Recortes de Prensa  Jueves 15 Septiembre 2022

Tras liberar Járkov, las fuerzas ucranianas centran ahora su ofensiva en Donetsk

El Confidencial. 15 Septiembre 2022


La contraofensiva ucraniana continúa. Tras liberar la mayor parte de la región oriental de Járkov, las fuerzas de Zelenski se centran en su ofensiva en la vecina provincia de Donetsk (una de las dos regiones que componen en Donbás), donde intentan avanzar hacia Limán, mientras que las tropas rusas intentan de nuevo ocupar el estratégico nudo logístico de Bajmut.


El presidente de Rusia, Vladímir Putin, se reúne este jueves en Uzbekistán con su homólogo chino, Xi Jinping, quien ha salido por primera vez en más de dos años de China y que ha tratado de mantener un delicado equilibrio con respecto a la campaña militar rusa en Ucrania y las sanciones económicas occidentales.


Por otra parte, el Consejo de la Unión Europea (UE) acordó este miércoles prolongar seis meses más, hasta el 15 de marzo de 2023, las sanciones impuestas a personas y entidades consideradas responsables de socavar o amenazar la integridad territorial, soberanía e independencia de Ucrania.


Las claves del momento:

Zelenski visita la ciudad de Izium, en la región de Járkov

Ucrania alerta de posibles inundaciones en Krivoi Rog tras un ataque ruso a infraestructuras hidráulicas

La UE prolonga las sanciones individuales por amenazar a Ucrania

La ONU ve "ingenuo" pensar que la paz en Ucrania está cerca

EEUU y otros países perdonan los pagos de deuda a Ucrania hasta 2023


Hace 1 minuto 09:30

Ursula von der Leyen llega a Kiev

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha llegado a Kiev. Ha publicado en su cuenta de Twitter que se reunirá con el presidente Volodomir Zelenski y con el primer ministro de Ucrania, Denis Shmyhal.


Hace 1 horas 2 minutos 08:29

Algunas unidades rusas estarían "huyendo" del país, según Reino Unido

El último informe de la Defensa británica afirma que "algunas fuerzas rusas están huyendo en aparente pánico", dejando atrás sus equipos. También explica que Ucrania continúa consolidando su control sobre la región de Járkov, recientemente liberada.


Hace 1 horas 44 minutos 07:47

Zelenski sale ileso de un accidente de tráfico en Kiev

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se ha visto involucrado este jueves a primera hora en un accidente de tráfico en Kiev cuando regresaba de la ciudad de Izium, aunque ha salido ileso.


Así lo ha confirmado el portavoz del mandatario ucraniano, Sergei Nikiforov, quien ha detallado en un comunicado en Facebook que un vehículo se ha estrellado contra el convoy presidencial.


Putin acorralado

EMILIO CAMPMANY. libertad digital. 15 Septiembre 2022

Conforme Kiev va siendo capaz de convertir en éxitos la ayuda militar que recibe de Occidente, el foco se va girando hacia Moscú. Son muchas las cosas que están pasando en Rusia, suicidios de magnates, críticas a Putin por parte de un número muy significativo de concejales y últimamente también hay gruesas críticas por parte de los activistas favorables a la guerra.


Se dirigen básicamente al Alto Mando ruso, al ministro de Defensa y a los generales que dirigen la "operación militar especial". Pero, en parte, también tienen por objeto a Putin. A los militares se les acusa de incompetencia culpable, de no saber dirigir a un ejército al que no debería costarle mucho derrotar al ucraniano y que, en condiciones normales, nunca podría ser derrotado por éste. A Putin se le critica por no decretar la movilización general y por no recurrir a las armas no convencionales que Rusia posee. Hay aquí una evidente contradicción. Si el problema es de dirección, no hay por qué incrementar los medios pues debería bastar con sustituir a la cúpula. Y si el problema es que no se emplean todos los medios de que se disponen, la culpa no es del Alto Mando, sino de quien le niega los medios necesarios para vencer.


Sea como sea, la pregunta es qué hará Putin ante todo esto. Quienes ahora le critican integran el núcleo de sus apoyos políticos entre la población. Si los pierde, se queda sin base social en la que fundar su poder. Lo lógico, por tanto, es que intente atender sus exigencias y tratar de ganar la guerra por todos los medios. Pero esto, que parece la reacción natural, no es tan fácil. La movilización general sometería a toda la ciudadanía a graves tensiones. Es posible que la mayoría de los rusos quiera ganar esta guerra por encima de todo, pero son muy pocos los dispuestos a arriesgar sus vidas para lograrlo. Recurrir a las armas nucleares, limitándose por ahora a las tácticas, las que se emplean en el campo de batalla contra las fuerzas enemigas sin recurrir a las estratégicas, las que se utilizan para planchar ciudades, es una opción. Pero, ¿y si Occidente arma al ejército ucraniano con armas similares? Y es probable que lo haga si se piensa que Occidente no puede permitir sentar el precedente de que Rusia se apropie del territorio de otra nación abusando de las armas nucleares de las que la agredida carece. Por otra parte, y esto vale para toda escalada militar, cuántos más medios comprometa Putin en la guerra, más humillante será la derrota de su ejército. Entonces, quizá lo mejor para él fuera buscar una salida diplomática honorable, conformándose con la anexión definitiva de Crimea, por ejemplo. Pero entonces, ¿cómo manejar la ira de los grupos que respaldaron y jalearon la invasión? Tampoco esta opción es halagüeña, mucho más si ve obligado a reprimir con dureza esta oposición, encabezada por gente que supuestamente piensa como él.


Así pues, parece que Putin está en un callejón sin salida, sin fuerza para reprimir a concejales pacifistas, sin capacidad para atender las exigencias de sus más acérrimos partidarios y sin autoridad para reprimir las críticas que le hacen por no ser suficientemente duro. ¿Qué hará finalmente? Buena pregunta.


La operación especial, el eufemismo de Putin para invadir Ucrania que se ha vuelto contra él
Javier Arias Borque. libertad digital. 15 Septiembre 2022

Rusia inició su invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero. Al mismo tiempo que sus militares iniciaban las incursiones en el país vecino, los mandamases del Kremlin levantaron un muro de censura mediática en los medios de comunicación rusos. La expresión 'guerra' entró en la lista de términos proscritos y se obligó a los medios de comunicación a hablar únicamente de 'operación especial' u 'operación militar especial'.


Bajo amenaza de cierre, Vladimir Putin y su camarilla también han prohibido que los medios den información que no salga directamente de los cauces oficiales del Gobierno ruso o que se haga alusión alguna al fallecimiento de civiles ucranianos por culpa de los ataques de su ejército. El mensaje debe ser único: Rusia se ha visto obligado a realizar un misión especial para desnazificar Ucrania; y nadie debe salirse del guion y la narrativa diseñada por el Kremlin.


Lo que parecía ser una operación quirúrgica que iba a concluir en cuestión de días se ha convertido en un escenario bélico de alto desgaste que lleva ya seis meses a sus espaldas y que no parece tener un final a la vista. Y esto ha provocado que el eufemismo diseñado por Putin y sus asesores se esté volviendo contra ellos, porque está mermando de forma importante las capacidades de su propio ejército en el campo de batalla.


Como Moscú no quería bajo ningún concepto que se hablase de guerra, la Duma o Parlamento ruso aprobó la invasión de Ucrania utilizando resquicios legislativos, sin los trámites habituales previstos para aprobar misiones bélicas, con las diferencias legales que ello conlleva. Rusia se encuentra de este modo en estado de paz y huir del frente no está penalizado de la misma forma que si se hiciera en un estado de guerra.


Los militares que abandonan los combates en Ucrania y se vuelven a Rusia no se enfrentan a un consejo de guerra o a un juicio sumario, sino que su único castigo posible es ser despedidos del Ejército ruso en el caso de ser militares profesionales. Ya ha habido, que haya trascendido, una primera sentencia, relativa a 115 militares de una unidad de la Guardia Nacional (Rosgvardia) de Kabardia-Balkaria, que se negaron directamente a desplegarse en Ucrania.


En el caso de aquellos que están vinculados por un contrato temporal al Ejército ruso, como los voluntarios que se están alistando para ir a Ucrania, con una duración de un año, tan solo se enfrentan a la rescisión automática de su contrato, algo que obviamente no supone ninguna penalización real porque si están abandonando el frente y regresando a casa es porque ya no quieren continuar vinculados al Ejército ni continuar en la guerra.


El Gobierno ruso no ha facilitado ningún tipo de datos sobre el número de militares rusos que han desertado desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero, ni del número de efectivos profesionales que se han negado a ser desplegados en Ucrania, algo dentro de la normalidad, porque mantiene una opacidad casi absoluta sobre la invasión de su país vecino, pero algunos centros de análisis internacionales hablan de miles de "desertores".


Los carteles de reclutamiento que se han distribuido por todo el país prometen salarios de 300.000 rublos para quienes se unan a la causa rusa en Ucrania, un salario aproximado de unos 5.000 euros al mes, cinco veces y media el salario medio ruso, un salario muy poco atractiva para los jóvenes urbanitas de Moscú o San Petersburgo, pero un auténtico dineral para los jóvenes y adultos que provienen de las repúblicas más pobres de Rusia, ubicadas mayoritariamente en Asia Central.


Entre los beneficios por alistarse también se incluye un seguro médico completo, alimentación, vestuario, acceso a viviendas de protección oficial, ayudas para la compra de vivienda libre, derecho preferencial a recibir educación superior por parte de los hijos, así como un viaje de vacaciones tanto para el voluntario como para su familia a un listado de destino ofertados por el Ministerio de Defensa ruso.


Toda una golosina que se derrumba cuando se pasan unas horas en el frente de batalla en Ucrania. Allí la moral de combate es baja porque los ucranianos están resistiendo con heroicidad, muchos han visto como sus compañeros de batallón han sido masacrados y, por su fuera poco, la ruinosa logística rusa hace que en muchas unidades carezcan del material necesario: armamento en buen estado, munición abundante, uniformes y casos modernos, comida, material sanitarios…


Las llamadas telefónicas interceptadas por Ucrania, que han ido haciendo públicas desde cuentas oficiales en redes sociales, muestran cómo algunos militares han tenido que comprarse material militar a través de Avito, una especie de ebay o wallapop ruso, donde es probable que el vendedor fuese un militar corrupto que lo había robado de los depósitos de material militar desde los que le debía haber llegado al militar de forma totalmente gratuita.


La falta grave de material y comida fue la causa, por ejemplo, de que cerca de 300 de los 1.200 voluntarios de Osetia del Sur -una de las repúblicas fantasma que Rusia mantiene en Georgia- se volvieran a sus casas a finales del pasado mes de marzo porque consideraban que las condiciones que les daban desde Moscú para combatir en los frentes ucranianos eran intolerables. Por eso Moscú centra la búsqueda de voluntarios en las regiones más pobres de Rusia.


La contraofensiva ucraniana en Jarkov, que ha generado una auténtica huida en desbandada de las tropas rusas que estaban en la zona, han vuelto a poner de manifiesto los problemas rusos en el país vecino, entre otras cosas, porque ha venida acompañada de un importante número de nuevas deserciones. También ha provocado que se escuchen las primeras voces en Rusia criticando la intervención en Ucrania y pidiendo que se declare oficialmente la guerra.


El hecho de declarar oficialmente el estado de guerra permitiría a Rusia organizar levas, es decir, reclutar obligatoriamente a jóvenes de todo el país, lo que permitiría liberar a un número equivalente de militares profesionales para enviarlos a Ucrania. Incluso algunos de esos nuevos reclutas podrían ser destinados también al frente -la ley rusa no lo permite, pero Putin ya lo hizo el pasado mes de febrero-. Un movimiento que, tal vez, podría cambiar el rumbo de la guerra.


El problema de esto es que, por un lado, dejaría en evidencia que la guerra en Ucrania no va como se había planificado desde un primer momento, algo que todavía mantienen desde el Kremlin y el Ministerio de Defensa ruso. Por el otro, supondría que los hijos de las clases altas de Moscú y San Petersburgo, el gran sustento de Putin, podrían poner sus vidas en juego. Y una cosa es perder dinero y otra muy diferente perder un hijo, por lo que el presidente ruso debe medir muy mucho las consecuencias de sus decisiones.


Día 18. Español, lengua vehicular

JOSÉ MARÍA MARCO. la razon. 15 Septiembre 2022


Muchos habremos tenido la misma experiencia. Cuando le decimos a algún conocido de fuera que en Cataluña no se puede cursar la educación en español y que el español es tratado como una lengua extranjera nos miran como si estuviéramos desvariando… Después de haber asimilado esto, aún más les costará entender que desde este curso no se podrá utilizar el español como lengua de comunicación en los centros escolares catalanes. Las directrices, expuestas en un documento del Departamento de Educación de la Generalidad del mes de julio para su aplicación en el curso 22/23, son inequívocas: en catalán «se realizan las actividades de los centros, tanto orales como escritas (…); las exposiciones de los profesores; las actividades de aprendizaje y de evaluación; la interacción entre docentes y con los alumnos y las actividades de formación del profesorado». Si esto no se parece a una prohibición, como ha escrito Iván Teruel, habrá que volver a definir el término.


En realidad, la expulsión del español de los centros de enseñanza es consecuencia lógica de la imposibilidad de cursar la enseñanza en español. Y sin esta, que hace del catalán la única lengua vehicular de la enseñanza en Cataluña, la segunda no tiene sentido alguno. Las dos, y en particular la primera, nacen de la misma idea: considerar la lengua catalana como lengua propia de Cataluña con exclusión del español. La doctrina ha sido rechazada en diversas ocasiones por el Tribunal Constitucional. No importa. Estamos ante un proyecto político de construcción nacional para el que la ley es un obstáculo que hay que superar o, mejor dicho, derrotar. La única lengua que la Comunidad está en la obligación de impartir es la «propia», que en este caso es la catalana.


La situación a la que se ha llegado en Cataluña no es privativa de la región. En Galicia también se da prioridad, en la enseñanza y en la administración, a la lengua «propia», vertebrador de la unidad de «los gallegos». En el País Vasco el vascuence es también el núcleo duro de la identidad local, y tiene preferencia sobre el español: en Guipúzcoa ningún centro escolar ofrece el español como lengua vehicular. En Navarra, donde el español y el vascuence son lenguas propias, el segundo está siendo sistemáticamente favorecido. En Valencia ocurre otro tanto, y la administración local discrimina en favor del valenciano a los futuros funcionarios y se promociona el valenciano en toda la enseñanza y cada vez más en la Universidad. En las Islas Baleares, tanto el balear como el español están siendo sustituidos por el catalán como lenguas vehiculares.


Estamos por tanto ante un caso general, en el que en torno a la cuestión de la lengua vehicular se desarrolla todo un proyecto de construcción de identidades nacionales locales y, como es natural, de desmantelamiento de aquello que une a todos los españoles. Si el español no es lengua propia, es porque es extranjera, y si es extranjera, su utilización en la enseñanza como lengua vehicular sólo puede deberse a un fenómeno colonial de conquista y ocupación. La manifestación del próximo domingo 18 de septiembre en Barcelona convocada por Escuela de Todos en favor del «Español, lengua vehicular» no requiere por tanto más eslogan que este para aclarar su objetivo. Objetivo que afecta a todos los españoles que quieran seguir siéndolo.


El extraño de Feijóo

AGAPITO MAESTRE. libertad digital. 15 Septiembre 2022

Me pongo el zahón, como haría el rejoneador Diego Ventura, me subo a la columna y a torear. Es menester lidiar, o sea, hallar las razones de la "espantá" de Feijóo, dicho en el lenguaje de Ferrera y Morante, del Calatraveño y Ruíz Miguel, de Urdiales y todos los toreros que a caballo y a pie en el mundo han sido. ¿Es lo de Feijóo una genuina espantá? ¡Quién lo sabe! Pero es urgente que entendamos por qué Nuñez Feijóo, el jefe de la derecha española, no asistirá a una manifestación para que los niños españoles puedan estudiar en español en Cataluña, Valencia y Baleares. En verdad, no creo que el líder del PP huya de Cataluña. Es algo más complicado y, a la vez, muy simple de entender. Creo que su actitud es reflejo de un comportamiento colectivo, de un denominador común de los españoles, que dista mucho de ser una genuina virtud ciudadana.


La actitud de Feijóo está, sin duda alguna, más cerca la pusilanimidad que de la prudencia, pero quiero creer que su actitud no es una vulgar "espantá". Feijóo, simplemente, "ha hecho un extraño". Está de acuerdo con las razones de la concentración de Barcelona, pero su agenda política no le permite la asistencia. ¡Habrá algo más urgente que la defensa de los derechos de los niños a ser escolarizados en la lengua de Cervantes! La excusa de Feijóo es muy española. El refranero está lleno de expresiones que recogen con precisión ese taimado comportamiento. Pero es menester recurrir al lenguaje de la tauromaquia para explicar la cosa. Cuando el toro bravo pierde la línea recta en la embestida, o sea la derechura que lo convertiría en excelente, la plaza entera siente el peligro, el riesgo y el miedo que deberá sortear el torero para convertir el ritual en un grandioso espectáculo artístico. Eso es hacer un extraño. Pues quizá la anunciada inasistencia de Feijóo a la manifestación de Barcelona sea algo muy parecido al cambio de comportamiento de un toro bravo, genuinamente bravo, durante la lidia.


Ya sé, ya sé que son muchos los que desconfían de la bravura del personaje, pero yo se la supongo, como también se la supongo, e incluso se la atribuyo, a la mayoría de mis conciudadanos. Pero de bravura, como de dinero, sólo me creo la mitad de la mitad, y quizá sea mucho creer. Vamos que Feijóo representa a la perfección la manera de ser de millones de españoles. Hace un extraño parecido al que practican millones de españoles. Me explico. La lengua española está prohibida en Cataluña. Es algo sabido en el mundo entero. Los separatistas catalanes dieron un golpe de Estado hace cinco años. Se enteró del asunto todo el mundo civilizado. Los separatistas catalanes, incluidos en este grupo los socialistas y los comunistas, han prohibido el sagrado ritual de las corridas de toros en esa parte del territorio español. Esta prohibición también es conocida por millones de personas. En Cataluña, en fin, son miles y miles las acciones de los separatistas, incluidos en esta cuadrilla ideológica ciento de periodistas, profesores, escritores, contra todo tipo de libertades, especialmente contra quienes discuten su anacrónica ideología. La vida en Cataluña para cualquier ser libre, es decir, español, es peor que difícil. Resulta invivible.


Por eso son miles los españoles, residentes en esta región, que han abandonado sus hogares, familias, amigos y costumbres locales para instalarse en otras partes de España. La cosa es dura, muy dura, pero qué hacemos exactamente el resto de los españoles para prestarle ayuda, solidaridad y apoyo material a esos millones de españoles que viven perseguidos en Cataluña. Poco. Decimos, o mejor dicho, "hacemos un extraño": "que eso lo arreglen los políticos, bastante tenemos con sobrevivir". Ya… Aunque hay algo peor, están las buenas conciencias, millones de individuos que siguen votando a los socialistas y los comunistas para que detengan a los separatistas, olvidando que son estos los que mantienen a Sánchez en La Moncloa. Pero todavía esto puede empeorar. El hombre que no quiere hacer demasiado ruido. Ha hecho otro extraño, tan peligroso como el de Barcelona, su acercamiento al PNV. Terrible. Pero, es cierto. Sí, el PNV expulsó al PP del gobierno de España. Y ahora el jefe de ese partido quiere volver al poder con la ayuda del PNV. Adelante, Feijóo, siga haciendo extraños. Es muy propio de los españoles que le votan tanto a usted como a Sánchez.


******************* Sección "bilingüe" ***********************


La Cataluña que no sale a la calle debería hacerlo este domingo

TERESA GIMÉNEZ BARBAT. Okdiario. 15 Septiembre 2022


Entiendo que el domingo quien no sea un independentista u otro tipo de iluminado lo dedique a su familia, sus amigos o a sí mismo. Fíjense: mediados de septiembre, con ese dulce deslizarse hacia el otoño que permite, entre tormenta y tormenta, disfrutar de la gloria de un día soleado. Hay que estar muy motivado para preferir apretujarse en el asfalto, con desconocidos con los que comparte intereses circunstanciales, cargando con la mochila, la pancarta y la botella de agua.


Pero, si usted es un catalán constitucionalista, burlado hasta el oprobio por una Generalidad que no quiere representarle y se lo dice, motívese, porque motivos tiene. Entre otros la vulneración de la igualdad de los derechos lingüísticos de los alumnos catalanes durante más de 30 años. Y, ahora, cuando parecía que se veía algo de luz, han vuelto a retorcer las leyes para incumplir la sentencia que garantizaba un mínimo de 25% en castellano a todos los alumnos catalanes. Gracias a las instrucciones dictadas por el Departamento de Educación, verán que este próximo curso escolar, el castellano (que es lengua oficial) no será vehicular en la educación en Cataluña. Sólo el catalán y el aranés.


¿Ha visto en los medios de comunicación al padre del niño de Canet? Se ha personado como acusación particular contra los tuiteros que publicaron mensajes de acoso a su familia. Javier Pulido, que así se llama, pidió por vía judicial un 25% de clases en castellano, lo que le valió un aluvión de insultos y amenazas. Él, como la mayoría de padres que desean un mínimo de enseñanza en castellano para sus hijos, no deseaba ningún protagonismo. Y menos verse en televisión y que conocieran su rostro en todas partes. Pero decidió romper su silencio declarando, junto a su esposa, como perjudicado en el procedimiento abierto en el Juzgado de Instrucción 12 de Barcelona contra cuatro energúmenos de Twitter que enviaron mensajes amenazantes contra el menor.


Mientras tanto, el presidente de la Generalidad catalana, Pere Aragonés, se niega a recibir a ninguno de estos padres. Presume de ser el presidente de todos los catalanes y enarbola, cómo no, la bandera del «diálogo». Pero no considera necesario conocer directamente lo que puedan exponer esas familias o las asociaciones que las representan. Al contrario, aún presume de haber tumbado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que fijaba ese porcentaje de enseñanza de español en el sistema público y concertado.


Motívese, pues la Generalitat ha pisoteado otra vez los derechos de los castellanohablantes en Cataluña mientras el TSJC y la Fiscalía de Cataluña miran para otro lado y niegan a los padres la adopción de medidas cautelares hasta que resuelva la cuestión el Tribunal Constitucional. Con la esperanza, imagino de que cuando toque ya haya sido tomado al asalto por el PSOE y Podemos.


Esto no se puede soportar más. Aunque la última Diada haya resultado un fiasco y los políticos separatistas anden insultándose por las calles, siguen haciendo imposible la vida de más de la mitad de los catalanes. Cinco años después del intento de golpe contra el Estado, de partirnos por la mitad, de hacer huir a las empresas y de arruinarnos económica y moralmente, mandan en la Generalidad y controlan al Gobierno. Todo ello en connivencia con el Gobierno de España.


Este domingo, bajo el lema ‘Español, lengua vehicular’, la plataforma Escuela de Todos ha convocado una manifestación en Barcelona, a las 12.30, en el Arco del Triunfo. Debemos apoyar a estos padres; debemos apoyar a Javier Pulido y a su mujer. Que no sientan que han sufrido por nada.


Allí nos vemos.


Por una Cataluña de todos, la escuela también en español

Dolores Agenjo. cronica global. 15 Septiembre 2022


Los niños catalanes no pueden estudiar en español, a pesar de ser esta lengua oficial en toda España y mayoritaria en Cataluña. Así de simple, así de claro. Tampoco podrá hablarse español en las actividades extraescolares ni en espacio escolar alguno. Y así será por obra y gracia de los recientes decretos perpetrados por el Gobierno catalán contra la sentencia del TSJC –que establecía un 25% de enseñanza, cuando menos, en ambas lenguas oficiales―. Lisa y llanamente: si no quieres caldo, toma dos tazas.


Siempre que pienso en la aberrante cruzada emprendida por el nacionalismo catalán contra la lengua mayoritaria de los catalanes, me viene a la memoria lo que dijo el senador de la Entesa dels Catalans Josep Benet en su libro Combat per una Catalunya autònoma:


“[…] Pero hay aún un segundo crimen, que resulta peor por inhumano: se tortura a nuestros niños durante los primeros años de escuela aprendiendo en una lengua que no es la materna”.


En las postrimerías del franquismo, fuimos muchos los jóvenes “charnegos” que compartimos la opinión de Benet. Nos movía la sed de democracia, así que no dudamos ni un instante en arriesgar nuestro físico ante la policía del régimen para reclamar, codo con codo junto a otros jóvenes de ocho apellidos catalanes, libertad, amnistía y estatuto de autonomía, y también derecho a la educación en catalán.


Han pasado muchos años desde entonces, pero, lamentablemente, nada ha cambiado respecto a la injusticia descrita por Benet. Se sigue vulnerando el derecho a la enseñanza en lengua materna, solo que ahora no son los hablantes de lengua catalana los damnificados, sino aquellos que hablamos español.


¿Qué demonios ha pasado para que lo que era un crimen a finales de los 70 sea ahora un “éxito de país”, como proclama ufano González Cambray, consejero de Educación de Cataluña? ¿Acaso los niños hispanohablantes carecen de sensibilidad? ¿No les afecta a ellos que su lengua materna sea expulsada de la enseñanza? ¿Miente González Cambray o mentía Benet? Porque no puede ser que privar de educación en lengua materna sea un crimen para unos y un éxito de país para otros, a menos que se piense que solo los niños catalanohablantes tienen sentimientos y derechos.


Sea como sea, aquellos jóvenes idealistas nos creímos a Benet. Pensábamos entonces y también ahora que arrebatarle a un niño su lengua materna en la escuela de su propio país es cuando menos una clara vulneración de derechos, algo insólito en cualquier Estado democrático.


¿Y cómo se ha llegado hasta aquí? ¿Cómo hemos podido tolerar una política lingüística hasta tal punto liberticida y totalitaria? Los sucesivos Gobiernos de España tienen mucha responsabilidad al respecto. Siempre han ignorado a los catalanes hispanohablantes, siempre nos han sacrificado en aras de sus pactos con los políticos nacionalistas. La actitud de nuestros actuales gobernantes frente a los recientes decretos urdidos por González Cambray es buena prueba de ello: a pesar de sus claros visos de inconstitucionalidad, el Gobierno de España ha preferido mirar para otro lado y no impugnarlos –con lo que se hubiera activado automáticamente su suspensión cautelar―. No solo eso, la misma ministra de Educación, Pilar Alegría, ha comprado al completo el falaz discurso nacionalista y ha declarado sin sonrojo alguno que no pasa nada, porque al final todos los niños catalanes dominan perfectamente el español, como si, de ser así, que no lo es, no pudiera invertirse la situación y aplicar la inmersión lingüística obligatoria en español a los niños de Vic, por ejemplo.


La realidad es que el modelo lingüístico de la escuela en Cataluña supone una burla a los tribunales de justicia, un sarcasmo cruel contra las familias que tanto han sufrido hasta conseguir que la Justicia les diera la razón, un acoso sin precedentes a la libertad lingüística de profesores y alumnos, y un desprecio absoluto a los catalanes hispanohablantes, reducidos a ciudadanos de segunda.


Porque la enseñanza monolingüe en catalán no obedece a criterio pedagógico alguno, sino puramente a objetivos identitarios, de construcción nacional; porque ni cohesiona ni contribuye a la convivencia, sino todo lo contrario, pues divide a los ciudadanos en dos categorías: aquellos de rango superior, con derecho a educarse en su lengua materna, frente a aquellos otros privados de ese derecho, a pesar de ser su lengua, además de oficial, mayoritaria; porque a una sociedad bilingüe corresponde una escuela bilingüe; por todo ello, hay que participar el próximo domingo, 18 de septiembre, en la manifestación convocada por Escuela de Todos, en el Arco de Triunfo de Barcelona, a las 12.30. Es nuestro deber cívico.


PAÍS VASCO

El PSOE respalda que todos los colegios en Euskadi impongan el euskera como "eje central" del aprendizaje

JOSEAN IZARRA. Vitoria. el mundo. 15 Septiembre 2022


La nueva Ley de Educación consensuada por nacionalistas y socialistas elimina los modelos lingüísticos que incluían aprender en castellano para que todos los escolares hablen vasco


Los 43.198 estudiantes vascos que aún se forman en castellano en el sistema educativo del País Vasco perderán a partir del curso 2023-2024 la posibilidad de elegir el castellano como lengua vehicular. La nueva Ley de Educación impulsada por el Gobierno de Urkullu elimina de facto la posibilidad de elegir el castellano para imponer el euskera como "eje central" de la educación con el objetivo de que todos los escolares acrediten el conocimiento y uso del vasco al finalizar sus estudios. El borrador de la ley consensuado por PNV y el PSOE vasco será aprobado en las próximas semanas por el Gobierno vasco y tramitado a partir de diciembre en el Parlamento Vasco con el objetivo de que entre en vigor en el próximo curso escolar.


El consejero Bildarratz ha finalizado la elaboración de la futura Ley de Educación que se basa en un acuerdo alcanzado por PNV y PSE-EE junto a EH Bildu y Elkarrekin Podemos. El texto articulado que será tramitado en la Cámara vasca establece en su artículo 69 que cada centro educativo -tanto los públicos como los concertados- elaborará su "proyecto lingüístico" con el criterio impuesto de que "el euskera se sitúe como eje central y en el que las dos lenguas oficiales y, al menos, una lengua extranjera, se consideran lenguas de aprendizaje. El castellano, que prácticamente no se cita en la futura norma, queda relegado a los objetivos de euskaldunización de la totalidad de los 361.000 alumnos escolarizados en el curso 2022-2023 en Euskadi.


La nueva norma supone un paso más en el proceso de euskaldunización de los escolares vascos después de décadas en las que los colegios con formación en castellano -tanto públicos como concertados- se han ido reduciendo hasta el punto de que en Gipuzkoa ya no hay ninguna escuela pública con línea en castellano o 'modelo A'. Según los datos ofrecidos por el consejero de Educación Jokin Bildarratz en el arranque de este curso escolar, se han matriculado 1.195 niños de entre 3 a 5 años en castellano, frente a los 7.395 en un modelo mixto con preponderancia del euskera y 40.256 escolares de esta edad que estudiarán solo en euskera.


La futura Ley de Educación vasca no solo impone la obligación de acreditar un nivel B2 de conocimiento y uso del euskera sino que impone a los centros su utilización en actividades extraescolares y en la comunicación exterior. De esta manera, recoge que en el denominado proyecto lingüístico de cada centro también se incorporará "las propuestas de actividades extraescolares que vayan encaminadas a asegurar el uso ambiental de la lengua vasca". Además, se establecen varios artículos para fomentar el "uso ambiental del euskera" tanto en el centro como las actividades paralelas que realicen los escolares, los docentes y el personal de cada colegio.


Para lograr la "generalización del uso del euskera" la futura norma educativa vasca establece que "en los centros educativos financiados con fondos públicos, el euskera ha de ser normalmente el vehículo de expresión en las actividades de proyección externa".


Tras desvelarse el contenido del borrador elaborado por el Departamento de Educación, sólo Elkarrekin Podemos ha realizado una primera valoración con una "profunda decepción" porque el articulado conocido hoy no elimina la "segregación" escolar basada en la relevancia de los colegios concertados -casi la mitad- en el sistema educativo vasco. La portavoz parlamentaria Miren Gorrotxategi ha advertido que tal como está ahora redactada la futura norma su grupo parlamentario no la aprobará pero ha subrayado su voluntad de enmendarla para asegurar la preeminencia de la escuela pública cuando las aulas ya sufren una caída exponencial de la demografía. "No desfalleceramos", ha advertido Gorrotxategi mientras el resto de partidos vascos aún no han valorado el contenido del texto elaborado por el Gobierno vasco.


¿Pero es verdad que Franco también persiguió a la lengua leonesa?

Carles Mulet, senador de Compromís, reivindica la «persecución de la cultura leonesa» como enmienda a la Ley de Memoria Democrática

JORGE VILCHES. libertad digital. 15 Septiembre 2022


Carles Mulet García es un senador de Compromís. Es muy posible que usted no conozca a dicho político. Yo tampoco. El caso es que ha registrado casi 80 enmiendas a la Ley de Memoria Democrática que se está tramitando en el Senado después de su paso en el Congreso. Esta semana, el hiperactivo Mulet García ha presentado una para incorporar a dicha ley la «persecución» de la «lengua y la cultura leonesa». El político dice que la represión de lo leonés es equiparable a la que sufrieron «lenguas y culturas vascas, catalana y gallega» a manos de Franco. En un castellano que necesita un repaso escolar, el senador nacionalista dijo: «No es lo mismo la represión de la lengua y cultura gallega como la represión cultural en el Bierzo, que va más allá del idioma gallego y así en todos los casos». Mulet García asegura que las naciones lingüísticas son «víctimas» del franquismo, «cuyos hablantes fueron perseguidos por hacer uso de estas».


¿Qué lenguas y culturas son víctimas de Franco? ¿Está sentado? Adelante. La gallega, la asturiano/leonés en todas sus variantes incluida la cántabra y la extremeña, y «las lenguas propias de Extremadura». Y, además, el «catalán/valenciano» que se extiende por «Aragón, Cataluña, Baleares, País Valenciano y Murcia, el aragonés propiamente dicho, el occitano/aranés, el tamazight o el árabe ceutí, el vasco en País Vasco y Navarra, así como la lengua y cultura gitana», dice.


Los «acosados»

Todos fueron acosados por usar sus culturas y lenguas propias. No es cierto que Mulet cobre comisión por el descubrimiento de lenguas perseguidas. Simplemente quiere dejar claro que solo los franquistas y los obligados hablaban español. Más claro todavía: el español es el idioma de la dictadura y hay que perseguirlo, liquidarlo y anatematizarlo, porque sin culpable no hay victorioso, y Mulet García y su Compromís menguante quieren apuntarse algún triunfo. No hay que olvidar que el partido de Mulet está muy a la baja en las encuestas, con una caída de 5 puntos, y todo indica que van a perder el poder en Valencia. El asunto no es si León tiene una lengua propia, porque ya llegará el político todólogo y populista que pontifi - que al respecto para colocar a los suyos. No.


El tema es si hubo «represión» de la lengua y cultura leonesa. Es ahí donde el asunto hace aguas. La izquierda ha degradado tanto el término «represión» que da pena si se conoce a los que sí fueron represaliados. El tema puede escocer a los nacionalistas que viven del cuento, pero la Academia española tiene una definición clara de «represión». Se entiende por tal un conjunto de actos, normalmente desde el poder «para contener, detener o castigar con violencia actuaciones políticas o sociales». No existió durante el franquismo ningún decreto para reprimir el leonés y su cultura, ni hubo detenciones ni encarcelamientos por usarla o difundirla. No tuvieron que aplicarse a fondo los «grises» o los guardias civiles para reprender a quien hablara o escribiera en leonés. Es más; si se consulta el catálogo de la Biblioteca Nacional, cuyo nombre no lo puso Franco, tranquilos, sino Isabel II, no hubo represión. Concha Casado, una mujer, sí, publicó en 1948 «El habla de la Cabrera Alta». Al año siguiente Álvarez Guzmán publicó «El habla de Babia y Laciana», y en 1950 César Morán editó el «Vocabulario del concejo de La Lomba, en las Montañas de León». Más. Álvaro Galmés escribió en 1957 «Trabajos sobre el dominio románico-leonés». Y, por no cansar, César Bardón publicó el conocido «Cuentos en dialecto leonés» escrito en leonés, con tres ediciones hasta 1955. Bardón no fue a la cárcel. En fi n, que no hubo persecución ni prohibición. Es trola. Sí hubo represión política y social por ideología y moral. Era una dictadura que nadie va a descubrir ahora. Pero no se persiguió la lengua y cultura leonesa y, por tanto, no es víctima del franquismo. Está visto que al nacionalismo victimista se le ha ido la mano, carece de formación o nos toma por memos. Una cosa es reivindicar la riqueza cultural de León y otra inventarse un pasado de represión que no existió para construir un relato falso con el que asegurarse una subvención.


El Gobierno vasco sólo permitirá ser profesor de autoescuela sabiendo vascuence

Nuevo capítulo en la incesante vulneración en todas las regiones bilingües del derecho de los ciudadanos a usar el español.

Carlos Cuesta. libertad digital. 15 Septiembre 2022


Profesores bloqueados y marcados en Cataluña por querer respetar lel derecho de los niños a una educación en español. Músicos expulsados por no tener título de valenciano. Médicos desplazados por no saber catalán en Baleares. Y, ahora, profesores de autoescuela que no podrán desempeñar su trabajo porque no saben vascuence. Es el resumen de una era donde los separatismos imponen sus reglas sin la más mínima defensa administrativa de los derechos de los profesionales, docentes, alumnos, menores y ciudadanos españoles en general afectados.


El nuevo capítulo ha llegado en el País Vasco, una comunidad española en la que únicamente podrán obtener el necesario título de profesor o director de autoescuela los candidatos que se presenten teniendo conocimiento del vascuence. La decisión ha sido adoptada por el Departamento de Educación del Gobierno vasco, en manos del PNV y del PSE-PSOE.


El Gobierno vasco ha cambiado las reglas y ha impuesto un módulo formativo —totalmente necesario para la obtención del título— que se imparte exclusivamente en lengua vasca. Resultado: el que pretenda optar al título en lengua española y sin conocer el vascuence no tendrá ninguna posibilidad. Por ahora, la exigencia parece dirigida a los futuros profesores o directores de autoescuela. Pero el temor se ha instalado entre los trabajadores del sector ante el evidente riesgo de que se exija también en el futuro a los profesionales ya en activo.


Las quejas por escrito ante la Administración vasca no han tardado en llegar. Pero las declaraciones realizadas por miembros del Ejecutivo regional han dejado claro que el Gobierno de PNV y PSOE no tiene ninguna intención de rectificar.


La explicación oficial se basa en que han detectado una demanda suficiente de personas interesadas en realizar el curso íntegramente en euskera. Una versión plenamente subjetiva que, además, tampoco justificaría el hecho de que todos los profesores tuvieran que cursar ese nuevo módulo y aprobar su correspondiente evaluación.


Desde el PP de Álava, Iñaki Oyarzabal ha calificado la medida de "discriminatoria". "Se trata de un nuevo atropello basado en el deseo de imponer el euskera", ha señalado. Oyarzabal ha explicado, además, que la medida cuenta con el rechazo pleno de las autoescuelas.


Hay que tener en cuenta, además, que los estudios exigidos para poder ser profesor o director de autoescuela se han modificado este año. Y fruto de ese cambio, los exámenes de acceso se han asimilado a una oposición. Los aspirantes a la titulación deben estudiar un temario y posteriormente realizar un examen. Y ahora, en el País Vasco, ese esquema forzará a pivotar el temario en el nuevo modulo de Formación para la Movilidad Segura y Sostenible, que tiene una duración de 2.000 horas y que en el País Vasco es gestionado por el Gobierno de PNV y PSOE. Y ahí es donde ha entrado la exigencia del vascuence.


Todo ello ocurre en medio de otros escándalos similares como el que le ha tocado sufrir a Encarna Grau. Ella fue la primera profesora de trompa con título en España. Además de ser una pionera, lleva casi 40 años dedicándose a la enseñanza en varios conservatorios de la Comunidad Valenciana. Sin embargo, la Generalidad valenciana de Ximo Puig ha mandado al paro a esta mujer de 62 años porque no tiene el título de valenciano.


Ante el agravamiento de la situación en todas las regiones con lengua cooficial y la indefensión de las instituciones, las asociaciones que defienden el derecho de los ciudadanos a usar el español en toda España anuncian movilizaciones. Este domingo, la Asamblea por una Escuela Bilingüe ha convocado una gran manifestación en Barcelona, a las 12:00 en el Arco del Triunfo, para "exigir el fin de una escuela monolingüe". Además, la asociación Hablamos Español convoca concentraciones en otras ciudades españoles.


El vía crucis de un estudiante catalán para acreditar que domina el español

Un joven que optaba a una beca para cursar su carrera en una universidad británica choca con el conflicto competencial entre Govern y ministerio, y los agravios comparativos entre castellano y catalán

MARÍA JESÚS CAÑIZARES. cronica global. 15 Septiembre 2022


Tan comprensible como lógico es que el protagonista de esta historia, un estudiante de bachillerato con buenas notas en su currículo, decidiera optar a una beca para cursar su carrera en una universidad británica. Lo que no es habitual es el vía crucis sufrido por este joven catalán para acreditar su dominio del español.


La Generalitat y el Ministerio de Educación se negaron a expedir esa acreditación, destapando así el conflicto de competencias, los agravios comparativos entre catalán y castellano y el limbo legal a los que se debe enfrentar cualquier joven que desee completar sus estudios en el extranjero y requiera de esa documentación.


La historia de este joven tuvo un final feliz porque utilizó sus propios recursos para lograr la documentación, pero no todos los estudiantes disponen de medios para hacerlo.


Acreditación automática del catalán

Actualmente, los alumnos que finalizan la ESO y han aprobado la asignatura de catalán pueden acreditar automáticamente el certificado de suficiencia de la lengua, el llamado nivel C1. El automatismo que podría cambiar en los próximos meses, ya que entre las 50 propuestas presentadas por el Consell Lingüístic Assessor al consejero de Educación, Josep González-Cambray, para “impulsar el uso de la lengua catalana en los centros educativos”, figura la creación de una prueba para acceder a esa acreditación.


“En el último curso de la ESO, los centros educativos ofrecerán la posibilidad de obtener, mediante una prueba específica, un certificado oficial que acredite la competencia lingüística en catalán (o del occitano, en el caso de Arán) de acuerdo con los niveles del MCER (Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas)", señala la iniciativa.


Competencias transferidas

Pero nada de eso hay establecido en el caso de los certificados de castellano. El joven bachiller se dirigió en primera instancia a la Generalitat, sin que lograra obtener esta acreditación. Acudió entonces al Ministerio de Educación, que tampoco le ayudó, alegando que las competencias estaban transferidas al Gobierno catalán.


"Conocemos muchos casos de personas que ven limitados sus derechos por una legislación que se queda a medias, que no profundiza en lo que necesita el ciudadano", explica la presidenta de Sociedad Civil Catalana (SCC), Elda Mata, quien conoce el caso de este joven, finalmente admitido por la prestigiosa universidad. "Él tenía sus propios recursos y la universidad aceptó su certificado, ¿pero qué pasa con todos los demás estudiantes que necesitan pedirlo? ¿Tendrán que ir a la Consejería de Educación y después al ministerio, que está vacío de contenido? ¿Renuncia esta persona a la mejor educación porque se ponen por delante los intereses políticos a los ciudadanos? Estos matices son los que tenemos que aportar las entidades civiles a los partidos políticos", añade.


“Regular esas competencias corresponde al Ministerio de Educación, pero deja en manos de las comunidades autónomas su ejecución”, explica a Crónica Global el presidente de Impulso Ciudadano, José Domingo.


La Ley Orgánica de Educación 2/2006 organiza las enseñanzas de idiomas de régimen especial en tres niveles: el básico, el elemental y el intermedio, mientras que el Real Cecreto 1629/2006 determina el carácter que los niveles básico, intermedio y avanzado de las escuelas oficiales de idiomas tienen como referencia. "Las competencias de estas escuelas también están transferidas a la Generalitat; su Secretaría de Política Lingüística actualiza los diplomas y certificados equivalentes a los certificados de conocimientos de catalán. Pero nada dice esa norma catalana, sin equivalentes en otras comunidades autónomas, sobre acreditaciones en castellano", añade Domingo.


Instituto Cervantes

Además de las escuelas oficiales de idiomas, otra de las vías posibles para obtener la acreditación es cursar estudios en el Instituto Cervantes. Fuentes de esta entidad explican a este medio que “el Instituto Cervantes expide los diplomas DELE, que certifican --cuando se ha superado el examen-- el nivel de español (de A1 a C2) del candidato. Pero cada institución académica, dado que se trata de una universidad inglesa, decide qué diplomas o certificaciones son válidos para ingresar como alumno”.


Según Carlos Conde, profesor de Historia en el departamento de Humanidades de la Universidad Northumbria (Newcastle), “efectivamente, las comunidades autónomas no expiden certificados de español. Ni Cataluña ni ninguna otra. Tampoco el ministerio. La única manera de obtener una calificación en el Common European Framework es a través del Instituto Cervantes. Sucede, claro, que los exámenes del Cervantes no se pueden hacer a la carta. Si se te pasa la última convocatoria, a lo mejor no se puede obtener el certificado antes de que cierre el plazo de matrícula y/o beca en su universidad de destino. También ocurre que no hay Instituto Cervantes en todas partes". En Barcelona, por ejemplo, no tiene delegación.

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