítimo defender públicamente la
independencia de Cataluña, pero es cosa bien distinta ‘utilizar las
vías de hecho para imponer ese criterio de parte sobre la ley
vigente’, vulnerando así los derechos que la ley garantiza a todos.
Y también que la aplicación de la ley penal no puede quedar
suspendida con la excusa de que se persiguen objetivos políticos.
Esa banalización de los hechos es comprensible como estrategia de
defensa de los encausados, pero no debería trasladarse a la opinión
pública, como viene sucediendo en Cataluña. En septiembre y octubre
presenciamos una sublevación en toda regla contra una democracia
constitucional con objeto de imponer el proyecto político de una
minoría al conjunto de la sociedad catalana, violando para ello la
ley y poniendo en riesgo los derechos de los ciudadanos. De ahí las
graves consecuencias penales a las que se enfenetan los políticos
independentistas procesados. Ningún intento de distensión o de
diálogo puede banalizar lo ocurrido o restarle gravedad, como me
temo que algunos pretenden. Y eso significa atribuir la
responsabilidad principal de la crisis abierta en Cataluña a quienes
se levantaron contra el orden constitucional, sembrando la división
en la sociedad catalana. De lo contrario, nada bueno cabría esperar
de ese diálogo.
El doble frente separatista
José Javaloyes Republica 6 Julio 2018
Hay un frente exterior del separatismo en Cataluña, compuesto con
las incidencias generada con el activismo de los prófugos del
entorno de Carles Puigdemont, al que acompaña la injerencia rusa
desde primera hora, propiciada desde labores de las “embajadas” que
el prófugo principal dispuso durante las vísperas de su golpe de
Estado, y que Quim Torra, sucesor suyo en la Presidencia de la
Generalidad, ha dado en reponer como palanca del Procés que prolonga
el mismo golpe.
Pero ese frente exterior se acompaña de una cadencia política
interior, vertebrada desde la propia dinámica de la discontinuidad
en el Gobierno de la Nación, desde el punto y hora en que para
poderse substanciar fue preciso el concurso aquiescente de los
propios partidos del catalanismo separatista. No habrían éstos
votado toda fórmula que suscribiera la continuidad de lo que en
términos de cohesión nacional significaba el PP.
Este otro frente parece que va a suponer más peligro para la unidad
de España que el representado por el laboreo canceroso de las
estrategias rompedoras que operan en el exterior. ¿Qué otra cosa se
le ha perdido a Quim Torra en su inmediata visita a la Moncloa que
no sea repetir su tabarra de la estricta separación de Cataluña que
el adiós España hasta nunca más? Nada ha dejado entrever este
siniestro personaje que no sea su ontológica aversión a España y lo
español.
De otro punto, no puede menos que subrayarse la definición de la
Fiscalía escocesa por las antípodas de belgas y alemanes en lo
tocante a la eventual extradición de Clara Ponsatí, compañera de
fatigas de Puigdemont en la fuga hasta Bruselas.
Macià Alavedra: la condena de los
fundamentos del pujolismo (1)
Carlos Jiménez VillarejoCronica Global 6 Julio 2018
Como es sabido, Macià Alavedra formó parte de los gobiernos de Jordi
Pujol? desde 1980 hasta 1997. Diecisiete años. En este año, se
retira de la política institucional de CiU pero no del
aprovechamiento de sus relaciones institucionales para su
enriquecimiento personal y familiar, como acredita la sentencia del
caso Pretoria. Durante todo ese periodo, en el que se sientan las
bases del actual desafío independentista, comparte gobierno con el
president Pujol que, desde 1980, estuvo defraudando a la Hacienda
Pública. Lo que no impidió que Alavedra dijese del president: "Era
un hombre de austeridad absoluta y le interesaba poco el dinero".
Retirado de la política institucional, es nombrado presidente de
Autopistes de Catalunya, sociedad concesionaria de la Generalitat,
manteniendo, pues, sus estrechos vínculos con el aparato
institucional. Además, presidió las sociedades Abertis Logística y
Kern Pharma.
Desde esta posición de poder económico y, por mediación, político,
realiza las conductas delictivas que describe la sentencia con un
evidente afán de enriquecimiento.
Dice así: "La cuantía de los fondos que durante los años 1997 a 2003
Macià Alavedra percibió por su actividad ilícita ascendió --cuando
menos-- a 6.080.405,41 euros, de los cuales 452.088,88 derivan de la
actividad delictiva cometida por su labor de intermediación en las
adjudicaciones públicas realizadas en las localidades de Sant Andreu
de Llavaneres y Badalona, 185.600 por aparente actividad de
intermediación realizada en el año 2004 en el municipio de
Hospitalet de Llobregat sin que consten el origen y justificación de
dicha comisión, 290.337,69 euros de un pago recibido de Gas Natural;
288.000 euros de pagos realizados por la sociedad BUIC
--instrumental de Lluís Prenafeta a la que más adelante nos
referiremos-- y 9.604,17 euros de intereses percibidos,
desconociéndose el origen último del resto de sus ganancias
--4.854.774,67 euros--, si bien, al igual que las cantidades
anteriores, ocultó su existencia a la hacienda pública española,
eludiendo, por tanto, el cumplimiento de sus obligaciones fiscales".
¿Cómo pagar 60% menos en el seguro del coche? Hace 4 meses decidimos
cambiar la compañía con la que tenemos asegurado nuestro coche
porque estábamos cansados de pagar 480 € al año con Mapfre. Cada vez
que veíamos en el buzón la carta de Mapfre nos poníamos de mal
humor, pero esto dejó de ser un problema cuando descubrimos la nueva
compañía a través de la cual hemos asegurado nuestro coche. Os
contamos cómo hemos conseguido pagar un 60% menos Haz click para
leer este contenido
"Para conseguir su opacidad así como la desvinculación de su origen
ilícito y posterior afloramiento utilizó, en connivencia con su
esposa Doris Malfeito --contra la que no se dirige acusación al
haber fallecido-- y de los también acusados Gloria Torres
Pladellorens y Philip Mc Mahan Bolich, un entramado societario y
financiero constituido por sociedades domiciliadas en territorios
off shore así como por cuentas abiertas en entidades bancarias
andorranas a través de las cuales canalizó sus fondos".
"Para asegurar la opacidad de estos fondos hizo figurar como
titulares de estas cuentas tanto a su esposa como a Gloria Torres,
encargando a Philip Mc Mahan Bolich que, bajo sus órdenes, asumiera
su gestión diaria y directa, función que ejecutó realizando una
gestión muy activa con continuas inversiones en compras y ventas de
valores. Asimismo, es quien organizó, tal y como había planificado
Macià Alavedra, el plan para repatriar a España parte del dinero
--300.000 euros-- que este tenía oculto en sus cuentas de Andorra”.
"Las cantidades que ocultó cada año a través del entramado
societario y financiero que describiremos a continuación fueron las
siguientes:
1997: 2.643.743,46 euros
1998: 1.192.182,05 idem
1999: 9.604,17 idem
2000: 296.450,22 idem
2001: 22.398,94 idem
2003: 88.000,00 idem
2004: 100.000,00 idem
2005: 100.000,00 idem
2006: 700.000,00 idem
2.008: 290.337,69 idem
Total: 5.442.716,53 euros".
A continuación, la sentencia describe puntualmente las estrategias
de ocultación y reinversión utilizadas por Alavedra y sus
cooperadores.
Lo que acabamos de exponer es una brevísima muestra de la actividad
delictiva analizada en la sentencia.
Pero, además de este pronunciamiento condenatorio, siguen pendientes
todas las causas penales contra los miembros de la familia Pujol, la
investigación de la percepción ilícita del 3% por CiU por el juzgado
central número 5 y otros procesos contra dicho partido. El poder
judicial es un instrumento indispensable para perseguir la
corrupción y cualquier otra forma de abuso de poder. Es un elemento
esencial del Estado democrático que nadie, nadie, podrá eludir.
La Guardia Civil le sitúa también a la cabeza de los golpistas
catalanes
Jaume Roures, el multimillonario de extrema
izquierda dueño de Mediapro y fundador de La Sexta, fue detenido en
1983 acusado de colaborar con la banda terrorista ETA
www.latribunadelpaisvasco.com 6 Julio 2018
Jaime Robles Lobo, el multimillonario de extrema-izquierda dueño de
Mediapro y fundador de La Sexta y del diario Público que se presenta
públicamente como Jaume Roures, fue detenido en 1983 acusado de
colaborar con ETA.
Por aquel entonces, Roures, que jamás terminó la escuela básica,
militaba en la Liga Comunista Revolucionaria, un grupo asentado
fundamentalmente en Cataluña de ideología trotskista que mantenía
excelentes relaciones con los terroristas vascos.
Concretamente, Roures fue acusado de colaborar en la constitución
del comando Barcelona y de haber alojado en su domicilio al etarra
lñaki Ibero Otegui, secuestrador del empresario Saturnino Orbegozo,
que fue liberado por la Guardia Civil tras varias semanas de
secuestro y apenas unas horas antes de que fuera a ser asesinado.
Más de 30 años después, y convertido ya en un magnate y especulador
de la comunicación audiovisual gracias a las dádivas que en su
momento le concedió el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez
Zapatero al adjudicarle a dedo la puesta en marcha de La Sexta,
Jaume Roures ha vuelto a toparse con la Guardia Civil. La Benemérita
le sitúa a la cabeza de la estrategia de comunicación diseñada par
la celebración del ilegal referéndum del 1 de octubre de 2017. Así
lo considera al menos en un informe entregado al Tribunal Supremo
que explica que el propietario y fundador de Mediapro, productora de
La Sexta, "podría integrarse en el Comité Ejecutivo" que se plasmó
en el documento 'EnfoCats' en calidad de "profesional experto en el
ámbito de la comunicación".
El informe revela que Roures habilitó un centro de prensa desde
donde el Gobierno golpista catalán informó "sobre el desarrollo y el
resultado del referéndum ilegal" y que Mediapro "produjo el vídeo
[del] 1-O difundido por la cadena de televisión TV3 en el que se
narraron los acontecimientos relacionados con el referéndum, se
enaltecieron a las personas que fueron capaces de hacerlo efectivo y
se difundieron los mensajes que interesaban a la causa
independentista".
Los investigadores detallan que "los máximos responsables del
movimiento independentista son conscientes de que en sus acciones de
comunicación juegan un papel fundamental los medios de comunicación
social" por lo que "contar con el soporte de un proveedor de
servicios audiovisuales de la entidad Mediapro permitiría difundir
el mensaje soberanista a un público mucho mayor".
El documento elaborado por la Guardia Civil detalla tres llamadas,
captadas por los investigadores por orden judicial, en las que el ex
cargo del Departamento de Economía Josep Maria Jové habla con varias
personas sobre la supuesta implicación de Roures en el proceso
soberanista y detalla que pretendían crear un "documental que tenía
que girar alrededor de todos porque se trataba de hacer un documento
para la historia", posiblemente en referencia a la producción de
Mediapro respecto al 1-O.
Recortes
de Prensa Página
Inicial
|