Recortes de Prensa Domingo 19 Mayo 2024


La ofensiva rusa en Jarkov dispara las bajas rusas en combate y hacen dudar de su éxito

Las tropas rusas están sufriendo unas bajas insostenibles que hacen dudar de la viabilidad de la ofensiva en Jarkov

Miguel Pérez Pichel. el debate. 19 Mayo 2024


Si bien es cierto que Putin y su alto mando han demostrado que les importa poco la cifra de bajas en combate, lo cierto es que los números de caídos estos últimos días son llamativos.


La ofensiva rusa en la región de Jarkov, con la apertura de un nuevo frente que ha permitido a las tropas del Kremlin penetrar más de ocho kilómetros dentro de Ucrania, está dejando más de 1.500 muertos y heridos al día entre las filas rusas, según difundió el ministerio de Defensa ucraniano.


Lo cierto es que antes de la apertura del nuevo frente, Rusia ya registraba cifras cercanas o incluso superiores a los 1.000 muertos y heridos al día. Cifras insostenibles pese, a lo cual, la maquinaria de guerra rusa siguió funcionando sin importar el reguero de cadáveres y sin mostrar signos de agotamiento.


Rusia tiene unas reservas, no solo materiales, también humanas, enormes que le permite aguantar el ritmo de la guerra con independencia de lo que ocurra en el campo de batalla. La pregunta es: ¿hasta cuándo podrá sostener esta cifra de bajas?


La capacidad de resistencia rusa a los muertos en sus tropas ya le jugó una mala pasada al exjefe del Ejército ucraniano, Valerii Zaluzhnyi, quien reconoció que erró su previsión de que una alta cifra de bajas obligaría a Rusia a poner fin a la guerra. No fue así y Ucrania fracasó en su última gran contraofensiva, en verano de 2023.


Las cifras son llamativas. En la jornada del 15 de mayo Rusia sufrió 1.520 bajas. El día anterior, sufrió 1.510 muertos y heridos. El 13 de mayo murieron 1.400 soldados rusos en combate. Las cifras siguen similares en los días previos.


La cifra más alta de bajas rusas en combate se produjo el 12 de mayo, con 1.740 muertos y heridos.


El Kyiv Post, en un análisis sobre el tema, afirma que las muertes de soldados rusos y los heridos sin posibilidad de regresar al combate están alcanzando «cifras récord».


Según el periódico ucraniano, pese al avance ruso, lo cierto es que las tropas del Kremlin se están enfrentando a una respuesta brutal de la artillería ucraniana y de los sistemas de drones.


Si las fuerzas rusas ganan terreno es por el empleo masivo de tropas como carne de cañón oleada tras oleada. Sin embargo, cada metro ganado se avanza a un altísimo coste de bajas rusas.


La televisión ucraniana señaló que los rusos están muriendo en grupos, con cifras equivalentes a batallones aniquilados prácticamente enteros. Batallones inmediatamente reemplazados por la trituradora de carne rusa, que parece no agotarse.


Kyiv Post señaló también que, lejos de la imagen de desbandada desorganizada de los ucranianos difundida por los órganos de propaganda rusos, las tropas ucranianas están monitoreando con drones la incursión rusa, seleccionando detenidamente sus blancos y eliminando de forma metódica a todos los objetivos.


Los rusos han logrado avanzar rápidamente los primeros kilómetros más allá de la frontera, pero se han comenzado a frenar al estrellarse con las primeras líneas fortificadas ucranianas, situadas a 12 kilómetros de la línea fronteriza.


Ucrania acusa a Rusia de estar bombardeando civiles en la región de Járkiv

Henar Andrés. Madrid. el mundo. 19 Mayo 2024


Guerra en Ucrania Cientos de ancianos se niegan a evacuar sus casas, pese al avance ruso en Járkiv: "Si tengo que morir por una bomba de los rusos, pues moriré"


En plena ofensiva rusa en la región de Járkiv, Ucrania ha acusado a Moscú de estar atacando a la población civil. La fiscalía ucraniana está investigando como posible crimen de guerra un ataque aéreo ruso contra una zona residencial de la segunda ciudad más poblada del país, en el que resultaron heridos seis civiles, entre ellos tres menores de 16, 13 y ocho años.


Por su parte, Volodími Zelenski ha asegurado en su discurso nocturno que sus tropas se encontraban en una posición más segura en la región de Járkiv pese a que Rusia se atribuyó la conquista del pueblo de Starytsia. "El ocupante está perdiendo su infantería y su equipo", afirmó el presidente ucraniano, que también desveló que los soldados ucranianos habían repelido un ataque ruso en torno a Chasiv Yar, en Donetsk.


Ucrania ha informado de que sus defensas han destruido los 37 drones de ataque lanzados por Rusia durante esta madrugada en todo el territorio.


Mientras, las autoridades rusas han asegurado que seis drones lanzados por Ucrania se estrellaron en una refinería de petróleo en Slavyansk, en la región de Krasnodar.


9:15

Seis drones se estrellan en la refinería de petróleo en el sur de Rusia

Seis drones se estrellaron en una refinería de petróleo en Slavyansk, en la región de Krasnodar, en el sur de Rusia, durante un ataque nocturno de Ucrania, informó la agencia de noticias Interfax citando a las autoridades locales.


Anteriormente, el Ministerio de Defensa ruso había informado de que sus fuerzas habían derribado nueve misiles estadounidenses ATACMS sobre Crimea y al menos 60 drones sobre territorio soberano ruso.


8:15

La fiscalía ucraniana investiga ataques a civiles en la región de Járkiv

La fiscalía ucraniana dijo que está investigando como posible crimen de guerra un ataque aéreo ruso contra una zona residencial de la capital regional, Járkiv, en el que resultaron heridos seis civiles, entre ellos tres menores de 16, 13 y ocho años. Moscú niega haber atacado deliberadamente a civiles, pero miles de ellos han muerto o resultado heridos desde el inicio de la guerra.


En Vovchansk, ciudad situada a sólo 5 km de la frontera rusa, los bombardeos rusos mataron a una mujer de 60 años e hirieron a otros tres civiles. También resultó herido un hombre de 59 años en el pueblo de Ukrainske.


8:10

Zelenski afirma que la situación ha mejorado en Járkiv

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha asegurado en su discurso nocturno que las fuerzas ucranianas se encontraban en una posición más segura, en particular en la región de Járkiv. "El ocupante está perdiendo su infantería y su equipo, una pérdida tangible. Aunque, al igual que en 2022, contaba con un rápido avance sobre nuestra tierra", afirmó el mandatario refiriéndose a la invasión inicial rusa.


Sin embargo, el Ministerio de Defensa ruso declaró que sus fuerzas habían capturado el pueblo de Starytsia este sábado, ocho días después del inicio de una nueva ofensiva rusa en la zona.


PARA UNA EUROPA «FUERTE, SOBERANA Y PRÓSPERA»

El ECR Party presenta en ‘Europa Viva 24’ su manifiesto para el 9J: defensa de las fronteras, respeto a la soberanía de las naciones y apoyo al mundo rural

AGUSTÍN BENITO. gaceta. 19 Mayo 2024


El partido de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR Party) ha presentado en el encuentro ‘Europa Viva 24’ su manifiesto de cara a los comicios del próximo 9 de junio. La formación, de la que el candidato de VOX es vicepresidente, llama a preservar la identidad nacional y a salvaguardar la soberanía de los Estados miembros: «El ECR Party rechaza la centralización innecesaria del poder en Bruselas, proponiendo que las decisiones se tomen lo más cerca posible de los ciudadanos». Y subraya la necesidad de una defensa europea robusta, apoyando a Ucrania contra la agresión rusa y fortaleciendo la cooperación UE-OTAN. Aboga por el aumento de los presupuestos de defensa y la mejora de la tecnología militar y rechaza la creación de una unión de defensa a nivel de la UE.


Propone una estrategia integral para la seguridad fronteriza, mejorando la infraestructura y combatiendo la inmigración ilegal. Aboga por la externalización de la gestión migratoria y la colaboración con terceros países. Insiste en que el asilo sólo debe concederse a refugiados genuinos y en fortalecer agencias como FRONTEX y Europol.


Además, apoya a los agricultores y pescadores rechazando la burocracia excesiva. «Proponemos una revisión de la Política Agrícola Común y la estrategia ‘De la granja a la mesa’, defendiendo la soberanía alimentaria y prácticas pesqueras justas a nivel mundial», destaca.


En este sentido, el ECR Party pide «una estrategia climática equilibrada que priorice el bienestar socioeconómico». Aboga por una «revisión» de los objetivos del Pacto Verde, promoviendo la investigación y la innovación tecnológica, y defiende la viabilidad comercial del motor de combustión interna mediante tecnologías avanzadas y combustibles alternativos. Se compromete también a revitalizar la política industrial y el mercado único, reduciendo la burocracia y fomentando la competitividad. Apoya a las pequeñas y medianas empresas «promoviendo un entorno regulatorio que favorezca la innovación y la inversión en tecnologías avanzadas».


Apuesta por la seguridad energética y la innovación promoviendo la autonomía de los Estados miembros en la determinación de su mix energético. Aboga por un enfoque tecnológico neutral, incluyendo la energía nuclear y la geotérmica.


El ECR Party defiende el libre comercio y la reducción de barreras comerciales, promoviendo acuerdos que respeten la propiedad intelectual y el trabajo ético. Aboga por relaciones comerciales diversificadas y una reforma de la Organización Mundial del Comercio. Y se compromete reformar el presupuesto de la UE, priorizando la eficiencia y la transparencia. Propone presupuestos basados en resultados y rechaza la necesidad de nuevos recursos propios, «buscando una administración más eficaz de los fondos europeos».


El partido apoya una mayor ampliación de la UE basada en el mérito y el cumplimiento de criterios. Rechaza una mayor integración política automática y promueve la cooperación en seguridad y defensa con aliados estratégicos. Aboga por una política más firme hacia China e Irán, y por la protección de los cristianos perseguidos y la libertad religiosa. «Con este manifiesto, el ECR reafirma su compromiso con una Europa fuerte, soberana y próspera, defendiendo los valores conservadores y las tradiciones nacionales que han forjado la identidad de un continente con 2.500 años de historia», concluye.


REÚNE A DECENAS DE LÍDERES PATRIOTAS DE EUROPA E IBEROAMÉRICA

VOX inaugura ‘Europa Viva 24’: «El movimiento patriótico y conservador constituye la fuerza política con mayor vitalidad. El futuro es nuestro»

AGUSTÍN BENITO. gaceta. 19 Mayo 2024


El candidato de VOX en las elecciones europeas del próximo 9 de junio, Jorge Buxadé, ha manifestado que su formación es la única capaz de reunir a decenas de líderes políticos y organizaciones de Europa y de Iberoamérica para hacer frente a la política globalista «que se impone sobre las naciones soberanas».


Así, ha reivindicado que este viernes empezaron con la presentación de más de 40 asociaciones juveniles, estudiantiles y universitarias de varios Estados miembros, con sindicatos no marxistas como la UGL en Italia o Solidaridad en España. «VOX y el movimiento patriótico, conservador, reformista, identitario, constituyen la fuerza política mundial y especialmente europea con mayor vitalidad», ha agregado en la presentación de ‘Europa Viva 24’.


«La socialdemocracia y los partidos populares tienen sólo el poder, pero no tienen nada más. Todo lo demás lo tenemos nosotros: la ilusión, la esperanza y la vitalidad», ha agregado Buxadé, antes de reiterar que en los paneles del encuentro se van a tratar cuestiones como el agua, la energía, la seguridad, la inteligencia artificial, la seguridad alimentaria y la soberanía energética.


Por ello ha manifestado que VOX ha puesto al Palacio de Vistalegre, a Madrid y a España «en el centro político informativo del mundo»: «Tenemos a 160 periodistas acreditados, más de 90 medios de 16 países. Va a haber más de 30.000 personas a lo largo de este fin de semana, batiendo todos los récords del Viva 21 y Viva 22″.


Buxadé ha recordado que los jóvenes ya no ven ni a la socialdemocracia, ni a los partidos populares, ni a la izquierda que «les ha traicionado» como una «referencia»: «Saben que el futuro es nuestro, es de los partidos patriotas, es de los partidos conservadores».


El encuentro, organizado por VOX y por el ECR Party, reunirá a los principales dirigentes patriotas y conservadores de Europa y la Iberosfera, y se celebrará a tres semanas de las elecciones europeas del 9 de junio.


Se darán cita el presidente de la República Argentina, Javier Milei; el ministro de Asuntos de la Diáspora de Israel y combate contra el Antisemitismo, Amichai Chikli; el ex primer ministro polaco Mateusz Morawiecki; la diputada de la Asamblea Nacional de Francia y candidata a la presidencia de la República, Marine Le Pen; el presidente de CHEGA y diputado, André Ventura; y el diputado chileno y líder del Partido Republicano, José Antonio Kast, entre otros. Además, el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, y el presidente del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, participarán vía telemática.


EL PRESIDENTE ARGENTINO INTERVENDRÁ ESTE DOMINGO EN EL ENCUENTRO ORGANIZADO POR VOX

Abascal se reúne con Milei: «Los argentinos tienen un gran presidente y el socialismo globalista un gran problema»

AGUSTÍN BENITO. gaceta. 19 Mayo 2024


El presidente de VOX, Santiago Abascal, se ha reunido este sábado en Madrid con el presidente argentino, Javier Milei. «Los argentinos tienen un gran presidente y el socialismo globalista un gran problema», ha señalado tras el encuentro.


Este viernes Milei agradeció a Abascal apoyo a Abascal: «Uno tiene que ser agradecido. Cuando yo era un ser despreciable que nadie me quería, el único que me abrazó fue Santiago Abascal. Por lo tanto, era un imperativo moral participar en el evento, pues además es un gran amigo, es un gran ser humano».


Milei ya participó hace dos años en el festival político-cultural de VOX ‘Viva 22’. Allí reiteró que «los valores sobre los que se construye el socialismo son la envidia, el odio y el resentimiento». Firmante de la Carta de Madrid impulsada por la Fundación Disenso, el presidente argentino es aliado de VOX y ya mostró su respaldo a la formación y a sus militantes en la Asamblea General Extraordinaria que reeligió a Santiago Abascal como presidente. «Este es un mensaje para los amigos de VOX que tan fuerte la están peleando en España, y muy especialmente para mi queridísimo amigo Santiago Abascal, que renueva por cuatro años más», señaló en un vídeo proyectado en el acto.


El líder de VOX, por su parte, acudió a Buenos Aires el pasado 10 de diciembre a su toma de posesión invitado por el propio presidente y celebró la apertura de «un camino de futuro y esperanza para los argentinos y para toda Iberoamérica». Y respaldó a Milei ante el ataque del ministro Óscar Puente: «Querido Javier Milei, cuando vengas a España comprobarás de nuevo que ese tipo no nos puede representar. Y que una gran mayoría de españoles te aprecia y te respeta».


Europa viva el 9J

JORGE BUXADÉ. gaceta. 19 Mayo 2024


El próximo 9 de junio nos jugamos el futuro de España y de toda Europa. El próximo 9 de junio decidimos si Europa sigue en manos de fanáticos globalistas que persiguen la destrucción del campo, la devastación de nuestras clases medias, la desprotección de las fronteras y la sumisión de Europa a los caprichos de una casta burocrática de relatores de la ONU y la Comisión de Venecia; o, por el contrario, si las naciones europeas recuperamos el control de nuestras vidas, nuestra economía y nuestra libertad.


Una casta oligárquica que campea en Bruselas ha decidido que igualdad es igualitarismo y resentimiento, que la separación de poderes sólo es válida cuando en el gobierno hay políticos conservadores y que las instituciones de Bruselas están por encima de nuestras constituciones históricas.


Y nosotros decimos que no. Decimos que España y su Constitución histórica, que es mucho más que el texto del 78, están por encima de la voluntad caprichosa de los grupos de presión.


La democracia, la libertad y el Estado de Derecho son obra de las naciones, no de los burócratas de Bruselas. Formulemos tres proposiciones claras:


Primera. La democracia es una forma política de gobierno de la Nación. No hay democracia sin Nación. No puede haber democracia europea si no existe un pueblo europeo. Españoles, italianos, polacos, franceses o húngaros no tienen ni una sola preocupación por la creación de un pueblo europeo; al contrario, les preocupa la seguridad en las calles, la creación de empleo estable, la inflación de productos básicos, el precio de la vivienda, la competitividad de la producción europea frente a la competencia extranjera, la inmigración ilegal o el futuro de nuestra juventud.


Segunda. La democracia es una victoria de la civilización occidental. Schumann escribió que la democracia o es cristiana o no será. Los hechos le han dado la razón. Cuanto más se aleja Europa de sus raíces y tradición, más lejos estamos de una democracia. No puede haber Estado de derecho si amplios porcentajes de la sociedad quieren imponer sus privilegios irracionales. Europa ha venido a menos por esa triple división azuzada por los burócratas: la de los separatismos regionales que quieren romper la unidad política de la nación; el separatismo de género que busca romper la unidad jurídica de la nación concediendo privilegios para algunos por su género autopercibido; y el separatismo islámico que pretende socavar la unidad espiritual de la Nación creando zonas de exclusión donde no rige la ley civil europea, la igualdad de sexos o la autoridad de nuestra policía.


Tercera. No es cierto que las instituciones de Bruselas sean garantía de nuestras democracias nacionales. Al contrario, nuestras democracias nacionales están en peligro por la creciente intromisión de la casta burocrática y oligárquica de Bruselas.


Las mayorías políticas existentes hasta ahora en el Parlamento y la Comisión Europea invocan como arma política arrojadiza contra los gobiernos de signo conservador los llamados valores europeos, pero es el mayor ejercicio de hipocresía política. Si la Hungría de Orbán establece un sistema eficaz de control de fronteras para evitar la inmigración ilegal protegiéndonos a todos los europeos, es contrario al Estado de Derecho, pero si la Polonia de Tusk, coalición de los populares y los neocomunistas, entra con la Policía y toma al asalto medios de comunicación, es democracia. El doble rasero es la forma de proceder de las élites dirigentes en Bruselas.


Las élites de la UE son débiles, cobardes y pusilánimes porque saben que no representan a nadie en el verdadero sentido democrático de la palabra: no son elegidas democráticamente, no son transparentes y no rinden cuentas a nadie. Sólo así se entiende que la Comisión Von der Leyen haya promovido y ejecutado un Pacto Verde Europeo, que ha destrozado al campo europeo, aplaudido y votado por la coalición de populares, socialistas, liberales y verdes en Bruselas.


Insistamos sin descanso: El Partido Popular y el Partido Socialista votan el 90% de las veces exactamente lo mismo en Estrasburgo. Constituyen un fraude y una anomalía antidemocrática.


El 9 de junio nos van a oír porque, como se demuestra en estas jornadas históricas que hemos vivido en Vistalegre, el futuro es de los patriotas, el futuro es de los conservadores, el futuro es nuestro.


El abrazo de Milei

Hughes. gaceta. 19 Mayo 2024


En arranque improvisado, saltándose de repente el debate ideológico, Milei, que primero de todo es liberal en las formas, se fue a por Abascal, «el único que me abrazó cuando era un ser despreciable». Los libertarios de Madrid, ciudad llena de Estado, querían peperizar a Milei, que se saltó el protocolo y el escrúpulo tiquismiquis y abrazó a un «impuro» que lo es por liderar un partido con eso que llamaríamos sensibilidades sociales, algo que existió siempre en la derecha o en el mirar derechil desde que la revolución industrial puso las condiciones de vida del trabajador en el escaparate urbano.


Quien no vea a estas alturas que «liberal» ya no significa aquí mucho más que una etiqueta de exclusión administrada por una dudosa élite que la esgrime sobre todo ante los movimientos populistas y soberanistas es que ha decidido habitar un plano tan ideal como la competencia perfecta.


Pero Milei al abrazar a Abascal ante los envarados liberales ibéricos hizo algo importante. Su discurso infatigable, machaconamente enfático, de publicista arrollador, se detuvo, y sobre el liberal-socialista puso otra distinción: el amigo frente al resto, la condición primordial del amigo en el que además reconocía la lealtad, una cualidad que, no puede ser casual, es la más valorada en Abascal: la lealtad a su país, a la sangre, a una posición y una bandera.


Sobre la mayor pureza o impureza de lo «liberal», Milei destacó y defendió algo humano, una actitud humana y política tan importante o más que lo ideológico. Milei, el incontenible Milei, disruptor hasta de sí mismo, «rompió» el momento panel y lo rompió para el abrazo. Al hacerlo ya como presidente, perdida su condición de despreciable (deplorable hispano) limpiaba de la mácula a Abascal delante de los primeros maculadores peperoides. Listísimo Milei y sin embargo espontáneo Milei. El juego de alianzas internacionales de VOX consistiría, según esto, en que cada exdespreciable rehabilitara al que aun lo es, lo fuera sanando, ungiendo…


Con el abrazo-motosierra de Milei, la oposición liberal-socialista, que esquematiza demasiado la complejidad de las cosas, dio paso a un plano más amplio y humano de valoraciones también propio de la política. ¿Quién, realmente, juzga en Abascal su posición sobre la regulación de Uber antes que su lealtad a la patria en el País Vasco?


Este debate de purismos liberales es un poco sospechoso. Liberal es el capaz de liberalidad, según la RAE el capaz de «distribuir generosamente sus bienes», así que lo liberal es una virtud moral dadivosa que además solo puede el que tiene, no el que no tiene. Tampoco se le puede exigir a todo el mundo. La libertad (¿para cuándo la libertad política de todos?) no puede ser solo un ideal exclusivista, una pasión un poco pija, una ideología rigurosista, sino algo que nos una, sume, aglutine en una sístole-diástole de igualdad y libertad.


Milei y el mensaje a PP y Vox: "El poder es un juego de suma cero y, si lo tienen ellos, no lo tenemos nosotros"

Milei se reivindica en Madrid: "Estamos incomodando a los rojitos de todo el mundo".

Nuria Richart. libertad digital.. 19 Mayo 2024


Primera visita oficial del Presidente de la República Argentina, Javier Milei, a España y sin agenda institucional, solo contactos con empresarios. Sin duda, un presidente "liberal libertario" es otra cosa. Hay que recordar que Pedro Sánchez ni siquiera le felicitó cuando tomó posesión. Ha venido a Madrid este fin de semana, entre otras cosas, para presentar su libro, El camino del libertario (Deusto, 2024). En primera fila del auditorio del diario La Razón, Karina, su hermana, "el jefe", la ex Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, única representante del Partido Popular junto a Cayetana Álvarez de Toledo, y el líder de Vox, Santiago Abascal. Las llamadas derechas de España…


Oficiaba de maestro de ceremonias el doctor en Economía Juan Ramón Rallo que para acabar le preguntaba cómo le gustaría inspirar a las "nuevas derechas europeas, una amalgama de ideas muy diversas, unas proteccionistas, otras que tiran al libre mercado"... Contestaba:


"Hay que entender que el poder es un juego de suma cero y si lo tienen ellos no lo tenemos nosotros, y eso ellos lo entienden. El cáncer de la humanidad es el socialismo, el enemigo es el socialismo. Una de las cosas maravillosas que se dio ahora en Argentina es un ordenamiento en términos ideológicos, que cuando la gente vota sepa lo que vota y que en un lado queden los colectivistas y en otro los que abrazan la ideas de la libertad. Obviamente que va a haber matices...".


Citaba Milei al Nobel de Economía Milton Friedman cuando definía los distintos tipos de liberales, "minarquistas, conservadores, anarquistas":


"En lugar de estar tan preocupados por las diferencias que podemos tener en este lado de la vida, no dejemos que el lado oscuro negro, satánico, atroz, espantoso y cancerígeno lo gane".


El presidente explicaba que "los progres son una máquina de hacer pobres" y "los valores morales tienen un correlato institucional y esas instituciones son las que terminan destruyendo o no un país. Esa es la pelea que hay que dar". La audiencia aplaudía y así acababa una presentación que en realidad había sido una clase magistral, una lección completa de la batalla moral del liberalismo frente al socialismo, ideología "con 150 millones de muertos".


Sobre la Justicia Social

Durante toda la presentación era implacable contra el socialismo , "un fraude intelectual y un horror en términos humanos":


"Los socialistas lo que hacen es darle una justificación bonita a la envidia, y eso crea un ataque sobre el que genera riqueza que termina hundiendo al país. La justicia social es eso, es una idea de resentidos y envidiosos, que además es injusta porque implica un trato desigual ante la ley, porque implica violencia, porque para hacer una política redistributiva se lo tienen que robar a otro. Y el que tenía que invertir no lo hace y estamos todos peor".


Otra de las reflexiones más interesantes y potentes que arrojaba es por qué, como ha pasado en Irlanda (de ser el país más pobre de Europa a lograr un PIB per cápita 50% mayor que el de EEUU) donde "el milagro tomó lugar" ahora se vuelve atrás. Es decir, cuando llega el éxito es cuando "aparecen las vastas ideas socialistas basadas en el odio". Para Milei hay que "aplicar aquí activamente la batalla cultural y moral". "¿Cuántos piensan que el capitalismo es insoportablemente injusto?". Y es que, "una sociedad muy dinámica y que crece mucho va a generar desigualdad porque cada vez que se crea un producto o se resuelve una necesidad ése que lo hace va a ganar dinero", decía, "el socialismo recurre a las miserias humanas para implantar sus ideas".


Al hilo de esta reflexión, desvelaba una conversación con el empresario norteamericano Elon Musk, "un tipo genial", con el que se ha visto en un par de ocasiones. Musk le contó que se levanta "todos los días pensando qué kilombo le puedo arreglar a la gente. Arreglar problemas a la gente... Entonces, ¿qué les importa si gana más plata o menos plata, si les está haciendo la vida mejor?".


Va a cerrar el Banco Central argentino

Por otro lado, Milei, presidente "en un país de zurdos", confirmaba su compromiso de cerrar el Banco Central, una medida que prometió durante la campaña electoral. "Absolutamente, se va a eliminar, no es un asunto que sea negociable".


Ha ido, como siempre, más allá: "Estamos incomodando a los rojitos por todo el mundo, vamos a mandar una ley por la que emitir dinero sea un delito. Van a ir presos el presidente del Banco Central, el ministro de Economía, el presidente de la Nación y todos los diputados y senadores que hayan aprobado esa ley".


Hablaba también de la devastadora situación financiera de Argentina, donde la inflación interanual se sitúa por encima del 280 por ciento. "Estamos domando con mucho éxito la inflación. Cuando llegamos, la inflación iba a un ritmo del uno por ciento diario, y hoy hay un derrumbe fenomenal. Hoy hablamos de créditos hipotecarios a 30 años. Las jubilaciones le están ganando a la inflación".


Milei ha recordado que la mayor batería de reformas del país fue impulsada por el presidente Carlos Menem (1989-1999), y aunque su Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), que incluye "cinco veces más" de leyes, no sido aprobado en el Parlamento, "va a salir" y "se vienen 3.000 reformas más que apuntan a que Argentina termine siendo el país con mayor libertad económica del mundo y en unos 35 o 40 años sea una de las primeras potencias del mundo, como fue a fines del siglo XIX". Su referente, Suiza.


Ha destacado por encima de otras medidas la de eliminar el control de capitales para que la ciudadanía pueda escoger libremente en qué moneda comprar. "El control cambiario era una salvajada, y es imprudentemente moral. Es una aberración". Pero avisaba, "hasta que no se pueda arreglar el tema de los stocks, no puedo abrirlo". El cepo cambiario se aplica en Argentina desde 2011.


Milei es "el error" y lo que enseña ser portero de fútbol

Lo suyo es lo nunca visto, que los electores aclamen a un político que anuncia recortes y no gasto. Recordamos los gritos entusiastas de "¡No hay plata!" en su toma de posesión. Él mismo se ve como "un error" que salió bien. "Soy un error tipo dos. Un presidente liberal libertario no es normal en condiciones normales de presión y temperatura. Hicieron las cosas tan mal que acá estamos", bromeaba.


Sobre su particular carácter batallador y outsider contaba que se forjó bajo los palos de una portería de futbol. "Ser arquero ha sido muy importante en mi vida, me ha hecho fuerte y me ha ayudado a ser diferente. Los arqueros están solos, visten diferente y cuando encajan un gol es siempre su culpa". También están solos en las celebraciones. Milei fue actor de teatro y músico, lo que explica esa imagen y "en parte el histrionismo", decía.


La larga marcha hacia el desastre

Juan Manuel Blanco. vozpopuli. 19 Mayo 2024

Pocos meses lleva esta legislatura y, en apariencia, no puede haber más enfrentamiento y polarización entre los grandes partidos de la política española. Sin embargo, algunos elementos parecen indicar que la hostilidad y agresividad en la superficie enmascara cierto consenso de fondo, como si las dos formaciones chocaran por una mera cuestión de formas, plazos, actitudes y rostros.


Con el fin de permanecer en el poder, y aprovecharse de sus ventajas, Sánchez ha quebrantado cualquier principio, forma o apariencia, provocando una agria respuesta de parte de la opinión pública. Sin embargo, aunque su falta de escrúpulos haya alcanzado extremos inéditos, no se ha apartado del guion, de esa larga senda hacia la degeneración que nuestro sistema político viene recorriendo con la complicidad de ambos partidos. Sus inusitados impulsos para socavar el equilibrio de poderes, profundizar en el más burdo nepotismo, imponer la arbitrariedad, difuminar la frontera entre lo público y lo privado o, la nueva amenaza, meter en cintura a la judicatura y a la prensa libre, no resultan muy novedosos ni implican un cambio de régimen: tan solo una notable intensificación de esa fatídica tendencia que, acelerada por la izquierda y ralentizada por la derecha, dura ya décadas sin que nadie haya osado revertirla. El actual presidente ha prescindido del disimulo, forzando hasta el límite la locomotora de un tren que, de todos modos, hubiera pasado por estas tenebrosas estaciones a la vuelta de algunos años.


El tenso ambiente político se asemeja formalmente al vivido en los meses anteriores a la Guerra Civil, pero sus aspectos sustanciales son muy distintos. En 1936 los partidos mantenían concepciones del mundo incompatibles e impulsaban líneas políticas radicalmente opuestas, desde la revolución social violenta a la reacción. Hoy día, tras el juego de sombras chinescas, se adivina un acuerdo tácito en muchos puntos poco edificantes. Prueba de ello es que PSOE y PP acordaron una ignominiosa reforma constitucional, que entró en vigor en enero de 2024, hace apenas cuatro meses, con el objetivo de introducir, de forma taimada y solapada, la discriminación por sexos en la ley de leyes. ¿Alguien imagina a Azaña y Gil Robles acordando una reforma de la Constitución en la primavera de 1936? La actual polarización posee un carácter mucho más emocional que ideológico; más visceral que racional. Y, para los dirigentes, más teatral que sustancial.


El auge de la polarización emocional

Estudios recientes descubrieron que, incluso en países con gran enfrentamiento y animadversión entre izquierda y derecha, los votantes de un sector y del contrario no exhiben tantas diferencias ideológicas en asuntos políticos concretos. Incluso los más acérrimos prosélitos suelen desconocer la posición de su partido en muchísimos temas. Aunque sigan existiendo diferencias ideológicas, la polarización y el enfrentamiento se deben principalmente a una mera cuestión de emoción, sentido de pertenencia e identidad.


En Ideologues without issues, Liliana Mason sostiene que la pasión y el prejuicio con los que muchos sujetos abordan la política no se debe tanto a lo que piensan como a lo que sienten. La dinámica partidista se asemeja más a la rivalidad entre forofos de fútbol que a una confrontación racional de ideas. Ciertos experimentos en psicología social habían mostrado que la mera inclusión casual o aleatoria en un grupo generaba en el individuo fuertes sentimientos de afecto hacia los propios y de desprecio, incluso odio, hacia los ajenos. Disolver parte de la personalidad en un colectivo, y buscar un rival malvado, satisface conjuntamente esa contradictoria necesidad humana de inclusión y diferenciación. El sujeto trata de acrecentar su autoestima convenciéndose de que forma parte de los buenos, que su colectivo se sitúa en el lado correcto de la historia.


La polarización emocional fue desbancando paulatinamente a la identificación ideológica por el auge de un tipo de votante con débil anclaje de ideas, carente de sólidos principios y crecientemente proclive a aceptar de buen grado cualquier ocurrencia que introduzca su sector político, por muy descabellada que sea. Se trata de un típico individuo contemporáneo descrito por David Riesman en el ya clásico The lonely crowd: sin brújula interior, guiado por los demás, influido por su entorno, siempre al albur de las modas y los medios. Un sujeto que, creyendo garantizado su bienestar material, solo busca sentirse bien a toda cosa. Así, la fibra que teje la sociedad civil resulta cada vez más dócil, acrítica e incapaz de poner límites al poder político, especialmente en un país donde la mayoría cree que la democracia consiste tan solo en el derecho al voto.


Como gran parte de los votantes mantiene criterios cambiantes con el viento de la última novedad, sea esta sensata o aberrante, los partidos tienen poco incentivo en mantener un cuerpo ideológico bien definido, estable y coherente. Al contrario, descubrieron que ganan más apoyos limitándose a incorporar las reivindicaciones de los activistas, esos grupos de intereses bien organizados que difunden emocionales e infantiles historietas de buenos y malos. La izquierda suele adoptar primero sus dudosas propuestas pero, al poco tiempo, la derecha también las incorpora a su acervo. Así, los principios que inspiraron el surgimiento de la democracia liberal van quedando arrinconados, convergiendo los partidos hacia una creencia difusa, incoherente, una nueva cuasi religión laica bien sazonada de ideología de género, ecologismo milenarista o wokeismo, mientras crece entre ellos una rivalidad predominantemente identitaria, vacía de contenido. Los votos ya no se obtienen elaborando un programa político consistente sino agitando las más bajas pasiones del público. O comprándolos con ayudas, empleos públicos y subvenciones.


Los dos grandes partidos rivalizan por el poder, pero ambos se encuentran cómodos en esa corriente que, desde una Transición pésimamente diseñada, arrastra nuestro sistema político, como en una tragedia griega, hacia la degradación institucional, hacia el deterioro de los derechos individuales y hacia la descomposición territorial. Muchos pensamos en su momento que, tras la devastación causada por el gobierno Zapatero, Mariano Rajoy dejó pasar una oportunidad de oro para acometer las imprescindibles reformas debido a su carácter apático e indolente. Pero no era una cuestión de personalidad: ningún presidente barajó jamás, ni por asomo, la opción de restaurar controles y contrapesos al ejercicio del poder pues ello hubiera implicado gobernar con muchas más cortapisas y limitaciones que el ejecutivo anterior.


El ascenso de Sánchez

La clave del éxito de Pedro Sánchez fue comprender que la política actual no se basa en ideas o razones sino en emociones. Y que los principios, la sensatez y la responsabilidad cotizan muy a la baja. En las primarias del PSOE de 2017, Sánchez rebasó a Susana Díaz, no a lomos de un atractivo proyecto de futuro sino a hombros de unas bases cerriles y ofuscadas, una turbamulta marcada a fuego por un visceral y salvaje odio a la derecha. El pecado de Díaz, apoyando una abstención responsable para permitir formar gobierno al malvado derechista Rajoy determinó su caída en desgracia.


La astracanada del actual presidente, tomándose unos días de “reflexión”, habría significado su expulsión del poder en cualquier país sensato. En España, por el contrario, es una estrategia capaz de tensar la polarización emocional, de enardecer a esa masa irreflexiva que vota impulsivamente a la izquierda por mera animadversión a la derecha.


Una democracia sólida requiere unos eficaces mecanismos de (auto)control del poder, ciertos órganos del Estado neutrales y objetivos, una mayoría de votantes que considere al sector opuesto como adversario (no como la encarnación del Maligno) y unas élites valientes, responsables y conscientes de los límites permisibles a la acción de los gobernantes. Estos elementos fueron socavados en la vorágine de las últimas décadas hasta casi alcanzar el punto de no retorno, ese en el que no quedan en pie suficientes contrapesos para impedir que el gobierno elimine caprichosamente los pocos que aún permanecen.


Desgraciadamente, lo que alarma a una parte de la opinión pública no es que las instituciones, las libertades y los derechos individuales se deterioren, como ha venido ocurriendo en las últimas décadas, sino que lo hagan a ojos vistas, a un ritmo vertiginoso, como sucede en la actualidad. Pero el problema no estriba tanto en la velocidad como en el funesto e inalterable derrotero. De nada serviría un nuevo gobierno que mejore las formas y restaure las apariencias, regale sonrisas y buenas palabras, pero, al estilo Rajoy, tan solo ralentice la degeneración sin revertir ninguno de los desaguisados.


Por suerte, cada vez más gente va tomando conciencia de lo que hay en juego, de la necesidad de una remodelación completa del sistema. Si, estando en peligro los derechos fundamentales, la libertad de expresión, la igualdad ante la ley, o la propia continuidad de España, no surge una potente corriente que reclame un cambio radical, si una mayoría de intelectuales, informadores y opinadores sigue suscrita a la vacía rivalidad partidista o al silencio políticamente correcto, entonces… no debe causar sorpresa nada de lo que pueda ocurrir.


Bienvenido a España, Javier Milei, moralista económico y economista moral

Federico Jimenez Losantos. libertad digital. 19 Mayo 2024

No pude estar en la presentación de El camino del libertario de Javier Milei, aunque espero verlo en el Premio "Juan de Mariana" que le hemos dado este año, por unanimidad, los premiados vivos y el grupo que dirige Manuel Llamas. Pero me gustó mucho su charla con Rallo, tantos años ya con Dieter y en esta casa, porque le dejó hablar, él contó su vida, y se creó en la sala o, al menos, eso parecía en YouTube, un silencio muy respetuoso. Temo que Milei está más acostumbrado a las adhesiones que al respeto y, sin embargo, su crédito nacional y su prestigio internacional los ha ganado haciéndose respetar por su acción de Gobierno. Es curioso, aunque nada extraño en estos tiempos líquidos y entre tanto charco informativo, que los aspectos anecdóticos de la vida personal de Milei dominen los realmente extraordinarios que está cosechando como gobernante, no como político e incluso pese la política, que en presidencia lleva Karina y en el Senado, reducto kirchnerista, maneja con mano izquierda Victoria Villarruel.


Las muchas caras del fenómeno Milei

Milei son muchos Milei. Y en su estela concurren muchos factores que tienen que ver poco con el liberalismo, y no digamos con Rothbard y el libertarismo, sino que son totalmente opuestos. Véase Vox, donde Abascal, prohibe a sus militantes hablar en esRadio, ha echado a todos los liberales y dice que "hay que distribuir equitativamente la riqueza" (Gallardo), "le molesta ver en todo el mundo la M de McDonalds" (Buixadé) o que "las empresas pertenecen a los trabajadores" (su sindicato Solidaridad).


No quiero molestar a Milei con los disparates de sus anfitriones, que están, cada vez más, en las antípodas de las ideas de la libertad. Pero Vox no hace sino seguir la corriente de lo que, sin afán de descalificar, puede llamarse la derecha radical europea que, como se verá en el mitin de hoy, está evolucionando hacia el socialismo a toda velocidad, la misma que lleva la Argentina de Milei huyendo de él. Hace una década, cuando la derecha, como recordaba Agustín Laje, daba la batalla ideológica sólo en las redes sociales (nuestro grupo es la excepción, desde hace 25 años, en el mundo liberal de lengua española) los enemigos del socialismo en general y de la Agenda 2030 en particular, podían simpatizar con Trump frente a Biden, con Orban frente a Soros. Todo eso ha cambiado, sobre todo desde la guerra de Ucrania, tras la que algunos supuestos defensores de la libertad se alían con Putin, y defensores del libre mercado alaban el esclavismo comunista de Xi Jinping. No es el caso de Milei; va siendo el de Abascal.


Aquel viejo frente de rechazo a los progres, que tenía más de rabieta que de alternativa, es infinitamente menos valioso que lo que ha construido Milei: una alternativa política, institucional y ética, en un país enfermo de colectivismo como Argentina. Y lo importante, al revés que Vox, cada vez más orgulloso de su aislamiento, es que no lo ha construido sólo él. Sin la derecha nacional de Victoria Villarruel y los liberales progres de Macri y Bulrich, hubiera sido diputado (en un grupo de dos, Milei y Villarruel), pero no presidente. Lo ha sido gracias a la coincidencia patriótica de los tres grupos y a la desesperación masiva de unos jóvenes sin presente y sin futuro. No habría triunfado sin ellos, como Hernán Cortés sin tlaxcaltecas y totonecas. Ni ellos hubieran vencido al enemigo común, peronista o azteca, sin una figura venida de fuera, de otra civilización, como Milei o Cortés. La hispana, romana y cristiana de Hernán Cortés; y la liberal de Milei.


Milei y Hernán Cortés: líderes que llegan de fuera

El paralelismo no es ocioso. Sólo alguien ajeno a las guerras tribales de aquel inmenso territorio, un europeo pobre de la España que tras la Reconquista se veía espada de la Cruz y heredera de la Roma y la Grecia del Renacimiento, con unos cientos de soldados y sin experiencia militar pudo, con Doña Marina o Malinche, y genio diplomático, unirlos a todos. Sólo alguien ajeno al peronismo, salvo el aprecio histórico a Menem, al radicalismo sin excepciones, y al macrismo, salvo el respeto a Macri, ha sido capaz de crear no sólo una formula victoriosa, sino un verdadero modelo para cambiar de raíz el Estado fallido y la sociedad argentinos.


Creo haber sido casi el único, tal vez porque me gustaba aquel Milei que se exaltaba justísimamente contra la inflación ("robar en sus bolsillos a los pobres", según la Escuela de Salamanca), tal vez por mi afecto cultural a la nación de la literatura, el tango, el psicoanálisis, el fútbol y el genio de la retórica periodística, en decir que Milei podía ganar. Mi argumento era que "sólo un loco podía creer que la Argentina tenía remedio". Y sucedió.


Pero la acción de gobierno de Milei en sus primeros cuatro meses es mucho más importante que su victoria electoral. Sólo se le critica, creo que con justicia, un error: elegir para la Corte Suprema al juez Lijo, símbolo de corrupción mediante dilación, amigo y defendido en su día por el ministro de Justicia actual. Y conste que lo entiendo: Milei ve en la Corte un hato de indeseables, con pocas excepciones, y piensa que un juez acostumbrado a plegarse al Ejecutivo le facilitará el ritmo de las reformas económicas, que debe ser rapidísimo. La única vez que le vi explicar, muy incómodo, la designación de ese juez, fue que "conoce muy bien la administración de Justicia". ¡Como que es uno de los símbolos de la corrupción kirchnerista! La incomodidad de Milei se ve en un gesto muy suyo: baja la cabeza y mira desde abajo, con un mohín de enfado, próximo al zarandeo, como diciendo: "¿por qué me lo preguntas, si sabes que no quiero responder?".


La cruzada moral y la resurrección nacional

Y esa incomodidad tiene motivos, porque Milei es sobre todo un moralista. Llegó a la economía por entender el daño que la hiperinflación hacía a los humildes. Y llegó al liberalismo cuando comprendió que el libre comercio era lo que más favorecía a los pobres y que el mecanismo más justo de distribución de bienes es el de la competencia en libertad. Su misión, y la de "las fuerzas del cielo" (que toma de los Macabeos, pese a que al final fueron derrotados) es de orden moral, pero también patriótico. El moral es acabar con la pobreza en Argentina eliminando los mecanismos que impiden, desde el Estado y sus parásitos sindicalizados, la posibilidad de que los ciudadanos elijan libremente el modo de alimentarse, vender, comprar y sacar adelante, dentro de la Ley, sus proyectos personales, familiares o empresariales. Y el patriótico –en parte, nacionalista–, es el de restaurar la riqueza argentina de antaño volviendo al concepto de Estado liberal de Alberdi y a su idea de comunidad política republicana o nacional.


Ambos medios, la salvación económica y el resurgir nacional, son parte de un solo fin moral, cuya base es defender las instituciones naturales de una sociedad occidental: el derecho a la vida, la libertad y la propiedad. Digo occidental y no sólo libre porque para Milei la libertad es hija de la tradición judeocristiana y de la Ilustración europea, los dos referentes de la Argentina de Alberdi que él reivindica. Como las primeras constituciones, la americana, la francesa y la española de Cádiz, la de los "españoles de ambos mundos", también de los argentinos del virreinato del Mar del Plata. La de Cádiz dice que esos españoles de ambos mundos deben ser "justos y benéficos". Claro que, para ser justo, Milei topa con lo que Quevedo llamó "jueces mercadería", corruptos o colectivistas, y, para ser benéfico, acabar con los "gerentes de la pobreza", el hampa sindical. Y lo está haciendo.


Del mismo modo que en La Nación+ o en la cadena de Joni Viale se ha criticado abiertamente (Carlos Pagni) la elección de Lijo, Milei tiene un decidido respaldo mediático a la lucha contra los piquetes de Bulrich y al desvelamiento por Petobello de la corrupción de los planeros, de Grabois, el comunista vaticano al Polo Obrero y Movimiento Evita. Eso, junto a la caída de la inflación y la mejora de todos los índices económicos, explica que la popularidad de Milei y Villarroel sea aún mayor que tras la victoria. También la de Bulrich en su lucha contra el narcotráfico, otra obligación moral, y como tal la apoya Milei. En eso no hay equívocos como los de algunos libertarios académicos, indiferentes al comercio de drogas que matan personas y que están convirtiendo países enteros en narco-estados. Seguir, como hago a diario, la televisión argentina, es fascinante en el orden intelectual y admirable en el orden moral. Y es obra de Milei y su gobierno. La sociedad argentina quería despertar, pero ha necesitado que llegara al poder el loco más cuerdo desde Don Quijote para conseguirlo.


La Argentina actual se parece poco a la Unión Europea

En poco se parecen la Argentina de Milei y la Europa actual, aparte del nivel social y económico que, pese a todo, aún disfrutamos, y aunque lo que ellos están abandonando, nosotros lo estamos aceptando. Sin embargo, la apertura de fronteras, una de las ideas básicas de la libertad, es algo que combaten, no sólo contra la inmigración ilegal, muchos de los partidos que hoy acompañan a Milei en la fiesta de Vox. El globalismo colectivista de la Agenda 2030 se pretende atacar mediante el proteccionismo comercial y las fronteras a la importación, variante de la "sustitución de importaciones" del comunismo clerical iberoamericano, y clara subvención del voto rural.


Una parte del giro a la derecha en la UE que se constatará en las elecciones europeas me parece positivo. Así, el endurecimiento de la lucha contra la inmigración ilegal, inseparable de la trata y del narcotráfico. Ese reforzamiento de los Estados puede parecer aberrante a los libertarios de cátedra, pero es fundamental en la defensa de las libertades reales de los ciudadanos más pobres, como es el caso de la ciudad de Rosario, en la que prácticamente tienen que rehacerse todos los pilares del Estado para que cumpla sus funciones básicas: proteger la vida, la libertad y la propiedad.


Pero además de los aspectos económicos, base del proyecto político de Milei, los partidos de la derecha radical europea no van sólo contra la burocracia socialista, la ideología de género o el cambio climático, sino en favor de la imposición de otro tipo de censura, religiosa o nacionalista, muy parecida a la que la Izquierda ha impuesto en los medios y en la enseñanza. Son viejos compañeros del viaje a ninguna parte. No a la Argentina liberal que, con Milei, se ha convertido en faro de las libertades en todo el mundo.


Leña a Vox para que parezca que algo cambia

Nota del Editor. 19 Mayo 2024


Las buenas gentes que se parten el lomo luchando por España deben estar hasta el moño de recibir desprecios por todos los lados, de gentes que parece que su memoria reciente, 70 años, está vacia.


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No va a ser posible seguir tirando

Jesús Cacho. vozpopuli. 19 Mayo 2024

“Lo asombroso de las élites barcelonesas, con el Cercle a la cabeza, es que todavía no se atrevan a condenar a un movimiento que ha partido en dos la sociedad y ha empobrecido Cataluña, una ideología iliberal que dispone a su antojo del Presupuesto y lo usa a su particular conveniencia, una opción política que hoy representa al 25,8% del censo electoral o apenas el 18,6% de la población total de Cataluña (resultado de las autonómicas celebradas el 14 de febrero de 2021)”. El párrafo transcrito pertenece a un artículo publicado en Vozpópuli en junio de 2022 (“Cataluña en el espejo del Círculo de Economía”). Los resultados de las elecciones celebradas el pasado domingo en esa misma región arrojan cifras aún más clarificadoras del viaje a los infiernos emprendido por el voto nacionalista tras la aventura de octubre de 2017. En efecto, la suma de Junts, ERC, CUP, AC y ALHORA ascendió a 1.361.942 votos, equivalentes al 24,8% del censo electoral (5.495.363 inscritos con derecho a voto) y al 17% (16,98%) de la población total de Cataluña (8.016.606 personas, a 1 de enero pasado). Eso es todo. Lo que equivale a decir que entre febrero de 2021 y mayo de 2024, el nacionalismo (“la peor de las pestes, que envenena la flor de nuestra cultura europea", Zweig) se ha dejado 1,6 puntos del censo en la gatera y 1 punto, grosso modo, respecto a la población total catalana. Y ello a pesar de la respiración asistida que Sánchez ha prestado a esa “pura barbarie” (Vargas Llosa) en forma de indultos, malversaciones y amnistías, como los más descollantes de entre los socorros mutuos que ambas partes se han prestado.


De modo que, primera providencia, el argumento esgrimido por el Equipo de Opinión Sincronizada según el cual Pedro el Magnífico ha acabado, aplacado o anestesiado al nacionalismo catalán es, cuando menos, una solemne tontería. El voto independentista, o si se quiere el independentismo como movimiento político, ya venía muy desangrado desde la sublevación de octubre de 2017. Lo hirió de muerte la aplicación del polémico (por pacato, ¡ay, don Mariano!) artículo 155 de la Constitución, y la acción coordinada de la justicia condenando a los culpables del golpe, sin olvidar la importancia que como revulsivo tuvo el discurso de S.M el Rey del 3 de octubre de dicho año. La aparición en escena a partir de junio de 2018 de un tipo sin escrúpulos como Sánchez ha logrado justamente lo contrario de lo que ahora elogian sus exegetas: dar vida nueva a un movimiento que estaba en retirada, en sálvese quien pueda, si no francamente herido de muerte. El milagro, con todo, no ha llegado a producirse este 12 de mayo. El cansancio, cuando no franco hastío, de una parte importante de la población con el famoso “procès” es tan fuerte, tan harta la gente de tanto vividor que ha hecho de la independencia su modus vivendi, tan generalizado el cabreo del personal con una clase política que ha destruido la convivencia y la prosperidad de Cataluña, que ni el boca a boca de Sánchez en estos años ha logrado sacar al movimiento indepe de la parada cardiorrespiratoria en que se encuentra.


Ni el boca a boca de Sánchez en estos años ha logrado sacar al movimiento indepe de la parada cardiorrespiratoria en que se encuentra

¿Está muerto? Ni mucho menos. Dependerá de muchas cosas, entre ellas, de lo que en el futuro inmediato el Partido Popular (PP) sea capaz de hacer en Cataluña. Intentaré explicar esta aparente butade. Siempre he dicho que, al menos desde 2012 a esta parte, el nacionalismo ha jugado un partido sin equipo contrario en frente. Ha metido goles sin portero. Entre otras razones, por incomparecencia del contrario, por la falta de voluntad política para combatir el separatismo, tanto por parte del PSOE como del PP, con un proyecto alternativo, y por esa trampa mortal que para la gobernabilidad implicaba tener que contar con Convergencia para gobernar en Madrid ya fuera uno u otro el inquilino de Moncloa. Desde el punto de vista constitucionalista, el dato más esperanzador de lo ocurrido el pasado domingo en Barcelona es el extraordinario resultado logrado por el PPC de Alejandro Fernández. Sí, es cierto, que esos 15 escaños -o los 26, si se le suman los 11 de VOX- no alteran en nada el puzzle endiablado que es hoy la gobernabilidad de Cataluña, pero pueden ser, de hecho son, una base formidable desde la que plantear una alternativa de futuro al independentismo. ¿Para acabar con él? Ni hablar. Vano intento condenado al fracaso. Pero sí para reconducirlo a los márgenes por los que siempre transitó y en los que cabe circunscribir la famosa “conllevanza” orteguiana, una parte de la población con perfecto derecho -faltaría más en una sociedad democrática- a ser independentista, pero instalada en el 10% o 12% del voto, porcentaje del que nunca debió salir de no haber sido por la criminal desidia mostrada durante la transición por socialistas y populares, víctimas ambos del encantamiento pujolista.


Fernández ha demostrado que la coherencia de una línea política clara, con voluntad de desenmascarar la gran mentira separatista, termina dando fruto. De hecho, ha logrado el milagro de devolver a la vida (342.584 votos, frente a los 109.453 que contabilizó en febrero de 2021) a un PPC que estaba muerto. Y bien, ¿qué va a pasar con el actual presidente del partido en Cataluña? ¿Cuál va a ser su margen de actuación? ¿Podrá fijar la línea política sin interferencias de Génova o tratarán de cortarle las alas según lo que convenga a la dirección madrileña en cada momento? ¿Seguirá el PP ofreciendo la misma alfalfa con la que ha obsequiado a los españoles de centro derecha en Cataluña desde los tiempos de José María Aznar? Para nadie es un secreto las dudas alimentadas por Feijóo respecto a la candidatura de Alejandro. Simplemente parece que no le “cae” bien. De hecho y por increíble que parezca, su candidatura estuvo en el alero hasta muy al final, y la lista por él encabezada llegó trufada de gentes de obediencia diversa (García Albiol, Dolors Montserrat, los hermanos Fernández Díaz, inamovibles caciques del PPC). Con estos bueyes tendrá que arar un Alejandro Fernández cuyo prestigio ha salido muy reforzado por los resultados cosechados. Radicalmente descartado el PSC/PSOE como partido constitucionalista, las esperanzas de un cambio a medio/largo plazo de la situación política catalana, cambio que reconduzca el nacionalismo a los márgenes en los que se movió antes del famoso “Programa 2000” de Jordi Pujol, descasan en la capacidad del PP de ahormar un discurso integrador pensado no para nacionalistas desencantados, sino para ese 75% largo de catalanes que no votan nacionalista o se abstienen, un proyecto de futuro -para Cataluña y para el resto de España- que aborde sin miedo los cambios fundamentales -la estructura territorial, entre ellos- que reclama este país y cuya enumeración resultaría fatigosa.


¿Es pedirle demasiado a Núñez Feijóo? El PP necesita un Churchill pero en bodega tiene a González Pons, Bendodo, Sémper y demás compañeros mártires genoveses. Lo que es evidente es que ese proyecto del futuro del PP no puede estar centrado en la estúpida pretensión de acabar con VOX (asunto del que parece que ya se está encargando el propio VOX con notable acierto). Votantes del PPC sobrados de “seny” manifiestan su temor a que, desaparecida la independencia del horizonte catalán, esa mafia política indepe aficionada al saqueo centre sus esfuerzos en consolidar, mediante el correspondiente pacto con los partidos “españolistas”, una especie de cortijo catalán sobre el que reinarían los herederos de esos Puigdemont y Junqueras hoy más muertos que vivos, consistente en terminar de sacar al Estado de Cataluña para establecer una independencia de facto con la exclusión de la vida política de ese 75% que no participa de la ensoñación separatista. Y por ahí parecen ir los tiros. La Generalitat acaba de publicar el Decreto 91/2024, de 14 de mayo, sobre “régimen lingüístico del sistema educativo no universitario”, que consagra el catalán (y no el español) como lengua educativa y confirma la imposición de la inmersión lingüística. Y el candidato a presidirla, el aspirante a manejar un Presupuesto millonario del que vive una claque de más de 200.000 familias, el patético Salvador Illa, acaba de anunciar su intención de crear un “Poder Judicial” catalán, vieja obsesión de esas elites ladronas (la independencia como privilegio de los poderosos, que dijo Nietzsche) que aspiran a poder nombrar a los jueces que un día podrían tener que juzgarles.


Un PP en la encrucijada. Condenado a rebelarse contra los que han conducido a este país a la bancarrota (empezando por sus Mariano Rajoy) o a morir definitivamente en la orilla de la traición a esta gran nación que es España. La tentación de perseverar en el “reparto de los despojos”, incluso con este PSOE putrefacto; la atracción del “ir tirando hasta que el cuerpo aguante”; la cobardía del “mejor callar y esperar a ver”; el miedo a abrir la boca y romper el velo de tanta cohabitación incestuosa con esta izquierda vendepatrias, sigue siendo muy fuerte entre la derecha española. La sospecha que anida en no poca gente es que en Génova están convencidos de que tal vez vayan a necesitar al PNV, esos chicos tan de fiar, o al propio Junts, para gobernar tras la caída de Sánchez, razón que explica que no se atrevan a mover una hoja, a diseñar un país distinto, a abrir una ventana por la que pueda penetrar el aire puro en la putrefacta habitación contaminada por las flatulencias de la corrupción sanchista (“por supuesto que mi señora lo ha hecho todo bien”). Feijóo puede acabar siendo una de esas flores secas que se lleva el viento del verano, pero tiene también la oportunidad de pasar a la historia grande de este país como un reformador. Un demócrata reformador. Lo que parece claro es que ni él ni su entorno de Génova van a poder seguir callados. No va a poder Feijóo hacerse “un Rajoy”. No va a ser posible, porque esto no va a aguantar mucho tiempo, ni siquiera con una economía como esta, dopada por el gasto público. La citación de Begoña Gómez ante el titular del juzgado de instrucción número 41 Madrid debería suponer el final automático de la carrera de este “logrero de la política” que decía Baroja, con independencia de lo que ocurra en Cataluña o en las europeas. Esto no da más de sí, y los que hoy permanecen callados -esos empresarios del Ibex, esa intelligentsia​ vendida- van a quedar muy pronto en evidencia. No va a ser posible seguir tirando.


Sin Vox, solo queda Sánchez I el Devastador

Nota del Editor. 19 Mayo 2024


Pretender que Vox sea miss universo, una belleza sin defectos, es lo mismo que pretender que cada español tenga su propia constitución, redactada a su gusto y conveniecia.


Hay que apoyar a Vox sin fisuras porque es nuestra última oportunidad de seguir siendo españoles, en vez de basura bajo la bota de El Devastador.


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