Recortes de Prensa Lunes 29 Mayo 2023

Moscú vuelve a atacar Kiev durante la noche con más de 40 misiles y drones

El Confidencial. 29 Mayo 2023


Las fuerzas rusas volvieron a atacar de madrugada la capital ucraniana, donde se escucharon una noche más fuertes explosiones, con más de 40 misiles y drones kamikaze de fabricación iraní que fueron destruidos por las defensas antiaéreas ucranianas. “Es el décimo quinto ataque desde que comenzó mayo”, explicó la Administración Militar de Kiev en un comunicado en el que se señala que los “terroristas” intentan “destruir objetivos clave para ellos y al mismo tiempo agotar los recursos” de las defensas antiaéreas ucranianas.


Según la Administración Militar de la capital ucraniana, Rusia utilizó en el ataque de anoche drones de fabricación iraní Shahed (un término religioso islámico para designar a los mártires) y, “casi simultáneamente”, misiles de crucero disparados desde la región del Mar Caspio. “El ataque contra la capital fue combinado, desde varias direcciones”, añade el parte militar, que se felicita por el buen trabajo de las defensas aéreas ucranianas y habla del techo de un edificio residencial dañado como consecuencia de la caída de los cascotes de un proyectil interceptado como daños de esta nueva ronda de drones y misiles.


Este bombardeo se produce un día después de que Moscú lanzara el mayor ataque con drones desde que comenzó la guerra, según las autoridades ucranianas.


Las claves del momento:

Moscú vuelve a atacar Kiev con más de 40 misiles y drones kamikaze

Ucrania avisa a Putin: ya está lista para iniciar la contraofensiva.

Dmitri Medvédev ha advertido de que su país lanzará un ataque nuclear preventivo si Ucrania recibe armas nucleares

Moscú admite que la invasión se puede prolongar décadas

Lukashenko afirma que se han trasladado armas nucleares a Bielorrusia

Así hemos contado la jornada 456 de la guerra en Ucrania


Hace 8 minutos 08:29

Rusia pone a un senador de EEUU en su lista de personas buscadas

El Ministerio del Interior de Rusia ha incluido al senador estadounidense Lindsey Graham, un veterano político republicano, en su lista de personas buscadas, según ha informado la agencia de noticias rusa TASS.


Graham visitó Kiev la semana pasada y se reunió con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Un vídeo de este encuentro, que ha corrido como la espuma en redes sociales, parece mostrar al senador diciendo "Los rusos están muriendo. Es el mejor dinero que hemos gastado". Sin embargo, la transcripción completa del encuentro revela que estas dos frases estuvieron separadas y no conectadas.


Hace 1 horas 10 minutos 07:27

Bielorrusia asevera que Occidente "no dejó más opción" que desplegar armas nucleares en su territorio

El jefe del Consejo de Seguridad de Bielorrusia, Alexander Volfovich, ha aseverado este domingo que la decisión de desplegar armas nucleares en territorio bielorruso se debe a las políticas adoptadas por los países occidentales. Volfovich ha explicado que la situación actual, en el marco de la invasión rusa de Ucrania, está marcada por un aumento del gasto de defensa de varios países, sobre todo de algunos vecinos, como Polonia, por lo que considera que "se está creando un grupo ofensivo". "Se puede ver a simple vista", ha declarado.


Así, ha señalado que Minsk puede tomar el mismo camino y comenzar a aumentar el gasto militar, pero esto supondría "una enorme carga" para la economía. "Entonces, uno de los elementos de la disuasión estratégica en términos militares, por supuesto, son las armas nucleares tácticas", ha manifestado, según recoge la agencia de noticias BelTA.


Hace 1 horas 10 minutos 07:26

Rusia lanza contra Kiev su ataque número 15 en lo que va de mayo

Las fuerzas rusas volvieron a atacar de madrugada la capital ucraniana, donde se escucharon una noche más fuertes explosiones, con más de 40 misiles y drones kamikaze de fabricación iraní que fueron destruidos por las defensas antiaéreas ucranianas.


“Es el décimo quinto ataque desde que comenzó mayo”, explicó la Administración Militar de Kiev en un comunicado en el que se señala que los “terroristas” intentan “destruir objetivos clave para ellos y al mismo tiempo agotar los recursos” de las defensas antiaéreas ucranianas.


LA FORMACIÓN LOGRA MÁS DE 1.700 CONCEJALES

Abascal: «VOX hoy se ha convertido en un partido absolutamente decisivo para la alternativa»

LGI. gaceta. 29 Mayo 2023


El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha manifestado que hoy se ha producido la consolidación del partido como «proyecto nacional» y ha incidido en el papel de VOX «absolutamente necesario» para la alternativa al socialismo, al comunismo y sus socios separatistas.


«Somos el partido que más crece. Hemos doblado el porcentaje de votos. Hemos pasado de 500 concejales a más de 1.700. De 47 diputados regionales a tener 119. «VOX hoy se ha convertido en un partido absolutamente decisivo para la alternativa».


Así, ha recomendado «a los agoreros que en 2019 pronosticaron la defunción de VOX» que «hagan una regla de tres» para vaticinar los resultados de diciembre.


Sin embargo, y volviendo a los resultados de este domingo, Abascal ha recordado que «el otro partido» —–el PP— también es «decisivo para la alternativa» y está presidido por quien advirtió que primero ofrecería un pacto al PSOE. De modo que ahora «tiene que elegir entre la alternativa o el continuismo».


VOX mantiene su compromiso con los votantes, ha agregado Abascal, que no es otro que «construir la alternativa y derogar la legislación de la izquierda». «VOX va a defender a sus votantes», ha señalado Abascal, antes de advertir «que nadie espere regalos porque no podemos regalar la confianza y que no espere que vamos a aceptar chantajes».


Ayuso y Almeida convierten Madrid en la tumba del socialcomunismo

OKDIARIO. 29 Mayo 2023


Las victorias por mayoría absoluta del PP en la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid convierten al tándem Ayuso-Almeida en un filón electoral que puede tener una importancia capital para catapultar a la formación de Alberto Núñez Feijóo a La Moncloa. Al final, quienes alentaban torticeramente que el PP no lograría la mayoría absoluta en la capital de España se han coronado. Una (Ayuso) y otro (Almeida) han triturado literalmente a la izquierda, que otra vez en Madrid ha pagado muy caro en las urnas su obsesiva estrategia de acoso y derribo contra la presidenta y el alcalde madrileños. Si hay una comunidad y una ciudad que se han conjurado para frenar al sanchismo es Madrid, que ha decidido plantar cara al socialcomunismo.


Madrid es la tumba política de la izquierda, la horma en el zapato de un presidente del Gobierno que lleva años tratando inútilmente y con malas artes de frenar el avance de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida. Los resultados del PP son abrumadores y desnudan el sectarismo de una izquierda que se ha dedicado en los últimos años a torpedear la gestión de los dos líderes populares madrileños a través de una bochornosa campaña de agitación en la que los ciudadanos se convirtieron en rehenes de los ataques del Gobierno. Y los ciudadanos han respondido en las urnas lanzando el mensaje más contundente contra Pedro Sánchez: Madrid no paga traidores. En efecto, las victorias aplastantes de Ayuso y Almeida corren paralelas al destrozo de Pedro Sánchez. Madrid ha sepultado al socialcomunismo y le ha lanzado al jefe del Ejecutivo un golpe que puede resultar definitivo para que el PP de Feijóo logre dentro de unos meses desalojar al sanchismo del poder.


El filón de votos que representan la presidenta madrileña y el regidor de la capital de España alientan los vientos de cambio. De Madrid a La Moncloa.


Semejanzas entre Argentina y España (VI): declive económico

MARÍA ZALDÍVAR. gaceta. 29 Mayo 2023


Otra vez España y Argentina parecen transitar caminos análogos. En estos días los españoles y en unos meses los argentinos, van a tener que elegir las personas para representarlos y conducir el destino de sus respectivas sociedades. En los dos casos, la próxima no es una elección más, sino una decisiva porque los últimos años ambas naciones han padecido un deterioro económico e institucional tan graves que urge rectificar el rumbo.


España cerró el año 2022 con un 20,4% de sus habitantes en riesgo de pobreza. Esto significa que casi 10 millones de personas padecieron esa categoría en el último año. Los números de Argentina son aún peores: la cantidad de pobres ascendió a 18 millones, un millón más que a mitad de 2022 y la pobreza escaló al 42%. En el extremo más vulnerable, el 8,1% de la población es indigente, es decir que sus ingresos ni siquiera alcanzan para la comida.


Pero hay mucho más ya que, sin desmerecer la importancia de la economía y considerándola un factor de extrema gravitación social, no es menos trascendente la decadencia en el plano político e institucional que sobrellevan ambos pueblos.


El desempleo, la inflación o la suba de impuestos preocupan y mucho, pero también la condescendencia con el delito, una tolerancia infinita hacia la inmigración ilegal, la falta de expectativas, los jóvenes que se van de su tierra a buscar oportunidades de crecimiento a otras latitudes, la intención explícita de manipular la justicia, el desprecio por las minorías, el atropello a las libertades con la imposición de políticas de género, la falacia del estado de bienestar, el feroz impulso al marketing LGTB, la dependencia globalista y la intervención del estado en la educación de nuestros hijos son también algunos de los parecidos entre España y Argentina que exceden el marco de las cuentas públicas.


España, además, ha apoyado los vanos intentos de los países latinoamericanos por lograr una integración económica, política y comercial como la Unión de Naciones de América del Sur (UNASUR), el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC). Se trató en todos los casos, de iniciativas fracasadas y vacías de contenido entre naciones de espíritu profundamente socialista a las que les resulta imposible la cooperación. La Argentina en particular, que integra todos esos sellos huecos y los ha presidido en más de una oportunidad, es incapaz de tejer lazos de entendimiento sanos porque está cegada de ideología. Quienes consumen y militan socialismo no aprecian el valor de la asistencia recíproca excepto, entre parecidos.


En los últimos años, España también participó del Foro de San Pablo y actualmente del Grupo de Puebla, dos entidades formadas para mantener la cohesión de los partidos de izquierda de la región tras la caída del Muro de Berlín. El ex presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido y es miembro activo de esas formaciones.


La cercanía en las relaciones entre España y los países de Iberoamérica se refleja claramente en los viajes oficiales del presidente del Gobierno a Chile, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Guatemala y Cuba, el primero de un jefe de Gobierno español en 32 años. Si bien expresó que Cuba no es una democracia, toda una obviedad, se cuidó de condenar la dictadura castrista. Argentina también mantuvo siempre una estrecha relación con la isla y una férrea defensa de su política aberrante.


Estas tendencias del PSOE y su alianza con Unidas Podemos, con quien el kirchnerismo mantiene aceitados vínculos, no es todo lo que está mal. Argentina también comparte con España la existencia de una oposición indefinida, tibia que no termina de enfrentar al oficialismo. El Partido Popular de Nuñez Feijóo se caracteriza por ser condescendiente con Pedro Sánchez hasta el extremo de considerar la opción de una alianza de gobierno con el socialismo separatista para evitar cualquier participación de Vox en la próxima administración. Como frente a un espejo, en la Argentina la oposición encarnada en el partido de Mauricio Macri también destiñe, es vaga y sin contundencia.


La falta de compromiso férreo con un manojo de ideas e ideales parece ser el mal de la época en los espacios políticos que dicen encarnar el espectro de la centro-derecha y sus representantes son proclives a intentar el equilibrio con el que, primero se desdibujan y luego, más temprano que tarde, pierden la identidad. La consecuencia de ese proceso, nunca exitoso, de caminar por el medio, fue la aparición de opciones generalmente conocidas como antisistema. El ejemplo español es Unidas Podemos, cuyo discurso enamoró el oído del extremismo de izquierdas pero que, en la práctica, resultó una burla a aquellas expectativas. La deriva populista argentina es tan similar que asusta pero España tiene a su favor estar algo más lejos del precipicio.


El verdadero desafío es la conformación de una fuerza política que, dentro del sistema de las instituciones establecidas, respetando las normas de la convivencia democrática y aceptando el disenso, proponga un programa rico en medidas y en valores.


España, a diferencia de Argentina que vive indefinidamente el eterno retorno al peronismo con sus distintos sombreros, tiene una reserva moral en Vox que no titubea ante el desafío de recuperar los valores tradicionales de España y el orgullo de pertenecer a Europa, dos objetivos perfectamente conciliables que el globalismo pretende enfrentar. La salida a la mala política es la buena política y los buenos políticos y el poder de reemplazo está en cada uno de los votantes. Este domingo y siempre.


Vox es la clave

Irene González. vozpopuli. 29 Mayo 2023

Sin que nos hayan aclarado en estos comicios qué sucede con el voto por correo —hubo fraude en Melilla, compra de votos en Mojácar y en otro sin fin de localidades que han sido enterradas por las televisiones del régimen— vemos cómo los flamantes sondeos que declaraban a las 20:00 una arrolladora ola de cambio azul, será más bien azul verdoso o no será.


Sevilla, Valencia, Palma de Mallorca y Valladolid son municipios muy importantes que ha perdido la izquierda en favor de una mayoría de los partidos a su derecha. La Comunidad Valenciana, Aragón, La Rioja y Baleares dejarían de ser rojas. El Partido Popular ha subido en votos y escaños respecto a los anteriores comicios y aventaja al PSOE en concejales a esta hora del lento recuento. Un triunfo sin duda en una noche de celebración en las sedes populares, donde los inconscientes actúan como si ya les hubiesen sido entregados esos bastones de mando municipal, como esas presidencias autonómicas sin haber llegado aún a un acuerdo de gobierno con VOX. La otra parte de la necesaria suma, salvo la excepción de Madrid.


El último partido conservador que queda en España ha tenido una expansión territorial con un espectacular aumento de votos entrando en casi todas las Instituciones de la geografía nacional por primera vez. VOX ya se ha convertido en la clave del futuro de España. Cualquiera que escuchase el discurso de los de Abascal volcado en no olvidar la ruina del campo, la inseguridad ciudadana y todo en la base de un proyecto nacional, no sólo palabrería de banderita, sabría que lejos de convertirse en residual —como deseaban los que viven de hundir España—, se ha consolidado en las Instituciones. Y según las urnas es hora de entrar en el poder.


Respecto a otros nuevos partidos que fueron y ya han desaparecido (Cs) o están cerca de hacerlo (Podemos desaparece en Madrid), VOX tiene una posición y situación distinta en el sistema de partidos donde tiene campo para crecer y ganar la presidencia algún día si así se lo proponen. Porque su función y su misión no es ser la bisagra del bipartidismo para esquivar a nacionalistas antiespañoles, sino ser el guardián de los intereses de España ante la corrupción traidora del bipartidismo, capaz de vender los intereses generales en los montes de Aragón o frente a Marruecos. El patriotismo siempre fue el requisito más importante en una formación política y especialmente en su líder, pero ahora es una cuestión vital. No pretenden sustituir al PP, como pensó Rivera, sino que entienden que la disputa no está entre populares y socialistas, sino entre españoles y quienes entienden España como el campo de saqueo en favor de intereses extranjeros de agendas 2030 y bolsillos personales.


El reto es difícil. Formar parte de un gobierno con un Partido Popular al que tienes que controlar en minoría, que él mismo ha declarado sin faltar a la verdad tener más en común con el PSOE y prefiere llegar a acuerdos con ellos. El problema es que se puede luchar contra el socialismo, pero el PP ha decidido hacerlo contra las matemáticas ignorando que el gobierno sólo puede cambiar con el acuerdo y la suma con VOX.


La intención desde Génova es trasladar al partido de Abascal el peso de que apoyen un gobierno del PP en solitario a cambio de nada, porque la alternativa seria que gobernase la izquierda y eso VOX no lo puede permitir. En el propio chantaje burdo que pretende hacer el PP está su trampa. Esta estrategia de «cómo perderlo todo antes de ganarlo» la inauguró el inteligentísimo Pablo Casado y ahora la abandera Borja Sémper. Ellos mismos vendrían a admitir que prefieren que la peor izquierda desde la II República siga en el poder antes que atender al mandato de las urnas y llegar a acuerdos con el partido conservador VOX. Los votantes que no perdonarían eso en la siguiente convocatoria serían los del PP. Si es verdad que quieren echar a Sánchez del poder el PP debe entender que la clave es reconocer el sitio que a VOX le han dado los españoles con su voto o serán ellos quienes lo paguen en diciembre, si llegamos a votar sin incidentes.


El PP no sólo debe llegar a acuerdos de gobierno con VOX, sino reivindicarlos, pues es su única vía para llegar al poder. Pueden escuchar La Ser, El País y a Borja Sémper o con respeto y normalidad acordar un gobierno con VOX. El sentido común de la calle sabe que Extremadura y Castilla La Mancha, tierra donde el socialismo no ha salido nunca del poder, pueden perder su última oportunidad de cambio. La clave está en pensar quién es mejor para España y eso no pasa por el PSOE.


El pp que aún no ha desaparecido

Nota del Editorial. 29 Mayo 2023

A continuación copio dos artículos fechados el 21 Noviembre 2011, como muestra de la necesidad de que el pp desaparezca.


Voto de confianza para el PP
EDITORIAL Libertad Digital 21 Noviembre 2011

El Partido Popular ha obtenido una victoria arrolladora en estas elecciones generales: los diez millones y medio de votos que ha cosechado le permiten hacerse con 186 escaños, once más de los requeridos para gobernar con mayoría absoluta. Se trata de sus mejores resultados... y de los peores de su principal contrincante, el PSOE, que ha perdido nada menos que 59 de los 169 escaños que tenía desde los comicios de 2008. Parece de todo punto pertinente citar a un tiempo ambas circunstancias; de hecho, las cifras dicen que ha sido más contundente el desplome socialista que el triunfo de los populares: estos apenas han sumado unos 300.000 votos y cinco puntos porcentuales a sus resultados de 2008, mientras que aquellos han visto caer su apoyo en 15 puntos y más de cuatro millones de votos.

La derrota del PSOE ha sido tan merecida como histórica. El partido del puño y la rosa ha causado a España un mal difícilmente reparable, por el que debe seguir pagando. Si no acomete de manera inmediata un proceso de auténtica refundación, que se lleve por delante ideas, personas y prácticas tóxicas, corre el riesgo de acabar en el vertedero. Lo cual no supondría, ciertamente, un gran drama. Lo dramático es que unas siglas tan vinculadas a las páginas más negras de nuestra Historia y nuestra democracia sigan condicionando la vida política de la manera en que lo hacen.

En cuanto al Partido Popular, debería arrumbar la euforia inmediatamente: por el ya referido dato de que apenas ha avanzado cinco puntos cuando su mayor rival ha perdido 15, porque sus resultados han sido manifiestamente mejorables en dos plazas tan decisivas como el País Vasco y Cataluña, y porque difícilmente podría presentársele un panorama más complicado, con el paro desbocado, las cuentas públicas en estado comatoso, los nacionalismos poco menos que en estado de rebelión y la arquitectura institucional con graves daños estructurales. Y todo el mundo pendiente del menor de nuestros movimientos...

El próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debe ponerse inmediatamente a trabajar, porque España no puede perder un minuto más. Y debe trabajar en lo urgente sin descuidar un solo segundo lo menos acuciante pero igualmente importante. Es decir, tiene que coger el toro de la deuda por los cuernos cuanto antes, pero sin perder de vista las cruciales reformas de largo aliento, que atañen a lo político, a lo económico, a lo institucional y a lo cultural. Los próximos años serán decisivos, nos jugamos el todo por el todo. No hay vuelta atrás ni manera de obviarlo.

De este modo, a la regeneración económica se añaden retos como el de contener a ETA, aplicar con rigor la ley, desandar los atajos tomados por el PSOE, frenar el impulso desvertebrador de CiU y también acometer las reformas necesarias para que partidos como UPyD no se vean penalizados por una ley electoral que prima a los nacionalistas y supone una discriminación intolerable para sus votantes, cuya representación será inferior a otros partidos con muchos menos votos, como es el caso de Amaiur, la marca electoral de ETA. También la Justicia debe acometer grandes cambios para responder a las verdaderas necesidades ciudadanas y no al antojo de los gobernantes de turno. Son objetivos inexcusables para un PP que ha recibido un mandato claro, el de sacar a España de una crisis que no sólo es económica, sino que afecta a algunas de sus principales instituciones y estamentos políticos. Es hora de sumar, sí, pero sin que ello sirva de excusa para aplazar reformas en la administración tan dolorosas como necesarias. Desde luego, Rajoy no va a disponer de cien días. Reclamaba algo más de media hora, pero los graves problemas de España dan para pocas celebraciones. En este sentido, el Gobierno en funciones y el PSOE deberían ser lo suficientemente generosos como para no prolongar más su agonía. Que la fecha de constitución de las Cámaras sea el 13 de diciembre no es precisamente un buen indicio de las intenciones del PSOE, pero el hecho de que los socialistas hayan obtenido el peor resultado de su historia debería hacer reflexionar a Rubalcaba y Zapatero, verdaderos artífices de un fracaso que no sólo afecta a su partido, sino que ha supuesto una pesadilla nacional.

Finalizado el negro episodio de los dos últimos gobiernos socialistas, los españoles pueden contemplar esperanzados la nueva etapa, pero es necesario que en los próximos días, con la mínima dilación, el PP lance indicios claros de cuáles van a ser sus primeros pasos. No sólo se trata de aplacar a los mercados, sino de dar satisfacción a la amplísima mayoría de españoles que han exigido un cambio radical.
 

JIMÉNEZ LOSANTOS a las 6
Federico: "El PSOE ha cebado la bomba de ETA y le ha estallado en las manos"
En el editorial de las seis, Federico Jiménez Losantos ha hecho una valoración de los resultados de las elecciones y ha enumerado los retos de Rajoy.
esRadio  21 Noviembre 2011

Federico Jiménez Losantos ha analizado en Es la Mañana... el resultado de las elecciones generales de ayer en las que Mariano Rajoy ha conseguido aunar el mayor poder de un partido en la democracia. Jimenez Losantos ha comentado que "no ha sido la victoria que predecían las encuestas ya que decían que podía sobrepasarse el disparatado umbral de 202 escaños de los socialistas en 1982". Ha añadido que "en todo caso es una victoria clara con mayoría absoluta y el PSOE ha quedado justamente reducido a escombros".

El director de 'Es la Mañana... ha señalado que "el PSOE se ha sacado a sí mismo 15 escaños con respecto al peor resultado en su historia". Ha recordado que "en las primeras elecciones de la democracia en 1977 tuvo un resultado bastante flojo pero no como lo de ayer con los dos grandes partidos ya asentados que han hecho del duopolio una verdadera trampa para las libertades".

Sobre la entrada de partidos "antiespañoles" en las Cortes, Federico ha comentado que "el problema más grave es que el separatismo vasco y catalán ha salido más fuerte que nunca". Ha indicado que "el PSOE ha cebado la bomba de la ETA y le ha estallado en las narices". Ha señalado que "el resultado socialista en el País Vasco es muy malo, el resultado socialista en Cataluña es todavía peor y el de Andalucía es todavía mejor para el PP".

Para Jiménez Losantos "se dibujan cuatro retos en el horizonte a los que va a tener que hacer frente Mariano Rajoy cuanto antes". Ha comentado que "el primero es el de poner en marcha hoy mismo un mecanismo de respuesta a lo que puede ser una suspensión de pagos en diez días". Federico ha opinado que "la función mediadora que la Constitución atribuye a la Corona se ejecute de verdad y Zapatero se redima en este momento que es breve, pero crucial, para la economía española".

El segundo reto de Rajoy, para Federico, "es la Ley, no puede ser que en España a los jueces y los altos miembros de los tribunales los pongan los políticos". Jiménez Losantos espera que "si Mariano no nombra un Fiscal General de Estado decente por lo menos que no obstaculice la acción judicial y se pueda hacer justicia a las víctimas de 11-M".

El director de Es la Mañana cree que el tercer reto "es muy grave", ha señalado que "en España los ciudadanos no son iguales ante la ley". Espera que "con la ETA más tarde o más temprano se acabará este idilio político pero el problema está también en Cataluña, donde el PP no ha conseguido sacar más votos" en esta región. Federico ha comentado que el verdadero reto de fondo es que "no puede ser que en los territorios donde gobiernan los nacionalistas la ley no se cumpla, es decir, de nuevo Cataluña y el País Vasco".

Jiménez Losantos cree que "es de una obscenidad delirante que con más de un millón cien mil votos, Rosa Díez tenga la cuarta parte de representación de CiU". Ha señalado que "no puede ser que teniendo cuatro o cinco veces el resultado del PNV y de los proetarras tengan los mismos escaños que los primeros y menos que los segundos". Ha sentenciado que "hay que cambiar la Ley Electoral".

Igualmente, Federico ha comentado que "es de resaltar que la participación ha bajado, los españoles estamos hasta las narices de la corrupción política".


Votos baratos y votos caros

PEDRO DE TENA. libertad digital. 29 Mayo 2023


Que los votos se compran y se venden no es nada nuevo. Cualquier mirada aguda desde cualquier ventana de la Historia lo certifica. Pongamos por caso, por lo sublime de su rango, el caso de la compra de votos en la Iglesia. Parece certificado que un cardenal español, Rodrigo Borgia, luego el papa Alejandro VI, compró los votos de los cardenales Orsini, Sforza, Colonna, de Sant’ Angelo, Savelli y, que se sepa hasta ahora, el del cardenal Gerardi de Venecia, a cambio de dinero, propiedades y otros favores.


¿Caso único? No, los griegos clásicos ya sabían de estos manejos antidemocráticos e inventaron una máquina, el kleroterion, que trataba de que el nombramiento para algunas funciones públicas relevantes como los jueces y jurados, por ejemplo, fuesen aleatorias, de entre lo aptos para desempeñarlas, de modo que no pudieran ser compradas o vendidas por quienes querían influir en las decisiones. Idea interesante ésta de los viejos griegos que, más que pretender elecciones limpias de dirigentes políticos, descartada por improbable y tal vez imposible, deseaban nombramientos no controlados de los funcionarios que debían aplicar las leyes y administrar los servicios.


¿Tiene la decencia política y el respeto a los ciudadanos alguna oportunidad? Uno que la defendió y la creyó posible, el colombiano liberal centrista Diego Fajardo, no pudo hacer nada frente al ascenso del infame Gustavo Petro. Decía Fajardo: "Cero mermelada" y añadía: "Nosotros combatimos la corrupción desde la campaña con una condición esencial: ni un peso por un voto... Nadie tiene precio para nosotros. Siempre repito: un voto comprado es un robo asegurado. Si no pagamos para llegar no llegamos a robar. No le debemos nada a nadie… Y una vez ganadas las elecciones, ni un puesto ni un contrato para ningún congresista". Suena bonito. Canción de un mirlo blanco reciente.


No merece la pena decir nada sobre la compra de votos "democráticos" en la España caciquil, a derechas e izquierdas. El fabulador Paul Preston siempre se refiere al mercadeo de sufragios de las derechas, que lo ha habido, pero se olvida, como tantos, del fraude perpetrado ya en 1931 por los republicanos (ordenando repetir las elecciones que perdieron el 12 de abril de ese año mayormente en las localidades en las que perdieron). Incluso, uno de los considerados "venerables" socialistas originales, como Andrés Saborit, fue señalado por incluir a masas de difuntos en el censo electoral de Madrid en 1931. No digamos nada del robo de las elecciones de febrero de 1936, denunciado por el expresidente republicano Niceto Alcalá Zamora y certificado de forma contundente por recientes estudios indudables.


Pero hay votos baratos y votos caros. Durante esta semana pasada, hemos comprobado como el precio de los sufragios para la gente de a pie que hemos ido a las urnas, ciudadanos como usted y como yo, es bien bajo, entre 150 y 200 euros. Con estos votos, se trata de asegurar la victoria o la posición dominante o arbitral en las elecciones de los municipios y comunidades y ciudades autónomas. Verbigracia, caso Mojácar, la de Pedro Sánchez, caso Melilla. O Maracena, donde muchos votos tendrán que ser comprados para que repita el PSOE. Estos son los votos baratos. En Mojácar, la de Félix Bolaños, una ridícula inversión de 150.000 euros, –1.000 votos a 150 euros, una migaja para quienes tengan intereses relevantes—, podría haber dado la alcaldía al PSOE.


Ahora reparen en Maracena. Antes del secuestro de la concejal socialista y del culebrón bipolar del amiguete de la alcaldesa también socialista, ya intentaron comprar el voto y el silencio de la secuestrada para que no molestara. Si al secuestrador le ofrecieron "vivir de puta madre" el resto de su vida, ¿qué le ofrecieron a la secuestrada Vanessa Romero? Pues ya se sabrá, pero mucho. El caso es que no aceptó y de ahí su rapto a punta de pistola.


¿Lo ven? Hay votos mucho más caros. A partir de hoy, que se abre el mercado de las mayorías, el precio de los votos se multiplica exponencialmente. Pero ya los aspirantes a venderlos no son los ciudadanos del montón, sino los políticos electos y sus partidos. Si la compra venta de votos es siempre oscura, a partir de hoy las transacciones serán invisibles porque ninguno de los actores está interesado en desvelarlas. Ni luz ni taquigrafos ni leches.


¿Qué precio real pagó Felipe González a Pujol en las elecciones generales de 1993? ¿Cuál fue el que pagó Aznar al mismo ratero y racista tres años más tarde? Aunque el dinero presupuestario, de ahora o de futuro, es la moneda habitual, a veces se paga en especie, laboral o no, en cosas de comer o en pedazos de alma. ¿Cuánto o qué valdrá el voto de quiénes aseguren la alcaldía de una ciudad importante ( o no tanto)? ¿Cuánto el de quienes sostengan al gobierno de una Comunidad o Ciudad Autónoma?


No, no. Esto no es un rastro. Rastro es lo que no queda nunca, salvo que se sea tonto, o novato, o desinhibidos de Mojácar. Imaginen lo que se puede pagar, aquí o en el extranjero, por hacer a alguien presidente del gobierno a quienes con su voto pueden conseguirlo. Se me dirá que es una suposición… ¿En serio? Lo dicho. Votos baratos para pobres y caros para otros a partir de hoy.


El no siempre clarividente Ortega ya detectó sin embargo "la tendencia fatal en todo Estado de asumir en sí la vida entera de una sociedad". No hay otro remedio, si se quiere que la democracia no sea una farsa macabra, que crear "órganos de socialidad, de cultura, de técnica, de mutualismo, de vida, en fin, humana en todos sus sentidos: de energía pública" al margen del Estado de partidos. Y de moralidad civil, añado, soñando, claro.


La desorbitada factura de la deuda pública: desde que gobierna Sánchez se ha disparado 375.000 millones de euros

JOSÉ MARÍA ROTELLAR. libertad digital. 29 Mayo 2023


Sánchez sigue incrementando el gasto. La semana pasada escribía acerca de los anuncios electorales con medidas destinadas a todo tipo de grupos de ciudadanos, con objeto de tratar de atraer voluntades y llenar las urnas con votos a su partido. Eso incrementará gasto, déficit y deuda, que es el punto final de todo el derroche. Será muy preocupante, porque sin que todavía se recoja el efecto de las medidas electorales de Sánchez, todo su período de gobierno se ha caracterizado por un constante derroche de dinero público, gastando lo que no tiene, endeudando a los españoles y poniendo en riesgo la sostenibilidad de la deuda, ya que sin el apoyo del BCE tendría dificultades, como se vio cuando el BCE decidió acabar con la compra de deuda soberana. Tanto riesgo tiene que el propio BCE tuvo que convocar un consejo extraordinario para anunciar la creación de una herramienta antrifragmentación y, así, calmar a los mercados.


Ese gasto hace que la tendencia de la deuda continúe siendo alcista, que no se frene, que aumente, mes tras mes, el volumen de endeudamiento, cuyos registros, como vemos mensualmente, son los siguientes:


En marzo, la deuda aumenta en 15.351 millones.


La tendencia alcista de déficit y deuda continúa, pese al exceso de recaudación derivada de la inflación, que, además, ya se va ralentizando (crecimiento de ingresos fiscales de un 15% en el ITR-2022 frente al incremento del 2,6% en el ITR-2023, que con la deriva del gasto presionará más sobre el déficit y la deuda)..


La deuda supera ampliamente los 1,5 billones de euros y se sitúa en marzo en 1,535 billones de euros de endeudamiento, con 378.000 millones de euros de incremento desde que gobierna Sánchez (378.019 millones), según las notas iniciales de deuda de las AAPP emitidas por el Banco de España con carácter mensual.


De esta forma, la deuda sigue incrementándose en alrededor de 200 millones de euros al día (214,18 millones) -casi 1.500 millones a la semana, 6.000 millones al mes- desde que gobierna Sánchez.


O dicho de otra manera, Sánchez incrementa la deuda cada minuto en 148.736 euros.


Es decir, mientras un ciudadano hace una pausa de quince minutos para tomarse un café por la mañana, Sánchez habría incrementado la deuda en más de 2 millones de euros.


Y durante una jornada laboral completa, en la que un ciudadano habrá estado trabajando duramente ocho horas, generando actividad económica, empleo y pagando sus impuestos, Sánchez habrá aumentado la deuda en casi 70 millones de euros.


Este grave problema puede poner en peligro a la economía española, tanto por su capacidad para financiarla si el BCE deja de comprar deuda, como por la repercusión de sus intereses en el presupuesto, que mermará recursos para servicios esenciales y que, a su vez, incrementará el gasto.


Esto hay que tenerlo especialmente en cuenta ante las turbulencias financieras ocurridas hace algunas semanas, que han tenido alguna repetición en Estados Unidos: si se reprodujesen más y de forma persistente, que esperemos que no suceda, podría haber un cambio en la política del BCE que dejase más frágil el respaldo de deuda española por parte del BCE o que encareciese su financiación. De momento, se mantiene la política monetaria contractiva a ambos lados del Atlántico.


El incremento del gasto es un problema importante, con el déficit estructural, construido sobre un gasto desmedido, que se ha ido consolidando en el tiempo, como principal problema.


Así, sobre la base de unos ingresos coyunturales, se ha ido asumiendo un incremento del gasto anual en el sector público, especialmente en el Gobierno de la nación, que nos lleva a una situación de insostenibilidad: con una recaudación adicional de más de 30.000 millones en 2022, el déficit sólo se redujo 2 décimas sobre el objetivo, que denota el importante incremento del gasto que se está produciendo.


Este endeudamiento se agravará a lo largo del año, pues los PGE para 2023 vuelven a sustentarse sobre unos ingresos coyunturales, derivados de la inflación -que ya están desacelerándose de manera intensa, con mayor crecimiento de gasto, que incrementará el gasto estructural y el déficit estructural, especialmente con las medidas electorales que está tomando Sánchez.


De esa manera, el déficit estructural español se situará en 2023 cerca de cinco puntos porcentuales sobre el PIB, elemento que señala un grave desequilibrio de la economía española. Déficit estructural que es la gran preocupación de la Comisión Europea.


De hecho, la Comisión Europea, pese a revisar ligeramente al alza la previsión de crecimiento, considera que España no cumplirá con el objetivo de estabilidad del 3% en 2024, al situarlo en el 3,3% del PIB. Eso se debe a que el gasto se está acelerando, de manera que se están desperdiciando los ingresos adicionales derivados de la inflación para reducir el déficit y la deuda. Así, el Gobierno ni deflacta para no subir los impuestos a los ciudadanos como consecuencia de la inflación, ni lo aprovecha para cuadrar las cuentas, ni reduce la deuda, que es una losa que se traducirá en más impuestos futuros para pagarla.


Sánchez no rectifica, pues la disminución de la deuda que algún mes se produce no es real, sino por efecto estadístico del distinto decalaje entre amortizaciones y nueva financiación.


La tendencia, así, sigue siendo alcista -y así seguirá mientras siga habiendo déficit, pues la deuda no es más que el sumatorio de los distintos saldos presupuestarios de cada ejercicio- con la aportación de inestabilidad a la economía que ello supone, como también ha sucedido en el pasado 2022 y sucederá en 2023, pese al incremento extraordinario de recaudación motivado por la inflación, que ya se desacelera a pasos agigantados.


La deuda con esos más de 1,5 billones de euros, supone el 110,52% del PIB español sobre la estimación de crecimiento de PIB nominal del plan presupuestario 2023 que el Gobierno envió a la UE: 1,3892 billones de euros), que asciende al 113% si se emplea el PIB agregado de los últimos cuatro trimestres.


Aunque es obvio que el efecto del denominador derivado del crecimiento del PIB mitiga el cociente, como vemos, seguirá siendo muy elevado porcentualmente y, lo que es más preocupante, creciente en valores absolutos. La cifra de cierre prevista para 2023 por el propio Gobierno es de 112,14%.


Todo ello, nos lleva a que desde que gobierna Sánchez la deuda se ha incrementado en 378.019 millones de euros. Durante el primer año, aumentó en 38.688 millones, y al cabo cuatro años de mandato el incremento es de más de 375.000 millones de euros, según las notas mensuales iniciales publicadas por el Banco de España sobre la deuda de las AAPP.


Así, si durante el primer año creció la deuda por persona en 828,03 euros, en los más de cuatro años de mandato de Sánchez la deuda por persona ha aumentado en casi 8.000 euros (7.967 euros, casi nueve veces el incremento del primer año).


O visto de otra manera: en el primer año, la deuda se incrementaba a un ritmo de 105,99 millones de euros al día. Ahora, tras casi cinco años de Gobierno de Sánchez, la deuda crece 214,18 millones de euros cada día.


De esa forma, seguimos con un incremento exponencial del gasto sin haber recuperado el nivel de actividad económica previo a la pandemia (tal y como corrobora Eurostat, ya que España está casi 1 punto por debajo de su nivel anterior a la pandemia), en un entorno económico complicado, de elevada inflación, siendo muy preocupante la subyacente -la mayor desde hace más de treinta años-, fuertes costes energéticos -que están propagando ese incremento de precios por toda la cadena de valor-, y marco macroeconómico de los PGE irreal. De hecho, todas las instituciones siguen manteniendo sus previsiones –pese a las revisiones coyunturales al alza— por debajo de las previsiones del Gobierno, al tiempo que mantienen unas previsiones de inflación mayores que las previstas por el Ejecutivo.


Es más, la mejora en las revisiones puede ser temporal de materializarse los innumerables riesgos que existen sobre la economía.


Es imprescindible, por tanto, reducir el gasto ineficiente, porque es el origen del problema y vuelve insostenible el mantenimiento de la estructura económica con semejante endeudamiento, y deflactar el IRPF para impedir que los ciudadanos tengan que pagar más impuestos debido a la inflación, que asfixia a los españoles, les hace perder poder adquisitivo y les impide llegar a fin de mes y poder competir, en el caso de las empresas, en los mercados.


La política económica de Sánchez no es otra que la del gasto elevado, el déficit permanente, la deuda exponencial, los impuestos cuasi confiscatorios y el intervencionismo permanente en la economía, y eso dejará a la economía en una situación estructural pésima en el medio y largo plazo.


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ESPAÑA

Vox se consolida como tercera fuerza y será clave en la mayoría de autonomías donde vence el PP

La formación de Santiago Abascal sale fortalecida en las elecciones del 28 de mayo, aunque no logra ser imprescindible en la Comunidad de Madrid

Marina Alías vozpopuli. 29 Mayo 2023


No solo no toca techo, sino que es el partido que más crece. Vox pasa del 3,56% de los votos que tuvo en 2019 al 7,19%, lo que se traduce en un salto de 529 concejales a más de 1.700 y de 47 diputados autonómicos a 119. El partido liderado por Santiago Abascal consigue entrar en todos los parlamentos en juego y hacerse imprescindible en aquellas plazas donde el PP ha ganado, pero no con mayoría absoluta. Es el caso de Aragón, Baleares, Cantabria, Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia. "Vox ha venido para quedarse", celebró este domingo Abascal desde el número 12 de la calle Bambú, cuartel general del partido.


El dirigente político vasco subrayó que, lejos de los que pronosticaban "los agoreros que insistían en su defunción política", el partido ha pasado de los 800.000 a los 1.600.000 apoyos. Además, destacó el papel de sus candidatos "en circunstancias complicadas, incluso de violencia, y en sitios muy difíciles". También han entrado en el Parlamento de Navarra y en las Juntas Generales de Álava, donde su candidato fue agredido en plena campaña.


Desde las filas de Vox celebran haberse consolidado como partido absolutamente necesario para construir una alternativa a los socios separatistas y terroristas del Gobierno de Sánchez. Sin embargo, las mayorías absolutas del PP en la Comunidad de Madrid y en el ayuntamiento no les han permitido convertirse en imprescindibles para entrar en un hipotético gobierno de coalición con Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida, respectivamente. Tras una campaña frenética, Rocío Monasterio ha pasado de los 13 a los 10 parlamentarios, mientras que Javier Ortega Smith sube un concejal.


En este contexto, y pese a los buenos resultados cosechados, Abascal contuvo su euforia. "No vamos a echar campanas al vuelo porque el otro partido está presidido por Alberto Núñez Feijóo y es Feijóo el que tendrá que elegir si quiere alternativa o continuismo", advirtió para después lanzar un órdago al líder de los 'populares'. "Que nadie espere regalos y que nadie espere que Vox acepte trágalas ni chantajes", insistió.


Vox, decisivo en 18 capitales

Asimismo, los resultados de las elecciones municipales celebradas este domingo convierten a Vox en decisivo en 18 capitales de provincia para que el PP sume mayoría absoluta. Además, ha logrado representación en todas las capitales de provincia excepto las cuatro de Galicia, donde su representación en los ayuntamientos de toda la comunidad es mínimo, las tres vascas y tampoco en Cádiz. Galicia y País Vasco continúan siendo una suerte de kryptonita para Abascal.


En cambio, Vox se convierte en decisivo para la suma de mayorías absolutas en hasta 18 capitales de provincia. En Andalucía, el PP deberá buscar su apoyo para ser elegido en primera vuelta en Sevilla, donde ha triplicado el resultado, en Huelva y en Córdoba.


En Cataluña, logra entrar por primera vez en los ayuntamientos de las cuatro capitales de provincia

Los 'populares' también necesitarían sus votos en Toledo, Guadalajara y Ciudad Real en Castilla-La Mancha; en Cáceres; en Valencia, Castellón y Alicante, las tres provincias de la Comunidad Valenciana; y en Segovia, Valladolid y Burgos en Castilla y León. Por otro lado, habría mayoría de PP-Vox en el Ayuntamiento de Oviedo; en los de Huesca y Zaragoza en Aragón; y en el Consistorio de Palma, en Baleares, donde pasa de cero escaños en 2019 a siete en estas elecciones.


En Cataluña, los concejales de Vox no suman mayorías alternativas, pero logra entrar por primera vez en los ayuntamientos de las cuatro capitales de provincia. En la comunidad catalana, Vox pasa de solo tres concejales a 124 representantes. Ignacio Garriga, secretario general de Vox y líder del partido en el Parlament, celebró las cifras que consagran a la formación como "el partido nacional de referencia en Cataluña"»". "Vox es decisivo", repitió a lo largo de su comparecencia.


Trayectoria del partido

Vox irrumpió en las instituciones por primera vez el 2 de diciembre de 2018. Los días previos a las elecciones autonómicas de Andalucía las encuestas más optimistas daban al partido de Abascal un máximo de dos diputados. Para sorpresa de los demoscópicos, el juez Francisco Serrano -ya defenestrado- y su equipo se hicieron con 12 escaños y el Parlamento andaluz se convirtió en la primera conquista de la formación tras concatenar varias derrotas.


La semilla plantada por Vox en el sur del país a finales del año pasado germinó en 2019. Fundado en 2013, el partido ha experimentado una auténtica eclosión en los últimos años hasta convertirse en tercera fuerza política en el Congreso de los Diputados, por delante de las formaciones a las que no hace tanto tiempo se consideraba "emergentes".


Vox irrumpió en las instituciones por primera vez el 2 de diciembre de 2018, en las elecciones andaluzas

Tras la ruptura del bipartidismo y con los proyectos de Ciudadanos y Unidas Podemos consolidados en la Cámara Baja, Vox fue floreciendo regado por el descontento ante la debilidad de la clase política para alcanzar acuerdos de Estado, las amenazas constantes a la unidad de España por parte del secesionismo catalán, los chantajes del nacionalismo periférico y las desigualdades entre las distintas comunidades autónomas.


Creció también a lomos de su discurso contra la inmigración ilegal, contra el "fracaso" de las autonomías donde ahora podría entrar y contra el gasto político excesivo. También contra la violencia de género, contra el "supremacismo feminista", contra las exhumaciones, el "alarmismo climático", los "filoetarras" de Bildu y, en los últimos tiempos en defensa del campo y la España agrícola. En definitiva, contra todo lo que Vox denomina "dictadura progre".


28 de abril es la fecha en la que el partido vivió su particular primavera. Ya había conseguido los 12 parlamentarios en la Andalucía de Susana Díaz, pero faltaba saber si este éxito podía ser extrapolable a unas generales. No era la primera vez que Vox concurría a unos comicios a nivel nacional y los resultados anteriores habían dejado mucho que desear. Pero finalmente sacaron 24 escaños y se convirtieron en quinta fuerza parlamentaria.


La legislatura duró nada y menos. Sus 24 diputados participaron en los Plenos desde el gallinero. Era el lugar que PSOE y Podemos habían reservado a los recién llegados. Llegaron las elecciones del 10 de noviembre. El partido desplegó a todos sus dirigentes por cada rincón de España. Abascal dio más mítines que nunca e, incluso, se atrevió a mostrar su faceta más personal en 'El Hormiguero', el programa de Atresmedia conducido por Pablo Motos. Finalmente, lograron 52 diputados y se erigieron como tercera fuerza política del país. No fue hasta hace un año cuando entraron por primera vez en un gobierno autonómico. Es el caso único de Castilla y León que ahora pretenden replicar en otras autonomías, aunque reconocen que las negociaciones no pintan fáciles.


España se hartó de Sánchez

EDITORIAL. libertad digital. 29 Mayo 2023


El resultado de estas elecciones autonómicas y municipales es inequívoco: la derecha en general y el PP en particular han logrado una victoria espectacular. El PSOE pierde prácticamente todos los gobiernos que tenía, con la única excepción de Asturias, donde el cambio era prácticamente imposible pero ha estado cerca, y Castilla-La Mancha, donde García-Page ha aguantado por los pelos.


Valencia, Baleares, Aragón han sido victorias más cómodas de lo esperadas para la derecha, Extremadura ha sido una sorpresa feliz y en la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso ha logrado una mayoría absolutísima que tiene un enorme significado político y es una reivindicación ya definitiva de la presidenta madrileña.


La debacle socialista y de la izquierda también ha llegado en las municipales: la derecha recupera ciudades tan importantes como Valencia o Sevilla, gobernará en todas las capitales andaluzas, tiene la mayoría absoluta en Madrid y, encima, el PSOE no puede consolarse ni siquiera con una alcaldía de Barcelona que parecía segura a mitad de campaña.


Cuando la derrota llega en tantos lugares y circunstancias distintas, cuando afecta a perfiles tan diferentes como Puig, Lambán o Fernández Vara, sólo tiene una explicación: España se ha hartado de este PSOE, de Sánchez, de sus políticas y de sus pactos con terroristas, separatistas y todo tipo de delincuentes.


Aunque en política no siempre se manda la lógica, es cierto que un resultado así era lo que cabía esperar y lo que merecen sin ninguna duda alguna el peor gobierno de la historia de nuestra democracia y el presidente más nefasto que se recuerda: su política de permanente huida hacia delante, su falta de respeto por las instituciones y la democracia misma le han pasado factura por fin. La gran mentira ya es insostenible.


Y no sólo ha sido Sánchez: el Gobierno en conjunto sale muy tocado después de que Podemos haya desaparecido en Madrid y en la Comunidad Valenciana y se haya desplomado en Asturias y Baleares. Y tampoco los miembros del Sumar de Yolanda Díaz han tenido buenos resultados: Compromís ha caído en las autonómicas y ha perdido Valencia, Colau ha hecho lo propio en Barcelona y en Madrid ni Mónica García ni Rita Maestre han logrado buenos resultados.


Aunque ni el PSOE ni Sánchez son de fiar y en la situación en la que han quedado son extremadamente peligrosos, porque son capaces de cualquier cosa, es casi imposible que remonten democráticamente este resultado de aquí a diciembre: tal y como buscaba el PP, esta noche electoral ha sido el primer partido de una eliminatoria que debería acabar con los socialistas alejados del poder.


Por último, aunque la victoria de la derecha es incontestable estas elecciones también tienen varios mensajes para PP y Vox: el primero es que si quieren rentabilizar al máximo este resultado es necesario que lleguen a acuerdos con la máxima rapidez y sin las escenificaciones habituales.


Y el segundo, que una vez más ha quedado claro que cuando uno de esto partidos se dedica a confrontar con el otro en lugar de luchar contra Pedro Sánchez, su resultado es peor. Ahí está el fracaso de Rocío Monasterio en Madrid, donde no sólo ha perdido casi un tercio de los votos sino que se ha convertido en irrelevante. Les guste o no, están condenados a convivir y a colaborar, es hora de que lo asuman y actúen en consecuencia.


Los votos y los medios

Nota del Editor. 29 Mayo 2023


Por mucho que defiendan al pp, los hechos demuestran y han demostrado que no son de fiar. El pp tiene especialmente en Madrid, una potente maquinaria de televisiones, instituciones, medios afines en prensa y radio que se han dedicado a machacar a Vox, lo mismo que las televisiones y medios afines del psoe. Y cada vez que veo al tal Núñez, continuador machacador de los español hablantes en Galicia, es que ya no los puedo ni ver.


El PP de Feijóo tritura al sanchismo

OKDIARIO. 29 Mayo 2023


Los resultados en conjunto de las elecciones municipales no dejan lugar a dudas y dibujan un cambio político de enorme magnitud, pues permiten establecer una comparación con los registrados hace cuatro años. Entonces, el PSOE de Pedro Sánchez obtuvo más de 6.600.000 votos, aventajando al PP de Pablo Casado -que logró cinco millones- en más de millón y medio de sufragios. Esa distancia se reflejó meses después en las elecciones generales que dieron el poder al socialcomunismo. Hoy, el PP de Feijóo aventaja al PSOE en más de 700.000 votos, lo que supone una profunda transformación del paisaje político español.


Parece evidente que el sanchismo toca a su fin y que el resultado de las municipales -la primera gran cita a nivel nacional con las urnas desde 2019- es indiciario de un cambio de dimensiones colosales. A nadie se le oculta que el retroceso del socialismo, que pierde la práctica totalidad de su poder territorial, es consecuencia directa de las políticas frentistas y sectarias de un presidente del Gobierno que, con tal de garantizarse su supervivencia política, no ha dudado en echarse en brazos del populismo de ultraizquierda que encarna Podemos y de tejer ignominiosos acuerdos con los golpistas catalanes o los etarras de Bildu, minando con perseverancia extrema el entramado institucional sobre el que se asienta el Estado de Derecho y engendrando leyes nefastas que responden únicamente al código de valores de una izquierda reaccionaria.


Por contra, el incremento en votos del PP responde a la gestión de un Alberto Núñez Feijóo que en poco tiempo ha situado a su partido en las coordenadas de moderación y centralidad, no exentas de firmeza frente al socialcomunismo, que le han permitido recuperar buena parte del electorado perdido tras absorber por entero a Ciudadanos, formación que desaparece literalmente del mapa. En cuatro años, el PP ha vuelto a emerger con fuerza y a postularse como gran alternativa de gobierno frente a un PSOE que, de la mano de Pedro Sánchez, sencillamente agoniza.


España: cordura y drama

JAVIER SOMALO. libertad digital. 29 Mayo 2023


El problema de Pedro Sánchez —lo es también para España— es que es presidente por accidente. Su ilegitimidad viene de que juró —sin Dios, pero repetidamente y en público— que no pactaría con los que pactó, que son los que ahora llegan al poder en las tierras sin Ley. De haber mantenido su promesa, esa dignidad que no conoce ni le visitará, no habría llegado al Gobierno de la nación.


La gran noticia de este 28 de mayo es que el peor PSOE de los últimos tiempos, con sanchistas y no sanchistas, se va a su casa en casi toda España. Pedro Sánchez se bajará del Falcon en diciembre si no lo hace antes pero de momento, este domingo por la noche no ha salido de su madriguera, muestra inequívoca de su escasa gallardía y de que ya sólo cabe esperar un control de daños personales acorde con su egoísmo.


Que en Madrid queden claras dos mayorías absolutas significa mucho. El PP podrá demostrar sin zancadillas — "en libertad", ha dicho Ayuso con alivio— si el liberalismo es o no mejor que el socialismo y el proteccionismo doctrinario. Además, desaparece Podemos, el populismo más peligroso y con peores intenciones, amén de nulo en cualquier atisbo de gestión administrativa. Los perseguidores, de uno y otro signo, recogen, pues, sus bártulos y se van al rincón de llorar tras las contundentes victorias de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida.


El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, compareció ante la primera victoria colectiva del partido bajo su mandato. Se ve más cerca de la Moncloa pero sabe que todavía no puede arrogarse los éxitos, como sí hiciera su malogrado antecesor Pablo Casado. De momento, ha mostrado prudencia —le sobraron minutos de intervención, eso sí— al dejar claro que la clave de bóveda es Madrid, donde la política del PP, sobre todo la de Ayuso, es la que más conecta con la base electoral real de la derecha, que sigue suponiendo en torno a once millones de votantes. Es un análisis que requiere pocos matices, ninguno si se tiene en cuenta que quedan seis meses para demostrar si el vuelco de mayo es nacional.


De momento, el cambio es evidente. Los ayuntamientos de Andalucía caen también del lado del PP con especial énfasis en el de Sevilla, de José Luis Sanz, otra conquista de especial valor contra la izquierda. En Valencia (ciudad y Comunidad), en Aragón o en Extremadura (también en Murcia o en Baleares) PP y Vox tendrán que demostrar si son partidos de Estado o prefieren afilar diferencias en contra del centro derecha social.


Los ciudadanos ya han demostrado gran cordura votando contra la corrupción, el clientelismo y el retraso económico del comunismo. El PP, en mayor o menor medida según los escenarios, necesitará a Vox para gobernar y ambos partidos están obligados a hacerlo sin lucimientos estériles. Sus errores y vanidades los pagamos los demás. Madrid debería ser una referencia en caso de dudas o tentaciones.


La cara amarga

El drama del 28-M viene del separatismo. No porque allí voten de otra manera o sean diferentes sino porque han echado a los españoles, a los constitucionalistas. Es el censo de la vergüenza. Los echaron a tiros, a pedradas en los cristales, con insultos, acoso y amenazas. Los mataron también. ¡Fora! ¡Kanpora! Y ahora votan los que se pueden quedar. Engordaron a Pedro Sánchez a cambio de mandar, de quedar impunes, de esconder a los muertos guardando las pistolas, siempre a mano, en la mesita de noche.


Ahora tienen fuerza indiscutible allí donde una vez se les pudo echar para siempre, entre PP y PSOE. Porque se les pudo echar, no eran más. Un drama sin paliativos que puede apuntarse como éxito, sin duda alguna, Pedro Sánchez.


Esta noche y las venideras merecerá sufrir aquel insomnio que fingió antes de abrazar a Pablo Iglesias, el mejor resumen de nuestros peores males. Pedro Sánchez se bajará del Falcon habiendo dejado a ETA metida en los despachos, un golpe de Estado como forma de gobierno en Cataluña y al comunismo creyendo seriamente en el asalto al poder.


El PP no se puede tomar ni un día libre para celebraciones.


Delendus est Sánchez

Ignacio Ruiz-Jarabo. vozpopuli. 29 Mayo 2023


La derrota electoral cosechada ayer por Pedro Sánchez es incuestionable. Su partido ha pasado de ser en 2019 el primero en el voto municipal con más de siete puntos porcentuales sobre el PP, a ser el segundo a una clara distancia del primero. Y si se cumplen las expectativas lógicas, cuando dentro de unas semanas se conformen los nuevos Gobiernos autonómicos y municipales el PSOE perderá parte del poder territorial del que ha dispuesto hasta ahora.


La derrota de Sánchez era esperada y es merecida. Se esperaba pues lo venía anunciando el consenso demoscópico del que solo Tezanos ha sido una vez más la cabra suelta. Y que ha acumulado méritos a lo largo de su estancia en La Moncloa para caer ahora derrotado es una verdad clamorosa. A su nefasta gestión de Gobierno, que por reiteradamente analizada renunciamos en este momento a exponer, ha sumado una precampaña y una campaña electoral que le han desnudado ante la sociedad española pudiendo ésta percibir la auténtica esencia de Sánchez, un gobernante impropio de un país desarrollado y un político ayuno de las mínimas dosis de seriedad y responsabilidad exigibles.


El show que ha protagonizado intentando atraer votos mediante sucesivos anuncios electoralistas pasará a los anales de la sinvergonzonería política. La indignidad de acudir a los mítines preelectorales y electorales anunciando medidas que eran después aprobadas en el siguiente Consejo de Ministros ha supuesto un intento de tomar el pelo a la sociedad española, ha caricaturizado a su Gobierno y, por cierto, ha constituido también una deslealtad para con sus socios de Podemos que se enteraban por las crónicas de la campaña electoral del PSOE de lo que iban a aprobar después como ministros. Junto a lo expuesto, Sánchez ha abierto en canal el grifo de nuestro gasto público, dificultando así aún más el futuro combate por reconducir el déficit a la dimensión máxima establecida en las reglas fiscales de la Unión Europea, cuestión a la que parecen nos van a obligar el año que viene. Sanchismo en estado puro.


Qué decir de su bochornoso silencio y el de los ministros de su partido durante las 36 horas siguientes a conocerse el contenido de sangre presente en las listas electorales de Bildu, su socio parlamentario preferente con el que se comprometió a no pactar y ha pactado hasta su propia investidura como presidente de Gobierno. Pasado el tiempo reseñado y tras limitarse a calificar de “indecente” la cuestión, volcó su ilimitada ferocidad hacia el PP acusándole de no olvidarse de ETA cuando ésta lleva ya doce años sin asesinar y formalmente disuelta. Y lo ha dicho él, que está permanentemente agitando el franquismo que terminó hace en 1.977, hace 46 años y no 12, y la guerra civil que finalizó en 1.939, hace 84 años y no 12. Delicia genuinamente sanchista.


Y ha resultado completamente soez su postura en relación con el ilegal mercadeo de los votos por correo. Habiendo sido detenidos varios militantes y dirigentes del PSOE por la presunta comisión del citado delito en diversos municipios de varias provincias, Sánchez no ha dado explicación alguna y lo único que ha dicho al respecto es acusar al PP de “embarrar la política”. Él, que es el secretario general del partido al que pertenecen los presuntos delincuentes electorales, se atreve a acusar a otros del lodazal que han creado los suyos. Sanchismo químicamente perfecto.


Por lo expuesto y por otras varias razones, Sánchez ha perdido las elecciones locales de ayer. Y si el cuerpo electoral español se comporta en el futuro inmediato como lo ha hecho en el pasado mediato, también ayer ha empezado a perder las próximas elecciones generales. De modo que sí, que todo apunta a que el final de Sánchez y el sanchismo está próximo, es inminente. Personalmente considero que se trata de una buena noticia para España y para nuestra democracia, pero no puedo dejar de expresar mi preocupación por el peligro que hemos de afrontar en los próximos meses.


Dos son las circunstancias que motivan el peligro al que me he referido. Una, que Sánchez no se rinde fácilmente tal y como ha demostrado en su trayectoria. Dos, que no tiene escrúpulo alguno a la hora de plantear las batallas políticas. Que alguien así vea próximo su posible desahucio del puesto que ocupa pero que hasta entonces disponga del poder que otorga el Boletín Oficial del Estado para intentar evitarlo me provoca auténticos escalofríos. El daño que de aquí a diciembre puede ocasionar Sánchez a España, a su democracia, a sus instituciones y a su economía resulta inimaginable. Evitarlo o reducirlo es una tarea que compete a la oposición política, al entramado institucional aún no colonizado por el sanchismo, a los medios de comunicación que no están enchufados económicamente al poder de Sánchez y, en fin, al amplio conjunto de los españoles que queremos mantener nuestro sistema democrático como fue constitucionalmente concebido. Nos va mucho en el envite, prácticamente todo. Y esto no es un juego.


El PSOE pierde poder territorial

El plebiscito sobre Sánchez ha condenado al PSOE con una sentencia inapelable. Ha perdido el grueso de su poder territorial, muchas alcaldías y el PP le supera en unos 800.000 votos

Editorial ABC. 29 Mayo 2023


Pedro Sánchez quiso convertir estas elecciones municipales y autonómicas en un examen personal de sus políticas y las urnas se han expresado con una aplastante rotundidad. El PP ha aventajado al PSOE en más de 800.000 votos y la práctica totalidad de territorios que estaban en disputa han caído del lado de los populares. En clave autonómica, el Partido Socialista ha perdido Valencia, Aragón, Extremadura, La Rioja, Cantabria y Baleares, y se ha demostrado incapaz de desafiar los gobiernos de Murcia y Madrid. El mapa de España ha quedado teñido de azul y la pérdida de poder territorial del PSOE no encuentra precedentes. Lo más parecido fue la derrota de Rodríguez Zapatero el 11 de mayo de 2011, pero en aquella ocasión nuestro país se encontraba inmerso en una crisis económica global que sin duda decantó los resultados. Ahora el castigo de la ciudadanía no puede achacarse a ninguna causa externa ni al contexto internacional. Los españoles se han pronunciado con extraordinaria claridad y han reprobado las políticas del Gobierno de Pedro Sánchez y, sobre todo, su insólita geometría de pactos.


La derrota socialista supera, con mucho, los peores augurios que se habían realizado desde Ferraz y La Moncloa. La debacle sin paliativos que han sufrido los socialistas en las elecciones autonómicas encuentra un correlato casi perfecto en las elecciones municipales. El PSOE pierde Sevilla así como Valladolid, Valencia, Gijón, Murcia, Toledo, Coruña, Cáceres, Badajoz o Huelva. Durísimo. Ni siquiera Barcelona, que se había planteado como un posible premio de consolación y que adquirió un papel protagonista en el cierre de campaña, puede servir para minimizar los daños de este duro correctivo electoral. El Partido Socialista no tiene ningún dato sobre el que articular un relato mínimamente optimista como demuestra la incomparecencia de Sánchez, que ni siquiera acudió a la sede socialista de Ferraz.


Una de las herencias que deja Sánchez es el reforzamiento de Bildu, partido al que no sólo ha considerado un socio prioritario de legislatura, sino al que también ha blanqueado maquillando su pasado como brazo político de ETA. Los titubeos mostrados por el PSOE al conocer que había etarras en las listas de Bildu han sido demoledores para los socialistas, y el efecto conseguido es el de haber 'normalizado' al partido de Otegi, que ha pasado de 930 concejales en 2019 a cerca de 1.400 ahora, con un bagaje de casi 400.000 votos. De hecho, Bildu gana en dos relevantes capitales como Vitoria y Pamplona. Los resultados de Bildu generan alarma, especialmente en el PNV, porque con una extrapolación de estos resultados a unas autonómicas vascas, tiene factible acceder a la Lehendakaritza y abrir un nuevo desafío independentista al Estado, con el añadido de que sería el partido secuela de ETA quien lo pueda poner en marcha. Bildu, sin duda, se convierte así en una de las principales amenazas a nuestra democracia. También es relevante la práctica desaparición de Ciudadanos y la relevante pérdida de peso específico de Podemos, lo que determinará las alianzas futuras de Sumar.


En estas elecciones el presidente Sánchez ha arrastrado al PSOE a una derrota que tal vez se podría haber evitado si los barones territoriales hubieran ejercido con responsabilidad su liderazgo y si hubieran confrontado el rumbo insólito de la legislatura. Es seguro que muchos líderes locales hoy estarán lamentándose por no haber exhibido una mayor distancia con el presidente del Gobierno al modo en que lo hizo, por ejemplo, Juan Lobato, a quien al menos le queda el consuelo de haber recuperado terreno para el PSOE en Madrid tras enfrentarse a las directrices oficialistas.


Es de justicia conceder que si estas elecciones las ha perdido el PSOE es porque, también, las ha ganado el Partido Popular. El rotundo éxito de los de Núñez Feijóo evidencia de forma irrefutable la recuperación del partido que, tras sufrir una intensa crisis reputacional, regresa para ejercer una robusta hegemonía desde las que encarar las próximas elecciones generales. La de Alberto Núñez Feijóo, Isabel Díaz Ayuso y otros líderes regionales es la estampa de una victoria pero, sobre todo, es el preludio de lo que puede ocurrir en las generales de diciembre. Pese a todo, nada está ganado y es seguro que veremos al presidente del Gobierno idear nuevos golpes de efecto que intenten revertir lo que, a todas luces, parece anunciar un cambio de ciclo político.


El PP tiñe de azul el mapa autonómico y deja en las raspas al PSOE

OKDIARIO. 29 Mayo 2023


Al final, el resultado del PP en los distintos territorios se convirtió en un tsunami: el PP revalida su hegemonía en las comunidades de Madrid y Murcia y está en condiciones de arrebatar al PSOE, con apoyo de Vox, los gobiernos de Valencia, Aragón, Baleares, Extremadura y La Rioja. En Cantabria destrona a Revilla, mientras que un acuerdo con Coalición Canaria permitiría también desalojar del archipiélago a los socialistas. En definitiva, el PP podría gobernar en 12 autonomías, dejando al PSOE sólo con los gobiernos regionales de Asturias, Castilla-La Mancha y Navarra, aquí con el apoyo de los proetarras de Bildu.


El vuelco es brutal: sólo Page en Castilla-La Mancha y Barbón en Asturias aguantan la embestida de la derecha, pero en este último territorio dependerá de la ultraizquierda para seguir gobernando. Pocas veces hemos asistido a una transformación del paisaje autonómico como la que acaba de salir de las urnas. El PSOE se queda en las raspas y de los dos territorios donde mantiene el poder pierde la mayoría absoluta en Asturias. El sanchismo ha provocado una auténtica masacre: ha acabado por arrastrar al abismo a sus barones: Puig (Valencia), Lambán (Aragón), Armengol (Baleares), Vara (Extremadura), Andreu (La Rioja) y Torres (Canarias) han sucumbido con estrépito.


Es lo que tiene permanecer callados y mirar para otro lado ante la ignominiosa estrategia de pactos de Pedro Sánchez con los golpistas catalanes y los etarras de Bildu. El electorado se los ha llevado por delante. El socialcomunismo ha caído como un castillo de naipes: el PSOE se hunde y sus socios se estrellan. El mensaje de las urnas es claro y obligaría a Pedro Sánchez, si tiene un atisbo de cordura, a cambiar de rumbo. No lo hará y descargará las culpas de su derrota sobre los hombros de sus barones. Por cierto, a nivel municipal, el socialismo se queda sin Valencia, Sevilla o Valladolid, entre otras grandes ciudades. Y no logra la victoria en Barcelona. Un naufragio en toda regla.


Las anomalías catalana y vasca

Miquel Giménez. vozpopuli. 29 Mayo 2023


Para quien esto escribe resulta tristísimo escribir acerca de los resultados electorales en Cataluña y las Vascongadas sin saber todavía los resultados exactos. Porque dan igual y ya me los sé. Gane quien gane en Barcelona, por poner un ejemplo, la ideología catalanista pijoprogre estará situada en los sillones del poder. Colau, Collboni, Trias y Maragall representan ese pensamiento único, hegemónico y totalitario que se ha impuesto en mi tierra. Fuera del mismo no hay rendija por la que introducir una palanca para romper décadas de ausencia del estado, cuando no de complacencia y apoyo a quienes defienden que “esto” de aquí es otra cosa diferente a España.


Ni que decir tiene que los vascos están todavía peor, porque ahí el debate se produce entre PNV y Bildu. Muerte o muerte. Susto o susto. Imposición o imposición. A diferencia del resto de España, dónde se dirime si el comunismo revestido de sanchismo va a seguir arruinando a los españoles, en estos dos territorios históricos no cabe tal posibilidad, porque esa disputa no existe. No se consideran españoles y, por tanto, su guerra es otra.


Ni que decir tiene que los vascos están todavía peor, porque ahí el debate se produce entre PNV y Bildu. Muerte o muerte

Claro está que una victoria socialista en Barcelona será capitalizada por el que vive en Moncloa y que un incremento del PSC lo venderá como un éxito de pacificación. Pero todos sabemos que claudicar no es pacificar y que el virus que ha expulsado de las vascongadas a miles de votantes constitucionalistas desde hace años, dejado solos a quienes defienden la ikurriña, el euskera, la capucha más o menos disimulada y los onguietorris es el mismo, en esencia, que el catalán.


En mi tierra el catalán es obligatorio y el español es una provocación – hace poco una ex consejera decía que había que “eliminar” a aquellos candidatos que hablasen en español en los debates de TV3 y no ha pasado nada -, el referéndum es de sentido común, la convivencia es perfecta y a VOX casi ni se le ha mencionado en TV3 y otros medios catalanes con muchísimo más descaro que en TVE, lo que ya es decir. El mantra es el mismo: som una nació.


En mi tierra el catalán es obligatorio y el español es una provocación, el referéndum es de sentido común, la convivencia es perfecta y a VOX casi ni se le ha mencionado en TV3 y otros medios catalanes con muchísimo más descaro que en TVE, lo que ya es decir

Ambas anomalías son ácido para la democracia española, porque han contaminado a regiones limítrofes con ellas: Valencia y Baleares en el caso catalán y Navarra en el vasco. Ese germen podrido que es el nacionalismo anula la dicotomía derecha-izquierda porque todo lo subsume en la identidad nacional. ¿Eres o no catalán? Y ahí se acaba el asunto, porque se reservan el derecho a decidir quién puede y quien no otorgar tal título. De ahí que viendo los resultados que van dando y vea unos lugares de azul y otros de rojo me detenga a mirar estas dos comunidades autónomas que cito en el titular.


Con menor participación, porque esto no va mucho con ellos, demuestran que hay ya una parte del territorio nacional que, si no se ha perdido para siempre, sí precisa de una intervención rápida y urgente. Porque ahí da igual que quien gane sea de izquierdas o más de derechas que el palo de la bandera. De la estelada, claro. Todos son nacionalistas, todos sustentan el mismo mantra y si unos representan el papel de moderados y los otros el de talibanes es por azar, asunto de cama, tradición familiar, provecho crematístico o pura chiripa. Si los juntas y los pones a hablar del fet diferencial no habrá ni uno solo que discrepe. De ahí que, o PP y VOX empiezan a trabajárselo muy en serio en las generales o habrá dos lugares que, aun participando en los comicios nacionales, serán otra cosa. Como si pudiesen votar esquimales y habitantes del Kalahari. Y es que los que defendemos la Constitución y a España cada vez somos menos en población porque la gente se va de Cataluña como en su día hicieron los vascos de su tierra. Y en los madriles o nos encontramos con un sanchismo promotor de indultos o con un PP que habla de catalanismo constitucional y se jacta de entenderse mejor con uno del PNV que con uno de VOX.


Basta ya de anomalías, señores.


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