Recortes de Prensa Jueves 2 Octubre 2025
Zelenski
denuncia un ataque ruso a la subestación que alimenta el sarcófago
de Chernóbil
Henar Andrés. Madrid. el mundo. 2
Octubre
2025
Volodímir Zelenski ha denunciado que un ataque ruso con más de 20 drones contra una subestación eléctrica en el norte de Kiev ha provocado un apagón de más de tres horas en el sarcófago donde se custodian los residuos del accidente nuclear en la central de Chernóbil. Para el presidente ucraniano se trata de un ataque deliberado contra una infraestructura crítica.
Por otra parte, Estados Unidos proporcionará a Ucrania inteligencia sobre objetivos de infraestructura energética de largo alcance dentro de Rusia, según han informado a Reuters dos funcionarios estadounidenses, que confirman la información adelantada por Wall Street Journal.
Los funcionarios además añadieron que EEUU ha pedido a los aliados de la OTAN que brinden apoyo similar. La decisión representa el primer cambio de política de Donald Trump desde que endureció su retórica hacia Rusia en las últimas semanas.
Washington ha estado compartiendo inteligencia con Kiev desde hace tiempo, pero esta nueva información permitirá a Ucrania atacar con mayor precisión infraestructuras como refinerías, oleoductos y centrales eléctricas.
9:30
Rusia derriba 85 drones ucranianos
El MInisterio de Defensa de Rusia ha informado de que sus defensas antiaéreas han derribado 85 drones de ala fija ucranianos sobre seis regiones del país y la anexionada península de Crimea, según recoge Efe.
Según el parte castrense, 38 de los aparatos abatidos fueron destruidos en la región de Vorónezh, limítrofe con Ucrania. El segundo mayor número de derribos (13) se produjo sobre el territorio de la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014.
Los drones restantes, añadió Defensa, fueron interceptados y destruidos sobre las regiones de Bélgorod (11), Sarátov (10), Rostov (7), Volgogrado (4) y Penza (2).
Debido al ataque con drones, los aeropuertos de las ciudades de Astracán, Sarátov y Volgogrado suspendieron temporalmente sus operaciones, que reanudaron una vez que cesó la amenaza a la seguridad de los vuelos.
8:38
Zelenski denuncia un ataque ruso a la subestación que alimenta el sarcófago de Chernóbil
Volodímir Zelenski denunció un ataque ruso con más de 20 drones contra una subestación eléctrica en Slavútich, en el norte de Kiev, que provocó un apagón de más de tres horas en el sarcófago donde se custodian los residuos del accidente nuclear en la central de Chernóbil.
"Un ataque ruso contra una de nuestras subestaciones energéticas en Slavútich provocó un apagón que duró más de tres horas en las instalaciones de la antigua Central Nuclear de Chernóbil", dijo en redes sociales Zelenski, que agregó que entre las instalaciones afectadas estuvo el sarcófago.
Zelenski dijo que el ataque, ejecutado por los rusos en varias oleadas para complicar la respuesta ucraniana, fue claramente deliberado. "Los rusos no podían no saber que atacar infraestructura en Slavútich tendría consecuencias para Chernóbil", escribió el presidente ucraniano.
8:30
Zelenski se reunirá con líderes europeos en Copenhague el jueves
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se reunirá este jueves con líderes europeos en Copenhague, según informó en un comunicado la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen.
Zelenski participará en la cumbre de la Comunidad Política Europea, una reunión de alrededor de 50 jefes de Estado y de Gobierno, así como de líderes de la Unión Europea. Además, ofrecerá una conferencia de prensa junto con Frederiksen, indicó el gobierno danés.
8:10
EEUU dará más inteligencia a Ucrania
Estados Unidos proporcionará a Ucrania inteligencia sobre objetivos de infraestructura energética de largo alcance dentro de Rusia, según han informado el miércoles dos funcionarios a Reuters. También añadieron que EEUU está pidiendo a los aliados de la OTAN que brinden apoyo similar, confirmando la información ofrecida por Wall Street Journal.
La decisión representa el primer cambio de política de Donald Trump desde que endureció su retórica hacia Rusia en las últimas semanas.
Washington ha estado compartiendo inteligencia con Kiev desde hace tiempo, pero según el citado medio estadounidense, ahora será más fácil para Ucrania atacar infraestructuras como refinerías, oleoductos y centrales eléctricas con el objetivo de privar al Kremlin de ingresos y petróleo.
Apagón
en la central nuclear de Chernóbil tras un ataque ruso en
Slavútich
Un ataque de Moscú con más de veinte
drones contra una subestación eléctrica en el norte de Kiev provocó
la noche del miércoles un apagón
Antonio Fernández. la razon.
2
Octubre
2025
Un ataque ruso con más de veinte drones contra una subestación eléctrica en Slavútich, en el norte de Kiev, provocó la noche del miércoles un apagón de más de tres horas en las instalaciones de la central nuclear de Chernóbil, incluido el Nuevo Confinamiento Seguro, la estructura que aísla el reactor número cuatro destruido en 1986 y evita la liberación de materiales radiactivos.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, denunció que se trató de un ataque deliberado, ejecutado en varias oleadas para complicar la respuesta de las defensas aéreas ucranianas, y subrayó que Rusia no podía ignorar que golpear infraestructura en Slavútich tendría consecuencias directas sobre Chernóbil. Pese a la magnitud del corte eléctrico, el Ministerio de Energía informó que los niveles de radiación se mantuvieron dentro de los límites de seguridad y que no existió riesgo inmediato para la población.
La ministra de Energía, Svitlana Grinchuk, anunció a las 23:00 horas que el suministro eléctrico quedó completamente restablecido gracias al trabajo de los especialistas, que actuaron con rapidez para reconectar todas las instalaciones. El incendio originado por el impacto de uno de los drones fue sofocado a las 21:07 h por unidades de bomberos de Kiev y Chernihiv, y se instaló un cuartel general operativo en el lugar con la participación de autoridades locales, rescatistas y equipos de emergencia. Para garantizar la actividad básica de la ciudad, se habilitaron “Puntos de Integridad” fijos y móviles, equipados con generadores y sistemas Starlink, donde los ciudadanos pueden cargar dispositivos y recibir asistencia.
Zelenski aprovechó el incidente para alertar de la situación en la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, que permanece parada desde hace ocho días debido a daños en sus líneas eléctricas tras bombardeos rusos en la zona. El mandatario acusó a Moscú de “crear de forma intencionada un riesgo de incidentes radiológicos” y criticó la debilidad del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) frente a la presión rusa.
Además, instó a Europa, Estados Unidos, el G7 y el G20 a imponer sanciones más severas contra Rusia por poner en peligro no solo la seguridad nuclear de Ucrania, sino también la estabilidad de toda la región y del continente europeo.
Europa necesita un mando militar único
para enfrentar la amenaza rusa
Los ejércitos
europeos son ineficaces por falta de coordinación y propone una
fuerza común de hasta 600.000 soldados para 2030
Akila Dbichi.
la razon. 2
Octubre
2025
Mientras los líderes de la UE se reúnen hoy en Copenhague para intentar elaborar un marco relevante de cara a una cumbre más amplia de la Comunidad Política Europea prevista para el jueves, su atención se centrará inevitablemente en cuestiones de defensa y, más precisamente, en la amenaza rusa que se ha vuelto más visible en las últimas semanas. Varias fuentes ya habían confirmado que los drones que penetraron en las fronteras polacas a principios de septiembre eran de origen ruso, lanzados desde bases en Bielorrusia y dirigidos hacia Occidente bajo órdenes estrictas, y en ningún caso por error. Los rusos también habían “advertido” al mundo sobre posibles “grupos de asalto ucranianos que podrían orquestar provocaciones en países de Europa Central”, lo que, en mi opinión, significa que tales grupos podrían aparecer allí, pero lo más probable es que fueran rusos, no ucranianos.
El Kremlin parece satisfecho con el efecto que han producido sus últimos movimientos: han demostrado la poca eficacia de la defensa aérea europea y la falta de voluntad de la OTAN para dar una respuesta contundente. Por lo tanto, a mi juicio, los rusos están dispuestos a continuar, y los europeos deben trabajar en reacciones más adecuadas lo antes posible.
La reunión actual ha sido convocada para reforzar las capacidades de defensa de Europa, aumentar la financiación en defensa, desarrollar su base industrial y crear oportunidades de adquisición conjunta. Todo esto suena importante, pero nada de ello impresionará a los rusos. Los ejércitos europeos son, en efecto, numerosos y parecen estar bien equipados, pero su ineficacia proviene sobre todo de la ausencia de un mando único y una dirección coordinada. Nadie duda de que es necesario lograr la “preparación de defensa europea para 2030”, pero muchas cosas deben hacerse ahora, y lo que se necesita es más audacia que dinero.
En primer lugar, sostendría que los europeos deberían anunciar su disposición a contar con una fuerza militar única para 2030, equivalente a aproximadamente un tercio de las actuales (el resto podría mantenerse bajo mandos nacionales). Esto crearía un ejército manejable y eficaz de 500.000 a 600.000 efectivos, con la mayor parte de la industria de defensa europea trabajando para apoyarlo con armamento de última generación (esto, diría, es un objetivo militar y político perfecto a largo plazo que podría alcanzarse en unos 10 años). El resto de los ejércitos podrían servir principalmente como guardia nacional y fuerza de patrullaje fronterizo.
En segundo lugar, la mayor parte del complejo militar-industrial debería subordinarse a las necesidades de este mando único (o, mejor dicho, unido) europeo y concentrarse en armamento moderno y municiones, sobre todo drones y misiles de alcance medio. Mientras tanto, otros 1.000 tanques que el Bundesministerium der Verteidigung (Ministerio de Defensa alemán) ha encargado ahora a Rheinmetall parecen demasiado obsoletos para considerarse vitales en estos tiempos. Europa no puede permitirse hoy tener 27 ejércitos ni 27 industrias de defensa; debería haber solo uno si el Viejo Continente quiere modernizarse de manera relevante.
En tercer lugar, hasta que este ambicioso diseño se materialice, los europeos deberían conformar una fuerza modesta concentrada en defensa aérea y operaciones antiterroristas, desplegada en los países que hacen frontera con Rusia y Bielorrusia. Una vez más, debería contar con un mando único y con autorización para repeler cualquier movimiento agresivo sin esperar órdenes de la OTAN o de los cuarteles generales de la UE. El derecho a la autodefensa es un derecho básico de cualquier país soberano, y quienes dicen que se desconoce cómo respondería Rusia, por ejemplo, si un país de la OTAN derribara uno de sus aviones, están equivocados: un país de la OTAN lo hizo en 2015 y no hubo represalia militar rusa.
En resumen, diría que los tiempos desafiantes, tiempos que representan un “peligro claro y presente”, son los mejores para alimentar un nuevo sentido de unidad. La Europa contemporánea hunde sus raíces en la tragedia de la Segunda Guerra Mundial, y sería adecuado usar otra guerra (que, gracias a Dios, sigue siendo regional) como la ocasión perfecta para promover una “unión aún más estrecha” en la defensa europea. Esto, a mi juicio, puede ayudarnos a todos a prevenir una escalada militar, ya que la Rusia actual solo entiende el lenguaje de la fuerza. O, mejor dicho, calcula de manera magistral si la fuerza es real y si puede ser utilizada sin previo aviso…
¿Estamos en guerra con Rusia?
Antonio
Alonso Marcos. el debate.
2 Octubre 2025
La semana pasada tuve la oportunidad de escuchar a diversos militares, algunos en la reserva, otros en activo, y todas las conversaciones repetían el mismo estribillo: «Cuando estemos en guerra con Rusia…». Irremediablemente, antes de acabar la frase, otro interlocutor le cortaba también con otro estribillo, igualmente repetido: «¡Ya estamos en guerra contra Rusia!».
Allá cada cual y sus opiniones, sobre quién empezó todo esto, sobre si eso está bien o mal,… El caso es que, queramos o no, sin que nadie desde el Gobierno lo haya declarado oficialmente, esa es la realidad: España está en guerra contra Rusia.
¿Desde cuándo? Pues esto es como el otoño. De repente, llega el frío y dejamos la ropa de manga corta. Ha sido poco a poco, casi sin darnos cuenta, pero ya estamos ahí. Nada más comenzar el siglo XXI, EE.UU. empezó a retirarse de los Tratados que componían la arquitectura de seguridad colectiva. Obama y Medvedev intentaron resistir ese movimiento cuanto pudieron, lanzando el Tratado Nuevo START –firmado en 2010—, pero los demás –el ABM, el INF, el FCE entre otros— fueron decayendo. Ahora mismo estamos en un punto de la Historia en que la situación tan pronto puede desescalar y desinflarse este enorme pastel que tenemos delante como empezar una serie de ataques cinéticos como los que vemos en Rusia o Ucrania. El tratado Nuevo START debe renovarse en marzo de 2026, y veremos si es el inicio de una paz –y en qué condiciones— o un paso más hacia la guerra abierta y declarada.
La situación actual recuerda mucho a esos tiempos de la Guerra Fría en que las superpotencias se atacaban, pero no directamente sino a través de proxies, de actores subsidiarios, a quienes se subcontrataba para hacer el trabajo sucio. Fue, también, la época dorada del espionaje, en todas sus facetas. La contrainteligencia estaba siempre ojo avizor para atajar los planes del enemigo, los agentes de inteligencia hacían sus análisis y prospecciones, los agentes de campo hacían sus operaciones encubiertas, que podían ir desde la obtención de documentos clasificados del enemigo o el reclutamiento de agentes extranjeros, hasta sabotajes o asesinatos selectivos.
Ese ambiente de Guerra Fría en el que nos movemos ahora tiene sus ventajas, entre las cuales la principal es, sin duda, que se evita un choque directo entre potencias nucleares. No lo olvidemos, esto no es una guerra de Rusia contra Ucrania, sino que es una guerra entre Rusia y la OTAN que hoy se desarrolla fundamentalmente en territorio ucraniano, aunque esto bien podría cambiar en cualquier momento.
Así lo advirtió Putin en su famoso discurso de la Conferencia de Seguridad de Múnich, donde sin pelos en la lengua que ellos percibían la expansión de la OTAN como una amenaza para la seguridad de Rusia, que el propio Werner, Secretario General de la OTAN, había declarado públicamente que la promesa de no extenderse más allá de Alemania constituía una clara muestra de las garantías de seguridad que la OTAN le daba a la Unión Soviética.
Cualquier observador de la realidad internacional podría elaborar una lista y ver elementos de lo que se llama la guerra híbrida por doquier, por parte de un lado y de otro: suministrar inteligencia de señales y de satélite a tu enemigo, realizar sabotajes –como incendiar una fábrica de armas— en territorio de tus aliados, realizar ciberataques, lanzar campañas de propaganda, intentar manipular a la población de los aliados de tu enemigo,… Todas ellas son acciones que mantienen esta guerra en la que estamos contra Rusia en un perfil bajo, y quizás sea mejor así.
Todo con tal de evitar un enfrentamiento abierto con Rusia, pues ¿estamos seguros de que les podríamos ganar? ¿A qué precio? Es cierto que ellos llevan luchando en Ucrania desde 2014 y no han podido con ellos, pero no nos engañemos, los ucranianos no han luchado solos, ni con sus solas fuerzas, ni con su dinero; Ucrania es un estado sostenido por Occidente. ¿Cuánto tiempo más seguirá aguantando?
Esperemos que esta situación se encauce pronto y que todas las conversaciones de paz que se están dando –aunque no se hagan públicas— fructifiquen, como así lo han expresado en numerosas ocasiones tanto el Papa Francisco, como su sucesor, León XIV –también muy implicado en la resolución de dicho conflicto—.
El robo
del Estado
Pedro Corral. okdiario.
2 Octubre 2025
Pedro Sánchez siempre se pilla los dedos en la hemeroteca como un ratón en la trampa con queso, que es a su vez el producto con el que intenta dárnoslas siempre a los españoles. En 2018 dijo aquello de que «un Gobierno sin presupuestos es tan útil como un coche sin gasolina». Y añadió que la aprobación de las cuentas para el ejercicio entrante «era la primera y principal obligación de un Gobierno, porque sin presupuestos no hay nada que gobernar».
Aquello era a cuento de que Mariano Rajoy se retrasaba ese año, como en 2017, en la presentación de los presupuestos ante el Congreso, lo que le está sucediendo a él ahora. La diferencia es que Rajoy cumplió presentando y aprobando los presupuestos todos los años que estuvo al frente del Gobierno.
Sánchez, por el contrario, lleva sólo tres presupuestos aprobados en sus siete años en La Moncloa, además de dos prórrogas de los aprobados por Rajoy en 2018. Y ya veremos si presenta y aprueba finalmente los de 2026.
Lo del coche sin gasolina es en realidad una imagen engañosa, marca de la casa. Porque el coche tiene gasolina, como el Gobierno tiene los ingresos tributarios obtenidos de las familias, los autónomos y las empresas. Lo que no tiene el coche es volante de dirección, como no lo tiene el Gobierno sin presupuestos, y en consecuencia tampoco el Estado.
Esto hace incluso más injustificable que un Gobierno haga uso de la gasolina que aportamos los españoles sin decir claramente a dónde va, si es que lo sabe. Aunque en el caso de Sánchez no cabe pretextar ignorancia. Él va donde sus socios lo lleven, siempre que se cumpla una condición: dejar atrás un páramo de tierra quemada donde no vuelva a crecer la democracia, la separación de poderes ni la alternancia política.
Lo señalaba hace ya casi nueve lustros -que son cinco años cada uno, con permiso del ministro Urtasun- el Tribunal Constitucional, en su sentencia 27/1981, con un símil parecido al automovilístico: la Ley de Presupuestos es el «vehículo de dirección y orientación de la política económica que corresponde al Gobierno, cuando elabora el Proyecto y en la que participa el Parlamento en función peculiar».
Mal está que Sánchez hurte a los españoles la posibilidad de conocer el uso que pretende dar a sus impuestos a través de la ley presupuestaria. Peor aún es que hurte al Congreso y al Senado, en su enésimo desprecio a la democracia parlamentaria, la posibilidad de debatirla democráticamente, incumpliendo el artículo 134.3 de la Constitución, como hizo en 2020 y en 2024, que obliga al Gobierno a presentar los presupuestos al menos tres meses antes de la expiración de los del ejercicio anterior.
Entre tanto hurto, lo que se ventila de fondo, se cumpla o se incumpla este precepto constitucional, es el robo del Estado por el aparato sanchista. Poner las manos sobre los ingresos fiscales sin el ejercicio democrático que supone debatir en el Parlamento sobre la dirección y orientación de la política económica o supeditar ésta al capricho de un prófugo de la Justicia -a cambio de siete votos- significa sustraer el Estado con el depósito lleno de gasolina, tunearlo con los colores, siglas y símbolos del partido del Gobierno, y darse a la fuga por una carretera democráticamente desierta, camino de la frontera de la inseguridad jurídica y la arbitrariedad.
Esta huida hacia adelante comportará además nuevas subidas fiscales, y ya van más de noventa entre impuestos y cotizaciones sociales, o la creación de otros nuevos. Todo ello para pagar a sus socios el desorbitado alquiler de La Moncloa -zona tensionada, como se dice en la Ley de Vivienda- por la corrupción que asfixia a Sánchez, por la ruptura de la caja común de Hacienda y por la liquidación al modo trilero de la deuda de Cataluña, lo que obligará a exprimir más aún a los ciudadanos de las regiones más pobres a cambio de peores servicios públicos.
Todas las decisiones de Sánchez van encaminadas a garantizar el pago del combustible proporcionado por sus socios, tan adulterado que provoca que el coche ande cada vez más renqueante, a punto de griparse, con los servicios públicos dependientes del Gobierno en imparable descomposición.
A esto se suman otras resoluciones no menos arbitrarias como la de no aprobar los 230 millones de euros prometidos para financiar la Ley ELA y, en cambio, autorizar un gasto de 125 millones para subvencionar a medios de comunicación. Sánchez siempre está en lo importante, pero no en lo importante para los ciudadanos, sino para su propia supervivencia política.
Lo más inquietante es pensar que ese coche en fuga está dirigido al volante por quienes tienen como único objetivo precipitarlo al vacío por distintas razones. Hablamos de Sánchez, pero también de Puigdemont y Otegi. El cerco judicial a su entorno familiar, su partido y su Gobierno por la corrupción, empujan a Sánchez a lanzarse a una loca carrera por una carretera del infierno, pero del infierno para los demás, para cuantos se opongan a su poder y su impunidad, con el consiguiente deterioro de la convivencia democrática.
Ni siquiera se perdona a los muertos por haber contrariado al caudillo sanchista, como ha sucedido con Javier Lambán, al que sus propios compañeros, otrora obsequiosos en melindres y zalamerías hacia su persona, negaron el aplauso cuando un Jorge Azcón a la altura anunció en las Cortes de Aragón su reconocimiento póstumo con el premio Gabriel Cisneros a los valores democráticos.
Al lado de Sánchez, con las manos al volante también, Puigdemont y Otegi (nuestras Thelma & Louise del supremacismo ultranacionalista) dirigen al precipicio, alocada pero determinadamente, la chatarra en la que el PSOE ha convertido el Estado bajo el sanchismo.
En esta carrera imparable hacia el abismo, el propio Sánchez se encarga de inutilizar los frenos constitucionales y desactivar los mecanismos de salvaguarda judiciales, con Conde-Pumpido ingeniando chapuzas bajo el chasis con la amnistía; el imputado fiscal García Ortiz, a quien se acusa de hacer «puentes» bajo el salpicadero a favor de Sánchez y contra la oposición; y el inefable Bolaños, echando arena en el carburador de la división de poderes para que no se distinga entre el ejecutivo domesticador y el judicial indomesticable.
Con este panorama de achatarramiento institucional -en el que España se vende por piezas en un nuevo patio de Monipodio, se desintegra como nación de ciudadanos libres e iguales y se desencaja del eje tradicional de nuestra política internacional con aliados cada vez más siniestros como Hamás-, cabe que Sánchez se pregunte: ¿Si los españoles ya no tienen Estado, para qué quieren unos presupuestos generales?
Vota,
calla y paga
Manuel I Cabezas. Vozpópuli.
2 Octubre 2025
En 2015, en el contexto de un año con numerosos procesos electorales sucesivos (elecciones andaluzas, marzo; municipales y la mayor parte de las autonómicas, mayo; catalanas, septiembre; y las generales para el Congreso y el Senado, diciembre), publiqué una texto propedéutico, titulado con el aforismo latino “Facta, non verba” (“Hechos, no palabras”). En él argumentaba sobre cómo hacer un uso informado, razonado y responsable del voto, al tiempo que proponía que, antes de depositar el voto, había que tener en cuenta lo que han hecho los candidatos (“facta”) y no lo que dijeron que iban a hacer (“verba”). En general, la palabra y las promesas de los políticos son papel mojado o, como reza la frase lapidaria, atribuida a Luis de Góngora, son cera y no acero.
Esta forma de actuar responde al consabido axioma de la democracia formal española: “Tú, vota, calla y paga”. Hoy, por lo tanto, no vamos a ocuparnos de la penuria de actos o de los actos lesivos (“facta”) de la casta política contra los votantes. Tampoco vamos a centrarnos en la permanente falta de palabra de la casta política, algo habitual en ella, sino en su incapacidad para elaborar un discurso coherente y cooperador, preñado de contenido. Dicho con otras palabras, vamos a ocuparnos de su analfabetismo.
Las reglas de una buena comunicación
Voy a recordar las 4 reglas de una buena producción lingüística, formuladas por el filósofo del lenguaje, el inglés H.P. Grice. Además, daré algunos ejemplos concretos y reales, para ilustrar la prostitución y el mal uso o el uso no comunicativo del lenguaje por parte de la casta política española, de alta cuna o de baja cama. Para ello, basta con consultar la hemeroteca de los últimos años.
La primera, “regla de la calidad”, postula la obligación de no decir aquello que creemos que es falso. O, dicho con otras palabras, no se debe verbalizar aquello para lo que no se tienen pruebas objetivas y fehacientes o, simplemente, aquello que es un bulo o una falsedad. Basta con consultar la hemeroteca para tener que levantar acta de las mentiras, de las medias verdades y de los bulos que toda la casta política propala en los medios de comunicación. Ahora bien, entre todos los que no aplican esta primera regla, además de sus ministros, destaca Pedro Sánchez, hijo aventajado, como Pinocho, del viejo carpintero Jeppetto.
Es tal la cantidad y la frecuencia de sus mentiras, de sus contradicciones (“cambios de opinión”, dice él) y de sus bulos que le viene como anillo al dedo las palabras que, en 2010, le dedicó Felipe González a Zapatero: “Rectificar es de sabios y de necios tener que hacerlo a diario”. En efecto, Pedro Sánchez pasa su tiempo (mañana, tarde y noche) en rectificar lo rectificado. La solidez y la fiabilidad de su palabra son muy veletas, a pesar del ejército de asesores (varios cientos) que le preparan, cada día, en La Moncloa, lo que tiene que decir y hacer.
Según la segunda regla, “regla de cantidad”, al hablar o escribir, uno no debe enrollarse sino ir al grano. Esta regla la tenía muy clara Baltasar Gracián cuando escribió en el aforismo “105. No cansar. Lo bueno, si breve, dos veces bueno; incluso, lo malo, si poco, no tan malo. (… y añade:) El hombre largo (no tanto en estatura como en discurso) rara vez es sabio. (Y termina afirmando:) Lo bien dicho en seguida se dice”. La casta política tampoco es diligente en el respeto y aplicación de esta regla en su comportamiento lingüístico.
Si no se aplica esta regla se corre el riesgo de producir textos centrados en la “función fática” (R. Jakobson). Los mensajes fáticos no vehiculan información, no aportan nada sino que sirven simplemente para mantener la conexión entre emisor y receptor, como es el caso, por ejemplo, entre dos personas enamoradas; o para impedir que el interlocutor pueda hablar, en el caso de un debate televisivo o radiofónico. En el caso del Parlamento, la presidenta es muy condescendiente y generosa con los de su cuerda; y muy intransigente, cicatera y tiquismiquis con los miembros de la oposición, a los que corta el micro. Cf. Hemeroteca.
La tercera regla, “regla de la relevancia” obliga, en el caso de una entrevista, de un debate o de una intervención parlamentaria a no irse por las ramas. En efecto, en los debates y en las sesiones de control en el Parlamento, un parlamentario puede hacer una pregunta concreta y Pedro Sánchez o cualquiera de sus ministros sale por peteneras, se va por los cerros de Úbeda y se instala en Babia. Por ejemplo, un diputado puede preguntar: “¿Cómo piensa gestionar el Gobierno la inmigración ilegal?”. Y el ministro del ramo, responder: “Uvas traigo”.
Así son los debates parlamentarios españoles: genuinos debates de besugos, que responden a esta lógica parlamentaria tan española: tú, pregunta lo que quieras, que yo te responderé lo que me dé la gana. Además el Parlamento es un “mentidero”, donde circulan mentiras y mentiras y ... Por eso, mi amigo Anselmo Martín lo llama “Parla…miento”. Cf. nuevamente la hemeroteca.
Ministros silentes
Finalmente, la cuarta regla, “regla del modo o manera” se refiere a la forma en que se expresan las ideas. Hay que cuidar y mimar las formas lingüísticas, evitando la oscuridad, la ambigüedad y el desorden en la producción lingüística. Ejemplos flagrantes de violación de esta regla los tenemos cada vez que abren la boca Yolanda Díaz, alumna aventajada del actor Antonio Ozores o María Jesús Montero (la ministra “Mopongo”) o cualquiera de los ministros de “Pedrisco” Sánchez (cf. la sonoteca de videos que circulan por las redes sociales).
Más que ministros y presidente del Gobierno, parecen chonis, poligoneros y marujones. A la mayor parte de los ministros y diputados, la ciudadanía no les pone cara y ojos. Nunca se les ha oído hablar. Son silentes: están sólo para repetir como papagayos el argumentario cotidiano y votar lo que diga el PSOE por la boca del Hermano Mayor, Pedro Sánchez, “el puto amo”, y para aplaudir como focas. ¡No dan miedo! ¡Dan asco!
Discursos ortodoxos
En la sociedad actual, hay una serie de profesiones cuyo instrumento de trabajo es el obligado y esmerado uso de un exquisito y ortodoxo lenguaje. Entre ellas, por citar sólo algunas, están la del juez, la de la docencia, la del periodismo,… y también la de la política. A partir del análisis de cómo se expresan los miembros de la casta, estamos obligados a concluir que son unos genuinos analfabetos funcionales. Son incapaces de aplicar los principios de Grice, base y fundamento para construir discursos ortodoxos, cooperadores (fáciles de comprender) y preñados de contenido y no de contradicciones y mentiras. Son auténticos deficientes lingüísticos.
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Luis
Hens, la última víctima de ETA.
Fernando Jáuregui.
diariosigloxxi.
2 Octubre 2025
MADRID, 1 (OTR/PRESS) Cuando, en 1983, el ciudadano francés Segundo Marey fue secuestrado, confundido por Interior con un miembro de ETA, la banda terrorista desarrollaba casi sin límites su actividad criminal. Un error, el de Segundo Marey, que sería seguido por otros excesos de los Grupos Antiterroristas de Liberación, los GAL, puestos en marcha desde el Gobierno español.
Luis Hens era, entonces, un policía que operaba en el País Vasco, puesto difícil y peligroso donde los hubiera: me contó muchas penalidades del momento: un andaluz como él siempre vivía allí, en aquel ambiente infectado por ETA, bajo sospecha. Un día, él y otro agente, el gallego José Ramón Corujo, recibieron la orden de custodiar, en una desvencijada cabaña en Cantabria, a aquel preso, al que les presentaron como un terrorista etarra: Segundo Marey, un hombre aterrado. Eso hicieron, cumplir una orden recibida desde la superioridad.
Cuando se descubrió que Marey nada tenía que ver con la banda, el revuelo fue, lógicamente, grande. En 1998, el propio ex ministro del Interior, José Barrionuevo, y el ex secretario de Estado de seguridad, Rafael Vera, junto con otros ex altos cargos del Ministerio, fueron sentenciados por la organización y financiación del secuestro de Segundo Marey, con el agravante de que, cuando supieron que no era miembro de ETA, prolongaron su encierro, llegando a amenazar con asesinarle si Francia no liberaba a cuatro policías españoles detenidos cuando trataban de secuestrar a un presunto miembro de ETA. Luego, la historia se ha contado de muchas maneras y seguramente habrá muchas explicaciones, pero los hechos, judicialmente, están descritos así.
Naturalmente, ni Hens ni Corujo sabían nada de esto. A ellos, personas sencillas, policías de base, les habían ordenado vigilar y custodiar a un etarra y eso hacían, cuidando mucho, me consta, de no maltratar al detenido. Ambos perdieron la carrera y todos los derechos anejos tras ser condenados a cinco años de prisión. Hens jamás se recuperó de aquel golpe que le condenaba a la indignidad, ni del daño que hizo al secuestrado, al que acudió años después a pedir perdón en el sur de Francia. Me hizo prometerle que un día escribiría su historia y en eso andaba yo ahora, le repetí hace algunos días, cuando me informó de su grave enfermedad.
Pero Luis Hens murió hace pocas horas en Málaga, víctima de un cáncer que hundió su existencia en los dos últimos años. Hasta entonces, él, con su mujer, daba clases de equitación y con eso se ganaba, a falta de cualquier pensión, la vida. Porque su castigo oficial de réprobo ha durado hasta ahora. Ya se sabe que son los más débiles los que más y primero pagan.
Creo que nunca dejó de esforzarse por reivindicar su carácter y función de policía. Había nacido en Córdoba, era un hombre acostumbrado al campo, sencillo, con una tragedia a sus espaldas, el error de sus superiores con segundo Marey, un error que siempre pesó sobre él como una losa insoportable.
Ahora Luis ha encontrado la paz que perdió hace tantos años, cuando fue enviado a una comisaría de Bilbao. Yo le prometí, en sus últimas horas, contar toda la historia; un historia que tiene muchos flecos desconocidos u ocultados. Y aquí sigo, recopilando datos que se te clavan como puñales, como todas las injusticias. Creo que Luis es, en realidad, la última víctima indirecta de ETA, de aquellos años de oprobio, aunque la banda nunca atentase contra él.
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